Burdel de dama Espasmo

01/08/11, 01:16 am

Recuerdo del primer mensaje :

Edificio de cinco plantas de madera pulida con fachadas llenas de balcones y techadas con tejas azules. La entrada es un arco rectangular decorado con farolillos y da a una sala circular decorada con doseles y tapices. Una abertura atraviesa el edificio verticalmente, filtrando la luz que va a dar a una fuente de cristales de colores. Se utilizó como refugio para cosechados durante la primera cosecha pero actualmente es un negocio puesto en funcionamiento.

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23/10/11, 01:14 am

En un primer momento se gira con las manos por delante, con rapidez, pero cuando acabo, se cruza de brazos. Sus labios se mueven casi sin pronunciar sonido pero creo adivinar lo que dicen. Y de pronto me abraza con fuerza sin más, sin miedo, sin darme tiempo a reaccionar. Estoy estupefacto, no esperaba esta reacción aunque es la preferible y respondo a su abrazo pero con cuidado, aspirando su fragancia y notando su calor bajo mis frías manos, alegre y sonriente mientras me habla. <<Por supuesto que no, diantre...>> Pero no me da tiempo a responder pues siento sus labios primero en mi mejilla, calmados, y luego en mis labios con premura y dándome una especie de calambrazo, por miedo a descontrolarme. Pero no sucederá tal cosa, nada de eso. Está nerviosa, se le nota en el tono de voz, pero no por mi aspecto o transformación, si no por saber si me voy a quedar o no. ¡Por supuesto! Esta es mi casa, nuestro hogar. Pero no me da tiempo a responder, de nuevo, cosa que me hace sonreir mientras sigue hablándome, deleitándome con su voz. Abro la boca para decir algo pero vuelve al ataque y solo sonrío mientras me cuenta su transformación, pero hay una cosa que dice que no es tolerable y cuando acaba, le acaricio la mejilla:

-Ni se te ocurra decir que te odias y menos aún por dormir, diantre. Ahora a las preguntas...Sí, me quedaré aquí, es nuestro hogar, claro que me quedaré aquí. Y nada de volver a despedirnos como la otra vez, en absoluto. Nunca me perdonaría hacerte daño, nunca...-acabo diciendo para los dos, para ella y para el vampiro.-Y tu transformación... Hay gente de la ciudad que podría ayudarnos, quizá Sepalian o Dama Liviana. Esta me está ayudando con mi transformación, aunque es un poco...se cree muy superior.-acabo riendo.-Encontraremos respuestas a tu transformación, palabra. Y...y...-no puedo evitarlo y vuelvo a abrazarla, enterrando el rostro en su cuello y sintiendo su calor para luego leantar la mirada y mirarla a los ojos, visiblemente emocionado y sonriendo.-Si antes me gustabas, imagina ahora con lo deliciosamente bien que hueles.-digo riendo

23/10/11, 02:34 pm

Escucho con atención todo lo que me dice, sonriendo y sin separarme de él, la idea de que se vuelva a ir me estremece, pero no, se va a quedar aquí. Cuando su mano roza mi mejilla, la acaricio suavemente. En cuanto a lo de la transformación, sí, sería buena idea hablar con alguna de las personas que ha mencionado, pero mañana, hoy sólo quería estar con él. Le devuelvo el abrazo, pasando mis manos detrás de su cuello:
-Confío en ti y sé que podrás controlarte, si no, no haría esto.- Me quedo en silencio y vuelvo a besarle de nuevo.
Al separar nuestros labios, sonrío y vuelvo a darle otro suave beso, en la comisura de los labios:
-Siento decirte que ahora me voy a poner muy pesada y no me voy a despegar de ti.-Y tal y como he prometido vuelvo a besarle, recorriendo con mi lengua sus labios.-Tenía ganas de hacer esto.- Le sonrío y nos quedamos en silencio, apoyo mi cabeza sobre su pecho y suspiro.- Me gusta como ha empezado el día, si hubiese sabido que pasaría esto me hubiera levantado antes.
Y de nuevo, todo se queda en silencio. No parecía haber mucha actividad por aquí o los demás se habían ido o es que ya casi nadie vivía aquí. Entrelazo mis manos con las suyas y levanto la cabeza para preguntar:
-¿Qué ha pasado con los demás?, todo esto está muy vacío.

23/10/11, 04:33 pm

Sonrío cuando dice que confía en mí, pues eso significa mucho para mí y es la clave del control...¿Hacer qué? Un calambrazo de alerta me sacude cuando me besa pero consigo relajarme y cerrar los ojos cuando vuelvo a saborear sus labios <<Maldición, ya no servirá con limpiarme la sangre de la boca, tendré que lavarme de mejor manera...>> Río feliz cuando habla pero no me atrevo, de momento, a llevar los besos más allá de los labios, así que solo respondo al suyo ligeramente. Le acaricio el pelo y la espalda cuando se apoya en mí y cierro los ojos disfrutando del momento... Pero nada es eterno, ni siquiera la noche y el sol ya aparece por las ventanas y balcones.

-Para mí los días mueren cuando sale el sol, ya que me encierro en la oscuridad de mi habitación...-murmuro apesadumbrado por no haber encontrado la forma de protegerme de la luz, de momento.

Es más, cuando termina de preguntarme me separo de ella con suavidad, lentamente pues no quiero, pero es esto o que me de la luz de lleno. Y rápidamente echo las mantas por las puertas de los balcones y ventanas del cuarto de Erika, aplacando la luz del maldito astro rey; <<No es plan entrar en mi dormitorio, con los dos colaespinas inconscientes todavía...>> y me siento en el suelo, al lado de la cama de Erika, apoyando la cabeza en el colchón.

-A ver... Cain sigue viviendo aquí, Kaila creo que se marchó a la Torre Serpentaria a practicar su magia y aprender más. Skull ni idea, pero creo que sigue aquí. Marta y Alex se mudaron definitivamente...-ahora empiezo a hacer recuento con los dedos, haciendo memoria de las transformaciones.-Marta parece una mezcla entre humana y ciervo. Skull se ha transformado en una criatura extraña, no recuerdo muy bien... Kaila sigue siendo humana, al igual que Cain.-y ahora con las novedades en el Burdel.- Y el rubio tiene una mascota, una especie de pollo llamado Fresser. El maldito come de todo, mesas incluidas. Y ahora mismo no sé, pero hace unos día también estaban aquí Elliot y Vacuum, siempre con Cain. Ni idea de qué estarán tramando. Y yo tengo dos colaespinas vivos en mi cuarto de desuello, con los que practico mi magia de vampiro. ¡Ah! El chico griego, Vacuum, tiene una mascota: un fénix negro. Y Cain aprendió a invocar duendecillos que limpiaron el burdel hace uno o dos días.-acabo de decir riendo.-Y seré tonto...-río pasándome una mano por la cara.-Vacuum y Elliot también se transformaron: el griego es una criatura con alas, no me suena de haber visto nada similar; y la chica es... En su transformación ha perdido la cabeza... Pero sigue viva, aunque no he hablado con ella desde que me desmayé... Sí, me desmayé: para mi transformación creo que se me murió el cuerpo humano, todo lo que el vampiro no necesitaba...-sacudo la cabeza y acabo.-Y creo que esto es todo.-pero de pronto recuerdo algo.-¡No, maldita sea! No he vuelto a ver a Norou, no sé si se habrá transformado o no... Y esto es todo... Si tienes hambre creo que quedó algo de la cena, pero ni sé cocinar ni lo necesito, al igual que respirar.-empiezo a reirme.-Así que para pesado yo, que puedo hablar sin parar.-digo sin dejar de reir.

23/10/11, 05:46 pm

Se separa de mi y tapa las ventanas con mantas, todavía no había obtenido ningún hechizo que le protegiese del Sol. Ahora, con todo a oscuras apenas veía algo, pero podía percibir las sombras de los objetos, aunque tendría que ir con algo de cuidado, algo un poco difícil teniendo en cuenta lo torpe que soy.
Percibo a Jack moviéndose por la habitación y sentándose en el suelo, cerca de la cama. Yo, con ayuda de mis manos me muevo hacia la cama, pero a diferencia de él, me siento en el borde de esta, con las piernas cruzadas y apoyo la cabeza de Jack sobre mi regazo.
Le escucho con atención; Kaila se había ido y yo sin enterarme, supongo que algún día se le podría hacer una visita; Marta y Alex también se han ido, no tenía mucha relación con ambos, ahora mismo no sé si esa es una mala o buena noticia, aunque posiblemente sea la segunda opción. De momento no menciona ninguna “mudanza” más, osea que aquí quedamos poquísimos, no me extraña que no haya nada de actividad por aquí. Las transformaciones me sorprenden, físicamente, yo no había cambiado tanto, pero algunos estarían irreconocibles, ¿Ciervo?, ¿Perder la cabeza?, ¿Alas?, vale, las que más me llaman la atención son la de Elliot y Vacuum. Después de las transformaciones me habla de nuevos “inquilinos”, mascotas más bien, ¿Una especie de pollo? Raro, pero interesante, eso tenía que verlo. Y Vac un fénix, ¡Fénix!, pongo los ojos como platos,también quería verlo. Y por último, Cain y lo de invocar a un duende, bien, eso podría ser de muy buena ayuda:
-Vale, entendido, primero, ¿2 colaespinas vivos?, creo que no entrare en tu cuarto hasta que los mates. Segundo, ¿Te desmayaste? ¡Esas cosas se avisan mucho antes!, ¿Entendido?, tercero, quítate la idea de la cabeza de que eres pesado, porque no lo eres, sólo has respondido a mi pregunta, y último, ¿Comida?, bajaré más tarde, ahora me apetece quedarme aquí.
Empiezo a acariciarle el pelo, embobada, mirando la pared:
-Si no puedes salir de la habitación ni fuera del burdel, dime, ¿Qué quieres hacer?

23/10/11, 06:16 pm

Le doy tiempo para que asimile todo el torrente de información nueva y mientras tanto practico los movimientos manuales de los dos hechizos que me tienen en vilo desde la última visita de Dama Liviana, pero solo para perfeccionarlos. Pero su voz me saca de mis pensamientos y vuelvo a reir cuando menciona a los colaespinas. Pero diantre, el desmayo fue algo propio de la transformación...¡Y lo de pesado lo dije de broma! Y de pronto noto sus dedos acariciándome el pelo, acallando mis pensamientos y cerrando los ojos. Casi murmurando, respondo:

-¿Hacer? Yo me quedaba aquí toda la vida...Estaba practicando, pero cansa y da sed así que lo dejaré hasta dentro de un rato largo...-y sonriendo, echo la cabeza hacia atrás y digo de broma.-Y no querrás verme sediento...-pero recapacito y me disculpo, bajando la cabeza y mirando al suelo.-Perdón, solo era una broma... No quiero asustarte, malditas sean mis bromitas...Pero si ni siquiera puedo bromear sobre lo que soy, esto será una locura...Hacer...-vuelvo a repetir entre susurros.-Yo puedo quedarme horas así pero hablo por mí...-pero tengo que decir lo que llevo rato pensando, aunque ya lo dije en otro momento, pero no puedo evitarlo.-¡Hueles de maravilla! Y esto no es broma, hueles mejor que las manzanas esas doradas, malditas manzanas, ahora me huelen mal y destrozan el estómago... Para vosotros, pero yo me quedo con tu olor. No, olor es muy vulgar... ¡Perfume, eso!-y acabo, riendo.-Qué raro queda lo que acabo de decir, pero es lo que hay.

23/10/11, 08:21 pm

No paro de acariciarle el pelo mientras le oigo hablar, sonrío ante la broma, pero esa sonrisilla se borra cuando se disculpa. Mis brazos se apartan de su pelo y se escurren por su pecho:
-¿Estás tonto? No vuelvas a disculparte por algo como eso nunca más, era sólo una broma.
Cuando ha quedado claro, le doy un beso en la mejilla. Separo mis brazos de su pecho y vuelvo de nuevo a jugar con su pelo. Él propone quedarnos así y no pongo quejas, de hecho, a mí también me gusta este momento:
-Con que te gusta mi perfume, ¿Eh?, pues si te soy sincera a mi me gustas mucho más tú- Le muerdo la oreja y me levanto de la cama, cojo la almohada que seguía mitad en el suelo y mitad desperdigada sobre las sábanas. La dejo caer en el suelo y me siento sobre ella, al lado de Jack.- Yo me quedo aquí contigo, pero con una condición; También quiero que me acaricies el pelo.- Paso un brazo por detrás de su espalda y apoyo mi cabeza sobre su hombro. Mi mano libre busca la suya, para entrelazar ambas.

23/10/11, 09:33 pm

Con los ojos cerrados noto sus manos bajando por mi pecho y le acaricio los cálidos brazos con mis manos, ya menos sonrosadas que antes. Vuelve a hablarme y asiento sonriendo:
-Vaaale, vale.
Vuelvo a sentir el tcto de sus labios en mi cara y ladeo la cabeza como para que no acabe el beso, pero me habla y hago una mueca mientras río por el mordisquillo. La siento levantarse y sentarse a mi lado, la miro a los ojos cuando da su condición y pongo cara pensativa.
-Hum...Creo que es factible.-acabo sonriendo y por primera vez me atrevo a besarla en los labios, de nuevo, saboreándolos con una ligera pasada de mi lengua.
Cuando reposa la cabeza en mi hombro y entrelaza nuestras manos, apoyo mi cabezza con suavidad sobre la suya y le acaricio el pelo y la espalda con delicadeza, disfrutando de su compañía y del olor de su sangre...
Pero nada es eterno, yo podría estar así durante horas, días incluso, pero... Nada es eterno. Y Erika no ha comido nada desde que se durmiese...
-Hora de cenar.-digo de pronto pero sin dejar las caricias.
Y aprovechando la mano a su espalda y que la tengo cogida por la otra, la cojo en brazos con rapidez y la vuelvo a besar, venciendo al miedo de hacerle daño por última vez, ya no me estremezco ni siento temor, solo sé que estoy con ella, con Erika y... ¡al diablo! A cenar.
-Y no te resistas, tienes que comer algo. Es más, come por mí si quieres.-digo riendo mientras salgo al pasillo y bajamos al salón.
Llegamos a la cocina y la dejo en el suelo a la par que miro en derredor
-Quizá haya algo en la nevera... Voy a por mi cena, ahora vuelvo.
Y sin pensarlo, me convierto en humo y, tras coger un par de vasos, vuelo a mi dormitorio. Los dos colaespinas están bien despiertos, pero no pueden moverse ni chillar, nada. Cuando me solidifico delante de uno, su miedo es casi palpable, se le tensa todo el cuerpo mientras apreto un cuchillo contra su garganta y la sangre mana, caliente y agitada, llenando los vasos. Cuando están listos, remato a la criatura mordiéndole para finalmente limpiarme, lavarme los labios y bajar a la cocina con mi cena dejando los vasos en la encimera. Mientras me relamo, apoyando la espalda en la encimera, bromeo:
-Es un vino alemán de cosecha del 45, pero no te lo recomiendo, aparte de que está caliente, el sabor es un tanto peculiar.

24/10/11, 06:59 pm

Tras un desastroso primer intento Cain terminó haciendo la pipa en hueso, valiéndose del hechizo de perforación para tallar los símbolos necesarios y hacer algunos relieves, más por pura estética que por otra cosa. Las hojas que necesitaba eran las más bajas de la planta, las que habían ido secándose poco a poco, siendo sustituídas por otras nuevas que crecían en la parte superior. Cain ya las había recogido y tratado, así que una vez finalizada la pipa solo tuvo que poner la hierba y encenderla... Dudó. Nunca en su vida había fumado, y su primo le había hecho prometer muchas veces que no lo haría, pero esta vez era distinto, necesitaba de la sabiduría de Dantalian... Dió una calada y tosió con violencia cuando un torrente de imágenes pasó por su mente enviándole un mensaje
>>No te ahogues, chico, que no es robado<<
El tono era burlón e impertinente, pero a Cain no le sorprendía.
>>¿Esa vaca vieja de Balan te ha dejado invocarme? Debes de ser muy bueno... o más bien debes de ser muy idiota.
-Cuida tus palabras, demonio- dijo Cain al humo que salía de su propia boca- No te he invocado para que me insultes, necesito de tus conocimientos, y espero que sean verídicos.
>>Oh, ¿y qué harás si miento, novatillo?<<
Cain sonrió
-Entonces quedará claro que Balan es mucho mejor oráculo que tú
Un furioso torrente de imágenes irrumpió en la cabeza de Cain, cegándole por un momento, llenando su mente de información hasta que sintió que iba a estallarle el cerebro. Era un método muy dolorosi y ambiguo para aprender, pero Cain sabía que era la mejor forma de conseguir cierto tipo de información. Toda su vida había estado plagada de dolor y sufrimiento, y aunque no hubiese querido había desarrollado cierta resistencia, algo que le estab siendo de gran utilidad en ese momento. Exteriormente, Cain fumaba sin inmutarse de nada a su alrededor, pero tan solo pudo resistir un par de caladas más, antes de caer desplomado al suelo, vomitando por culpa de las migrañas provocadas por el demonio.

24/10/11, 07:16 pm

Cierro los ojos y me relajo por completo al sentir sus caricias en mi pelo. Sin duda alguna quedarnos aquí ha sido una muy buena idea. Acaricio su mano con mis dedos, recorriendo su palma, haciéndole cosquillas. Sonrío para mis adentros, disfrutando del momento, abro de nuevo los ojos. La habitación seguía a oscuras y el silencio reinaba en el dormitorio, en otro momento tal silencio me hubiese incomodado pero ahora, lo prefería así. Me acurruco un poco más mientras él sigue con las caricias, pero, al acomodarme, dice que es la hora de la cena. Levanto la cabeza y le miro, pero sin darme tiempo a reaccionar me coge en brazos y me da un ligero beso, pero antes de que sus labios se separen de los míos le respondo con un suave mordisco en su labio inferior.
Y así, en brazos, me baja a la cocina, donde una vez allí me deja de nuevo en el suelo para que coja algo de cenar. No sé muy viendo donde buscar, hacia tiempo que no bajaba aquí así que estaba un poco perdida. Me indica que busque en la nevera, así que no pongo pegas, me acerco a esta y abro la puerta mientras escucho a Jack, que no tarda en irse un momento a por su comida. Observo el interior de la nevera, no estaba del todo llena, pero no necesitaba mucho para ahora, tenía hambre, pero con un poco me servía. Cojo lo primero que encuentro y lo dejo encima de la mesa, justo cuando vuelve Jack con varios vasos llenos de sangre que deposita sobre la encimera. Contemplo el contenido de los vasos, no con un gesto muy agradable. Me siento en una de las sillas y empiezo a comer sin apartar la vista de los vasos:
-¿Y no me vas a dar ni siquiera un poquito?- Respondo de broma ante la suya.
Sigo comiendo, sin mucha prisa, aunque el plato se vacía rápidamente. Me levanto de la silla y lo limpio para dejarlo de nuevo en su sitio. Me apoyo en la encimera, mientras espero a que él termine:
-Ya está, terminado, ¿Contento?-Sonrío mientras me cruzo de brazos y observo como los vasos se van quedando poco a poco vacíos.

24/10/11, 10:35 pm

No me siento sino que sigo apoyado en la encimera, por un sencillo motivo: el olor de la comida "humana". Pero respondo a su respuesta con una risa pero no digo nada sino que doy un trago a uno de los vasos mientras la miro comer. Pero acabo por cogerme un cojín del salón y sentarme frente a ella. Me gusta el contacto frío con el suelo. Aunque quedo raro, rodeado por vasos repletos de sangre, sobre un cojín y con mi ropa negra. Sigo mirándola comer, vaciando los vasos poco a poco, y cuando acaba, se apoya en la encimera tras recoger y asiento quizá demasiado exageradamente, diciendo:
-Contento. Contento si tú estás contenta. Contento y con el estómago lleno, con lo cual más contento aún.
Después me levanto y friego los vasos tras acabar el último, me lavo las manos y, rápidamente, deposito un fugaz beso en los labios de Erika, con mis labios aún con diminutas gotas carmesíes. Paso mi lengua por los suyos, limpiándo todo rastro de sangre que acabo de dejar y me alejo sin dejar de mirarla, con cara pensativa.
-Hum...Lo siento, pero olían a comida normal y queria probar una cosa...Pero nist, prefiero tus labios sin más. Y creo que es recíproco esto.
Dicho esto, acabo con la cara seria, pensativa, con una risa y me lavo labios y boca para que no me sepa a sangre. Y de nuevo la beso en los labios, sonriendo y asintiendo luego
-Así mucho mejor.
Pero de pronto me quedo mirando por la ventana, mirando la oscuridad de la calle, tenuemente iluminada por los faroles del Burdel. Pero hoy no saldré de caza, ni siquiera a pasear o a explorar, no tengo ganas. Eso sí, un día de estos probaré la magia de oscuridad bajo el sol y en otro momento tengo que ir a los jardines a preguntar a Sepalian sobre Erika. Es más, mejor si viene ella conmigo.
-Ah, un día de estos, mejor un atardecer, estaría bien ir a los jardines de la ciudad a buscar y preguntar a Sepalian, quizá sepa algo de tu transformación. Y de los que hemos conocido es de los que mejor me caen. Excepto Cicatriz, los demás son muy raros...

24/10/11, 11:43 pm

Cain logra levantarse y limpia el vómito del suelo como puede. Guarda la pipa y la hierba y vuelva a la habitación en busca de ropa limpia, luego baja a las termas para darse un baño. El agua caliente y el vapor le marean un poco, pero le relajan. Se abraza las rodillas tratando de mantener la mente en blanco por un momento pero le resulta imposible, las imágenes de Dantalian le acosan, le persiguen... Una vez terminado el baño, se viste con un kimono carmesí. Al mirarse en un espejo, se sorprende de lo largo que lleva el pelo <<¿Debería cortármelo?>> No le disgustaba del todo, pero sí quería quitarse algo de volumen... Busca una cuchilla y se corta como pudo, quitando volumen de pelo hasta dejarse unos finos mechones largos bastante por debajo de las orejas. Se corta el flequillo solo lo justo para poder ver, siempre le había gustado que le cayesen los mechones sobre los ojos. Una vez contento con el resultado, subie a la cocina y se prepara una infusión para poder dormir sin sufrir de nuevo las migrañas. Jack y Erika estaban en el salón, pero no tenía ganas de saludar y no parecía el momento oportuno, así que regresa a la habitación, se toma la infusión y se acuesta por fin.

26/10/11, 01:14 am

Tras un vuelo rápido llego al burdel, aterrizando ante la puerta, necesito unas cosas antes de subir a la habitación. Entro por la puerta tras hacer un hechizo de intangibilidad, pasando hasta la cocina. Allí cojo una olla y la lleno de brasas de la chimenea, que caliento al rojo con un hechizo. Cojo a Feliks y le hago un nido en las brasas con las manos, dejandole en el interior de la olla. El pollo se acomoda con una piar feliz y se queda dormido, enroscado sobre los carbones encendidos. Cojo la olla con las manos desnudas y subo las escaleras de dos en dos hasta la habitación. Entro sin llamar, esperando encontrarme a Cain y a Elliot en la cama, pero solo esta Cain. Extrañado dejo la olla sobre un trozo de cuero grueso previamente mojado en lo alto de un armario, para alejarle un poco de Fresser. Me acerco un poco a la cama tras dejar junto a la guitarra la espada, me desvisto y me meto bajo las sabanas, acercándome al italiano. Le rodeo con mis brazos, besando sus ojeras y su cara, llenándola de besos el rostro. Apoyo mi frente en la suya, disfrutando de su contacto, hacia días que no dormíamos juntos, y aun falta Elliot. Suspiro contra su cuello, aspirando su aroma, se le nota el cansancio, invocar demonios debe de ser duro, pero tampoco lo se, no me ha contado nada. Beso su boca, jugando con su lengua, a estas alturas ya lo he despertado, pero me da igual, me siento egoísta...
-Buenas noches peluche -le saludo con una sonrisa, mis ojos brillan en la oscuridad, pero tampoco quiero interrumpir del todo su sueño, así que acomodo la cabeza en la almohada-, siento haberte despertado...

26/10/11, 07:52 am

Llegué al burdel tras un buen rato corriendo. No me sentía cansada, es mas, notaba como si pudiese seguir con la carrera el resto de la noche, pero de todas formas los músculos de mi cuerpo estaban en tensión aun por los nervios. Abrí la puerta, haciendo malabarismos con la cabeza y el libro en mis manos para no hacer ruido mientras la cerraba tras de mi. Dentro, todo estaba en completo silencio y quietud. Avancé entre los cojines hasta llegar a las escaleras. Aun no había abierto el libro. Tenía casi... miedo de hacerlo. Tenía miedo de lo que podría descubrir con él. Subí deprisa, y fui hacia la habitación, entrando sin hacer ruido ninguno por si estaban dormidos... pero los dos estaban abrazados en la cama, y bien despiertos... cabrones... Sonreí internamente dejando el libro encima de la mesa. "¿Aprovechando que no estoy para daros mimos?" Pregunté con el sarcasmo impregnando mi voz, en un tono casi infantil. "Muy mal, chicos..." continué mientras me subía a la cama, colocándome entre ellos y obligándoles a separarse bruscamente, para tumbarme en medio. Noté su calor como una bola de demolición impactando sobre mi, casi haciéndome olvidar al violinista, a su libro y al mundo entero. Les abracé apenas unos segundos, recorriendo la nuca y la espalda de ambos con las manos, pasando por su pecho y deteniéndome a jugar con el piercing de Vacuum unos segundos, atrayéndoles hacia mi, para notar su piel a través de la tela de mi ropa, que por suerte para mi, llevaba puesta aun, pues de no haberlo hecho, sin duda no podría controlarme. Pasé por encima de Caín, tumbandome a su otro lado. Hice levitar el libro hasta mi. "Ale, ya podéis seguir" pensé en un fingido tono condescendiente, haciendo un gesto con la mano. Lentamente, abrí el libro, con tal parsimonia, que mas que un libro parecía que estuviese a punto de destapar la caja de pandora. Me sumergí en la primera página, leyendo con toda la atención que podía, porque, aun que mi interés estaba puesto en el libro, el dulce olor de los chicos, y su compañía, tiraban de mi, haciendo que tuviese que leer cada linea un par de veces para enterarme.

26/10/11, 02:56 pm

Cain gruñó ligeramente cuando Vacuum le despertó, pero transformó pronto le gruñido en una especie de ronroneo. Se abrazó a él, respondiendo a sus besos y sus caricias y volviéndose a acurrucar entre las sábanas. No pensaba dormir, ahora que se había desvelado no podría volver a conciloar el sueño pero aun así no le importaba, podría quedarse así eternamente. Tan solo faltaba... Como si le leyese el pensamiento, Elliot entró en la habitación y se metió en la cama, haciéndose hueco entre los dos. A Cain le pareció oír un murmullo, un zumbido en sus orejas que tan solo duró un segundo, pero no le echó cuenta. Decidió estrenar su piercing acariciando la piel de Elliot con la púa de Luna, provocándole un cosquilleo allá por donde pasaba. Empezó por el cuello y bajó por los hombros y los brazos, rodeándo su cintura y estrechándose contra su cuerpo para acercarse también a Vacuum, pero la chica escapó y se tumbó a su otro lado con un libro. Cain miró el libro con curiosidad, echado en la cama, y estuvo un buen rato observamdo a Elliot leer mientras se entretenía acariciando el brazo de Vacuum, pero el Sol ya despuntaba...
Decidió levantarse, arreglándose el kimono carmesí que en un principio no estaba mal para salir a la calle con él. Se miró al espejo del tocador donde guardaba los venenos y se fijó en sus horribles ojeras... No le extrañaba que se preocupasen tanto por él, parecía que estaba enfermo con esas bolsas moradas bajo los ojos... Rebuscó entre los cajones del tocador y sacó un estuche de maquillaje. Se pintó los ojos para ocultar como buenamente pudo las ojeras, pasando de parecer un enfermo a parecer un gótico o un cantante visual. Se echó a reír al ver su nueva imagen en el espejo <<¡¡Parezco Crixo!!> y aún riendo recogió sus cosas para salir
-Voy al mercado un momento. No tardaré- anunció. Ya fuera, con el mismo lápiz que había usado para maquillarse, se dibujó un sencillo círculo en el brazo, y Ziel apareció a su lado saludando con un educado maullido.- Nos vamos de compras, gatito

(sigue en el antiguo mercado)

26/10/11, 05:55 pm

Después de perderme por las callejuelas logré llegar a una calle ancha cuyos edificios me sonaban algo más. al final de la larga calle encontré la plaza desde la que se podía ver el burdel y por la que siempre teníamos que pasar esquivando a los colaespinas. La rodee en silencio, metiéndome por otras calles, hasta que al final pude plantarme en la puerta del burdel. Trate de escuchar algún sonido en el interior para saber si había alguien, pero no pude escuchar nada. Aun así seguramente habría alguien... tal vez estuviese Jack vigilando en su forma de humo. Ahora es distinto, incluso su personalidad ha cambiado un poco, pero todavía confío en él. Incluso después de que nos intentara asustar el otro día.
Llamo a la puerta con los nudillos y levito con las piernas cruzadas esperando alguna respuesta. Vuelvo a hacerlo un par de veces más aumentando la intensidad de los golpes por si no había nadie cerca de la puerta en ese momento. Y a la vez vigilo a mi alrededor en busca de algún peligro, cualquier criatura que haya podido escuchar mis golpes.

26/10/11, 07:48 pm

<<Ya va, ya va...>> Qué cansancio... El otro día Erika se acostó y yo me fui al dormitorio a practicar la magia de sangre con la colaespina que aún vivía -ya bastante muerta y seca- con muy buenos resultados: hechizo de herir a distancia dominado, más o menos, con buena concentración. Lo próximo será probarlo en el fragor de una cacería. Pero el que sea o la que sea que esté llamando no para, diantre, ¿qué prisa tiene? Sigo con los movimientos pero cuando aumenta la intensidad apreto los puños y miro en dirección a la puerta, como atravesando las paredes con la mirada <<Diantre, no se puede ni estar tranquilo...>> Me levanto con rapidez y salgo al balcón, desde donde capto el olor a quemado que lleva el viento <<Gael...¿Qué querrá? ¿Buscará a Vacuum y Elliot?>> Decido salir al pasillo y paso por el cuarto de Cain, olisqueando la puerta hasta que doy con el olor del griego, demasiado débil para adormecerme siquiera, pero bastante reconocible; pero ni rastro de Cain y Elliot no huele, así que no sé si estará dentro. De todas formas, ¿qué más dará? Ya me enteraré de qué planean, estando tanto tiempo juntos... Quizá algo para con la ciudad, espero que para bien... O bueno, ya veré. Llego a la puerta y me aliso la ropa arrugada pero limpia, pues no bebo nada desde la noche pasada, y abro la puerta
-Bienvenido, peligroso y llameante Gael.-saludo sonriendo, de broma, mientras le invito a pasar.-Si desea el señorito algo para beber le puedo ofrecer sangre de colaespina fresca, de la cosecha de hace unas horas, exquisita.-digo riendo ya.-Va, en serio, ¿qué te trae por aquí?-inquiro mientras cierro la puerta, completamente en silencio, hasta que veo una figura acercándose. Me quedo mirando hasta que distingo la silueta y el pelo de Cain y espero a que llegue.-Bienvenido usted también, señor.-digo siguiendo con la broma de Gael de antes.-¿Qué traes ahí?-<<Huele a...hum...no sé>>

26/10/11, 08:34 pm

Cain aligera el paso al ver el brillo de Gael a lo lejos. Cuando alcanza la puerta dle burdel, Jack ya había abierto al puerta y esperaba a que él llegase para dejarle entrar.
-Hola- saluda-Comida- responde mostrando las cestas que traía. Llevaba una debajo de cada brazo y otra levitando. Si la conservaban bien tendrían comida para todo el mes.- Aunque claro, a tí no te hace falta... - lleva la comida a la cocina y va separando los alimentos que debía guardar en la nevera y los que iban en los armarios. Sus ojos brillan emocionados cuando saca varias botellas de leche cremosa de un animal de las montañas que ahora mismo no recordaba como se llamaba... y cristales de azúcar... Pero lo más preciado de las cestas, lo que de verdad hacía que le temblasen las manos eran las barras de grueso y duro chocolate que había conseguido por algunas monedas extras. El chocolate en Rocavarancolia era notablemente más caro que en la Tierra pero qué más daba, aquella era una ocasión especial <<Muy bien, Cain. Te has casado y no has hecho absolutamente nada para celebrarlo...>> Termina de guardar los alimentos, dejando fuera los que iba a necesitar; se recoge el pelo, se arremanga y se lava las manos.
-Vamos a hacer un banquete- dice a nadie en particular, poniéndose manos a la obra.
Harto de carne, había encargado pescado fresco y marisco. No estaba seguro de cómo prepararlo pero al limpiar el pescado encontró varias similitudes con algunos que conocía de la tierra. El marisco por suerte se cocía igual en todos sitios y las frutas y verduras ya las conocía la mayoría. La ollas ya borboteaban, el horno estaba encendido y Cain estaba inmerso en el postre... Ahora el delicioso olor a chocolate que inundaba le burdel era real.

Burdel de dama Espasmo (Archivo IV)

Burdel de dama Espasmo

Re: Burdel de dama Espasmo (Archivo IV)

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