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Torreón Sendar

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Rocavarancolia Rol
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Torreón Sendar - Página 26 Empty Torreón Sendar

19/09/12, 10:54 pm
Recuerdo del primer mensaje :

Ya antes de la Batalla de Rocavarancolia éste era uno de los mayores torreones de la ciudad. Quedó destruido por un explosivo que le arrancó sus cuatro plantas superiores, dejando tan sólo dos, aunque más tarde se reformó convirtiéndose en un torreón de cuatro plantas. Su base es circular y está protegido por un foso frente a la puerta, mientras que en la parte trasera hay un risco de varios metros de profundidad.

Tiene un patio empedrado muy pequeño acoplado a la parte trasera, con sitio para que una o dos personas entrenen. Una estatua pegada al muro representa una figura envuelta en túnicas cuya nariz y barbilla sobresalen de entre los pliegues. Alguien le pintó un bigote ridículo y una perilla garabateada con carbocillo mezclado con grasa.

La planta baja es un salón circular dividido en una gran sala central con cocina y salón y tres dormitorios pequeños que la rodean. Las escaleras, que están tras una puerta, llevan al resto de plantas del torreón. En el sótano hay una armería con mazmorras, en la primera planta hay cinco habitaciones medianas y dos baños, y en la segunda hay tres dormitorios grandes. La última planta no contiene nada salvo unas escaleras que llevan a la azotea, delimitada por un muro simple de escasa altura.

Recetario integral de Persilia Sukaldaria:

Grimorio para principiantes de Platero:

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Tak
GM

Ficha de cosechado
Nombre: Airi
Especie: Sanaí
Habilidades: Habilidad manual, memoria, imaginación.

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

24/08/23, 01:40 pm
A Airi no le tranquilizó que nadie hubiese visto nada, pero el hecho de sus compañeros hubiesen desaparecido podía ser una cosa buena, podría querer decir que estaban bien. Le sanaí se quedó cerca de la ventana, tapando con una mano su respiración inconscientemente, aunque careciese de sentido a esa distancia.

Le hizo caso a Räg cuando le indicó que no se quedase en la tronera, pero no pudo abandonar el marco y continuó asomándose a intervalos. No prestó atención a la comida, era imposible con el estómago cerrado por el terror. Necesitaba estar pendiente de la criatura para saber si iba a por ellos o no. Llevaba un rato extrañamente quieta, en el suelo. Para su sorpresa, al cabo de un rato se levantaría y continuaría vagando sin prisa, perdiéndose dentro de un edificio lateral. Airi apretó la mano en torno a sus mejillas al ver cómo efectivamente podía atravesar paredes sin esfuerzo, y se quedó así durante lo que le pareció una eternidad. Pero la criatura no regresó. ¿Tal vez no les había visto? ¿Se había ido tras sus compañeros?

Se fue… —les dijo a los presentes, ya que no todos se habían quedado junto a la ventana. Al girarse vio que faltaban Aniol y Damian, y Nohlem e Ethan nunca habían alcanzado la habitación. Se preocupó, pero realmente el monstruo se había ido, así que ya no tenían que estar confinados en aquel cuarto… ¿o sí?

Pronto sintió sus voces venir del hueco de la escalera, así que imaginó que se habían quedado lejos de donde hubiera ventanas. Mientras Rägjynn subía a la última planta, le sanaí prefirió quedarse junto a la tronera del cuarto, con Connor y Szczenyak y la chica desmayada, a la que de vez en cuando le echaba un ojo. Para su sorpresa, al cabo de un rato pudieron ver volver a sus compañeros desde allí.

Pronto el puente estuvo bajado de nuevo. Airi se debatía entre seguir vigilando o bajar a preguntar qué había pasado exactamente, y terminó por ganar lo segundo, ya que hacía rato que no había rastro de la criatura. Bajó lentamente por las escaleras y, al pasar al lado del grupo con los niños solo los miró para asegurarse de que todo iba bien, preocupándose por cómo lo estaban llevando todos. Era un alivio saber que habían logrado distraerse, pero no sabía por qué se habían quedado en el hueco de la escalera. Tal vez les preguntaría más tarde. Imaginó que no querrían bajar por mantener a los niños al margen un poco más y, en cierto modo, lo agradecía. Las cosas podían ponerse muy tensas por culpa de Serena.

¿Qué ha pasado? ¿Dónde habéis estado? —preguntó con preocupación al llegar a la planta baja. Por el momento evitó mirar a Serena, quien tenía que dar verdaderas buenas explicaciones para su actitud. Le alegraba que todos hubiesen vuelto, pero precisamente ahora que todo iba un poco mejor se podía permitir enfadarse. No dejaba de sentir un miedo atroz, aun así. La realidad de lo que había en aquellas calles los había golpeado finalmente, y eso sí que no era culpa de ninguno de ellos.
Isma

Ficha de cosechado
Nombre: Damian
Especie: Humano itaiano
Habilidades: Agilidad, dibujo, espontaneidad

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

24/08/23, 02:34 pm
Para el italiano, tener una compañía así de buena era muy necesario en aquellos momentos de miedo e incertidumbre. Con ellos sentía calma, la que le hacía falta. Era muy parecido a lo que tenía en el circo con todos los suyos pero con… gente nueva. ¿Por qué no había hecho eso antes, conocer gente y ver mundo? No sabía donde se encontraba y quería volver con su mamá, sin embargo para lo que estaban viviendo, todo ese caos y todos aquellos peligros, al menos lo haría con buena compañía y se sentía seguro entre aquellos desconocidos que poco a poco lo estaban ablandando.

Ante el tema de la comida, Damian ladeó el rostro en duda cuando mencionaron unos “noshis”—. ¿Nochis? ¿Qué es eso? —alcanzó a decir casi al mismo tiempo que Aniol. Se alivió de no ser el único, así no se sentía tan tonto. Los langostinos sí que le sonaban, llegó a probar uno cuando era muy pequeño y no estaba tan malo pero no era muy fan de ello, prefería un millón de veces la carne. La pasta sí que le sonaba, sobre todo de Stefano que era la mar de cansino con lo de que la pasta es el orgullo de Italia.

¿E...español? ¿Griego? —su duda iba en aumento, así como que no conocía mucho de lo que decían—. Yo soy de Italia, no soy americano ni vietnamita. ¿Qué es Polonia, un barrio italiano o de América? —eran los únicos países que supo sacar de Rambo, creía que eso era todo en el mundo en que vivía y escuchar Corea, China… No entendía casi nada y en su cara se le leía fácil, sabía nada del tema.

»¡OH! ¿¡Sabeis hacer guisos también?! —menos mal que podía saltar de tema respondiendo a Ethan y a Aniol y cuando el último dijo que sus padres son cocineros a Damian se le iluminó la cara—. ¡Que guay! ¡Yo puedo cocinar algo también, sé hacerme de comer y podría ser vuestro cocinero algún día! ¡Mi mamá me dice que soy un crack! —dijo orgulloso con la cabeza bien alta, aunque el saber hacerse de comer se reducía en un “a veces” en realidad.

Al final, Ethan comenzó a hablar de su pierna. Era cuestión de tiempo pero el italiano no se lo esperó y otra vez se sintió mal. Cuando mencionó los ánimos y la buena compañía ahí también sitió mas peso de culpa. Con la cara un poco larga, se ofreció a decir algo.

Joder... Perdon por la patada que te dí, no sabía que tu… —no le salían muy bien las palabras—. No sabía que estabas malo, no quería putear más tu pata chunga ni de coña —el chico sonrió un poco con un tinte de tristeza pero, al fin y al cabo, bienintencionado con lo que estaba diciendo queriendo conservar el buen humor durante sus palabras que, aunque tímidas, conservaban un poco de su yo enérgico.

Conservando la sonrisa, observó el pedrusco verde y los anillos de Nohlem, así como el “semarancio” de Aniol. En mitad de la conversación de ellos Damian estaba teniendo pensamientos intrusivos que llegaron a partir de lo que Ethan dijo con respecto a su pierna. No pudo evitar pensar en él mismo y en lo que Serena le dijo… un incordio y una molestia. No quería sentirse así, un inútil que solo va a dar por culo como ya le decían en el circo cuando solo quería jugar. No quería sentirse una sombra en la esquina, quería destacar y hacerse notar. Quería sentirse querido, necesitado así como le hacía sentir su mamá.

¿Puedo yo también? —en cuanto Aniol hizo la pregunta a Ethan, Damian quería estar con ellos quienes les hacía sentirse bien. No quería alejarse aun más de ellos y quería acompañarlos al menos esa noche—. Quiero estar con vosotros, me hace ilusión —confesó, con una sonrisa sincera y algo cortada.

De pronto, pudo ver que Airi bajaba y de pronto el puente se escuchaba de bajar. ¿habían llegado los demás? No sabía nada y estaba realmente cansado, con las energías drenadas.

Me gustaría decirle a esa loca un par de cosas pero estoy… reventado —se apoyó la frente en sus palmas, aún le escocían las heridas. Sus tripas rugieron de vuelta, mientras suspiraba—. Tengo mucha hambre, ¿vamos a comer ya? —dijo molesto y famélico.
Jack

Ficha de cosechado
Nombre: Tawar
Especie: Repobladore de la montaña
Habilidades: Artesanía, habilidad manual y resistencia

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

24/08/23, 08:36 pm
Las conversaciones de los demás le llegaban lejanas. Tawar solo conocía el miedo en esos momentos. Miedo a la Criatura. Miedo a lo que pudiera hacerles a elles y sus compañeres Gigantes perdides en el exterior. Miedo a la ciudad donde estaban. Miedo al tiempo que les restaba allí, si en tan solo dos días habían llegado a esto. Miedo a su inutilidad en situaciones así. Miedo a la ausencia de árboles a los que trepar y por los que correr y ocultarse. Miedo a que la Flora no existiera en toda partes... Miedo y más miedo del que le costaría reponerse. No lo hizo cuando la gravedad volvió a cambiar y notó otra superficie bajo su cuerpo. Lo haría más tarde, poco después de que un grupo de voces descendiera por el torreón. Se preguntó por qué se dividieron, pero tuvo su respuesta al escuchar el ruido del puente. ¡Sus Gigantes! ¿Habrían vuelto?

No recordaba haberse colocado cabezabajo en aquel mueble, pero supuso que lo habría hecho instintivamente a causa del miedo que aún tuvo que vencer para lograr moverse. Miró a su alrededor y reconoció una de las habitaciones, aunque no sabía en qué planta estaban. Seguía percibiendo las voces del hueco de la escalera, pero se entremezclaban con las que hacía rato que no escuchaba. Definitivamente el resto de Gigantes estaba allí, por fin. Consiguió sentarse y miró a Connor y Räg.
Me da vueltas la cabeza... ¿Estáis... bien? ¿Ha... han vuelto? Tengo que saber si están bien, tengo que.... Bajar, bajar debería ser lo primero que haga. ¿Vais a bajar o podéis avisar de que bajaré para evitar accidentes? Lamento no ser de ayuda.

No tenía problema alguno en trepar por las escaleras ya que era mucho más fácil que trepar una montaña ya que los escalones no eran más que patrones repetidos. Pero sabía que había movimiento por el torreón y con las prisas podían pasarle por alto, literal y figuradamente. En condiciones normales podría hacerlo por su cuenta, y de hecho quería enfrentarse a las escaleras a solas algún otro día. Tan solo no le había dado tiempo en esos dos días. Además, no se veía tan ágil con el pánico agarrado aún a su cuerpo. La Criatura se habría ido y el grupo habría vuelto, pero la pesadilla que acababa de experimentar seguía bien presente.
Seth

Ficha de cosechado
Nombre: Connor
Especie: Humano
Habilidades: Fuerza bruta, inmutabilidad, rapidez mental

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

25/08/23, 08:57 am
Connor siguió sentado en el suelo, perdido en sus propios pensamientos. Loas críos se habían ido, y a juzgar por las voces parecía que mantenían una conversación con Ethan y Nohlem, aunque no alcanzaba a distinguir lo que decían. En la habitación estaban también Szecheniak, Räg, Tawar, la nueva desmayada y Airi, le cuál observaba de forma intermitente por la ventana.

El motero decidió mirarle con el ceño fruncido, atento a sus expresiones para saber si aquel monstruo hacía algo nuevo o empezaba a acercarse. Por suerte pronto dio una noticia que hizo que Connor soltara todo el aire acumulado de golpe. Como si hubiera estado llevando una gran carga y ahora pudiera soltarla y descansar. <<Se ha ido... Esa puta cosa se ha ido...>>. Con rapidez se levantó para acercarse a la ventana junto a Airi.

-Ya era hora, joder.- Comentó en un tono aliviado, aunque la preocupación de que volviera seguía presente como un veneno que no tuviera ningún antídoto. Dudaba que pudiera quitarse esa sensación en mucho tiempo. Al mirar por la ventana pudo confirmar las palabras de le sanaí. Aquel puto monstruo ya no estaba, y las calles volvían a estar vacías como si nunca hubieran tenido un encuentro con aquel terrorífico ser.- ¿Por qué no los ha perseguido y ahora se va como si nada? ¿Es que solo quería acojonarnos ese cabrón?- Preguntó entre dientes, curioso y confundido a apartes iguales. Aunque no iba a ser él quien se quejara por la inactividad de aquella criatura hecha de sombras.

Räg subiría a la azotea, y en aquel tiempo que pasó Connor volvió a dedicarse a sumirse en sus pensamientos. Rick, Kalna, Abel y Serena aún no habían vuelto. Pero el motero tenía claro que ni de coña saldría a buscarlos, y menos con aquella cosa estando en las calles. Sin embargo, el grupo de fuera no se hizo esperar demasiado y pronto estuvieron en la puerta haciéndose notar. El puente no tardaría en empezar a ser bajado. Una parte de él se sentía algo aliviado, al menos por Rick ya que lo había conocido un poco mejor la noche anterior. Pero la verdad es que la mayor parte de su alivio por que hubieran vuelto se debía a algo mucho menos sentimental y más práctico: no podían permitirse perder a gente en el segundo día... de todo un año que les quedaba por delante. Räg estaría de nuevo en la habitación justo cuando Tawar empezaba a hacer varias preguntas.

-Estoy bien, joder.- Mentiría descaradamente. -Y sí, han vuelto ya.- Le contestó algo confundido por su pregunta tan obvia. Aunque parecía que aquella lagartija- planta parlante estaba perdide y asustade, y la verdad es que el motero no podía culparle por eso. Que el grupo hubiera vuelto estaba bien, pero Connor seguía muy enfadado con Serena. No... enfadado no... Más bien estaba hasta los cojones de ella.- ¿Los has visto muy hechos mierda desde ahí arriba?- Le preguntó con interés a Räg, mientras se sentaba en una de las camas. Luego volvió a centrarse en Tawar y su pregunta.- ¿Bajar? Joder, ni de coña pienso bajar y tener que verle la cara de nuevo a esa gilipollas.- Contestó con un bufido, refiriéndose claramente a Serena. Pensar en que aquella imbécil estuviera ahí abajo solo hacía que le entraran ganas de darle razones para que se fuera de nuevo. Sin embargo, un par de segundos después suspiró y con mala gana volvió a hablar.- Pero si necesitáis que eche una mano ya sabéis dónde encontrarme. Cagándome en mi puta madre por venir a este sitio de mierda.- Dijo con un tono a medio camino entre la amargura, el cansancio y la mala hostia. Luego se tumbó bocarriba en la cama con uno de los brazos tras la nuca, y cerró los ojos en un intento de alejarse de todo y de todos.

Connor estaba cansado, muy cansado. Y el sueño combatía contra el hambre que empezaba a aparecer, en un duelo por ver quién se adueñaba antes de su cuerpo. No parecía que abajo estuvieran muy mal, o sospechaba que habría más revuelo. Pero por si acaso intentaría no quedarse dormido como un puto bebé.
Giniroryu
GM

Ficha de cosechado
Nombre: Rägjynn
Especie: mjörní
Habilidades: memoria, buen oído y don de lenguas

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

25/08/23, 01:53 pm
La explicación de Connor acerca de lo que había ocurrido fuera parecía razonable, pero sobre todo deseaba que tuviera razón: que estuviesen bien. Y, aunque no lo hubiese expresado de aquella forma, desde luego compartía el sentimiento con el humano de la cresta acerca de cómo se estaba desarrollando el día.

No le extrañó que los niños no aceptasen su oferta y tan solo asintió y les aseguró que si en cualquier momento les entraba hambre solo tenían que decirlo. No mucho después, ambos abandonaron el cuarto y, preocupado, se asomó por la puerta del mismo. Los vio bajar por las escaleras y pronto oyó voces que reconoció como las de Ethan y Nohlem, aparte de las suyas. Estaban con ellos, así que estarían bien.

Regresó a su posición junto a la ventana, de la cual también parecía estar Airi muy pendiente. En cuanto notó que le sanaí claramente estaba viendo algo que le hizo cambiar su lenguaje corporal, el mjörní también se acercó a la ventana para ver qué ocurría. Justo a tiempo para presenciar como el monstruo sin más se desvanecía.
Sí… Voy a esperar… un momento para asegurarme de que no vuelva a aparecer y entonces subiré a la azotea —dijo tanto para Airi como para los demás que todavía quedaban en el cuarto, sin tener respuesta a la pregunta de Connor.
Realmente no tenía garantía alguna de que aquella criatura no volviese a aparecer de repente en cualquier momento, sobre todo teniendo en cuenta que atravesaba paredes, pero tras unos prudenciales minutos decidió que ya era momento de subir. Se armó de valor y ascendió hasta la azotea. Nervioso miró hacia todas partes, no viendo nada: por desgracia tampoco a sus compañeros. Permaneció de pie oteando en la distancia durante un rato hasta que su cuerpo le recordó cómo se sentía. Con un gran suspiro tuvo que sentarse contra la pared de la azotea. El sol, aunque tenue, calentaba su sangre fría. Aquel era el mejor lugar de todo el torreón donde huir del frío, seguramente. Sin pretenderlo, el mjörní acabó cerrando los ojos y quedándose momentáneamente dormido.

---

Un molesto golpeteo en sus cuernos le hizo abrir pesadamente los ojos. Durante un instante no reconoció el lugar en el que estaba, y el cansancio era tal que solo podía pensar que quería que parase lo que fuera que le estaba dando golpes en la cabeza. Un graznido le hizo sobresaltarse y levantarse de golpe. Vio salir volando a una pequeña ave, que sin duda era la culpable de aquel despertar pero que parecía completamente normal. Un simple pájaro de tamaño normal, de color negro, que se había asustado con su repentino movimiento.

Casi parecía que el ave fuese una mensajera de la Sanación, comparativa que cobró más fuerza en su mente debido a su color, pues no mucho después distinguió una voz conocida en la distancia. Rápidamente se asomó para comprobar que, efectivamente, pertenecía a Rick. Y, gracias a las ymres, no venía solo: todos los que se habían ido tras Serena, incluyendo a la pelirroja, le acompañaban.

El mjörní bajó hasta el cuarto alzando la voz y anunció la llegada de sus compañeros, así como preguntar por alguien que pudiese manejar el mecanismo del puente. En esa ocasión volvió a encargarse Szczenyak, pero tomó nota mental de que debería aprender pronto donde se encontraba y cómo se utilizaba. En el cuarto ya solo quedaba Connor, pues Airi había bajado en cuanto que escuchó las voces. O no, porque no lo había visto en un principio ya que reptó desde debajo de un mueble, pero la voz de Tawar le hizo detenerse ante sus intenciones de seguir el mismo camino que le sanaí.
Estamos bien y… ¡creo que ellos también! Es difícil de decir desde tan lejos pero… todos llegaron caminando por su propio pie…

El humano respondió enseguida que no pensaba bajar y Rägjynn no pudo evitar pensar, recordando lo que había ocurrido antes de que Serena decidiese irse, que quizás era lo mejor. En ese momento el humano le había resultado más aterrorizador que nada de lo que habían visto, pero ahora tenía otro tono… Les ofrecía ayuda. El mjörní todavía no entendía el comportamiento de algunos de sus compañeros, pero quería seguir pensando que podía fiarse de Connor, y de cualquiera de ellos a pesar de todo. Le agradeció brevemente sus palabras y se giró hacia Tawar.
>>Yo estaba a punto de bajar: sube —se agachó y le ofreció la palma de su mano para que escalase desde ahí a donde le resultase más cómodo—. No te preocupes por nada: siempre estás ayudando a pesar de que este entorno es complicado para ti —le aseguró a le repobladore mientras salían del cuarto y bajaban a la primera planta.

En su descenso ya no vio a los que antes estaban en las escaleras… excepto a Nohlem, justo al final de las mismas. Parecía estar observando la escena pero no se movía. Le dedicó una breve mirada interrogante casi sin poder evitarlo, pero no se detuvo.

Una vez en el gran cuarto que era la planta baja observó a los que habían vuelto uno por uno: todos parecían encontrarse bien… a excepción de Kalna.
Le asustó la visión de su cara manchada de sangre, y se dio cuenta poco después de su dedo vendado. ¿Eran eso marcas de mordiscos?
¿Te ha hecho eso el monstruo? —le preguntó dubitativo a la libense—. Deberíamos limpiar esas heridas también con agua y jabón. ¿El resto estáis bien?
No tardaría en empezar a reunir de nuevo lo necesario para limpiar heridas. Sería rápido, pues lo que habían usado hacía escasas horas todavía seguía por allí.
Sevent
Sevent

Ficha de cosechado
Nombre: Abel
Especie: Humano español
Habilidades: Intuición, imaginación y velocidad

Personajes :
Abel: humano español (1,90m)
Unidades mágicas : 5/5
Armas :
Abel: su arrolladora personalidad

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

25/08/23, 02:17 pm
Abel agradeció que nadie del grupo criticase abiertamente su fallido intento. De hecho, lo que Kalna y Rick indicaron acerca de la presencia de posibles instrucciones tenía sentido, pero él se había precipitado pensando que podría invocar las llamas tal como había hecho el protagonista en una de sus novelas. Así, abrió el libro en silencio y comprobó que había unos gestos y palabras concretos para realizarlo. Sin embargo, esta vez no se atrevió a intentarlo ni a decir nada sobre ello, tenía demasiada vergüenza y, ahora que se había dado de bruces contra la realidad, estaba más centrado en qué debían de hacer a continuación para sobrevivir que en la magia. Además, Rick había mencionado que Räg sabría algo del tema, así que se esperaría a llegar al torreón preguntarle.

El camino de vuelta no fue fácil para Abel, quien sentía ver al fantasma en cada sombra que se proyectaba por las laberínticas calles que llevaban al torreón. Por suerte, sus imaginaciones no se hicieron realidad, llegando al torreón sanos y salvos. Al entrar vacío sus bolsillos, dejando las pesadas herramientas que había robado del faro y las espada en un rincón del salón

Aunque Abel no podía evitar sentirse alegre de llegar a un “lugar seguro”, sentía pánico porque la situación continuase donde la habían dejado antes de salir, sobre todo con respecto a Connor. Afortunadamente, el chico pelirrosa no salió a recibirlos y no se le veía por ningún lado. En cambio, agradeció que Räg y también Airi, quien desde su punto de vista actúo correctamente en la discusión, fuesen quienes les diesen la bienvenida.

- Kalna ha sido herida por el fantasma, pero al resto creo que no nos ha pasado nada- dijo Abel claramente afectado por las consecuencias de la excursión- Conseguimos escapar al faro, pero también parecía ser el nido de algún ave peligrosamente grande…

De repente, se acordó de lo que sus compañeros le dijeron en el faro, que el monstruo podía atravesar paredes, lo que encendió todas sus alarmas, ya que, si el monstruo no había ido a por ellos, quizás había ido a por los del torreón.

- Vosotros… ¿estáis bien? – tragó saliva, asustado por la terrible posibilidad que representaba lo que iba a preguntar a continuación. – ¿No… no habrá conseguido entrar esa cosa?

No había habido ningún cambio significativo en el salón que pudiese indicar que había habido una pelea, pero, aun así, le daba escalofríos pensar que las puertas no significaran absolutamente nada para ese bicho.

Abel sujetaba el libro de magia entre ambas manos, le hubiese gustado nombrarles el descubrimiento que habían hecho a su compañeros, pero no quería desviar la atención de Kalna, quien había sido la que había salido peor parada de los cuatro. Aunque en el faro no habían encontrado nada que pudiese servir para realizar las curas, esperaba que aquí sí que hubiese material suficiente para ello. En cualquier caso, lo que más deseaba en esos momentos era encerrarse en la habitación, olvidarse de todos y de todo lo vivido y, por supuesto, echarse a dormir, por lo que esperaba que no volviese a haber ningún conflicto y que la charla acabase pronto para poder irse.

_________________________________________

Ven conmigo,Ven conmigo por la ciudad,ven conmigo, desatemos un vendaval, esta noche, no me importa lo que dirán
Harek
Harek

Ficha de cosechado
Nombre: Rick
Especie: Humano
Habilidades: Puntería, habilidad mental y carisma

Personajes :

Síntomas : A veces tendrá ataques de claustrofobia. Sus irises dejan de ser círculos perfectos, y en ocasiones sus ojos serán brevemente fosforescentes en la oscuridad.

Armas :

  • Rick: Sable y arco
  • Erknest: "Espada legendaria" y cuchillas de aire

Status : The journey never ends

Humor : Cualquier cosa me vale.

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

25/08/23, 04:17 pm
En un principio no escuchó ningún ruido de dentro del torreón, aunque al mirar a la azotea pudo ver fugazmente al mjörní. Era un alivio ver que seguían allí, esperaba que sin más daños que los de los colaespinas. Al poco el mecanismo del puente sonó y tuvieron la puerta abierta. -(Por fin de vuelta)- pensó con una ligera sonrisa recuperando un poco de seguridad.

No tardaron en pasa al interior, donde ya unos cuantos les estaban esperando. Todo el mundo estaba bien o al menos eso parecía. Saludó con la mano libre en cuanto entraron y no tardó en dejar la lanza apoyada en la pared para poder reunirse en condiciones con sus compañeros, que obviamente estaban preocupados con todo lo sucedido. -Sí, hemos tenido suerte de no encontrarnos nada más. Menos mal que esa cosa no andaba por aquí- respondió a la pregunta de Rägjynn.

Luego se centró en la de le sanaí, eso iba a ser más largo de contestar. Se cruzó de brazos y empezó a contar lo sucedido: -Después de que el monstruo apareciera Kalna intentó pararlo y fui en su ayuda mientras Abel se encargaba de seguir a Serena- Tal vez las motivaciones del español fueran otras, pero no iba a dejarle vendido cuando lo que había conseguido por poco que fuera lo veía bien. Que hubiera conseguido dar con Serena y no dejarla sola mientras los buscaban era algo que le reconocía el neoyorquino. -No se muy bien que pasó, pero cuando llegué Kalna estaba herida y el bicho ese en el suelo llorando. Huimos de allí y acabamos reencontrándonos en un faro que hay cerca. No nos quedamos mucho tiempo, el sitio era el nido de unos pájaros y, visto lo visto, lo mejor era no molestarlos. Aunque encontramos algo que tal vez nos sirva- terminó indicando con el pulgar el libro que llevaba Abel.

Ya puestos al día de su pequeña "aventura" que esperaba no se repitiera nunca, Rick se sumó a la preocupación del chico. -¿No ha entrado, verdad?- comenzó a preguntar mirando a todos los allí reunidos. -¿Dónde está el resto? ¿No... os ha atacado, no?- siguió haciendo más notable sus sentimientos aunque sin perder la compostura. Faltaban los niños, Connor y Ethan. Esperaba que no hubieran hecho la temeridad de salir a buscarlos, pero la idea de que hubieran salido mal parados si esa cosa había entrado le gustaba igual de poco que la otra posibilidad. A Nohlem lo acababa de ver en la escalera, algo alejado del resto. Le aliviaba verlo sin un rasguño como al resto, aunque le extrañó un poco ¿No quería acercarse por Serena? No lo culpaba, desde luego. En algún momento muy pronto iban a tener que tener una charla muy larga con la escocesa. Había que arreglar las cosas si querían sobrevivir allí.
Raven
Raven

Ficha de cosechado
Nombre: Ethan
Especie: Humano
Habilidades: Buen oído, valor y motivación
Personajes : Ethan: Humano, Ingles/Japonés 1.75

Síntomas : En ocasiones, se le desenfocará brevemente la vista. El amuleto curativo se carga el doble de rápido a su contacto y además es más eficaz si lo usa sobre sí mismo.

Armas : Ethan Lanza partesana y una daga

Status : Ciego y cojo, el chiste se cuenta solo.

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

26/08/23, 12:42 pm
Como era de esperar nadie sabía lo que era un mochi, no le sorprendió, como si le hizo la clase improvisada de geografía que ambos niños decidieron darles. Vale, Damian era un caso preocupante: Entre su comportamiento, la mentalidad rancia, la desnutrición con la que había llegado y el analfabetismo... O el circo era una forma bonita de edulcorar los gritos de algún padre maltratador o no le salían las cuentas. Por otro lado Aniol aún teniendo la mínima decencia de haber ido a la escuela tampoco había acertado, un error que en boca de un adulto habría caldeado las llamas de un cabreo próximo, pero que, ante el gesto apoyándose en su persona y su carita redondeada tan inocente no podía tomarse a mal.

-No te has acercado no, soy de Inglaterra, aunque te habrás equivocado porque mi abuela si es de Japón. -Le corrigió con una sonrisa y un tono suave en el que reflejaba que no le molestaba el desliz. En general no solía hablar de esa rama familiar, se sentía tan poco Japonés como lo era su padre y aún conociendo parte de su cultura, la había vivido tan distante que le era difícil llamarlo un "segundo hogar". En esos instantes, en cambio, quería hasta presumir de esa vertiente genética de la que sólo rehuía, quizá, porque estando a una distancia tan desorbitada del que era su planeta, cualquier detalle que sintiera como propio se convertía en una pepita de oro. -Mis ojos son herencia directa, a mi me gustan mucho. Ella siempre me decía que cuando es de noche, si te fijas muy bien, puedes ver las estrellas reflejadas en ellos.

Era un efecto óptico muy barato pero no tendrían porqué descubrirlo. Volvió a acomodarse en el sitio para que, de la forma más disimulada posible pudiera con el brazo libre darse unas palmaditas en un lateral del gemelo, como si fuera un tic espontáneo. Teniendo nuevos invitados no se atrevía a mostrarse tan vulnerable como estaba y a falta de no poder gruñir convertía el dolor en pequeños resoplidos que iba soltando en pequeñas dosis a lo largo de la charla.

Nohlem empezó a hablar del que era su trabajo y ante el mismo Ethan no supo esconder la curiosidad que le provocaba. Se inclinó en cuanto enseño el primero y tomó el pequeño accesorio en su mano, con el cuidado de quien sabía que tenía una millonada prestada. Lo giro distraído, asombrándose al poner rostro a un oficio que si bien existía en su hogar, nunca se lo había ni planteado. Era curioso, y casaba con el hecho de que viniera de alguna familia noble.

-Oh, no me malinterpretes tu compañía era perfecta, que seas extranjero es un plus. -Le devolvió el anillo con una sonrisa de medio lado, evidenciando en su tono de voz que solo estaba siguiéndole el juego. -Es sólo que no puedes competir contra ellos, son demasiado guapos...

A la segunda joya le acompañó una ligera risa por la reacción del pequeño, decidiendo trazar con la mirada el mismo recorrido para fijarse en que, efectivamente, hacía juego con el color de sus ojos. Se notaba que a ambos les gustaba el tema de accesorios pues entre los anillos de uno y las pulseras de otro iban todos arreglados.

-Vaya, algún día nos tienes que contar más de esto. ¿Trabajáis más cosas u os especializais en anillos? La verdad es que tengo 0 ideas sobre cómo se llegan a hacer peeeero tus anillos son muy bonitos -se giró hacia Aniol- y tus pulseras también. Yo por desgracia no tengo ni uno, ni lo otro ¿Os sirven pendientes? De esos tengo varios, aunque también cuento con un piercing secreto. -A lo último hizo una pausa dramática. No tenía una historia tan chula, ni tampoco se lo había hecho él así que mantener el factor sorpresa era su única baza. Aguardo un momento y cuando obtuvo la mirada de ambos les saco la lengua con una sonrisa tan amplia que le dolían las mejillas. La bolita de metal era de un azul oscuro, bastante simple más allá del extraño lugar donde había escogido colocarla. Una vez enseñada no tardó en volver a guardar la lengua. -¡Taraa! No es tan chulo como lo vuestro pero uno hace lo que puede.

La conversación estaba resultando amena y si bien los saltos de un tema a otro eran abruptos, más lo habían sido las disculpas inesperadas de Damian. Ethan no supo qué decir de primeras, parpadeando perplejo ante un comportamiento que no reconocía del italiano.

-Ah, eh... Bueno, agradezco tus disculpas pero creo que, valoraría más si solo me pidieras perdón por el golpe. Está mal pegar a alguien, independientemente de que esa persona tenga una herida o no anterior.

Igualmente se sintió complacido, no dejaría su perdón caer en un saco roto, ya era un intento y solo por eso lo valoraba. Las propuestas de los pequeños a continuación le parecieron aún más entrañables y si bien, cuidar de Damian toda la noche le imponía, busco en las pupilas rasgadas del felino una aprobación que otras tantas veces había buscado en el pelirrosa.

-¿Qué te parece? Podríamos dormir los 4 hoy, sobran habitaciones... -Su palabras fueron dirigidas hacia el otro adulto del grupo, con un lenguaje sutil que escondía de forma velada la indirecta de evitar a Connor. -Eso sí, habrá que poner alguna norma de convivencia.

Pero como calma que anuncia la tormenta pronto la voz de Rick se hizo eco en el lugar y mientras  algunos compañeros empezaban a bajar, Ethan se apartaba incorporándose como buenamente podía. Dirigió una mirada de preocupación a Nohlem, con una incertidumbre que le devoraba por dentro. Que no hubiera tono de alarma en la voz del Newyorkino no le aliviaba, al contrario, despejado el miedo expuesto el enfado.

-¿Te importa si ocurre algo grave avisarme? -El apretón que sintió en su mano le hizo desviar la vista a Aniol, no iba a dejar al joven vendido ante Serena, no otra vez. -Me voy con los niños a preparar la habitación, te esperamos allí.

Una vez vio al pelirrojo bajar le ofreció la mano libre a Damian y marchó con los dos peques a la habitación más alejada de las escaleras. Una protegida de la vista de incautos, ellos necesitaban un poco de calma y siendo sinceros, él también.

-Vale, ¿qué os parece si  montamos una tienda de campaña?
Kanyum
Kanyum

Ficha de cosechado
Nombre: Nohlem
Especie: Varmano granta
Habilidades: Puntería, intuición, carisma
Personajes :
Jace: Dullahan, humano americano. 1’73m (con cabeza 1’93m)
Rox: Cambiante, humano australiano/surcoreano. 1’75m
Kahlo: Aparición nocturna varmana granta. 1’62m
Nohlem: varmano granta. 1’69m
Xiao Taozi: Fuzanglong carabés. 1’55m

Unidades mágicas : 5/5
Síntomas : Mayor interés por acumular conocimiento. A veces, durante un par de segundos, aparecerán brillos de distintos colores a su alrededor.

Status : Prrrr prrrrr

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

26/08/23, 06:42 pm
Oh. Claro, yo no tengo una nariz tan bonita —dijo con una naturalidad que haría difícil distinguir la ironía a cualquiera que no hubiese participado en su conversación nocturna—. Es una esmeralda, sí —sus mejillas se redondearon en una sonrisa por el cumplido. Justamente por el color de sus ojos llevaba esa piedra, y apreciaba que Aniol se hubiera fijado en el detalle—. Gracias. Unos tienen el cielo nocturno y otros el color del mar en el puerto —continuó tras Ethan—. Ah no, trabajamos de todo y no solo con oro. Anillos, pendientes, diademas… Ojalá pudiera enseñaros mejores ejemplos que estos.

Nohlem había aprendido a fingir que el trabajo de orfebre le gustaba solo porque sabía lo atractivo que era para otros. Era un oficio peculiar y delicado, un arte que movía unas sumas ridículas de dinero, lo que estaba muy bien si te gustaba comerte chorrocientas clases de química, geología y mercado, o dejarte la vista y los nervios tallando un diamante de 0.50 quilates a sabiendas que si lo partías el dinero sangraba. Porque sí, los diamantes se partían. Que buenas semanas de castigo se había comido por ellos.

Cuando el pequeño les enseñó su semanario el sonido de la plata al chocar le gustó tanto por su familiaridad que casi le pidió que agitara la muñeca para que volviera a tintinear.

Que bonito —que Aniol fuese su calendario ensanchó su sonrisa y enchicó sus ojos. Estaba más que acostumbrado a ver piercings, y aunque opinaba que los humanos tenían orejas feas al menos sabían adornarlas. Lo que no se esperaba para nada es que se pudieran poner uno en la condenada lengua. El varmano abrió los ojos, muchísimo—. ¿Cómo? ¿Qué? —masculló—. ¿Cómo te-… ¿Cómo besas con eso?

De las quinientas preguntas que se le venían la mente (cómo te lo hicieron, cómo comes, como hablas, no te da miedo tragártelo), era esa, ESA por la que más curiosidad tenía. Después de todo sus intereses eran lo que eran, y su mente avispada ahora se estaba preguntando otras de un calibre similar.

Atontado y aún mirándole la boca a Ethan el tema viró a otros lados. Había estado cerca de sentirse desplazado cuando hablaron de cosas terrestres (como su más de medio millón de nacionalidades) y aunque sabía que era natural y que el único remedio era preguntar, no quería ser el extranjero al que le tenían que explicar todo. El sentimiento regresó cuando escuchó la petición de Aniol a Ethan y la suma de Damian a esta. Desconocía si estaba incluido en ese “vosotros”, pues el no ser humano creaba una barrera mental entre él y los demás, y aunque dormir con los niños no era exactamente algo que envidiase, sí lo era formar parte de algo. Especialmente con un espíritu fuera y un dormitorio a compartir con Connor. Aunque… ya era parte de algo, ¿no? Aquel juego de Aniol, la tribu… sonrió un poco para sí. Después Ethan se encargó de incluirle y eso terminó de calentarle el corazón, todo mientras seguía viéndole la boca para ver si la bolita se le trababa en los dientes o algo. Pestañeó para que no se notase.

Ah, eeh, ¡claro! —en su sonrisa cohibida había un “gracias” tan intenso como silencioso. Se volteó a Damian—. Sí. Con la condición es que no se grita nada más despertar y se respeta el sueño de los demás. Esas son mis partes del trato.

En ese momento pasó Colmillo escaleras abajo y tuvo que apartarse a un lado. Entre conversación y ladrillo no había oído el grito de Rick fuera, pero ahora que estaba más atento no tardó en oír el puente y las voces. Cuando Airi se sumó procesión abajo se puso en pie, corazón en mano.

Sí… Sí. Voy a ver.

Nohlem se quedó en el último escalón, visible pero sin intención alguna de pasar de ahí principalmente por miedo. Habían vuelto, todos. Se cruzó de brazos y escuchó, su inquietud mezclada con el alivio y la curiosidad, pero sobre todo con un enfado que emergía paciente y fuerte como las raíces de un árbol demasiado sano sobre el pavimento. Kalna estaba herida y sangraba de sitios nuevos, pero se tenía en pie y no mostraba debilidad. El resto seguía tal cual habían salido… Serena incluida. Quizás si les hubiera visto en peor estado la preocupación habría aplacado cualquier sentimiento negativo, pero no era el caso. Egoísta o no, Nohlem juzgaba a todos y cada uno de ellos como una panda de descerebrados. Si bien el varmano podía estar de acuerdo en que la chica no merecía ser expulsada o que hubieran querido detenerla por robar la comida que tanto les había costado conseguir, el salir en bandada como locos detrás suya había sido una absoluta irresponsabilidad. Con semejante bochorno no solo habían puesto en peligro la vida del resto atrayendo a un fantasma que claramente era capaz de dañar, les habían dejado con dos niños pequeños y una enferma delirante, eso si no contaba al cojo y al minúsculo espíritu del bosque. O mejor dicho, le habían dejado a él con ellos. Si Serena quería acelerar su encuentro con la Hoja Negra correteando por un mundo desconocido, bien, pero nada excusaba que otros se arrastrasen tras ella. Su pensamiento no sería tan severo de no haber visto la clase de criaturas que vagaban por la ciudad, pero por desgracia las cosas habían pasado como habían pasado, por bien que estuvieran al final.

Su mirada se encontró con la de Rick y por un momento la desvió al suelo. Se estaba preocupando por ellos. “Un poco tarde”. El calor del enfado le hizo devolver rápidamente la vista al chico sin expresión alguna, con unas pupilas que lejos de estar finas lucían enormes, como las de un felino que se prepara para saltar con las uñas por delante. Le había caído bien, pero ni a él ni a Connor los excluía de su molestia. No respondió ni miró a nadie más, y habiendo recopilado suficiente dio media vuelta. Cuando volviese a la habitación donde se hubieran metido cerraría la puerta tras de sí, una señal que esperaba supieran interpretar bien, al menos aquellos que tenían que interpretarla.

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♪♫♬:
LEC
LEC

Ficha de cosechado
Nombre: Kalna, hija de Mánide
Especie: libense, del imperio
Habilidades: Automotivación, nociones de lucha, valor.

Personajes :
Dama Puente/Kaila: Maga logomante austriaca (1.60).
Kaethe/Dama Sobras: Ghoul nublina (1.46).
Yttria: Bruja percusionista canadiense (1.53).
Amira/Cálamo : Valkyria francesa (1.63).
Kalna : Libense, del Imperio (1.78).
Nefer : Ammut hijo de luna Levyna. (1.85)

Síntomas : Su sangre adquiere un tono anaranjado y se espesa un poco. Es capaz de intuir con mayor facilidad cómo se van a comportar los animales con los que se encuentre.

Armas :
Dama Puente/Kaila: Magia, báculo
Kaethe/Dama Sobras: Daga, fuerza bruta
Yttria: Arco, hacha, magia, mala leche, cucharillas y otros objetos metálicos.
Amira/Cálamo: Espada corta, pegaso (shire)
Kalna : Espada bastarda; lanza y escudo
Nefer : Lanza, venenos

Status : One flesh, one end
Humor : Permanent resting bitch face

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

26/08/23, 10:46 pm
No todos habían ido a recibirles, pero poco importaba. Kalna tenía todavía menos ganas de socializar con ellos de las que tenía ya de normal. Estaban Airi y Rägjynn, así como Szczenyak, quien había subido el puente. Parecían estar todos bien, así que el monstruo no tenía pinta de haber entrado allí y simplemente se habría ido, lo cual era algo bueno en cierta medida. La libense seguía sin comprender muy bien las motivaciones de aquella cosa, pero se conformaba con que no les atacase dentro de aquel sitio. Si ya no podían ni considerar seguro aquel refugio, no podían aferrarse a nada.

Apretó los labios cuando Rick comenzó a explicar lo que había pasado. No es que hubiera intentado pararlo, es que había creído que no iba a salir de allí viva y por eso había actuado así. Había funcionado en cierta manera, pues aquella cosa se había puesto a llorar y le había permitido huir, pero aquella motivación pensaba guardársela para sí. Igual que Abel no había corrido por seguir a Serena sino por cobardía (o así lo creía), pues no era el momento para tener más discusiones y que más gente saliera corriendo. Con que lo hubiera hecho Serena sobraba, y tocaría hablar con ella al respecto.

Me rozó con un tentáculo de oscuridad y no pareció hacerme daño, pero estaba demasiado cerca como para que sirviera correr si quería seguirme, así que consideré que a lo mejor podía herirle y le clavé la lanza en uno de los ojos. Entonces me hizo esto. De alguna manera esa oscuridad empezó a apretar y morder y cortar y… no entiendo muy bien si es algo mágico o qué —explicó su parte del encuentro, aunque no llegase a comprender cómo aquel ser pasaba de ser oscuridad que atravesaba paredes a algo tangible que podía herir.
Miró a Rägjynn preparar todo de nuevo, y agradeció su ayuda con un leve asentimiento de cabeza.
»Me ha roto un dedo. No sé si tenemos algo para entablillarlo, pero sería de ayuda.

Dejó las explicaciones sobre el faro al resto, aunque no entendía por qué se estaban dejando lo más importante. La breve mención de Rick no era ni de lejos algo suficiente para la importancia que tenía lo que habían encontrado. ¿Por qué tanto interés en unos pajarracos cuando habían encontrado algo que podría ayudarles tanto? Le estaban dando demasiadas vueltas algo que a sus ojos tenía mucha menos relevancia, mientras ignoraban lo más interesante.
Hemos encontrado un libro con hechizos.

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Regocijaos, pues ahora sois parte de la leyenda de Kalna, hija de Mánide
Jack
Jack

Ficha de cosechado
Nombre: Tawar
Especie: Repobladore de la montaña
Habilidades: Artesanía, habilidad manual y resistencia
Personajes :
Jack: Vampiro de humo terrícola.
Atol/Skarog: Helión libense.
Alice/Onyx: Onycemante terrícola.
Tesón/Eterno: fantasma roquense, sin magia.
Sinceridad: Argos magnético roquense de Tierra Bruja.
Pefka: Lenguaraz hijo de Luna Kepryna.
Tawar: Repobladore de la montaña

Unidades mágicas : 12/12
Síntomas : Pérdida gradual del miedo a salir al exterior. Al regresar de algunas salidas tendrá jaquecas, que aumentarán en intensidad cuanto más tiempo haya pasado fuera.

Armas : Jack: dos espadas. Magia.
Atol: lanza, espada y escudo. Magia.
Alice: magia y onyces. Espada o arco.
Sinceridad: arco, jabalinas, espada/lanza y escudo.
Pefka: lo que pille, normalmente machete y arco


Humor : Os falta bosque, gigantes

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27/08/23, 03:05 am
Fue Räg quien se ofreció a bajar con elle y también añadió palabras de consuelo para le repobladore. Había visto que llegaban bien y por su propio pie, así que Tawar se permitió un largo suspiro como si se vaciara poco a poco del pesar que había ido acumulando. Bajaron, se cruzaron con el otro grupo de Gigantes y llegaron al encuentro del resto. Nada más posar la vista en les Gigantes, saltó de uno a otro con la mirada, buscando cualquier ápice, cualquier lesión, cualquier... ¡Kalna! Era la única que parecía herida, y pronto Räg también se dio cuenta y se dirigió a ella. Le desagradaba la visión de la sangre, pero precisamente con lo que le pasaba sí se veía capaz. Así que bajó desde el hombro del mjörní hasta su brazo y les habló a ambos.
¿Puedo ayudar? Si lo pensáis, vuestras manos son como pequeños brotes. Puedo buscar un tutor para ese dedo... Quiero decir, una tablita y tela para que esté recto, para recolocarlo y que se cure en su posición, me refiero —se apresuró a corregirse. Había usado un término más acorde a la Flora que quizá no les era familiar.

Le repobladore también había visto entablillar las extremidades de algunos animales, pero para elle le era más familiar hacerlo con las plantas. Entre tantos muebles de madera y el sótano del que sacaban tantas cosas seguro que encontrarían alguna tabla que pudiera cortar para ajustar al tamaño de sus dedos y colocárselo con telas anudadas entre ellas.  Habría seguido hablando al respecto antes de ir a buscar algo, pero entonces la chica dijo algo que se sumó a las infinitas dudas que acumulaba desde su llegada a la ciudad. También desconocía qué sería un "faro" o por qué un nido de pájaros les había asustado tanto, pero le resultaba más urgente otro asuntillo que tenían entre manos, nunca mejor dicho.
¿Pueden esperar los "hechizos" a que te curemos?

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No Hope. No Dreams. No Love.
My Only Escape Is Underground
Muffie
Muffie

Ficha de cosechado
Nombre: Szczenyak o Colmillo
Especie: vittya zawodny
Habilidades: Habilidad mental, habilidad manual y orientación

Personajes :
Wednesday: Vouivre humana británica.
Karime: Licántropa loba libense de la capital.
Kimbra: Demonio rakshasa krabelinense Hija de Lunas engendro.
Irenneil: Brujo de la cera aurva sinhadre.
Edén Damkinea: Atlante daeliciano de la Ciudad del Norte.
Szczenyak//Colmillo: vittya zawodny nómada.



Unidades mágicas : 5/5
Heridas/enfermedades :
Ka: Le falta el ojo izquierdo.
Colmillo: Tiene partido el colmillo derecho.


Síntomas : Gusto por dibujar trazos sin ton ni son cuando vacía la mente.

Armas :
Wen: Guadaña doble y arco.
Ka: Espadas gemelas, arco y dardos.
Kim: Arco, machetes y dagas.
Neil: Cuchara de madera y cera.
Edén: Magia y sonrisas amables.
Colmillo: inutilidad.



Humor : Absurdo

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

27/08/23, 03:15 pm

Szczenyak fue parcialmente consciente de que Connor se sentó a su lado, pero sí escuchó perfectamente su queja amarga y no pudo estar más de acuerdo. El vittya se sentía como si simplemente estuvieran ahí esperando la muerte. En cualquier momento el monstruo aparecería a través de una pared, los cubriría con su velo de oscuridad y Colmillo ni siquiera tenía el alivio de un futuro como estrella al lado de la de su yaya. Sus huesos terminarían en aquella grieta en el suelo, olvidados junto a todos aquellos a los que no les querían.

Y, entonces, Airi dijo que se había ido.

Así, sin más.

El monstruo había metido el miedo de cien vidas en su cuerpo y en el de sus compañeros, haciéndoles creer que ante ellos solo se presentaba el futuro más negro y vacío posible y él, simplemente, se había ido.

Ido.

Como si ni siquiera fueran lo suficientemente relevantes como para gastar las energías en matarlos. Como si no valiera el esfuerzo. Como si ninguno valiera la pena.

Szczenyak a penas registró las palabras de Räg y a este subiendo a la azotea. Un tumulto de sentimientos encontrados se arremolinó en su interior impidiéndole pensar más allá. El alivio y el miedo a que volviera luchaban entre sí para ser los predominantes, pero el sentimiento de insignificancia prevaleció sobre ellos.

Matka le había dicho que era especial, pero para el monstruo que tanto terror le había generado ellos no habían sido nada, no habían sido nadie.

Si bien sus oídos escucharon el grito de Rick, no fue hasta que Räg bajó de la azotea y confirmó que habían vuelto que Szczenyak se activó y, como un autómata, bajó hasta el sistema del puente para poder activarlo y dejar entrar al grupo. Mientras hacía el trabajo mecánicamente, el tumulto de sentimientos fue opacado por un único pensamiento. “Están vivos”.

Una vez el puente estuvo abajo, Colmillo esperó un tiempo prudencial antes de volver a subirlo. Nadie bajó pidiendo que volviera a bajarlo, por lo que el vittya pensó que había dado el tiempo suficiente para que todos entraran, pero no dio un paso adelante para subir de nuevo. Él había escuchado la voz de Rick y Räg había dicho que estaban todos fuera, pero todavía cabía la posibilidad de que hubiera heridos o, peor, bajas.

Inmovilizado junto al primer escalón, Colmillo quedó mirando al vacío, pero con las orejas direccionadas hacia las escaleras, esperando identificar la voz de sus compañeros que acaban de llegar. Y al hacerlo sus músculos, cuya rigidez no había sentido hasta el momento, comenzaron a desentumecerse y pudo empezar a poner un pie delante de otro para comenzar a subir las escaleras.

La visión de Kalna con sangre le dejó en shock durante unos segundos, alarmado, pero la linense parecía bien, tranquila y entera. “Están vivos” se volvió a decir mirándolos a todos por encima. Serena también estaba ahí, entera, intacta. La ira anterior, opacada por el terror y la incertidumbre hasta el momento, volvió a resurgir al ver a la humana. Quizás Aria había sido quien había atraído al monstruo hacia ellos, pero Colmillo no podía dejar de pensar en que Serena era la que lo había empezado todo.

Mirando hacia la puerta que llevaba al patio, Szczenyak quiso huir. No podía quedarse ahí y fingir que todo estaba bien, porque las cosas no estaban bien. Pero la idea de salir al exterior fue descartada al momento en su mente. Visualizarse a sí mismo sin un techo sobre su cabeza le hacía sentir vulnerable y expuesto, por lo que optó por la segunda mejor opción y, sin decir nada, volvió a subir a la habitación en la que antes se habían reunido.

Al llegar a la puerta, Colmillo titubeó un poco, viendo a Aria desmayada en una cama y a Connor tumbado en la otra, pero en seguida decidió que el silencio era quizás lo que necesitaba y, sacudiendo la cabeza, fue hacia otra de las camas para sentarse con las piernas cruzadas sobre ella y abrir con decisión el bolsillo de su riñonera. Necesitaba distracción y respuestas. Por falsas que fueran estas.

Al principio, su intención fue sacar su juego de tabas para poder hacer una serie de lecturas rápidas que pudieran calmarlo, a pesar de que sabía que era tan hábil en el arte como un dorogo con fiebre, pero un rápido vistazo a Connor, que parecía tener la intención de, al menos, descansar, le hizo desistir. Los huesos rebotando entre ellos harían bastante más ruido que las cartas y no quería tentar la suerte con el mal genio del humano si a este le molestaba el sonido, por lo que finalmente decidió sacar su baraja de tarot.

Cuando al sacar las cartas vio que la primera en aparecer era El Wendigo en posición invertida, casi tuvo que reprimir un resoplido divertido. Definitivamente, un mal augurio incluso para los más escépticos. Siempre que no se tuviera ni idea de tarot, claro.

Él, por su parte, había aprendido de su nana cómo identificar todos los matices de cada carta, cada posición y cada tirada.

Aunque para esta interpretación no se necesitaba tanto detalle. Para Colmillo era bastante obvio.

Su vida estaba sufriendo cambios y él se estaba resistiendo a ellos.


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"Rocavarancolia es una ciudad llena de misterios y sorpresas, como un acertijo complicado y excitante."
Aes
Aes

Ficha de cosechado
Nombre: Aniol
Especie: Humano
Habilidades: habilidad manual, automotivación, olfato fino.
Personajes : Ruth: Humana (Israel)
Demonio de Fuego
Tayron: Humano (Bélgica)
Lémur
Fleur: Humana (Francia)
Siwani
Aniol: Humano (Polonia)


Unidades mágicas : 03/12
Síntomas : Querrá salir más del torreón. En ocasiones, aparecerán destellos de luz a su alrededor que duran un instante.

Status : KANON VOY A POR TI
Humor : Me meo ;D

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

28/08/23, 11:16 am
Hasta entonces los muros de aquel torreón resultaron ser un fuerte inexpugnable que separaba al grupo de los peligros acechantes de fuera. Aniol pensó que viajaba a un mundo de fantasía, hadas, y criaturas mágicas en las que poder cabalgar con el viento meciendo su cabello. Puede que todavía fuera así, pero también existían las sombras. Cada esquina de cada calle parecía retorcerse en una garra famélica que se extendía en su dirección. Y no solo eso, ahora las tinieblas atravesaban el cemento y nada los mantenía a salvo.

Ni siquiera algunos de sus compañeros lo mantenían a salvo.

Aquel hueco de la escalera en cambio alejaba cualquier temor como una salvaguarda. Seguía escuchando el ruido de lo terrorífico lamer las murallas de la fortaleza pero ahora se traducía en un rumor más en consonancia con el fluir de un arroyo que otra cosa. Nohlem, Ethan y Damian acababan de conseguir que recuperara la calma y que cesara de interpretar el papel de un superviviente para volver a ser solo un niño que aunque exhausto, sonreía con amplitud y se permitía soñar.

El churumbel se llevó las manos a la boca con diversión ante el desconocimiento del que hizo gala el otro niño. Vale, había fallado en todas las ocasiones. Pero no entendía por qué tenía que confesar que no era ni americano ni vietnamita. Las mejillas de Aniol se inflaron con contención, estaba seguro que si se le escapaba un poco de aire terminaría por ofender a Damian con sus carcajadas.

Polonia es… —comenzó a explicar con la cara roja como uno de los tomates que su madre compraba en el mercado del pueblo—. Es… un país… ¡Pero me encantaría visitar un barrio italiano! Mi padre dice que los mejores helados del mundo son de allí. Y que sois la… ¿Bota?... de Europa.

Tuvo suerte de que sus demostraciones de geografía no tuvieran que aplicarse al continente Americano o Asiático o desde luego le iría mucho peor averiguando dónde quedaba cada país. Ya se había quedado lo suficiente impactado al comprobar que Ethan era de Inglaterra como para continuar aventurándose. Ahora cobraba mucho sentido su acento tan perfecto cuando trató de comunicarse con él en inglés antes de llegar a la fuente.

Su linaje japonés le maravilló más y fue incapaz de no imaginarse al chico ataviado con el vestido verde de Mulán de estar por casa, por mucho que la princesa disney fuera china en realidad.

¿Las estrellas? —levantó su cabeza distanciándose de la comodidad que le ofrecía el hombro del muchacho y se acercó a su cara con cautela como queriendo comprobarlo. Por suerte frenó en seco a mitad de camino, siendo consciente de que podría sentirse analizado como un ratoncito blanco de laboratorio. En lo que sí estuvo de acuerdo era en lo bonito de sus ojos y la amabilidad que despedían siempre. No era el único, el elfo poseía todos los rasgos atípicos posibles en su haber. Por un lado su piel tostada surcada de pecas, por otro un cabello anaranjado que nada tenía que ver con la blancura que presentaban los pelirrojos, y para rematar dos esmeraldas brillantes que miraban fijamente como un gato. Ambos serían dos príncipes guapísimos capaces de conquistar a cualquiera de sus hermanas. Bueno, a Nelka no. Nelka estaba enamorada de una tal Megan Fox.

Parecía que sus pulseras de plata les habían encantado a todos. Aniol se encontraba sumido en sus pensamientos imaginando como Nohlem creaba diademas, anillos y pendientes como lo haría un herrero cuando Ethan los sorprendió con algo. Un piercing en forma de bolita azul metálica justo en su lengua. Los ojos color miel del polaco se abrieron de par en par, intentando retener la imagen mental cuando el chico guardó el descubrimiento—. ¡Sí que es chulo! —quiso aclarar, no era la primera vez que veía un adorno de ese tipo pero siempre había sido en una oreja o en las cejas. Aquel lugar en particular era extraño. Tanto como para que también se lo pareciera al varmano, quien mostró la reacción más divertida de todas. El niño rió por lo bajo, apartándose la melena oscura de la cara y llevándose las manos al rostro. Su vena de celestina salió a flote como un salvavidas, demasiado había tardado—. ¡Eso eso! A las chicas debes parecerles un tipo malo. A mis hermanas siempre les gusta el villano de la película —dijo, sin reparar en lo cansino de mencionar a su familia constantemente. Se notaba a leguas lo unido que estaba a todos ellos—. ¡Solo te faltan los tatuajes! —la verdad, no sabía por qué a Nohlem se le había ocurrido preguntar eso, pero ahora él mismo tenía esa curiosidad. Quizá no había sido buena idea hablar de besos. Puede que Ethan tuviera novia allá fuera, esperándolo como una recatada joven japonesa vestida en kimono. O como una joven inglesa que le gustaba montar a caballo y tomar el té acompañándolo con mochis, fuera lo que fuera eso.

No tardaron en tener que apartarse para dejar paso a Colmillo y Airi, quiénes afirmaban que la criatura se había marchado. Aniol suspiró, dejando que sus redondos hombros descansaran y preguntándose cómo se encontraría el vittya y la sanaí al respecto de todo lo sucedido. Hablarían en otro momento pues el grupo de fuera había regresado. Deslizó su mano hasta agarrar la de Ethan un poco más fuerte de lo que pretendía.

Serena estaba abajo.

Y Connor continuaba arriba. No era valiente como para presenciar un encuentro entre ellos del mismo calibre. Ni por supuesto para que la chica le hablara con tanta frialdad. Eso sí, al menos el pelirosa le había defendido… pero no le consolaba mucho.

Por suerte su oferta no fue solo aceptada sino que encima se unió Nohlem. Y Damian, a quién desde que se había disculpado veía con otros ojos. Se dirigieron hacia una de las habitaciones entre normas de convivencia y mientras el elfito se aseguraba de que no había ocurrido algo malo.

Al final decidieron hacer una especie de cabaña improvisada para dormir todos juntitos y refugiados. El niño ayudó en todo lo posible a arrastrar camas, colchones y somier hasta que fuera cobrando una forma reconfortante. Tenían paredes. Un suelo blandito y cómodo. Sábanas que caían en cascadas para taparles de todos los males y una sonrisa pletórica de ilusión. En una de esas Nohlem apareció dejando tras de sí lo que identificó como un portazo. Pero no quiso preguntarle nada en absoluto.

¡Ya está! —aplaudió al finalizar la tarea. Estaba nervioso y de vez en cuando resoplaba por el esfuerzo. Su mente ya no estaba allí. En su lugar recreaba a la perfección la cabaña de Hensel y Gretel. Miró a Ethan y Nohlem con agradecimiento antes de hablar—. ¡Tenemos un castillo dentro de un castillo! Damian… ¿Hacemos los honores? —Aniol sacó a Anastasia del bolsillo de su sudadera envuelta en un halo de misterio. No quería que nadie entrara todavía hasta inaugurar el refugio como era debido. Esgrimió la grulla de papel en su mano y con su mirada quiso decirle al italiano que hiciera lo propio con Rambo. Su intención era que giraran las figuritas a la vez a modo de dos llaves gemelas.

Volvió a sonreír.

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"Ya No Hay Fuego, Pero Sigue Quemando."

"Son Un Sentimiento Suspendido En El Tiempo, A Veces Un Evento Terrible Condenado A Repetirse."

"Deja Que Tu Fe Sea Más Grande Que Tus Miedos."

"¡Se Lo Diré Al Señor Santa!"
Tak
Tak
GM

Ficha de cosechado
Nombre: Airi
Especie: Sanaí
Habilidades: Habilidad manual, memoria, imaginación.
Personajes :
Gael/Koval: fuego fatuo terrícola.
Kin: demonio raigaurum irrense.
Ayne: anima sinhadre.
Eara: sinhadre sin esencia.
Nime: demonio mineral libense.
Iemai: cercana, fallecida.
Airi: sanaí.


Unidades mágicas : 8/8

Síntomas : Tendencia a alargar sus baños. Tiene episodios de disociación esporádicos cuando sale al patio.


Armas :
Gael/Koval: espadas rectas, maza y quimeras.
Kin: alfanje y guan dao.
Ayne: sable.
Eara: ballesta de repetición.
Nime: dagas.
Airi: vara y arco.


Status : (ノ☉ヮ⚆)ノ ⌒*:・゚✧

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

28/08/23, 12:45 pm
Airi se quedó mirando al mal aspecto de Kalna, aunque se obligó a apartar la mirada para que esta no resultase invasiva. Ante todo, estaba entera, y parte de la sangre que tenía encima aún era de las heridas producidas por los animales con espinas. El resto estaban bien, incluso Serena. Para ser quien había obligado al resto a ponerse en peligro había tenido demasiada suerte. Airi suponía que su regreso era la principal razón por la que varios decidieron no bajar y Szczenyak se perdió de nuevo escaleras arriba tras abrirles el paso, pero por otra parte le resultaba frío aquel recibimiento para los que se habían visto arrastrados por la temeridad de la humana. De haber estado en el lugar indicado y encontrarse bien, Airi también podría haber ido tras Serena. Que apareciese un monstruo a escasos pies del torreón era algo con lo que ni esta habría contado, o no se habría ido como lo hizo.

Le sanaí agradecía al menos la presencia de Rägjynn y Tawar, y por el momento era más importante escuchar su historia. Al parecer habían podido cobijarse en el faro que se veía un poco más adelante desde los pisos altos.
A nosotros no nos pasó nada —explicó ante las preguntas de Abel y Rick—. Nos asustamos al ver lo que pasaba y nos refugiamos en los pisos de arriba. Vimos al monstruo levantarse e irse después de un rato, y no hemos vuelto a saber nada…

La historia de Kalna le sobrecogió, aunque en cierto modo era un alivio que solo hubiese sido un dedo no podía evitar apretar los dientes al imaginarse el enfrentamiento. Podría haber acabado peor, tal vez mucho peor… Solo la mención del libro pudo apartar su mente de seguir creando escenarios, despertando en elle una enorme curiosidad. Aunque estaba de acuerdo con Tawar en que debían curar primero el dedo de Kalna, tal vez el libro también contuviese la respuesta a eso, así que encontró su excusa para echarle un vistazo cuanto antes.

Se acercó a Abel y alzó las manos hacia el libro.
¿Podemos verlo? —pidió con suavidad. Su mirada buscó a Rägjynn y le preguntó—: ¿Si aquí se describiese cómo hacer algún tipo de magia curativa crees que serías capaz de...?
Tenía fe en que el mjörní pudiese enfrentarse a aquella manera nueva de canalizar la energía mágica mucho mejor que elle, al conocerla de antemano.
Isma
Isma

Ficha de cosechado
Nombre: Damian
Especie: Humano itaiano
Habilidades: Agilidad, dibujo, espontaneidad
Personajes :
Síntomas : En ocasiones se desconcentra con más facilidad. Sufrirá de vez en cuando migrañas con aura.

Armas :
  • Adam: Cimitarra y cuerpo de caballo. La incomodidad
  • Damian: Dientes
    Daga

Status : muñonesmuñonesmuñonesmuñonesmuñonesmuñonesmuñonesmuñonesmuñonesmuñonesmuñonesmuñonesmuñones
Humor : ajjaj

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28/08/23, 12:48 pm
Paiis… Okay, ¡Okay, vale! —respondió al final un poco enérgico pero en su cabeza le era raro que Polonia o lo que sea que fuese, se comparase a Italia que, para Damian, era su mundo y le costaba imaginarlo fuera de su burbuja. Aniol estaba un poco rojo pero el italiano le restó importancia de todas formas—. No sé a que te refieres con lo de que somos una bota... ¡P-Pero te digo que me encantan los helados, eso sí! ¡Están que te cagas, probé uno en Florencia de nata y chocolate! ¡Cuando pueda le diré a mi mamá que te compre uno también! —de hecho, de las poquísimas veces que le compraron uno y al chico le supo a gloria, atesoraría ese recuerdo con mucho cariño cuando su madre se lo obsequió dentro del coche.

Ethan también habló de sus orígenes y Damian intentó sumar dos mas dos, sobreentendiendo que el caso de Inglaterra sería el mismo que Polonia, un país. Japón también sonaba a eso y el italiano asentía con los ánimos más subidos por entender a su manera cosas de las que no tenía ni idea.

Cuando mencionó sus ojos que, la verdad tenían una forma que le recordó en su momento a los vietnamitas de las pelis de Rambo. Rasgados y afilados eran curiosos de ver y el rubio, sin poder ocultar su curiosidad o ser más discreto con ello, acercó su mirada a los esféricos con estrellas dentro según lo que explicó su dueño. Realmente eran únicos a su modo y Damian, cuando estuvo satisfecho de mirar, se alejó sonriente.

¡Me molan tus ojos! —confesó sonriente.

De hecho, muchos en el grupo tienen ojos muy únicos. Damian recordó los de Rag, verdes y únicos por la forma de la cabeza de su amigo. Los de Kalna, cuando hacían eso de estrechar la pupila, eran intensos junto a ese amarillo. Incluso Nohlem los tenía brillantes, como una gema. No pudo evitar mirar de reojo los de Aniol, bastante cálidos.

Les tenía envidia en parte. Tenían en su vista unos colores bastante chulos, como los azules cristalinos de su madre. Damian se miraba muchas veces al espejo en el coche, mirando sus ojos. Negro, vacío, nada de color. Era una cualidad que, según Bianca, heredó de su padre. Fue de las poquísimas cosas que sabía de él y como nadie mencionaba nada al respecto en el circo cuando preguntaba más, él se quedó con el dato solitario no muy satisfecho. Tenían suerte de que él ni siquiera sabía exactamente lo que es tener padre ni tampoco tenía referentes en los que compararse.

Tenéis colores molones, me gustaría tenerlos como vosotros —admitió señalando a los suyos, grandes, redondos y oscuros.

La profesión del pelirrojo, eso sí, no la llegó a entender del todo. ¿Trabajan con oro? ¿Se refería a los adornos que llevaba Luciano en el cuello? También portaba anillos plateados en sus dedos, ¿Nohlem era el encargado de hacer esas cosas?

—¿Podrías hacerme uno Nohlem? Una pulsera de oro estaría guay, y bien grande —vaya si le gustaba la idea de llevar una de esas, se veía a sí mismo bastante elegante—. ¡Ah! Por favor, claro —dijo al cabo de un rato largo, cayendo en como tenía que pedir las cosas aunque se le hacía un poco cansino repetirlo tanto…

¡OOOOH! —el circense exclamó muy sorprendido al ver que Ethan tenía un piercing en la lengua—. ¡Ya ves! ¡Ethan es un imán de tías con eso puesto! —dijo como respuesta a Aniol, convencidísimo de lo que dijo—. Buah, tatuajes como los de los brazos de Connor. Esos están de puta madre —y vaya si él los quería también, se veían tan molones y agresivos que seguro se vería duro y bien macho. Se imaginó a si mismo, grande como el de la cresta rosa y ligando de forma idealizada con chicas guapas. Eso le dibujó una sonrisa boba en la cara.

Emmm… Vale vale, pues perdón por el golpe. No voy a pegar a nadie —“prometió”, no entendiendo la parte de disculparse solo por eso. Solo el golpe. Pero si Ethan no estuviese tan mal de la pata, no le hubiera dolido tanto. Pegó por puro cabreo general y la pagó con Ethan, pero tampoco quería matarlo a golpes. Igualmente se sentía mal, así que se quedó satisfecho con la conclusión de todo y no lo iban a regañar más.

Sobre dormir juntos, el de ojos rasgados y Nohlem aceptaron la petición de ambos chicos. Damián abrió la boca, muy muy feliz por ello y antes de exclamar su buen estado de ánimo el pelirrojo le dejó bien claro que no quería oír gritos en la madrugada.

¡Bahhhh, si yo no grito tanto! Si soy el primero que quiere dormir, tranquilo —negó con aspavientos notables, convencido de ello y alzando las cejas, asintiendo al final—. Me muero de ganas de estar con vosotros, no haré naaaaaada jurado —levantó el pulgar ante los ahí presentes, guiñando el ojo de buen humor ya que significaba dormir otra vez con Aniol y también con Ethan y Nohlem.

Cuando Ethan se lo llevo de la mano, se preguntó si Nohlem aparecería luego. Esperó que no tardase mucho yendo a ese fregado con la pelirroja. En la habitación ya se pusieron manos a la obra para hacer la base, levantando las camas y distribuyendo los colchones. Ayudo todo lo que pudo con su pequeño cuerpo, no quería quedarse esperando en una esquina ni de coña.

¡Tomaaa, terminado! —Damian se unió a los aplausos, haciéndolos con muchas ganas. Se esforzaron mucho entre todos y estaba orgulloso del castillo, tal y como Aniol lo nombró—. ¡OH, claro! —con una sonrisa sacó de su bolsillo a un Rambo curtido en un millar de batallas. En comparación a Anastasia, Rambo estaba cansado de tanta lucha, convertido en un amasijo sin forma debido a las guerras que Damian provocaba en su contra. Roto, arrugado y moribundo, Rambo se giró tal y como Aniol hizo con Anastasia para abrir las puertas de su fuerte—. ¡Gracias Anastasia, ya tenemos la base militar lista! ¡Agradecemos tus esfuerzos a nuestro país, soldado! —dijo poniendo una voz grave y ronca, meneando a Rambo mientras el propio Damian saludaba con su mano en la frente, como un militar.
Giniroryu
Giniroryu
GM

Ficha de cosechado
Nombre: Rägjynn
Especie: mjörní
Habilidades: memoria, buen oído y don de lenguas

Personajes :
Noel: Draco de Estínfalo de origen sueco.
Archime/Krono Rádem: Kairós irrense.
Irianna/Dama Enigma: Nebulomante idrina lacustre.
Adrune: Gamusino sinhadre, edeel.
Lethe: Horus, enderth.
Rägjynn: mjörní.
Naeleth: Bruja del Hielo, nublina.


Unidades mágicas : 8/8
Síntomas : Aumenta su resistencia progresivamente. El sangrado de sus ojos se detonará con más frecuencia.

Armas :
Noel: hacha de dos manos y espada bastarda.
Archime/Krono Rádem: sus monólogos sobre biomecánica avanzada.
Irianna: arco y estoque.
Adrune: lanza, espadas cortas y arco.
Lethe: arco y lanza.
Rägjynn: jō.
Naeleth: arco, sai y báculo.


Status : Gin: do the windy thing.

Humor : REALLY NOT FEELIN' UP TO IT RIGHT NOW. SORRY.

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28/08/23, 09:55 pm
Les dieron relativamente buenas noticias al contarles que la única herida había sido Kalna, y aunque podían impresionar, sus heridas no eran en principio más graves que las que ya se habían hecho antes… Aunque Räg seguía queriendo no pensar en las posibilidades de infecciones al no disponer de medios más adecuados para tratar las lesiones.

Rick resumió lo que había ocurrido, y ellos parecían tan confusos como los que habían visto desde la ventana del comportamiento errático del monstruo. Una parte de él sentía curiosidad por los razones de que aquella criatura que a todas luces podría haberles hecho mucho daño (no había más que ver los mordiscos de la libense y su dedo roto) había decidido simplemente detenerse… e irse. Pero desde luego su curiosidad no era tanta como para que le importase por encima de lo que era de verdad urgente en aquel momento y se quedaría el tema en aquella incógnita irresoluble.

Asintió ante la explicación de Airi a la pregunta de Abel y le dijo a Tawar que si podía ayudarle se lo agradecía mucho, mientras ya había comenzado a tratar las heridas de Kalna con agua y jabón. Al reunir los materiales a su alrededor se dio cuenta de que allí abajo solo estaban ya le repobladore, Airi y él mismo para recibirlos, y le resultó sumamente extraño. Lo que le resultó menos raro fue ver a Serena irse al dormitorio que había usado la noche anterior sin apenas mediar palabra: aquella situación era culpa suya a fin de cuentas, y aunque el mjörní guardaba cierto resentimiento hacia ella por eso, también le inspiraba algo de lástima. No creía que, a pesar de sus palabras tan fuera de lugar, la chica pretendiese llegar tan lejos en un primer lugar y probablemente se estaría sintiendo bastante mal en esos momentos. Había vuelto, a fin de cuentas.

La mención del humano acerca de que habían encontrado algo útil había suscitado curiosidad, pero no la suficiente como para dejar la tarea que tenía entre manos… como si lo hizo la explicación de la propia Kalna de qué se trataba exactamente.
<<Hechizos>>, repitió para sí mismo, deteniéndose con el trapo a medio camino.

>>¡No, en realidad a lo mejor ese libro puede ayudarnos a curarla! —le replicó a Tawar con más énfasis del que pretendía. A continuación se giró hacia Airi, a quien cedió el trapo mientras asentía a su pregunta—. Es posible. Tengo que intentarlo, al menos. ¿Me lo dejáis ver, por favor?

Extendería sus garras hacia quien le tendiese el susodicho libro de hechizos y lo recogería con cierto temblor. ¿Podría ser que finalmente…? Al leer lo que ponía en la portada se desanimó con rapidez: todo indicaba que se trataba de hechizos orientados a la cocina. Era improbable que… No, a lo mejor venía algún remedio por si tenías un percance cocinando, tenía que ser positivo al respecto.

Pero ser positivo no bastaba. Un escaneo rápido a cada página le confirmó que no había hechizos curativos en aquel libro. Hubo algún nombre que le hizo detenerse a leer más en profundidad el efecto descrito, pero no servían para tratar heridas en absoluto... En otras circunstancias se habría alegrado, pues había visto cosas que podían resultar verdaderamente útiles, pero…
No los hay… Son solo hechizos para emplear en la cocina —anunció con cierto desánimo, dejando el libro sobre la superficie más cercana.

Tenía intención de intentar realizar alguno de aquellos hechizos en otra ocasión, por supuesto, pero por el momento lo que tenía que hacer era seguir atendiendo a las heridas de Kalna, una vez más, sin la ayuda de la magia. El mjörní, después del subidón de adrenalina ante la posibilidad de poder volver a realizar un hechizo, se tuvo que obligar a continuar con la tarea y no dejarse arrastrar por la frustración.
Raven
Raven

Ficha de cosechado
Nombre: Ethan
Especie: Humano
Habilidades: Buen oído, valor y motivación
Personajes : Ethan: Humano, Ingles/Japonés 1.75

Síntomas : En ocasiones, se le desenfocará brevemente la vista. El amuleto curativo se carga el doble de rápido a su contacto y además es más eficaz si lo usa sobre sí mismo.

Armas : Ethan Lanza partesana y una daga

Status : Ciego y cojo, el chiste se cuenta solo.

Torreón Sendar - Página 26 Empty Re: Torreón Sendar

29/08/23, 07:04 pm
El fuerte había sido entretenido de construir, sobraban colchones, almohadas y sábanas a doquier por lo que tomar prestadas varias para adueñarse de otro cuarto fue tarea fácil. La distracción de ver a los niños jugar sirvió como una tirita temporal, un espacio seguro lejos de una cruda realidad que regresó tan rápido como Nohlem cerró la puerta nada más pasar. Entendiendo lo que parecía ser el inicio de un cabreo por parte del varmano lo dejó estar. No necesitaba escuchar con claridad las voces de la planta baja para notar que no había nerviosismo en ninguna de ellas, aún con las dudas de aquella escapada no resueltas  era preferible dejar que el ambiente se calmara. Sonrió orgulloso al ver como usaban sus figuritas a modo de llaves mágicas y él mismo les regalo unos suaves aplausos contagiado por esa inocencia que solo a esas edades podían conservar.

Iban a estar bien.

Necesitaban estar bien.

En ese refugio atemporal donde las barreras eran suaves telas blancas y sus inquilinos dos chiquillos adorables y uno de los pocos jóvenes cuerdos del hogar encontró cierta calma. Una que crecía entre risas y conversaciones tranquilas, alejando de su mente unas sombras que mientras estuvieran allí no podrían pasar. Claro que tenía miedo, claro que había incertidumbre, dudas y alivio. Allí donde vivía el consuelo de saber que sus compañeros estaban a salvo se encontraba también el cabreo de un acto irresponsable, la alegría de que regresaran era carcomida por un resentimiento ante el peligro al que les habían expuesto. Nada grave había pasado, pero aquella excusa no era más que una moneda tirada al azar. Esta vez había caído cara, pero nada les aseguraba viéndola volar que no hubiera sido cruz, y que entonces, la huida de una persona se hubiera convertido en el cementerio de muchas otras. No, no podía perdonar eso, ya no por su vida cuyo aprecio estaba tan desgastado como los músculos de su pierna, si no por la de los que tenía enfrente. Ethan no deseaba la muerte de ningún compañero, si quiera heridas físicas como escarmiento, pero si el capricho de una ponía en peligro las brillantes sonrisas del resto, algo estaba fallando en un intercambio que para empezar, nadie había firmado.

Al menos, estaban a salvo. Por ahora.

Y eso fue lo que su corazón atesoró lo que duró ese encuentro, pues los muros de seda debían apartarse para enfrentar, entre otros asuntos, al hambre. Ethan bajó con ayuda y tras echar un vistazo exhaustivo a los escapistas acabo saludando con una sonrisa más apagada de lo normal. ¨Me alegra ver que estáis bien.¨ Diría sin querer abrir ningún tipo de conversación, pues en esa sinceridad se ocultaban matices variados con los que ahora mismo no querría lidiar.

Con los alimentos previamente separados era fácil iniciar una criba entre lo que conocía, lo que le hacía dudar y aquellos que al menos que alguien identificará públicamente serían apartados por el momento. Ante un horario en el que la tarde empezaba a menguar y la comida iba a mezclarse con una cena temprana decidirá preparar (Si a todos les parece bien) un estofado de carne. Tacos troceados, zanahoria, cebolla, un poco de ajo, tomate y patatas para poder hacer una buena cantidad de comida merecida tras dos días que se habían vuelto eternos. Ethan agradecerá cualquier ayuda y dará las instrucciones necesarias a quien quiera colaborar pero no sepa cómo. Cuando la cena esté lista dejará reposar el dolor de una pierna cuyo descanso es tan circunstancial como las ganas que tenga en ese momento de colaborar, dejando al cargo de sus compañeros el que sirvan los platos.

Cenado, un tanto descansado pero no por ello menos activo se pondrá a limpiar los restos visibles del caos que fue esa mañana. Las manchas de sangre traían recuerdos no bienvenidos y en pos de evitar que pudieran rememorarse transcurrida la noche va a querer dejar el salón impecable. Solo entonces regresará a su nueva habitación a descansar lo que buenamente pueda. Pues cuando la vida real se transforma en una disparatada pesadilla, hasta el sueño más inverosímil se puede volver un anhelo.
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