Casa Gamides

Nia se acerca a ver que habia visto aquella chica. Una sala con cortinas rojas. Detras llevaban puertas. Harm es quien habla y su voz femenina le delata.
-¿Y que si hay peligros detras de las cortinas?-

Me acerco a lo que Cain había encontrado. Me mareo un poco al principio ante tanta cortina:
-La salida esta cerca, seguro, tendremos que mirar en todas.- Entro en aquella inmensa sala llena de cortinas.

Cain dio un paso adelante. Ningún problema. Entró despacio en la sala y dio una vuelta en redondo, acercándose a todas las costinas.
-No hay peligro- dijo con voz ausente. Ahora que lo pensaba, Estigma no había reaccionado desde que entraron allí, en ningún momento le había impedido entrar o avanza ¿Acaso ese lugar no era peligroso? Descorrió una cortina y se encontró un cuadro en blanco. Bufó, porbó con otra y encontró una puerta, pero al abrirla se encontró con un pasillo que giraba sobre sí mismo

Harm se decidio y descorrio una cortina. Detras, habia una puerta. Tras abrila, se encuentra otra puerta más pequeña. La abre tambien. Para su sorpresa habia otra más aun mas pequeña. Bufa. A medida que va abriendo puertas estas se van haciendo más y más pequeñas hasta que no son mas grandes que un agujero para que pase un raton.
-Esto es de locos...-

Cain descorrió una y otra cortina, al igual que Erika, tratando de abrir las puertas que se encontraban, cosa que no siempre conseguían. Finalmente, Cain abrió la última, que dio en otra puerta idéntica pero a la inversa. Estuvo a punto de darse por vencido y desesperarse cuando Erika le sugirió que abriese la puerta, solo por probar. Lo hizo, y la luz de fuera iluminó la sala en penumbra.
-La salida!- exclamaron, y corrieron fuera sin pensárselo, recuperando sus cuerpos- Al fin- dijo Cain, feliz de sentir su voz de nuevo

Nia salio corriendo. Una vez que volvian a estar en la calle, Harm se arrepentia haber salido.
-¿Donde vivis?-pregunta Nia.

-En el burdel de Dama Espasmo- responde Cain- Pero ahora vamos al Torreón Letargo- Erika se abrazaba a sí misma de puro contento- Y tú? Me suenas un poco...- La niña tenía... olía a mar... Le recordaba a sus paseos por el puerto. Hacía mucho tiempo que no comía pescado...

-Yo vivo ahi!-dice señalando al torreon letargo.
<<Eso es exactamente a donde van.>>comenta Harm, aun molesto por haber perdido su hombria otra vez.
-Pues entonces vamos al mismo sitio ¿no?-

Drew salió del cuarto en el que había entrado sigilosamente mientras se ponía la camiseta, un tanto lívido. Al menos había salido de dudas. Escogió tres puertas al azar y se encontró al exterior de nuevo. De repente se sentía más torpe.

Alguien sale del edificio y pregunto.
-¿Y tu quién eres?
Una pregunta un poco básica,pero bueno,no le conozco,luego le preguntaré que pasa dentro.

-Pues vamos para allá...
Cain y Erika se encaminan al torreón Letargo. Con la niña a su lado no tendrían problemas para entrar... esperaba... Cain echó un çultimo vistazo a la extraña casa... Esa nueva voz le había gustado, no estaba entrenada pero era bastante dulce. Tenía que volver a probarla algún día

(sigue en el torreón letargo)

Nia sale correteando hacia el torreon. Venia bastante gente con ella.
(SIGUE EN EL TORREON LETARGO)

Después de presentarse, Drew decidió volverse a Torreón Letargo; estaba cansado.

(SIGUE EN... ADIVINAD)

Que raro... bueno,no esperéis que entre,soy demasiado cobarde y listo como para arriesgarme a...cualquier cosa.No me apetece volver,decido seguirles.

(sigue en Torreón Letargo)

Afuera del edificio encontro un pedrusco de considerable tamaño. Con un esfuerzo entró con él a cuestas en aquel edificio. En el momento en el que se cerraron las puertas él uso el pedrusco para impedir que se cerrasen del todo: No iba a dejar que se repitiese todo el follon del otro dia. Comprueba su ropa y, efectivamente, cambia y se adopta a un estilo de ropa más masculino. Se sienta apoyandose contra la pared y, abrazado a sus rodillas, llora en silencio.
El tiempo pasa y se encuentra mejor. Ya no podria mantener nucho más tiempo a Nia asi que decidio darle una sorpresa.
(CONTINUA EN EL RIO)

Antes de llegar al anillo dorado, se topa con la casa en la que se había quedado atrapado con Erika... Recordó su frustración al perder su voz, pero lo cierto es que no sonaba del todo mal... La curiosidad pudo con el. Sabía que podía quedarse encerrado y perderse como la otra vez pero... acabó entrando. Esta vez el pasillo iba a parar a unas escaleras que bajaban a un estanque vacío y luego subían de nuevo. Cain bajó y observó su nuevo cuerpo femenino en el reflejo. Saltó el estanque tratando de no mojarse, lo que hizo que sus pechos botaran. Con uan mueca de dolor se los cubrió con los brazos <<Nada de saltar...>> Subió y entró por una puerta al azar que llevaba a otro pasillo que serpenteaba. Lo recorrió con la mano pegada a la pared, esquivando las antorchas cuya luz brillaba en sus ojos dorados. Su mano pasa por una cortina y Cain casi pierde el equilibrio, no se lo esperaba... La cortina llevaba a una habitación pequeñita, circular, con el suelo de mosaico mostrando a un montón de horribles bestias aullándole a un orbe, todo en tonos ocres. La habitación parecía tener buena acústica, así que Cain se sentó en el suelo y buscó una canción que ya conocía bien... A la primera nota le salió un horrible gallo que le hizo llevarse las manos a la garganta, avergonzada (?) Hizo varias pruebas de voz, comprobando los tonos, hasta dónde podía llegar, y cuando estuvo segura (?) empezó a cantar.

Llego a la casa ... la construcción es extraña, es un edificio de una sola planta, sin ventanas ... solo tiene puertas, la voz viene de dentro, suena lejana, pese a que el edifico en si es muy pequeño, algo me empuja a ir, hay algo familiar en esa voz, no se el que ... pero necesito comprobarlo, necesito saber quien es ...
-Voy a entrar - digo con una sonrisa, me meto la mano en el bolsillo y me como un caramelo de miel que llevaba en el bolsillo desde que nos los trajeron, la miel se empieza a deshacer en mi boca, mezclada con las hojas de menta - ... ¿me seguís? ...
Me adelanto y abro la primera puerta, entro en la estancia, esta recubierta de espejos, y entre los espejos se adivinan puertas ... avanzo hacia una y veo a una chica, lleva unos vaqueros de pitillo, unas Converse y una camiseta negra con una cara de Jack Skeleton estampada en blanco, la camiseta es larga y deja al descubierto un hombro y el tirante del sujetador, también negro, lleva un montón de pulseras en las muñecas, una bufanda como la mía al cuello, y su pelo negro recogido en dos coletas, el flequillo esta sujeto con una horquilla a un lado, y sus ojos verdes me miran curiosos ...
-Hola me ... - empiezo adelantándome, me interrumpo al ver como me imita, mi voz suena rara - ... vaya - exclamo realmente curioso - ...
Me acerco al espejo y observo mis caderas, me agarro los pechos y compruebo su firmeza riendo, ahora que me fijo llevo la guitarra a la espalda, pero tiene chapas enganchadas, la espada sigue en mi espalda, y el escudo en mi brazo ...
Me giro y veo los cambios de los demás, en verdad se notan mucho, un chico pelirrojo a ocupado el lugar de Elliot, y una chica rubia el lugar de Jack ... también hay una chica chinita, que sera Yip y una niña mas pequeña, Gael ...
-Estáis genial - digo riendo con mi nueva voz - ...
Sigo oyendo la voz, mas cerca, y sin esperar abro una puerta, supongo que me siguen ...