Torreón Sendar

Recuerdo del primer mensaje :

Magia:

La divisaron a lo lejos. Una enorme cueva vertical se alzaba desde la tierra, colosal, majestuosa e imponente sobre la calle, y con una vista espléndida sobre esta. Aceleró el paso por curiosidad y esperanza, porque que algo estuviera en mejor estado que las calles que habían atravesado... ya era mucho. Además, no quería seguir hablando de los Hijos de Bakaiar allí, fuera, al descubierto, como si pensar en ellos o mencionarles pudiera atraer al de antes.

Cuando llegaron, sonrió al reconocer un foso, porque le era familiar del hogar, y se maravilló aún más al ver la enorme superficie de madera que lo atravesaba y que conectaba con el edificio.
—No sé si esto es lo que buscábamos, pero tiene buena pinta.

No esperó a los demás. Se había fijado en unos inventos nuevos que sujetaban la madera del foso y que se introducían en la cueva, y quería investigar tanto eso, como el interior como todo lo que pudiera. Se adelantó al grupo y caminó por la lámina de madera con toda la curiosidad del mundo, hasta llegar a la lámina vertical. La reconoció, parecida a las de esa cueva donde despertaron, así que empujó con el hombro hasta que se movió. Y... una vez dentro, se quedó parado en la puerta. ¡Era enorme! ¡Y había un sinfín de cosas sin determinar!  
—¡Esto es alucinante! —exclamó mientras liberaba el camino para entrar.

Le temblaba la pierna derecha, pero de anticipación por querer explorarlo y entenderlo todo. Su mirada saltaba de un artefacto a otro, de una pared a otra, de un punto a otro. Y aún tenía que investigar los hierros que entraban y salían de la cueva y se anclaban a la lámina de madera del exterior. Necesitaba nombres para aquellas cosas nuevas. Ahora sería él quien preguntara a los demás.

Cuando empezó a aparecer gente por la cocina, el nombrado se estiró en su lecho de pieles y fue a saludar. Le seguían pareciendo incómodas las sillas, pero tampoco quería sentarse en el suelo con la gente alrededor así que se resignó a quedare de pie. Apenas dijo un "buenos días" y siguió con su filete en la mano. A bocados. Pero había cogido un plato para que no chorreara el aceite, consejo de sus compañeros.

Un poco después, empezaron a hablar de un huerto. Lo había pensado alguna vez, pero no lo había planteado porque no sabía nada útil al respecto. En cambio, Toni sí parecía saber, así que se acercó al grupo que lo estaba comentando.
—Si tenéis idea, yo lo haría. Total, no tenemos tampoco nada mejor que hacer en esta monotonía de refugio, así que yo me apunto. —Se notaba que se aburría y cualquier actividad nueva sería bien recibida.

Pero otros también hablaron de salir a explorar. Era otra cosa que tenía en mente y que le parecía más urgente, así que empezó a devorar el filete con rapidez. Solo tenía una duda.
—¿Tenemos suficiente para descartas las cestas de hoy o recogemos las provisiones con las bolsas y exploramos después? —En efecto, daba por hecho que iban a salir, y añadió un agradecimiento al final—: Gracias por las bolsas, por cierto.

Rua añadió una serie de ideas que también constituían retos a la hora de plantar, como no controlar el clima ni, añadió para sí la cercana, el tipo de verduras que venían en las cestas. Entre todos solo habían sabido poner nombre a un porcentaje bajísimo de las cosas con las que los alimentaban, lo que también quería decir que iban a cometer muchos errores a la hora de cultivarlas.

—Lo mejor que podemos hacer es investigar, hacer pruebas y ver qué es lo que funciona y lo que no —dijo tras Rua. Pensaba en qué armas del sótano podrían usarse para ablandar la tierra, y en qué verduras de las cestas podrían volver a brotar, aunque tenían que solucionar antes lo de la tierra, y Toni tenía algunas ideas interesantes para que aquello funcionase—. Sería mejor evitar la arena, no es mejor que la tierra que hay aquí. Pero si encontrásemos tierra lo más oscura posible y la trajésemos ya tendríamos la mitad del trabajo hecho —repuso, admitiendo que, aunque iba a ser duro, tenía sentido cargarla hasta allí para enriquecer la del patio—. También tendríamos que evitar usar estiércol tan cerca de la boca del pozo, pero podemos reservar todos los restos de verduras crudas y las cáscaras de huevos para hacer abono con ellos. Es lo que hacía mi padre, y además no olía tan mal. —En Islasanta, y durante bastantes años, Anaide había continuado plantando coles y especias en tiestos dentro de la habitación que compartían, de modo que siempre tuviesen algo con qué hacer una sopa los días que no se podían permitir comprar alimentos. Precisamente por eso la cercana se mostraba favorable a la idea del pequeño huerto.

Algunos ya estaban hablando de la salida que harían ese día, entre otras cosas. La cercana, al no ir, sentía que no tenía demasiado derecho a opinar, y prefirió continuar hablando sobre el huerto. Al ver que algunos, como Nery’s, no tenían mucha idea de cómo crecía una planta, se sintió un poco más segura de sí misma opinando sobre el tema.
—Tenemos que intentar conseguir semillas de coles, que es de lo que se da mejor en tierra poco profunda. ¿Creéis que pueden volver a brotarle raíces a las que vienen en las cestas si se ponen en agua o tierra? Como algunas plantas lo hacen… —Tendrían que sacrificar comida para experimentar, pero si podían permitírselo en algún momento, era ese, mientras los rocavarancoleses siguiesen mandándoles cestas a diario.

Cuando Toni escucho la voz del frivy solo pensó en un campo de amapolas. Respira Toni respira, pensó antes de contestar.

- Le preguntas a Kiki, ¿no se supone que tú lo sabes todo?- abrió los brazos señalando el sitio donde estaban- Ilustranos con tu sabiduría.

- Solo es una idea, llevo días dándole vueltas y lo pongo en conocimiento de todos por si tenéis una idea para hacerlo de la mejor manera posible.

Miró a Kiki mientras decía- ¿no tenemos nada que perder no? Puedes dar tu opinión con la info que tenemos, ya sabemos que este nos ocultó información, pero dudo que tenga más. Vamos es que la tiene y ya le planto el huerto en la cabeza.

En el momento que lo dijo se dió cuenta que el tono no era el adecuado, ni el tono ni las palabras, pero total, estando en la situación donde estaban qué más da. Le estaban apoyando por primera vez en su vida y eso le había creado un calor en el vientre que le había dado el valor para enfrentarse a Nerys - Perdón- dijo respirando hondo- no quise decir eso, estoy un poco nervioso- intento no mirar a Nerys- Yo he propuesto la idea del huerto, podemos mirar como hacerlo entre todos.

- Y Nerys, por favor, si tienes más información de este maravilloso lugar dilo, porque me niego un poco a que todo lo que propongamos el resto tenga que pasar por tu filtro. Entiendeme, es algo incomodo.

Cuando Iemai comenzó a proponer ideas Toni pensó en darle un beso en la frente pero inmediatamente se dio cuenta que seria mala idea.

- Sí, no se si tienes intención de salir pero podemos encargarnos de buscar la tierra que dices nosotros. A ver, no tengo mucha idea de abonos, la verdad. Pero podemos investigar, no perdemos nada. Igual algo de comida pero no encuentro otra forma.

Sentada a la sombra, le llegaron un sinfin de voces, pero ninguna era la que quería oír: una voz nueva y desconocida que, sin querer, imaginaba como el crepitar de una llama oscura que ardía en su cráneo. Aramara no respondió y, aunque estaba familiarizada al silencio de los dioses, la cercana culpó a sus compañeros por la interferencia. Oyó sobre el huerto y sobre la tierra y sobre las cestas y sobre Frivowaldanny, hasta que, de nuevo sin querer, su mente se llenó de una cacofonía desagradable de respuestas que no les daría, de afirmaciones y negaciones a las diferentes partes del diálogo que se cocía dentro de la cocina; pensamientos que se guardaría para sí misma y que le impedían compartir con la diosa mensajera.

En un arranque egoísta deseó que se callaran, pero finalmente optó por levantarse, abandonar el patio y buscar una habitación vacía en los pisos de arriba. Cerró la puerta, la atrancó con el esqueleto de una cama y su colchón y se sentó en una esquina, lejos de la ventana y de la luz que entraba a través de ella.

>>Hola, Aramara. Espero que me estés escuchando aunque esté tan lejos de casa. Sé que siempre empiezo de la misma forma, pero hay algo que me escama en este lugar y la idea de que mis mensajes no te lleguen me reconcome, espero que no te importe si peco de repetitiva. Estaba pensando en lo del otro día y…

Si alguien intentaba entrar, Ulmara le pediría por favor que la dejara a solas.

Fleur le devolvió la sonrisa a Kiki mientras tomaba su taza y se servía, después compartió las risitas imaginándosela queriendo escapar de un frivy muy pesado y con muchos brazos.

Pero lo que perturbó lo que parecía un desayuno tranquilo fue la idea de Tony, la cual le parecía bastante acertada y coherente. No sabía cúanto tiempo pasarían en ese lugar pero no podían permitirse no pensar a largo plazo, que el español y algunos más supieran de cultivos era una oportunidad que no debían desperdiciar. Pero conforme la conversación avanzaba las diversas opiniones le quitaron el ánimo con el proyecto, no se trataba de algo fácil y ella era incapaz de aportar utilidad. En el convento había un huerto, eso lo recordaba, pero a penas tuvo que lidiar con él.

El tono de diálogo se airó un poco, y Fleur empatizó un poco con Tony. Especialmente después de la confesión de Nery´s días atrás, quisó intercambiar una mirada apesadumbrada con él, no le gustaba estar al tanto de cosas que el resto no, pero guardó silencio. Fleur únicamente intervino cuando Kiki estalló de tal forma y se marchó resoplando, un acto que jamás pensó que ocurriría. Por primera vez desde que se unieron... pensaba que Kiki estaba equivocada, la esperanza podía salvarles en situaciones adversas y estaba segura de que Kiki pensaría lo mismo de no estar cabreada porque su relación con Nery´s estuviera en el punto de mira. Tragó saliva.
-Igual alguien debería ir a hablar con ella- dijo tan bajo que solo podrían oírles los más cercanos pero en un tono que dejaba claro su ofrecimiento. O lo mejor sería dejarlo estar, tampoco tenía claro como gestionaba Kiki los conflictos pero estaba segura de que no le molestaría su presencia. Se incorporó con su taza en la mano y si nadie la interceptaba bajaría al sótano, en parte porque no se sentía cómoda con el ambiente actual, y por otra si Nery´s tenía algo que decir prefería no estar presente. Maila se enfadaría muchísimo si se enteraba que le había ocultado semejante información, aunque fuera por mantener las aguas calmadas. Descubrió que la parte de preocupación por Kiki iba en tercer lugar, tampoco había sido una discusión muy fuerte y no era buena oyente ni consoladora. >>Una riña sin importancia<<. Pero puede que ella sí se la hubiera dado.

La animadversión para nada oculta que sentía Toni por Nery's, casi aprecio resonar por todo el cuarto, por el y por quien pareciera defenderlo, al parecer. Rua observo el intercambio de palabras de forma aburrida mientras masticaba los trocitos de su macedonia, haciendo su mejor esfuerzo para ignorar el hecho de que estaban hablando de mierda mientras desayunaban. Literalmente.

Rua dio gracias mentalmente porque Iemai quitara un poco la idea de usar las heces como abono para el huerto, le parecía un tanto desagradable y teniendo en cuenta que no contaba con medicina, ni mucha salubridad en ese sitio, no le parecía muy adecuado.

El hecho de que Nery's fuese el único con información de ese lugar, estaba creando mas incomodidad que otra cosa entre algunos. Rua mastico otro trozo de fruta, antes de decidirse a responder cierta cuestión hecha por Pefka, que dio gracias por las bolsas que habían hecho.

-Diría que hay suficiente, pudimos traer mas que la primera ocasión con las bolsas. Creo que podríamos saltarnos en esta ocasión el ir por las bañeras. Necesitamos explorar, encerrados aquí no vamos a descubrir mucho. Quien sabe tal vez encontremos otra bañera o algo mas de información de este sitio- añadió escuchando en parte como parte del grupo seguía dándole vueltas al asunto del huerto, a la posibilidad de que Nery's aun escondiera cosas, alas palabras punzantes de Nery's y las reacciones que estaba provocaban. Rua frunció el ceño, empezando a impacientarse. Se había levantado de buen humor, se negaba en rotundo a que le agriasen el día. Ella sólita podía hacerlo por cuenta propia y no le apetecía en ese momento.

Dios algunos golpecitos con su cuchara en su taza, buscando atraer la atención del grupo que parecía inmersos en dar vueltas y mas vueltas en lo mismo mientras el ambiente se medio enrarecía.. Ya habían dicho de probar hacer el huerto ¿no? Fuera cual fuera el resultado, pues dioses, no había mas que discutir. Suspiro ante la forma en la que Kiki claramente se vio afectada. Bien, aquello estaba escalando tontamente. Miro por un instante a Fleur que parecía dudosa de que hacer. Decidió intervenir  de la única manera que sabia, clara y directa.

-Os ahogáis en un vaso de agua- dijo con un leve bufido, tecleando con sus uñas sobre la mes mientras comía con su otra mano, exasperada- Mas sencillo no puede ser, no hay nada realmente que discutir - añadió como si fuera mas que evidente que andaba internándose en un posible discusión sin mucho sentido- La idea de Toni no es mala. El grupo que se queda dentro, puede intentar ver lo del huerto, prueba con algunas semillas de lo que tenemos, con algún fruto también para intentar usarlo de compost o si tiene alguna idea sobre cualquier otra cosa, pues hacerla. Si hay o no resultados de eso pues ya se vera, leches...probamos y ya.¿Tenemos algo mas que hacer que probar todo lo que podamos para sobrevivir? No, ¿verdad?, pues ya está. Si funciona, pues perfecto, sino, pues bien también. Nadie va a negarnos que hemos intentado de todo- dijo Rua frunciendo levemente el ceño, jugueteando ansiosamente con el piercing de su labio, mirándolos con atención, alzando finalmente una ceja. Con lo fácil que era medio organizarse siendo tantos y perdían el tiempo discutiendo, creando mal ambiente y mas frustraciones de las que ya había. Y joder, Rua estaba de BUEN HUMOR; iba arrancarle la cabeza a alguien como se lo quitase por tonterías.-Y mientras tanto los que salgan o van por la comida de los bañeras, o exploran, como espero que hagamos hoy. Podemos buscar tierra oscura como dice Iemai mientras exploramos, no perdemos nada en hacerlo mientras tanto. Solo llevamos las bolsas que hicimos con nosotros por si encontramos algo útil y ya- continuo en el mismo tono suave con el que había estado hablando en todo momento a pesar de ser claro y conciso.

-Somos muchos, con muchos tipos de conocimientos diferentes, aprovechemos eso- añadió suavemente tomando otro trizo de fruta y masticándolo suavemente, lento, observándolos, mientras veía que apenas le quedaba algunos trocitos de fruta en su bol, empezó a picotearlos, mientras hablaba.

-Y sobre que Nery's, sea el único con información de este sitio...tampoco me agrada eso, porque soy de las que le gusta tener diferentes puntos de vistas. Aun así no creo que sepa absolutamente todo de este lugar. Al fin de cuentas dudo que si le hubiera dicho el estado real de esta ciudad o lo que se encontraría en ella, hubiera decidido venir por voluntad propia. No creo que fuese tan estúpido- esperaba que no le afirmase que así era o perdería totalmente fe en su inteligencia-. Sabrá algo mas, que imagino es lo que nos ha contado ya...- dijo mirando Nery's, inquisidora pero sin ser atacante sino esperando mas bien su confirmación. Porque esperaba que de verdad no estuviera ocultando nada mas. Por su bien. Porque sino sería Rua misma la que le partiría la cara.

- No creo que haya mucho mas que pueda decirnos, ha sido tan engañado como el resto de nosotros al ser traído aquí, recordar. -añadió como si fuera un detalle que pareciera que alguno había obviado. Nery's, había iniciado con extra de tener mas información que el resto, pero no era un enciclopedia de ese mundo, ni ni una deidad que todo lo ve y lo sabe.

-Así que, aclarado eso, espero ¿Por favor, podemos centrarnos en lo que va tocando? Organizarnos para ver quien se queda, quien sale y hacia donde nos dirigiremos - finalizo de nuevo suavemente, sin alterarse pero sonando con cierto tono autoritario, que intentaba poner un poco de orden u organización o se les iba a ir la mañana dándole vueltas a algo que ya medio había concluido que harían.

Seguía comiendo su fruta mientras Pefka e Iemai hablaban.

Miró a Iemai y se encogió de hombros, no tenía ni la más mínima idea de si las plantas podían hacerlo o no.

Cuando Toni empezó a ponerse chulito con el Nery´s simplemente levantó las cejas y procedió a bostezar de nuevo descaradamente en medio de todo el chaparrón. Aquello le importaba tanto como saber cuántas gotas de rocío podían caber en un trozo de césped y no se esforzaba lo más mínimo en ocultarlo. Estaba a punto de responder perezosamente cuando al girar la cabeza noto la chispa que se encendía en Kiki así que esperó a ver que tenía que decir. La observaba terminándose su fruta como si fueran palomitas, entretenido y encandilado con la reacción de la humanis. Aunque le molestaba que siguieran opinando que hubiera mentido u ocultado cosas, especialmente que lo opinara ella. Le sonrió como respuesta al golpecito y tras que hablase por última vez la vio marcharse tranquila mientras se terminaba su fruta. No quería demorarse mucho tampoco pues esperaba a que se tranquilizara un poco sola y luego ya él darle un buen abrazo y bromear para quitarle los nervios aunque no sabía qué efecto tendría que estuviera bajara Fleur también.

Al igual que con Toni el desinterés flagrante que mostraba ante el discurso de Rua hablaba por sí solo. Tomándose un bocadillo de queso y pan carabés. Comía muy rápido, costumbre de su horario apretado, para terminarlo y bajar en cuanto pudiese.

Tragó un gran bocado y habló cuando ella terminó. -Pues ahora que lo megadecís. -Volvió a dar otro que desapareció en su boca. -Quizás ultrasi que me acabo de dar cuenta de otra cosa. -El bocadillo terminó por desaparecer en aquella boca capaz de tragarse cosas mucho más grandes. -Pero como supersoy un mentiroso, oculta-información y espía os podéis ir a comer mierda. -Se lo soltó a todos con la más amable de sus sonrisas, terminó de un trago lo que le quedaba de leche y bajó tranquilamente a evitar que el flan de Kiki se deshiciese por temblar demasiado, ignorando todo lo que le dijesen por el camino.

Se acercó a ella tras buscarla un poco y la envolvió en un abrazo suave. -¿Sabes? Ultrano te rayabas así para nada mientras me hacías llorar a base de preguntas. Y megano soy un mentiroso, cabrona. -La riño en broma mientras empezaba a zarandearla un poco para calmarla.

Como no se vio detenida, Fleur descendió camino al sótano con las palabras de Rua a su espalda y agradeciendo en parte que la sueca pareciera poner punto y final a la discusión. Llevaba razón, no tenían nada que perder por intentarlo y si salía bien se alegrarían a la larga.

A excepción de los agujeritos de luz que entraban por el techo la oscuridad de la armería hizo que tomara unos segundos en adaptarse, hasta que vislumbró a Kiki hecha una bolita y resoplando. Se acercó lentamente y carraspeó para no cogerla  por sorpresa. Después habló con voz agradable, ignorando todo tipo jaleo en la planta superior.
-¿Estás bien? ¿Qué te ha ocurrido?- quiso preguntar ante lo inusual de la reacción, si su lenguaje corporal lo permitía Fleur se sentaría cerca suya.

Momentos después llegó el frivy ante el cual solo pudo preguntar.
-¿Todo bien Nery´s?- aunque se encontraba sorprendida e incómoda por sus palabras. Evidentemente Kiki y él habían mantenido conversaciones importantes en las que no estuvo presentes y quizá de no buen gusto >>¿Hacerle llorar con preguntas?<< y aún así el chico las había sacado a colación como si ella no estuviera allí. Después lo miró con semblante inexpresivo. Un poco mentirosillo sí que era.

Su sonrisa se ensanchó cada vez más hasta que empezó a reírse con el lío que llevaba la humanis encima. Cuanto más tiempo pasaba más adorable lo encontraba.

-Perdón Fleur, la hipertenía demasiado en la cabeza y se me pasó saludarte. Y megano te preocupes, los ultrahe mandado a la mierda sin más. Estoy demasiado alegre hoy como para que superdeje que me amarguen el día. -Las manos de Nery´s empezaron a rascarle la espalda y la cabeza a Kiki para hacer que se relajara y su cabeza se movió hacia abajo para mirar de nuevo al desastre que tenía entre brazos. -¿Superha sido tu primera vez? ¡Pero megasi has estado de maravilla! -Rio de nuevo pero no se notaba ironía, simplemente staba de buen humor. -Y ya la ultrahas oído Fleur, ha confesado. Que megano te coja confianza o te hará lo mismo a ti y sufrirás un montonacis. -Le dedicó una gran sonrisa burlesca a Fleur.

-Pero bueno, ultracreo que este flan temblorosis de la total necesita otro par de brazos para estabilizarlo y que no se deshaga. -Y le hizo gestos a Fleur para que se viniera a abrazarla. Desde que habían tenido aquella conversación Nery´s seguía trabándose al mirarla pero ya no tanto como antes.

Fleur le devolvió la sonrisa con sumo gusto y en medio de su frustración sintió el impulso de abrazarla, y por una vez no pudo reprimirse. Fue un abrazo leve y etéreo y se retiró en seguida, pero fue suficiente.
-Nadie va a odiarte por esto Kiki- dijo con toda la seguridad que su vocecilla podía transmitir. Había sido una riña estúpida, dudaba que Tony o cualquiera le tuviera en cuenta ningún comentario- todos... creo que todos estamos nerviosos pero lo de antes pasará - ¿lo estaba haciendo bien?- o... eso creo.

Fleur rió un poco más relajada con Kiki y las torturas nocturnas, por supuesto que no pensaba aquello, Dios la salvara si lo hacía. Le quitó importancia con un gesto de la mano a las palabras de Nery´s, entendía que la prioridad era su preocupación por Kiki, por quien Fleur adivinaba en aquellos instantes mientras los contemplaba como un partido de tenis que sentía un afecto especial. >>Es muy peculiar... pero a la vez bonito<<.

En cambio su expresión varió un poco con la respuesta a su pregunta.
-¡Nery´s...! -se le escapó antes de que pudiera remediarlo, luego se tapó la boca con sus manos menudas. ¿Qué los había mandado a la qué? ¿A la mierda?. Frunció el ceño, preguntándose por qué habría recurrido a semejante grosería. Si no recordaba mal Rua incluso estaba apoyándole. Guardó silencio, pero no estaba de acuerdo con la información que manejaba ni mucho menos- claro- le concedió al frivy con el abrazo de nuevo a la finlandesa, si se dejaba volvería a hacerlo con rapidez. Y si nadie volvía a impedírselo subiría a reencontrarse con los demás pues sospechaba que al ambiente no estaba lo calmado que esperaba en contraposición con las sonrisas de Nery´s, que no parecía estar preocupado por ello. >>Bueno, pues yo sí<<.
-Y Kiki... no te preocupes- dijo levatándose y sacudiéndose el pantalón del polvo del suelo, con alguien con más confianza en la estancia prefería dejarla hablando con él- creo que voy a mirar cómo están los demás... creo... sí, eso haré.

Había intentado mantenerse tranquila, apaciguadora, racional con tanta tontería, para que se centrasen era organizarse para salir. Pero era evidente que Nery's no había escuchado ni media puta palabra de lo que había dicho, o su cerebro no le daba para comer y pensar al mismo tiempo, a saber... porque de otra forma, de haber prestado mínima atención habría procesado que no estaba atacándole, al contrario intentaba limar el mal ambiente con palabras coherentes  y objetivos.  Si tan solo hubiera prestado un mínimo de atención no habría soltado tanta tontería en cuestión de segundos.

Pero claro, estaba hablando con un imbécil integral. Y Rua tenía poca o nada de paciencia para tratar con gilipollas, especialmente si le atacaban porque si.

Su sangre hirvió y apenas escucho la ultima silabara de la palabra de Nery's, se incorporo, furiosa, con la sangre bombeandole tan fuerte que su rostro pálido adquirió tal matiz de rojo que parecía que fuese a explotar en el momento que su voz se alzo como nunca antes.

-¡ME VOY A CAGAR EN TUS MUERTOS, GILIPOLLAS! ¿¡MANDÁNDONOS A COMER MIERDA POR TUS PUTOS SANTOS HUEVOS!? ¿¡QUE NARICES TE PASA!? - grito furiosa, todo su buen humor evaporado ante semejante niveles de idiotez mientras lo veía pirarse sin prestarle atención. Como había hecho desde el jodido inicio. Sus dientes se apretaron tan fuerte que su mandíbula dolió, mirando con ojos encendidos al resto del grupo como buscando mínima lógica a semejante retraso mental, su tono menos alto pero igual de molesto-¿En serio? ¡No solo ignora cada jodida palabra que digo, porque de haber estado prestando atención habría notado que estaba intentando apaciguar las cosas y que en ningún momento le he dicho nada malo! ¿¡A raíz de qué mandarnos a comer mierda!? Su prepotencia me saca de quicio, maldita sea...¡Joder que el día que repartieron las neuronas en su estirpe, se olvidaron de el!- exclamó sintiendo que hervía, que sus manos picaban, que como le siguiera iba a arrancarle las puta bolas de cuajo y se las haría tragar hasta la asfixia. No había cosa que Rua odiase mas que la imbecilidad y que le dijera cosas feas de gratis sin ella haber dicho nada.

-¡Ni en un jodido mundo lleno de monstruos uno no puede librarse de la estupidez! ¡Dios, dame paciencia!- exclamó exasperada. Todo su buen humor mañanero ya en la fosa del torreón. Fastidiada y claramente necesitando tener unos minutos de paz para contener sus ganas de ahorcarlo, se dirigió hacia las escaleras que daba al piso donde estaba sus habitaciones. Estaría furiosa, pero se conocía su temperamento y sus limites, no era irracional, tenía aun el suficiente sentido común como para saber cuando necesitaba calmarse.

Ya en las escaleras a punto de subir, miró al grupo. Rua podía estar muy enfadada con alguien, pero eso se limitaría a ese alguien, nada mas, no al resto, al que trataría como siempre. Y exactamente eso hizo. Tomó aire un par de veces intentando reducir sus niveles de enojo y estrés al mínimo suficiente para no hablarles de mala forma a ellos, que no tenían culpa de que Nery's no poseyera materia gris, según la sueca.

-Si alguien, por favor, me puede traer mi ballesta, mi espada y mis virotes, se lo agradecería realmente. Todo mi equipo esta en la entrada de la armería, no tiene perdida. – pidió con un tono mas apaciguado pero que aun mantenía tintes de rabia anterior, mirando hacia el lugar por el que Nery's había desaparecía, frunciendo el ceño con veneno en su expresión- Contra mas tarde me encuentre con esa ameba, mas tiempo tendré de calmarme. Voy a terminar de prepararme en el cuarto para cuando salgamos- dijo Rua con un tono de difícil de definir pero que no mostraba enfado contra ellos, esperando que alguien pudiera hacerle el favor por su sanidad mental y la de todos. Ignoraría a semejante tipo que no merecía ni un segundo mas de su valioso tiempo. Había otras cosas mas importantes que atender que al 'principito', ya bastante había obtenido de ella robandole su buen humor mañanero. No mas.

Y con el ceño aun bastante fruncido, entró en el cuarto compartido, se sentó en su cama tras tomar el protector solar de debajo de la almohada, e inicio con un ritual bien conocido y casi calmante, aplicándose cuidadosamente el protector sobre la piel que su ropa no cubría.

A falta de poder darse un buen baño caliente de esencias, jabón liquido con aroma azaleas y mucha espuma, como hacia siempre para calmarse cuando estaba molesta o frustrada, aquello era lo mas cercano a la rutina que tenía. Tendría que que valer.

Toni no entendía como alguien podía confiar en Nerys. Para él, hasta ese momento, solo era un buen chico, algo raro, pero bueno que se había equivocado al ocultar información. Pero con sus palabras y la huida de la discusión en lugar de dar la cara estaba demostrado que no era trigo limpio. Kiki lo había defendido ¿Sabría kiki algo más de todo aquello? ¿Por qué no recriminaba al frivi su comportamiento y le pedían explicaciones? Toni lo hubiera hecho.

Cuando se fue Nerys mandandolos a la mierda y dejando claro que sí tenía conocimiento de más información, Toni solo abrió los ojos, la sorpresa se había instaurado en los ojos y la garganta impidiéndole hablar. Con los gritos de Rua, Toni se alejó un poco y gritó, fuerte, muy fuerte. Gritó hasta que le dolió la garganta, respiró hondo y se giró para los que estaban detrás de él.

- Chicos, nos estamos jugando la puta vida, hay alguien aquí que tiene más información, al menos lo que parece por su comportamiento y palabras. No se vosotros, pero no me fio, ni de él ni de los que se llevan cuchicheando con él todo el dia. Perdonadme si son paranoías mias, pero si tengo que estar alerta para sobrevivir prefiero hacerlo antes que levantarme muerto en la cama.- Toni no sabía si lo que estaba diciendo tenía sentido.

¿Realmente Nerys tendría más información? ¿Estaría compinchado con las bestias y por eso sabían donde estaban? Si no era así, ¿por qué no decía todo lo que sabía?¿Por qué no daba la cara cuando se estaba discutiendo del tema? En lugar de eso afirmaba que había recordado más cosas, pero se negaba a decirlas.

Toni esa mañana se levantó con las ideas más claras, pero después del comportamiento de Nerys, de la actitud de Kiki a su propuesta del huerto y la intención de preguntarle al frivis si se podria hacer le habían sumergido en un mar de dudas y desconfianzas.

El nombrado no se percató del mal ambiente en el que se había metido hasta que estalló. Estalló dos veces. La primera le pilló cerca, cuando Nery's les insultó a todos. La segunda, la reacción de Rua, le pilló en la escalera. Se había escabullido lo más silenciosamente posible pero tampoco habría hecho falta mucho esfuerzo con tanto jaleo.

Había cogido sus armas del patio y se había sentado a esperar en los escalones. Si hubiera podido, habría salido por su cuenta, pero el puente se lo impedía. Miraba el muro de vez en cuando por las noches, pero sabía que no podría subirse y que la caída era incluso peor. Ese refugio empezaba a parecerle una jaula. Una trampa.

Tampoco quería meterse en los follones de los demás. Le venía grande su malestar hacia el frivy, que para colmo aumentó con esa última reacción. En opinión del nombrado, si todos sabían que les habían engañado, lo mínimo sería un poco de humildad. Y de pragmatismo, ya que supieran lo que supieran todos estaban allí en igualdad de condiciones... Por mucho que algunos insistieran en demostrar los avances de sus mundos.
—Me importa poco lo que sepa o no sepa. ¡Si no vamos a hacer nada relevante, al menos ayudadme a bajar el puente y me voy solo!

Cuando Iemai creía que iban a seguir conversando sobre plantas, la ira evidente de Toni estalló, mayormente contra Nery’s, y ni sus disculpas posteriores fueron suficientes para arreglarlo. La cercana se calló, no sabiendo donde meterse, y sintiendo un sudor frío perlando su frente mientras escuchaba las acusaciones del humano. Aquello iba de mal en peor; no había más que ver la mirada burlona del frivy y el nerviosismo de Kiki, que no tardó en saltar. Aquello le sorprendió aún más que la discusión en sí misma.

Cuando Kiki se hubo marchado, y Fleur fue tras ella, Iemai volvió a tomar aire, pensando que las cosas llegarían a calmarse. Rua había tomado la palabra y, aunque se la veía tensa, estaba intentando calmar los ánimos. Incluso defendió a Nery’s de los ataques que le trataban de mentiroso, lo que logró hacer más sorprendente la respuesta del frivy.

Iemai parpadeó varias veces con perplejidad mientras lo veía marcharse y escuchaba los insultos de Rua y los gritos de Toni, que la sobrecogieron. Comprendía la frustración de la humana, porque había intentando mediar en la discusión y sus intentos habían caído en saco roto. La propia Iemai había defendido que Nery’s no estaba en una situación tan diferente de los demás con buenas intenciones, pero en ese momento opinaba distinto. El frivy estaba dando la impresión de querer ser especial, diferente a los demás, incluso aunque no lo fuera. Iemai maldijo para sus adentros, deseando poder llamarlo gilipollas pero sabiendo que era lo último que debería hacer.

Todo aquello la había puesto nerviosa, y por eso había optado por cerrar la boca y pensar detenidamente antes de volver a abrirla. Las palabras de Toni hacían difícil volver a intervenir. Si empezaban a dudar todos de todos, estaban abocados a una convivencia nefasta, y era lo último que necesitaban para sobrevivir en aquel lugar. Iemai apenas era consciente de que temblaba. Tomaba aire con cierta dificultad, hasta que se dio cuenta de que estaba perdiendo la compostura y que no podía dejar que le afectase tanto aquella disputa. Para empezar, el resto parecían dispuestos a salir a explorar aunque fuese en malos términos. A lo mejor ella estaba exagerando la situación. A lo mejor el mero hecho de escuchar gritos todavía hacía que perdiese los nervios.

La verdad era que no había nada que pudiese decir en ese momento que fuese de ayuda. La mayoría necesitaban calmarse. La discusión había sido totalmente innecesaria y había escalado porque ni Toni ni, posteriormente, Nery’s, habían querido dejarlo correr. Eso también cabreaba a la cercana, que decidió ponerse a recoger los cubiertos que habían quedado abandonados en la mesa. No iría a por las cosas de Rua porque necesitaría hacer más de un viaje y le apetecía tan poco bajar como al resto. De hecho, también pensaba en abandonar la cocina en cuanto acabase de recoger.

Maila solo podía pensar en el dolor mientras corría. En el dolor en sus costillas y pulmones, señal de que estaba llegando a su límite físico, y en el dolor  por no haber intentando salvar a ese pobre chico. Si, sobretodo sentía eso último. Sabía que nada de lo que hubiera hecho habría cambiado la situación pero... ¿Qué se le habría pasado por la cabeza a ese niño cuando vio con sus propios ojos como todos lo abandonaban? <<Cabrones, hijos de puta. ¿ Cómo podéis dejarme aquí?Eso es lo que ha tenido que pensar>> Se dijo con la meta de no perder de vista la espalda de la cercana.

No tardaron en volver al torreón y Maila caería rendida a los brazos de Fleur. Cansada física y emocionalmente. Había visto demasiada violencia y muerte de la que jamás hubiera estado dispuesta a ver. Y aunque cada vez se hacía más a la idea de que estuviera en otro mundo no creía que llegara a acostumbrarse nunca a los asesinatos, la sangre...etc.

Los siguientes días la hawaiana los pasó ausente, tenía muchas cosas en las que pensar. Muchos de sus compañeros parecían llevarlo mejor que ella, más aclimatados a aquella situación. Pero para Maila, en aquellos momentos su mente era su peor pesadilla. No dejaba de divagar entre el pasado, con sus hermanos y en el presente, con aquel niño y ese horrible pterodáctilo. Cada día que se levantaba le tenía más miedo al exterior y a lo que pudiera albergar.

Se dedicó a la cocina y a intentar encontrar el momento para tener aquella conversación con la francesa. En realidad cualquier momento era bueno, pero en el fondo de su ser a la hawaiana le aterraba la idea de volver a derrumbarse y explotar con todo lo que llevaba dentro. También decidió no ir a la próxima salida por comida, necesitaba ordenar sus pensamiento y emociones, y sobretodo no quería ser una carga para el grupo ahí fuera. Y ya puestos nada más pensar en salir hacía que le entraran sudores.

Que en dicha salida no ocurriera nada malo le dio ciertas esperanzas de todas formas, podía  ser peligroso y podían suceder miles de finales horripilantes, pero no tenía que ser la regla. Que se volviera a decantar por acompañar al grupo a por comida ni siquiera ella sabia cuando.

Aquella mañana se levantó un poco más tarde de lo normal, ya que al girarse Fleur ya no estaba en su cama. Bostezó perezosamente, mientras la luz de un nuevo día bañaba su cara. Después de asearse, bajaría y tras saludar al resto empezaría a desayunar sumida en sus pensamientos sin prestar atenicón realmente a la conversación. Solo levantó la cabeza, totalmente sorprendida cuando empezó la discusión y sobretdod cuando el frivy los mandó a todos a la mierda y se largó tan pancho.  Maila soltó la manzana que se estaba comiendo y comenzó a masajearse las sienes, cansada de toda aquella situación mientras escuchaba los gritosde Pefka y los comentarios de Toni.

-Vamos a dejarlo de una vez, ¿vale? Dijo con tono cansado, en cualquier otra situación habría seguido a Nery´s, ya que si había que echarle un discurso a alguien el era el más indicado . Pero en aquellos momentos estaba luchando en su interior con preocupaciones mucho más transcendentales como para corregirle a un tío tan grande y mayorcito por su comportamiento infantil. Y ya que estamos porque ella estaba ahí mismo en la mesa  y para decirle algo al  frivy tendría que arrastrarse a seguirlo, y ahora mismo se negaba a hacer eso. -No podemos desconfiar de todo el mundo, Toni-. Le contestó con un tono comprensivo mientras se pasaba la mano por la frente, no quería provocar encima otra discusión .-Entiendo que te pueda llegar a costar  con Nery´s pero si queremos sobrevivir... si queremos tener oportunidad... Agg, da igual, ni yo misma me aclaro, joder. Solo... estoy cansada de esta  puta mierda, y de que encima haya tensiones aquí dentro-. Maila, con la cabeza hecha un lío suspiró, cansada . De todo.