Burdel de Dama Espasmo (Archivo I)

Recuerdo del primer mensaje :

Elegante, era la palabra apropiada para el edificio. Cain no estaba seguro de que Dirke supiese realmente donde les había llevado, pero eso ya no importaba. El lugar parecía deshabitado, y desde hace bastante tiempo, a juzgar por su aspecto dejado. Pero ese aire decadente hacía del sitio un lugar...
-Mágico...- susurró Caín dejando su cesta en el suelo
Nada más llegar, los chicos se habían dejado caer en los divanes y cojines del suelo, agotados por la carrera.

Salgo del agua cuando Cain se va y me seco con una toalla. Me pongo la ropa que traía puesta y subo arriba.
-Ya estoy.-le digo. Hago los gestos que necesito para realizar el hechizo y aparece una especie de bola anaranjada con tres agujeros que hace unos ruidos raros, como diciendo algo...¿Está hablando? De repente, la cosa que he invocado desaparece.
-¿Qué ha sido eso?- pregunto. No me acabo de creer lo que he hecho, ni siquiera sé lo que he hecho.

-Ciao,hola a todos-miro con curiosidad-¿Qué narices estáis haciendo?
Mmm,esto es nuevo,mejor estar atento,no se sabe que puedes aprender y esto podría serme útil.

Cain se queda pasmado cuando aparece la bola, afortunadamente pronto desaparece, no parecía muy contenta
-Esto... creo que estamos haciendo magia- le dice a ''James'' cuando pregunta. Coge el libro y revisa los hechizos que ya había leído, no hay ninguno que le llame especialmente la atención hasta que pasa por uno... Una polilla revolotea alrededro de una lámpara y eso le da una idea... Practica el hechizo mentalmente varias veces y luego atrapa la polilla con las manos. Pronuncia el hechizo y abre las manos esperando verla paralizada, pero se escapa, y a Cain se le quitan las ganas de volver a cogerla. Repasa el libro a ver qué había hecho mal.

Me llevo la mano a la nuca y me la froto. Más que la colleja en sí, lo que me ha dolido es el orgullo. Solo había ido a leer a la biblioteca, por si pudiera encontrar algo en alemán que nos pudiera servir, pero tampoco soy capaz de dar explicaciones en rocavarancolés, así que no me extraña que ellos se hayan tomado mi escapada así...

Tal vez deba pedir disculpas... Cojo el diccionario para buscar las palabras adecuadas y luego lo dejo en la mesita. Bajo a la salita donde están todos y los saludo algo cabizbajo. No sé por qué, pero ahora me siento demasiado aburmado como para disculparme, así que me siento en unos cojines, cruzado de piernas y de brazos, apoyándome contra la pared. Todo esto tratando de evitar con la mirada al resto. <<Mierda, no debería haber bajado... >>

Cain ve llegar a Dirke. Se siente un poco mal por haber sido tan duro, pero esta no es una ciudad en la que se pueda ir solo por la calle tan felizmente. Busca la polilla de antes con la mirada, pero no logra encontrarla. Ve un cienpiés que trata de escurrirse por un agujero de la pared y lo atrapa. No recuerda si los cienpiés picaban o no por lo que lanza el hechizo rápidamente. El insecto queda enredado en su dedo como un anillo, totalmente inmóvil. Cain sonríe y le muestra el cienpiés paralizado a Dirke.
-Magia- dice

Abro los ojos como platos y acaricio con la punta del dedo al ciempiés.
-¿Maaagia?-repito. Conozco la palabra. Hoy he traducido varios libros que hablaban de ella, de esos que picaban al tocarlos. Contaban cosas de hechizos que no era capaz de entender, pero me habían sonado a chiste... Ahora ya no me suenan tanto a chiste. ¿Y si les cuento lo que he leído? Si Cain puede paralizar un ciempiés con magia, puede que lo que ponía en el libro fuera real... Luego recuerdo lo que he venido a hacer aquí abajo y mi expresión se arruga de lo culpable que me siento por lo de hoy-. Yo... Yo lo sentir, Cain. Por ir biblioteca, no avisar y solo.

-No te preocupes- le dice robándole la gorra para revolverle el pelo- Pero avisa la proxima vez, ¿vale? - se sentó a su lado y jugueteó un poco con las gafas de aviador antes de ponérselas a Dirke para ver como le quedaban. Siempre las llevaba sobre la gorra, todavía no se las había visto puestas. Rió, le quedaban bien, le daban cierto aire de... ahora mismo no caía...

Magia,eh? Estos tíos pueden ser a la vez útiles y peligrosos,todo depende de como les use. Si voy de dominante no conseguiré nada. Tal vez un rol curioso con Cain,otro amable con las tías y uno de tipo gracioso con los demás sea una buena estrategia. Sí,puede que en unas semanas estén todos haciendo lo que yo quiera,aunque ellos no lo sepan...
Me levanto del puff,cojo las dos dagas y salgo al patio. Nunca he luchado con armas de filo,a mi padre lo maté empujándole al frío mar Báltico de noche,no acuchillándole. Cojo carrerilla y avanzo a maxima velocidad hasta el muro apoyo un pie en la base y otro a media altura y lo salto. Me siento en lo alto del muro y suspiro:
-Así me voy a aburrir...

(no tenemos patio, o al menos aún no hemos encontrado ninguno XDDD)

Cain no recosdaba haberse quedado dormido. Despertó en la sala central sobre un montón de cojines con el libro de hechizos abierto a su lado y pensó que todo lo ocurrido la noche anterior no fue más que un sueño hasta que vio el anillo de cienpiés. Se lo quitó y miró en el libro cómo desacerlo... al parecer se iba con el tiempo <<No he dormido mucho entonces...>> Fue a lavarse la cara, sentía los ojos pesados y legañosos y tenía que despejarse rápido. Lanzó sendas miradas de desconfianza a Leon y al tal James, luego miró a Dirke y su gesto cambió... Se había dormido con las gafas puestas por lo que seguramente se le habría quedado una marca roja alrededor de los ojos. Cain rió por lo bajo al imaginarlo y cargó con Dirke para llevarlo a su habitación. Se quedó allí un rato leyendo hechizos y pensando que tenía que buscar a las chicas para pedirles sus libros prestados, y más tarde volvió a bajar a comer algo.

Me despierto, de nuevo oscuridad pero ya me había acostumbrado a vivir en ella, es impresionante todas las cosas que la vista no me dejaba ver, usaba el oído y el olfato como nunca lo había hecho, también he descubierto que soy capaz de detectar los cambios de temperatura del ambiente, incluso el movimiento del aire y ahora en cierto modo veía con la mente.
El entrenamiento de ayer fue intensivo, aun así Jack lo afronto bastante bien, no paraba de atacarme por todos lados y el hecho de no poder ver ni oír, debido a que el suelo era de tatami cubierto con una alfombra, de dónde venían lo hacían aun más intensivo casi delirante, al principio me sentía un poco desorientado pero una vez avanzado en el tiempo esa desorientación desapareció, tengo todo el cuerpo lleno de pequeños cortes y la ropa llena de mi propia sangre de los fuertes latigazos que Jack consiguió asestarme.
Jack me está ayudando bastante en esto, aun recuerdo su imagen pero ahora la imagen es sustituida por un dulce olor a cuero, si no fuera por la maliciosa y excéntrica personalidad de Jack este entrenamiento no sería completamente efectivo, por ello le estoy muy agradecido.
Me quede dormido en el Dojo cuando Jack dijo que no podía más que iría a bañarse y acostarse, me levanto del suelo y bajo a la sala principal y no siento ninguna presencia, busco un sitio de suelo despejado y comienzo a hacer flexiones haciendo el pino apoyándome con dos dedos de cada mano.

El silencio es roto por una llamada a la puerta, me incorporo y no dudo en abrir, Cuando abro la puerta noto que es una persona que respira entrecortada como si hubiera estado corriendo y me impacta un fuerte olor a hierba y a flores, me resulta familiar:-¿Quién eres?- digo bloqueando la puerta con mi cuerpo y con todos mis sentidos al máximo para cualquier posible ataque.

Con un fuerte golpe con un martillo de cocina, el bloque dorado que había logrado sacar del frasco se rompe en pedacitos. Cain coge uno no muy grande, lo inspecciona y se lo mete en la boca. Se queda ensimismado chupando el cristal, que se iba desaciendo lentamente en su boca... Ya casi había olvidado el sabor de la miel... Mete los cristales en un bote y sale feliz de la cocina. Norou está en la puerta... parece que tienen visita

Al oír su nombre me relajo, me coloca una mano sobre el pecho y comienza a empujar para que me apartara:-Eres la chica del arma extraña*digo mientras me retiro* No puedo- me limito a decir por su propuesta de quitarme la venda, no sé dónde están los otros:-Hola Caín-*digo al percibir el apetecible aroma a comida especiada*Un leve olor a sangre proviene de Elliot*: -¿estas herida ¿- Le digo preocupado.

-Que es eso?- pregunta Cain aún con el cristal en la boca, reservado en uno de sus carrillos para poder hablar. Se acerca a los otros dos para ver mejor. Coge uno de los cristales dorados.- Norou, di 'ah'

Caín me dice que diga *ah* y al hacerlo me mete algo en la boca y me pongo tenso, luego el empalagoso dulce sabor de la miel me relaja: -Miel..*digo con nostalgia*gracias Caín- La miel me deja un poco anonadado trayéndome recuerdos de mi hogar…