Burdel de Dama Espasmo (Archivo I)

Recuerdo del primer mensaje :

Elegante, era la palabra apropiada para el edificio. Cain no estaba seguro de que Dirke supiese realmente donde les había llevado, pero eso ya no importaba. El lugar parecía deshabitado, y desde hace bastante tiempo, a juzgar por su aspecto dejado. Pero ese aire decadente hacía del sitio un lugar...
-Mágico...- susurró Caín dejando su cesta en el suelo
Nada más llegar, los chicos se habían dejado caer en los divanes y cojines del suelo, agotados por la carrera.

-Naturaleza...hacia mucho que no escuchaba esa palabra y ni mucho menos la sentia, echo mucho de menos a mis eternos maestros, el cielo y la montaña *Me quedo un rato pensativo* Yo no soy ningún maestro… aun así te puedo enseñar y esperar para mis luchas a muerte….pero a cambio me tendrás que ayudar en mi nuevo entrenamiento...- Había pensado mucho en aquella forma de entrenamiento pero no se sentía preparado pero ahora ya había llegado el momento…

Chasqueo la lengua
-Para mí la naturaleza es una maestra esencial, al igual que la vida. Si te llamo maestro es por amistad, diantre. Y claro que te ayudaré.-<<Siempre que sea beneficioso para mí y el grupo>> me digo mentalmente, luego sigo.- ¿De qué se trata ese nuevo entrenamiento?-y ¡por fin! termino el bocadillo.

-Consiste en esto…*me suelto el largo cabello que tenía sujeto con una cinta negra, cojo la cinta y me voy vendando los ojos con ella* te comprometerás a entrenar conmigo cada día sin falta* termino la frase apretando el nudo en la parte posterior de la cabeza dejando caer las dos puntas de la cinta por detrás*No todo es lo que parece…. Con este entrenamiento aprenderé a ver lo que con los ojos no se puede ver…-

Le miro curioso, sin parpadear y asiento, pero espero a que termine para responderle.
-Interesante...Lo haré, me comprometo a ello.Solo dime qué he de hacer.-<<Espero que no se mate por las escaleras...aunque si cayera, rompería los escalones...>>

-Tan solo tienes que atacarme cada vez que me veas, sea cuando sea y sin previo aviso además de entrenar en nuestro dojo como siempre, mañana comenzara mi entrenamiento, por ahora debo ir a dormir estoy bastante cansado, otra cosa...puedes usar mis libros yo ya no podre leer, buenas noches Jack- EL mundo ahora es distinto…tengo un plano mental de la casa por lo que consigo llegar a mi sitio de dormir como si no tuviera los ojos vendados, me echo en los cojines con la intención de dormir.

Parpadeo dos veces ante lo que me dice y una pérfida sonrisa se dibuja en mi rostro, pero la borro al instante <<Estoy enfermo, pero...la idea es...apetecible...¡enfermo!>>
-De...De acuerdo. Como desees. Y que descanses, te va a hacer falta.-<<Para lo que te espera>>
Se va y me lo quedo mirando, al final llega a su rincón y vuelvo a sonreír, borro la sonrisa y recojo la cocina. Después subo a mi cuarto y bloqueo la puerta con la silla. Me duermo acariciando el látigo, sonriente. . .

Hay que ver que lugar mas bonito,seguro que el decorador no era heterosexual. Que hago,no llevo pasta,aunque dudo que chingue por dinero,echaré un vistazo. LLamo a la puerta.
-!Hola! ¿Hay alguien?

Cain tardó en levantarse pues le habían cogido todas las canciones suaves durante la noche y aun no había llegado a una lo bastante fuerte como para despertarle. Se metió en la cocina directamente y al ver las lentejas en remojo recordó que había planeado un potaje para comer. Se fue comiendo un bocadillo frío mientras buscaba el laurel y preparaba la olla. En la cesta había algo parecido a las patatas... látima que no tuvieran aceite... Encendió los fogones y el humo empezó a salir por la chimenea. Se puso a buscar una canción en el mp4 y entonces oyó la puerta. Comprobó la mirilla y abrió a un chico con pinta de liante.
-Y tú eres?
En ese momento la canción que buscaba empezó a sonar

He tenido una noche bastante placentera, ni comparación con el caótico sueño de la otra noche…Abro los ojos pero todo esta oscuro << Ahora todo será un desafío…*sonrió de felicidad*>> Escucho una voz de un desconocido al otro lado de la puerta y unos pasos que se dirigen a ella, me pongo algo tenso, pero me viene un olor familiar, dulce y apetecible, sin duda es Caín, lo sé con toda seguridad cuando escucho su voz y el sonido de lluvia de las calaveras de su cabeza, me levanto y me acerco a él:-¿Quién nos visita?-

-Soy Ale... James! James Sawyer,del torreón Maziel! ¿Puedo pasar?

-Torreón Maciel...?- Cain recordó al chico de Maciel que les trajo las armas... aunque este no tiene ese aire de ingenuo... de hecho la sensación que le da es totalmente contraria...- Pasa- le ofrece- Puedes sentarte, estoy haciendo la comida. - Ve que Norou tse levanta, con los ojos vendado pero conociendo al japonés prefiere no preguntar- Tienes hambre Norou?

-Gracias-sonrío y paso al interior-que conste que no vine aquí por que era un burdel.
Echo un vistazo al lupanar,desde luego esta mejor equipado que el torreón.
-Y tu eres...

-Aun no mucha Caín pero gracias- La presencia del nuevo me pone algo nervioso y cuando se ha presentado he sentido algo extraño… algo que me dice que no es de fiar :-Has mentido-le digo cuando pasa por mi lado pero sin darle mas importancia, parece ser que con los ojos vendados pued sentir cosas que antes no podía…

Llevo toda la mañana memorizando palabras y mi cabeza ya no da para más rocavarancolés por hoy, así que decido salir de la habitación y, con un poco de suerte, encontrar a alguien que me acompañe a la biblioteca. Seguro que el bibliotecario tiene libros en alemán...

Vuelvo a coger la tabla, que para que negarlo: a pesar de ser solo una tontería, me gusta bajar las escaleras sobre ella. Salto encima y me empujo con las manos, agachándome como ayer, y estirando los brazos para equilibrarme.
-¡Weeeeeeeeeeeeeeeeee!-Cuando veo que la tabla va a volver a atascarse como ayer en el último escalón, salto de ella hasta el suelo, evitándome otro porrazo innecesario. Es lo bueno de vivir entre relojes, luego resulta más sencillo recordar el momento exacto en el que suceden las cosas.

Tras eso, recojo la tabla y me acerco a la puerta. La luz que entra por ella me ha llamado la atención. Allí veo a Caín, Carmesi y un chico totalmente desconocido para mí.
-¡Hola! ¡Buenas días!-les saludo.

Me río en su cara:
-Mentir,¿yo? Lo has deducido por que se me escapó un pedo? O por el tic de mi labio inferior,o no,déjame adivinar,aunque jamás he hablado contigo pero me conoces como mi querido padre,jajajaja. Relájate,estás paranoico.

-Cain- se presenta- y el vendado es Norou. ¿Qué te trae por aquí?- Había algo en el chico... una sensación extraña... ¿Era miedo? ¿Desconfianza? No sabría decirlo, pero el comentario de Noroy le confirma que algo no va bien. Se sentó en un montón de cojines y le señaló un puff al recién llegado, invitándole a sentarse.- Hola peque- saluda a Dirke cuando llega

Me levanto y hago la cama. Me cambio de ropa, esta vez elijo un kimono blanco con flores azules. Oigo a Dirke gritar y bajo corriendo. Parece que esta vez no se ha caído...Mejor.
-Buenos días a todos-saludo. Me fijo en que hay un chico al que no conozco, parece nuevo, nunca le he visto por el burdel...
-¿Quién eres?- le pregunto.