Burdel de dama Espasmo

01/08/11, 01:16 am

Recuerdo del primer mensaje :

Edificio de cinco plantas de madera pulida con fachadas llenas de balcones y techadas con tejas azules. La entrada es un arco rectangular decorado con farolillos y da a una sala circular decorada con doseles y tapices. Una abertura atraviesa el edificio verticalmente, filtrando la luz que va a dar a una fuente de cristales de colores. Se utilizó como refugio para cosechados durante la primera cosecha pero actualmente es un negocio puesto en funcionamiento.

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16/11/12, 05:41 pm

Norou

Después de escuchar mi confesión Jack continuó a explicarme su punto de vista, nada que ya no supiera, así que esperé hasta que desahogara un poco contándomelo.

“Por favor Jack ¿de verdad crees que es necesario que sigas intentando explicarme estas cosas con palabras después de lo que te he contado?-suspiré teátricamente- sé muy bien lo que necesitas- dije mientras gateaba lentamente sobre él dejando mi cara frente a la suya y despegando su fría mano de su cara para despejársela, de nuevo me volvía sentir estúpido como aquella noche en la taberna- lucha..-dije casi susurrando y sonriendo-“

Agarré a Jack por los hombros y dando una voltereta hacia delante lo lancé varios metros, Jack cayó de pie.

“No esperaba menos de usted, señorito-dije incorporándome con cara divertida-“

Enseguida supe que Jack no tenía mucho ánimo para luchar, parecía algo enfadado o confuso.

“bueno quizás hoy te perdone, pero cambia ese ánimo por favor-dije preocupado- ¿si no quieres luchar qué quieres hacer?-termine diciendo rascándome con una mano la cabeza”

16/11/12, 10:43 pm

Vuelve a lo mismo, a que sabe lo que digo <<¿Y entonces? ¿Es tonto?>> pero lo inesperado es cuando se desliza hasta hacer contacto visual a unos centímetros sobre mi cara <<Quizá no sea tan ton... >> Y de pronto salgo volando. Doy un giro en el aire por acto reflejo y logro caer de pie, resoplando.

-¿Luchar? No estoy de ánimos para eso...-mascullo y también se da cuenta.-Osea... lo sientes todo. No lo que pienso pero sí las emociones y sentimientos... Pero algo falla. Preguntas que qué quiero hacer. Un humano que vive en un burdel con esa habilidad ya lo sabría hace rato. Y sin el ki, también.-le voy explicando según me acerco a él, despacio.-Ahora tengo una pregunta...-me escurro por lado para susurrarle desde atrás, al oído.-¿En la Tierra, estuviste alguna vez con alguien?-mientras deslizo mis manos sobre su kimono, apretando el abrazo y pegando el mentón al cuello.

Pero claro, las caricias no eran sólo para él, también un hechizo de impulso hacia atrás, atravesando mi nube de humo, para tirarlo al suelo. Y de nuevo, uno encima de otro, sólo que al revés. Además, esta vez mis manos van más abajo, hasta la cintura pero no más. Tanteando.
-¿Y bien, guerrerito mío? Exijo una respuesta a eso. Y a esto :¿qué te dicen mis emociones, mi energía?-le vuelvo a sisear mostrando los colmillos y sonriendo pícaramente. <<Venga hombre...>>

21/11/12, 03:15 am

Norou

Tuve que hacer uso de mis habilidades para que el corazón no se me disparara además de detener otra cosa que también empezaba a animarse más abajo. ¿Pero qué me ocurría? Supuestamente me gustaban las mujeres pero ¿qué era esta sensación? Había sentido muchas veces en el burdel el deseo en los clientes pero no tenia comparación con lo que Jack me estaba haciendo sentir, no lo entendía. No sabía si estaba siendo enajenado por los poderes del vampiro pero todo aquello parecía real.

Podía sentir como sus frías sus manos robaban el calor corporal de mi torso a cada milímetro de piel que iba acariciando dejando una estela helada que al instante volvía a su temperatura, como las palmas de sus manos se iban ajustando a las curvas de mi musculatura ralentizando la marcha en mis cicatrices intentado leer sus historias.

Las manos de Jack pararon sobre mi vientre como exigiendo una respuesta antes de continuar.

“Yo nunca he estado con nadie de este modo…-dije justificándome- Jack yo…no sé qué pasa… pero nunca me sentí así y no sé muy bien como actuar-dije con un nudo en la garganta- por favor Jack ayúdame-dije cogiéndole una de sus manos con una de mis maltratadas manos con una delicadeza que no estaba acostumbrado a tener-“

Con habilidad y delicadeza lo hice caer hacia un lado para cambiar el rol y quedarme sobre él. Desde arriba tenia una vista magistral, su pelo dorado derramado por el suelo, su pálida tez con una marcada expresión picara, sus ojos que recorrían intensamente mi torso al descubierto y sus labios que eran lentamente acariciados por su lengua para luego ser castigados por sus dientes.

Con el dorso de mi mano comencé una caricia en su mejilla fría y suave como la porcelana. Sentí como todos los vellos de mi cuerpo se erizaron al hacerlo. Lo acaricié lentamente hasta llegar a sus labios donde girando la mano coloque el dedo índice presionándolos levemente, despegando labio inferior del superior por un momento fui bajando pasando por la áspera textura de su perilla para pasar de nuevo a la textura de porcelana de su cuello hasta encontrarme con el cuello de su camisa de satín negra, de la que fui desabrochando los botones poco a poco pero con impaciencia.

Una vez descubierto su pecho deslicé la mano por el hasta llegar a uno de sus costado. Con la otra mano atrapé su barbilla y lo miré a los ojos pero instintivamente desviaba la mirada a sus labios, parecían imanes… demasiadas emociones para controlar, no pude seguir controlándome, por primera vez después de mi transformación perdí el control de mi cuerpo, el corazón empezó a latirme rápidamente y mis mejillas se ruborizaron.

Casi sin darme cuenta me fui acercando poco a poco a su cara con la mía, lentamente mis labios se posaron sobre los suyos. Sentía como un vacío en mi pecho, un cosquilleo casi insoportable. Había dado mi primer beso, no tenia conciencia de si lo había dado bien o mal, simplemente hice lo que mi cuerpo pedía a gritos.

Los labios de Jack empezaron a moverse y yo simplemente los imitaba con los míos, pude sentir como cada vez los besos eran más suaves y resbaladizos. Aun podía saborear el sabor de mi sangre en su boca. Los afilados colmillos de Jack se hacían notar cuando los besos empezaban a ser más apasionados.

Jack comenzó a besarme, lamerme y a mordisquearme juguetón el cuello. la sensaciónes que le seguia a esto ultimo era indescriptible y un leve gemido se me escapó, seguido de otros tantos...

“¿Pero qué me has hecho? ¿Has usado algún tipo de hechizo conmigo? Esto es de locos…me estas matando…sea lo que sea termínalo…-casi supliqué-... siento que estoy ardiendo….-dije como pude pues me costaba hablar entre tantas sensaciones-“

23/11/12, 08:00 am

Pronto vi el efecto vigorizante que mis manos tenían y que su sangre comenzaba a acelerarse en cierta dirección, aunque lograse mantener el control en el resto del cuerpo. Mis manos perfilaban su musculatura hasta el estómago, donde el chico empezó a hablar, bastante confuso. Me detuve para escucharle, con mi respiración reposando en su cuello, cálido. <<Qué monada... Pobre guerrero confuso>> pienso riendo para mis adentros.

Cuando acaba me toma de la mano con suavidad y me dejo hacer, tumbándome de forma que se quede encima. Le miro con intensidad, sonriente, subiendo desde la cintura hasta los ojos y le observo divertido, pícaro, mientras me relamo y muerdo el labio inferior, esperando alguna reacción por su parte.

Esta llega en forma de caricia de su mano en mi mejilla, donde luchan su piel cálida con la fría mía, poniéndonos los pelos de punta a ambos. Al pasar sus dedos por mis labios, dejo que mi lengua se escurra y los lamo un poco, aunque pronto siguen bajando, perilla, cuello, hasta que empieza a desabrocharme la camisa con cuidado pero con impaciencia, aunque poca para lo que esperaba <<¿Y para esto ahorro yo para botones nuevos? Jo>> vuelvo a reír mentalmente <<Si capta que estoy alegre, riendo, pero nunca de él, se sentirá mejor, digo yo>>

Al acabar, una de sus manos se desliza por mi torso haciéndome cerrar los ojos para disfrutar de su tacto, y cuando noto la otra en mi barbilla, respondo con una mirada con cariño. Su cuerpo empezó a liberarse de su control: la sangre lo recorría en todas direcciones sin que él pudiera impedirlo y se sonrojó, cosa que nunca había visto en él.

Y llegó el beso. Al principio fue suave, un mero rozar de labios, pero le tomé de la nuca con delicadeza para atraerlo hacia mí y alargar el contacto, abrir su boca con mi lengua y, sin brusquedad, explorar y saborear sus labios. Primero lenta y suavemente, luego, al no oponer resistencia, más juguetón y apasionado, mordiéndole el labio inferior, mordiéndome, mezclando ambas sangres y saborearla en su boca, enloqueciendo. Mientras tanto mis manos habrían quitado la prenda superior al chico y todo su torso estaba a merced de mis caricias, rozándole con las uñas, recorriendo sus líneas y acariciando sus numerosas cicatrices.

Enfebrecido le besé las comisuras de los labios, el mentón, para luego repasar toda la mandíbula con los colmillos hasta el cuello, donde aspiré su letal aroma. Mordiscos superficiales, juguetón, mezclado con besos que volvían a la boca y subirían luego a la oreja, mientras una de mis manos se perdía en su cabello.

Gemidos y palabras. <<¿Hechizo?>> Terminé de escucharle y luego volví a encararle, sonriendo.
-Por mi honor que lo que te sucede es natural.-luego le mostré los colmillos, amenazador.-Esto no ha hecho más que empezar, cariño.

Después le hice un nudo con las piernas y volví a cambiar posiciones, tumbándome encima apretando las uñas en su pecho. Volví a devorar su boca con ansia, rezando interiormente para que ninguno de los dos perdiese el control por completo y destrozásemos el dojo. ¿Por qué? Porque se convirtió en una pequeña lucha por el poder, cambiando posiciones con brusquedad mientras las caricias y besos se sucedían. Cierto que sentir su pesado y lujurioso cuerpo sobre mí era una locura, pero esa noche cada centímetro de su cuerpo sería mío.

En uno de los giros lió sus piernas con las mías para que no pudiera rodar y escapar de su peso pero dejé de delinear sus clavículas con mis besos para subir a la base del cuello, donde hundí con fuerza mis colmillos. La seguida explosión de sangre fue atroz para mis sentidos, inundándome y colmando de calor cada poro de mi piel, erizada, haciéndome dudar de un detalle <<¿Sentirá su sangre dentro de mí todavía? Sea como sea... ¿quién tiene a quién, quién posee a quién ahora?>>. Sus besos y caricias, intensas, me devolvieron la cordura a los cinco segundos y liberé su cuello, para luego curar las heridas con mi propia sangre. Aún con los labios manchados, goteando mentón abajo y por su torso, dejé caer la cabeza hacia el suelo, extenuado y sonrojado.
-Has ganado. S-soy tuyo.-le dije riendo mientras volvía a besarme y a compartir nuestros sabores.

Spoiler:

Recordé todo lo que habíamos pasado desde que nos conocimos en esos primeros días de locos, huyendo de los colaespinas y refugiándonos con Cain, Erika, Dirke y los demás. Las salidas a por comida, las luchas contra las ratas, los entrenamientos con él, las visitas a Letargo y los buenos momentos pasados entre ambos grupos... Todo tildado de un intenso cariño hacia este chaval, una monada ahora mismo, enloquecida por un vampiro que se creía profesional. Y mírate ahora, congeladico encima de una monada disfrazada de guerrero a punto de explotar.

Spoiler:

Y tras un enérgico hechizo de limpieza y otro de oscuridad para toda la sala, volvería a su boca, a sus poderosos brazos y a sus piernas, su pelo, su fuerte espalda, reposando mi cabeza en su cuello para así quedarnos, extenuados y sonriendo, rompiendo el silencio con una caricia, una mirada.

10/12/12, 10:50 pm

Tras el frugal desayuno y de hablar brevemente con Adara y Toima nos encaminamos al burdel. Toima por lo visto iba a ir "a buscar aquello". No había querido soltar prenda al respecto y nos tenía bastante intrigados, pero hoy por fin se descubriría el misterio. Con Adara quedamos para ir a Varmania de caza una vez terminásemos en el burdel, aunque no le explicamos exactamente a qué íbamos. Ya se lo contaríamos luego con todos los detalles. Por el camino vamos últimando los detalles del plan con risa contenida. Pronto alcanzamos el edificio y llamo a la puerta suavemente. Aún es temprano y la mayoría de los habitantes del burdel ha de estar durmiendo... Como Vac, quien no nos convenía que se despertase antes de tiempo. Pero habíamos quedado con Wen sobre esta hora y ella sí estaba despierta, esperando para abrirnos.
-Buenos días, Wen. El objetivo todavía está en modo hibernación, ¿verdad? -pregunto jocosamente a modo de saludo según pasamos al interior.
La vouivre estaba desayunando todavía por lo que nos sentamos un rato esperando a que termine. Al ver la comida mi estómago protesta un poco, pues nuestro propio desayuno no había sido satisfactorio en absoluto... Y quien sabe cuantos días más iban a ser así a partir de ahora, pienso riéndome para mí de forma irónica. Cuando ella termina de desayunar nos conduce por los pasillos del edificio hacia el cuarto de mi hermano.
-Vac nos va a matar un poco, ¿verdad? -le digo a Gael en voz baja mientras seguimos a Wen-. Menos mal que ya hemos comprado los billetes para huir a Varmania -bromeo.

Llegamos a la habitación del hado y abrimos la puerta con suavidad. El Fuego Fatuo y yo le pedimos a Giz que nos haga unos hechizos de amplificación de voz y también que cree una burbuja de silencio que cubra toda la habitación.
-Os aconsejo que os quedéis fuera de la burbuja, por el bien de vuestra cordura -les digo a Giiz y Wen conteniendo la risa justo antes de que el asreniano lance los otros hechizos.
Una vez está todo listo, intercambio un breve asentimiento con Gael y, tras acercarnos cada uno a un lado de la cama donde duerme el hado infernal, comenzamos a cantar. De forma estridente de por sí y magnificada por el hechizo de amplificación, nuestra canción de la taberna, la misma que nos había despertado a nosotros de forma parecida al día siguiente estando resacosos, resuena dentro de la burbuja, mezclada con las ocasionales carcajadas que no podemos evitar.
-Buenos días, hermanito -digo con una fingida sonrisa inocente una vez terminamos y se deshacen todos los hechizos-. ¿Has sufrido adecuadamente o deberíamos esforzarnos más la próxima vez? -finalizo antes de volver a estallar en carcajdas.

11/12/12, 01:12 am

Vac había regresado al burdel junto con Jack y Wen después de la cena en el cuchitril. El hado estaba bastante cansado, y apenas había hablado de camino a casa. Una vez allí se había ido a su cuarto tras despedirse, ansioso por dormir en su cama. En cuanto entro en la habitación, se desvistió y se metió bajo las sabanas, agradeciendo la suavidad de estas.

Mientras la consciencia del hado empezaba a sumergirse en el sueño, su mente daba vueltas a los sucesos del día. Había sido un día agradable, agradecía la cena con sus amigos, pero no entendía aun la reacción de la nublina. La muchacha había desaparecido de la vista de todos aprovechando el alboroto que había montado el argos. Cuando el ulterano se había calmado, Vac había buscado a Tania preocupado, pero no había dado con ella. Ahora solo podía esperar que no le hubiera pasado nada y que se encontrara bien.

Los ojos del hado terminaron por cerrarse del todo, arrastrado por el sueño. Durmió varias horas, aunque no fueron suficientes, y antes de que estuviera completamente descansado un horrible sonido le arranco de su inconsciencia. En un principio no supo de donde venía ni que era, pero tras unos segundos, identifico la letra de la canción y reconocía las voces amplificadas de Noel y Gael. Vac hundió la cabeza entre las almohadas, alejando sus oídos del fuerte sonido, pero apenas noto mejoría. En un espacio tan cerrado, las voces amplificadas provocaban un eco tremendo, y la tremenda potencia hacía vibrar sus alas. Cuando la canción terminó, el griego apenas pudo escuchar la voz de su hermano desde debajo de la almohada, pero cuando empezó a oír su risa, se incorporo y les sacudió a él y a Gael con la almohada, con los ojos aun empañado por el sueño.

-Os creéis muy graciosos –empezó, mientras se ponía en pie algo mareado-, pero os saldrá el tiro por la culata, creedme. Ya os la devolveré, de momento creo que necesito una ducha, y una aspirina no estaría mal –rió para si.

El hado no había prestado atención a quien estaba en el cuarto, y tampoco se le había ocurrido taparse, por lo que se estaba paseando por la habitación desnudo. Cogió una toalla del armario y se la enrollo en torno a la cintura, y tras coger algo de ropa para cambiarse, se encamino hacia la puerta, empujando a los chicos delante.

-Buenos días –saludó a Giz y a Wen, que estaban en la puerta, y se encaminó hacia las termas, apoyándose con cuidado en la pared para no perder el equilibrio por el mareo persistente.

Una vez aseado y vestido, subió a prepararse una infusión fuerte, bebiéndola después con algo de alivio.

11/12/12, 12:02 pm

Al llegar nos recibe Wen, como habíamos acordado, y nos deja pasar. Por suerte Vac sigue dormido, y podemos esperar sin problema a que ella termine de desayunar. Después subimos sin hacer ruido por las escaleras. Cuando Noel bromea pienso un momento en ello. Bueno, si se lo tiene merecido no veo por qué debería matarnos. Aunque sí me hace sentir una pizca mal recordar que después nos dio unas infusiones maravillosas y un desayuno bestial que, hoy por hoy, ni de broma podríamos devolver. De todas formas no es como si fuésemos a romperle los tímpanos, así que sonrío a Noel ante su comentario y entramos en el cuarto de hado. Allí empiezan los preparativos, de los que se encarga Giz. Apenas me queda la magia de reserva del amuleto y prefiero no gastarla antes de la cacería.

Ya dentro de la burbuja y con todo listo, tomo aire profundamente y, al mirarnos para ponernos de acuerdo, empiezo a cantar. No tuve ni que repasar la letra, me parece que no se nos va a olvidar nunca nuestra pequeña obra de arte. Cuando Vac empieza a moverse debajo de las sábanas empiezo a hacer un amago de baile por los aires, y como colofón final de la canción recibimos un almohadazo cada uno, tan pronto como Vac se incorporó. Solté una pequeña risa que refrené cuando el hado nos dijo que nos la devolvería. En realidad me está dando un poco de lástima verlo así de desorientado, pero me encojo de hombros.
-Muy bien, estaremos esperando. -Cuando termina de salir de la cama me doy cuenta de que va desnudo y aparto la mirada, aunque él no parece incomodado siquiera. Aunque Wen también está aquí-. Pero tápate, hombre -murmuro.

Mientras Vac baja a las termas a darse un baño los demás salimos también de la habitación y volvemos al piso inferior. Mientras bajamos las escaleras me pongo a tararear por lo bajo.
-Nuevos hados machacados por los niños del lugar, y sus compañeros no les ayudarán...

11/12/12, 12:45 pm

Parecía que el hado había acumulado bastante sueño, pues llegamos con tiempo de sobra para que Wen desayunara antes de preparar su despertador particular. Giz se encargó de realizar los hechizos de amplificación de voz y una burbuja insonorizada para que nadie salvo los bromistas y el afectado escucharan lo que ocurría dentro. No era plan de molestar a todos los trabajadores del burdel. Wen y el asreniano se quedaron fuera también.

La imagen que resultó fue cuanto menos bastante curiosa, como si a la bella durmiente la hubieran despertado los trols de debajo del puente y no el príncipe. Se podía ver como Gael y Noel cantaban, a pesar de que no pudieran escucharles, y cómo Vac despertaba rápidamente. Los chicos habían tenido razón en el desayuno, su cara fue muy graciosa. Vac se levantó cuando acabaron de cantar, los golpeo con una almohada y se tapó con una toalla antes de salir. Cuando pasó frente a Giz, al asreniano le costó bastante aguantar la risa para darle los buenos días. Pensó de nuevo en la disculpa por lo de ayer, pero acabó aparcándola para otro momento en el que pudiera sonar serio y creíble.

11/12/12, 01:11 pm

Aunque la noche en el cuchitril terminó pronto, no fue aburrida ni mucho menos. Mientras volvía al burdel con Vac y Jack, Wen aun se reía interiormente por culpa de las bromas que se habían sucedido en la cena y con la perspectiva de la mañana siguiente.

Al llegar al burdel, la vouivre se fue rápidamente a la cama para no sentirse demasiado cansada al día siguiente por tener que madrugar. A la mañana siguiente se despertó bastante temprano y esperó a que llegaran Noel, Gael y Giz desayunando. Los chicos del cuchitril no se hicieron esperar y, cuando la vouivre hubo terminado su desayuno, comenzó la función.

Wen guió a los chicos hasta la habitación de Vac y se quedó apoyada en la puerta con los brazos cruzados durante el espectáculo. La británica no puedo evitar reir al ver como se despertaba Vac. Ella no había oído la canción, pero se imaginaba el dolor en los oídos del hado.

Con un “buenos días” entre risas mal disimuladas saludó al hado que salía rápidamente de su habitación medio desnudo, cosa que no le importó a la vouivre, pues estaba acostumbrada. “Vivo en un burdel, si me escandalizo cada vez que veo un desnudo no podría ni ir a desayunar.”

- Parece que se ha enfadado un poquito. - bromeó.- Tranquilos, ya se le pasará. ¿Queréis comer algo? - ofreció mientras se encaminaba a la cocina de nuevo.

En ella, preparó el desayuno de Vac, tal y como él había hecho para ellos cuando los despertó, pero, obviamente, no tan bueno. Cuando Vac apareció de nuevo, Wen le ofreció el desayuno sin ceremonias.

- Toma, tú hiciste lo mismo por nosotros.

05/01/13, 05:06 pm

Cain deslizó la pluma con tinta sepia por el papel, trazando un círculo que al cerrarse rodeó un rostro dibujado. Era el rostro de un chico, un chico idrino. A su lado había otro retrato de un joven aparentemente humano, pero algo le decía a Cain que no lo era. Hacía ya unas semanas que los había visto dando vueltas a lo loco por la ciudad, huyendo de algo o de alguien. Había estado tan ocupado que ni siquiera se había fijado en el comienzo de la cosecha, y salía tan poco que no había tenido la oportunidad de ver a ninguno. << ¿En qué te has convertido, Cain? Ahora eres un viejo gruñón obsesionado con el trabajo y el dinero... y ni siquiera has llegado aun a los 30>> Los chicos le habían parecido bastante monos, por lo que había acabado dobujándolos, y la respuesta histérica de una de sus prostitutas, también de Idris, le había hecho pensar en varias cosas. La mayoría estúpidas e inconexas, pero había despertado su curiosidad.

Se levantó y colgó el dibujo de una pared, junto a sus bolas de cristal. Tomó un libro de la estantería contigua y lo fue hojeando. Quería verlos de cerca, le apetecía salir de aquel maldito burdel que no podía dejar solo ni un segundo. Vacuum estaba pero podría dejarle a él al cargo. << Dos semanas para mover tu culo gordo y hacer algo, cualquiera lo diría>> Se reprendió. Debería quitarse la costumbre que había cogido de hablar consigo mismo como hacían sus demonios. Recordó que Gael y compañía fueron a espiar a los cosechados la cosecha anterior y pensó que podría apuntarse esta vez.

-Wen- llamó, al tiempo que salía por la puerta- ¡Wen! Avisa a los cuchitrileros, y consígueme una palangana de cobre.

07/01/13, 08:04 pm

Wednesday había conseguido, tras muchas negativas, que sus amigos no le pagaran la parte del pago que ellos decían que le correspondía. Al parecer de la vouivre, ella no había hecho demasiado y la “visita” a los subterráneos y el cargo de magia era suficiente. Al volver al burdel, y durante su pequeño turno de tarde-noche, no había dejado de pensar en qué haría con su muda de piel. “Podría hacerme un bolso o unas botas.” Pensó para sí. “Total, ahora mismo tengo más dinero de lo que nunca llegué a soñar. Podría empezar a comportarme como una de esas viejas ricachonas británicas.” Rió para sí misma antes de caer rendida en la cama.

A la mañana siguiente seguía pensando en lo de la piel mientras desayunaba cuando oyó la voz de Cain llamarla, a voz en grito, pidiéndole que llamara a los cuchitrileros y….

- ¿Una palangana de cobre? - preguntó desconcertada, mientras intentaba recordar en su mente si había visto alguna por el burdel.- Jefe, ¿puedo preguntar qué tienen que ver los del cuchitril con una palangana de cobre? Llámame tonta si quieres, pero no acabo de ver la relación.

A pesar de su desconcierto, la británica atendió al pedido de su jefe y se hizo con una palangana de cobre que recordaba haber visto en las termas y luego invocó un lacayo grotesco al que indicó llevar un mensaje al cuchitril donde les pedía que fueran al burdel.

- Toma. - le dijo la vouivre.- Ahora dime, ¿qué vamos a hacer?

08/01/13, 01:13 am

Cain inspeccionó la palangana para comprobar si le servía y tras darle el visto bueno se la puso bajo el brazo y buscó sus materiales de invocación; pinceles, tintas resistentes al agua hechas con grasa de ballena y algunos aceites.

-Vamos a espiar cosechados... -explicó- Y como no tiene gracia que vaya yo solo, pues os arrastro conmigo, y la palangana es imprescindible, ya lo verás- añadió en tono misterioso cuando notó la mirada extrañada que le dedicaba la vouivre.

Los cuchitrileros llegaron, todos ellos, igual de extrañados y acompañados de Matt y Nia a los que hacía tiempo que no veía. Tras los saludos pertinentes les contó su plan; irían primero a Maciel, que era el torreón donde vivían los chicos a los que había estado espiando.

-Esta vez no se os escapará ninguno- dijo con la misma sonrisa enigmática- Yo me ocupo de ello.

Invocó una quimera al azar como montura, que no le salió demasiado fea, y salieron en dirección al primer torreón.
Sigue en el Torreón Maciel.

08/01/13, 11:54 pm

Ya va siendo hora de levantarse, aunque sea pleno día...
-Buf...-mascullo contra la almohada.

Mientras me siento hago recuento y busco mi agenda mental, algo perdida. A ver... Vine de los subterráneos tras el primer ensayo sangriento... Luego me eché a dormir hasta la tarde del día siguiente y luego recuperé fuerzas pero nada de entrenar con Norou. Bien hasta aquí. Y hoy qué hago... >> Por lo pronto no tengo ganas de salir de la cama así que me quedo remoloneando, repasando el enfrentamiento contra la criatura e insistiéndome en mejorar la parte mágica. Y algo más intermedio: venenos. Ya sea para corroer o para clavarlos con las dagas y que ataquen desde dentro. Pero como no sé cómo funcionan...
-Despierta, idiota. ¡Cain!-exclamo, volviendo a sentarme y a planear mentalmente a saco, como siempre que se me ocurre algo.-Tengo que bajar y preguntarle... Pero mejor vayamos a lo fácil: si consigo venenos dañinos, los uso contra alguna criatura de la cual no pueda alimentarme y listo.
-¿M...Mande?-me sorprende una vocecita de pronto: Elunin recién despierto en el cuarto contiguo.-¿Con quién...
-Sólo. Pensaba.-me encojo de hombros, riendo.

Le veo levantarse y cambiarse pero reparo en sus ojeras y sus ojos rojos.
-Tienes muy mala cara, ¿qué pasó?
-Ma... mala noche... Alguien empezó a vacilar de haber timado a Dama Aroma y... y no recuerdo más.

Bajo el nivel de las risas y le doy un par de palmaditas en la espalda. Luego salimos al pasillo, yo envuelto en mi ya monótona protección, y bajamos a la cocina.
-Tomate alguna poción, anda, que pareces un muerto.
-Mira quién habla.-me responde riendo.

Saludamos al personal mientras cada cual se prepara lo suyo y cuando se despide, yo me quedo en uno de los sofás del salón, mirando fijamente las piezas de un tablero de ajedrez rocavarancolés, pensando que de aprender a fabricar los venenos, los podría hacer cerca de donde esté la bodega... Pero como es más fácil el tema venenoso... Primero me dedico a eso y ya iré buscando dónde y cómo realizar el otro proyecto.

Así pues, hago un movimiento con la ficha del vampiro como esperando a que alguien mueva las blancas a lo largo del día, y me encamino escaleras arriba, hasta que escucho que llama a Wen y decido dejarlo para más tarde, por lo que me voy a mi cuarto. Pero al rato escucho a los cuchitrileros y me asomo al pasillo a husmear, silencioso. Sonrío ante lo que dicen y cuando se disponen a salir, acelero y aparezco a su espalda:
-¿No creeríais que ibais a ir sin mí, no? Tengo cuatro monaditas de las que presumir.-exclamo riendo.
Sigue en el Torreón Maciel.

05/02/13, 08:19 pm

Wen se había pasado la vuelta al burdel rememorando los recuerdos de su infancia, sobretodo el desprecio de sus padres adoptivos. Una solitaria lágrima resbaló por su escamosa mejilla antes de volverse humana de nuevo, momento en el que se la limpió bruscamente. Con una sacudida a su vestido y la cabeza agachada refunfuñando por lo bajo, la vouivre entró en el burdel por la puerta principal. En la entrada, recostado en un sofá, encontró a Jack, con el que cruzó la mirada justo cuando este ponía una sonrisita picara.

- Ni se te ocurra abrir la boca o ahora mismo está serpiente te arrastrará a la calle y no sabes el solazo que pega. - determinó la vouivre mirando al vampiro con cara seria mientras lo pasaba de largo y subía a cambiarse a su habitación.

Una vez con ropa cómoda, pero adecuada para el trabajo, bajó de nuevo a la entrada, pasando por la cocina donde se hizo un simple sándwich, y se recostó en un sofá cerca de donde estaba Jack, a la espera de que se hiciera la hora de empezar su turno y pidiendo por unos cuantos culos a los que patear.

05/02/13, 11:12 pm

Amanecí en la penumbra del dormitorio de Erika, sin poder volver a conciliar el sueño. Me quedé un rato allí, acariciando su cabello y planeando el día. Lo primero era desayunar, así que salí y bajé en silencio, cambiando de idea por el camino para darme un señor baño frío. Necesitaba despejarme ya que aún no estaba acostumbrado al opio que probé anoche...

Con la cabeza más fresca, kimono y el pelo suelto, me encaminé a la cocina, agarré una botellita y, copa en.mano, me deje caer en un sofa a resguardo de.la luz. Y allí estuve un rato, jugando conmigo mismo al ajedrez hasta que Wen llegó. Y cómo no, recordé dónde la dejamos y sonreí en consecuencia pero brevemente, ya que primero sus gestos, luego sus palabras, me hicieron cambiar de idea. No sólo eso, la cara que se me quedó fue ojiplática. <<¿Qué he dicho? O... Qué he hecho... Maldita sea... Algo no fue bien.... Diantre...>> Me asomo a la escalera cuando pasa de largo y la sigo con la mirada hasta que desaparece, pensando qué hacer... Pero acabo negando la cabeza y me quedo en el sofá, expectante y pensativo <<¿Qué puede haber pasado... haber ido tan mal para llegar así? Gah...>>

Dejo la botella y la copa, mirando de vez en cuando a las escaleras por si volviera y, en una de esas, la detecto bajando, así que adopto una postura cotidiana para cuando baja del todo. Cocina, se prepara algo y se sienta cerca con cara de mala leche. Me aliso el bigote y la perilla, pensativo y como cogiendo valor, para luego levantarme e ir a la cocina, de donde cojo una silla. Esta la coloco en diagonal frente a ella, para poder hablarle a los ojos pero sin atosigarla, cosa imposible a su lado en el sofá. Luego hablo, con cuidado <<Vale que la amenaza fuese mentirijilla, pero... Algo le pasa y mejor no empeorarlo>>

-O-Oye, que siento lo de antes... No sé exactamente qué te pasa y de haber sabido que vendrías... así, no habría reaccionado de esa forma...-luego cambio el tono, pues lo que sigue lo digo más confiado.- Y no pareces estar bien, pero tampoco sé si preguntar qué ha ocurrido o callarme... No tienes muy buena cara...-finalizo, preocupado.

06/02/13, 02:38 am

El resto del día hasta después de la cena, Noel lo pasó junto a Vac. Después de abandonar la taberna pasaron por el mercado para comprar algo de comer. Decidieron pasar el día en los acantilados y se sentaron por allí para comer. A medida que avanzaba la tarde, Noel se puso de bastante mejor humor, bromeando y charlando con su hermano. Después de comer, a parte de las omnipresentes charlas, estuvieron practicando un rato en la bahía como si estuvieran ellos solos en los entrenamientos. A Noel le sentó bien el poder descargar parte de su frustración de esa manera y se divirtió. Algo más tarde, hablando de todo un poco se les ocurrió que podían ponerse a pescar para la cena. Obviamente no disponían de una caña, por lo que se dedicaron a explorar los barcos naufragados hasta dar con una que estuviera en un estado más o menos usable. Dedicaron otro rato a buscar gusanos y algún otro pequeño insecto que pudiera servirles de cebo y en cuanto tuvieron el "set" completo no tardaron en probarlo. Se turnaron para intentar pescar algo, con resultados bastante escasos como era esperable. Pero a lo largo del día consiguieron suficientes peces como para que pudieran darles una cena más o menos decente. Cuando ya había anochecido, prepararon una fogata y los asaron. Noel no solía comer mucho pescado desde que se habían mudado y agradecía el cambio. No es que supieran especialmente bien aquellos peces en concreto pero al draco le pasaron más que por vez. Se lo estaba pasando bien y estaba en medio de un breve ataque de risa cuando Vac le recordó que ya deberían volver. Noel asintió lentamente y se levantó del suelo arenoso. Según regresaban hacia el burdel, realizó un hechizo de limpieza sobre si mismo y sus ropas porque lo cierto era que entre unas cosas y otras se había ensuciado bastante.

Durante el camino no paraba de pensar en lo que iba a hacer a continuación. Por supuesto que había pensado en ello durante la tarde, pero la mayor parte del tiempo prefirió no pensar demasiado en el asunto. Realmente aún no tenía del todo claro que es lo que le iba a decir a Wen, salvo algún que otro esbozo. Agradeció de forma muda con alguna que otra leve sonrisa los intentos de Vac por infundirle ánimo y, sin que tuviera tiempo para pensar mucho más, por fin alcanzaron el burdel.

Una vez allí los recibió Norou, a quien Noel saludó con un "buenas noches" algo apresurado. Siguió al hado por el interior del edificio, caminando detrás de él con la mirada fija en sus botas. Hasta que llegaron a la que su hermano dijo ser la habitación de Wen. Noel agradeció brevemente a Vac y, tras un breve intercambio de palabras, el hado se perdió por los pasillos, dejándolo solo frente a aquella puerta que de repente se le antojaba muy interesante. Permaneció unos segundos observándola sin moverse hasta que su garra se movió por sí sóla y llamó a la puerta.

El breve instante que la chica tardó en salir a abrir le pareció eterno al draco, quien escuchaba los pasos de Wen en el interior con el corazón en un puño.
-Hola, Wen... -la saludó cuando ella le abrió la puerta.
La respuesta de la británica fue un cortante "¿qué es lo que quieres?" que no dejaba lugar a dudas de que seguía enfadada con él. El draco desvió la mirada un momento antes de volver a mirarla a los ojos.
-¿Puedo hablar contigo? -preguntó a continuación con expresión seria y tratando de que su nerviosismo no saliese demasiado a relucir.
La vouivre no le cerró la puerta en las narices, lo cual interpretó como que podía seguir hablando.
-Yo... verás... -empezó torpemente-. Creo que deberíamos aclarar lo que pasó esta mañana porque... bueno... me parece que... creo que me has malinterpretado y... también quería disculparme por lo que sea que te haya hecho pensar de ese modo -una leve sonrisa nerviosa se formó en su rostro antes de seguir hablando y Noel apoyó un brazo en el marco de la puerta-. S-soy un deasastre para estas cosas, lo siento, aunque creo que ya lo sabes -hizo una breve pausa y tragó saliva antes de continuar-. Y precisamente por eso a lo mejor te has debido de llevar una impresión equivocada esta mañana, mi ineptitud y la resaca no son dos cosas que deban juntarse como si tal cosa -sonrió de nuevo por la broma y dejó de hablar por el momento.

Había conseguido mantener más o menos la compostura hasta el momento, pero por dentro seguía hecho un amasijo de nervios. Trató de pensar en lo que le había dicho Vac para reafirmarse que estaba haciendo lo correcto y esperó, impaciente, la respuesta de la vouivre.

06/02/13, 07:02 pm

Wen no le dedicó ni una mirada al vampiro, ni siquiera cuando este terminó de hablar.

- Lo que pasa, Jack, es que hay personas que se creen superiores a los demás porque sí, sin motivo y yo, que soy tonta, creía que había dejado a ese tipo de gente en la Tierra. - expuso malhumorada.- ¿Pero qué digo? Yo misma era una de esas personas hipócritas que se creen superiores cuando no lo son. Claro que, al igual que yo cambié, pensé que los demás también. Estúpida. - terminó diciéndose para sí misma, sin darse cuenta que Jack seguía a su lado.- Voy a empezar mi turno.

Dejó a Jack ahí sentado y se limitó a hacer su trabajo durante toda la tarde sin dejar de pensar en lo que había pasado esa mañana. La verdad era que, a medida que lo iba pensando, cada vez se daba más cuenta de que quizás no había sido para tanto. “Ambos estábamos de resaca, quizás lo que interpreté como desprecio fue solo por dolor de cabeza.” Reflexionó, pero sin poder quitarse de la cabeza la cara de Noel de incredulidad, como si lo que hubiera pasado hubiera sido horrible. Reflexionando y dando vueltas a ese pensamiento pasó toda la tarde mientras pateaba algún que otro culo, cosa que le vino muy bien para desestresarse.

Cuando terminó su turno, la vouivre se limitó a cenar algo ligero y darse un largo baño en las termas, sin prestar mucha atención a su alrededor. Ya en su habitación, se preparó para leer un poco antes de irse a dormir. No sabía muy bien si al día siguiente iría al entrenamiento, pero todavía no quería pensar en ello. Con su pijama, el cual constaba de un pantalón largo algo holgado y una camiseta de tirantes, y una coleta se dispuso a leer algún libro interesante cuando tocaron su puerta.

- ¿quién es? - preguntó mientras abría la puerta, creyendo que sería alguien del burdel que necesitaba su ayuda o algo por el estilo, pero no se esperó que fuera Noel quien la saludara al otro lado de la puerta.- ¿qué es lo que quieres? - preguntó cabreada. Aunque había concluido esa tarde que quizás había exagerado, todavía no estaba segura y no iba a permitir que su orgullo fuera pisoteando sin confirmarlo todavía.- Venga, habla. - le espetó apoyando su hombro en el marco de la puerta, sin dejarle entrar, pero tampoco cerrándole la puerta en la cara.

Dejó hablar a Noel durante un rato y, cuando este paró de hablar, Wen pensó que lo mejor sería continuar la conversación dentro. No le hacía especial ilusión que el resto del burdel se enterara de sus problemas.

- Pasa. - le dijo secamente apartándose de la puerta y esperando que él la siguiera y la cerrara a su paso.

Una vez estuvieron dentro, la vouivre se sentó en la cama y ofreció con un movimiento brusco de mano la silla de su escritorio al draco para que se sentara, lo que los dejó considerablemente separados por culpa del poste que se encontraba en medio de la habitación y que se interponía entre ellos. Wen agradeció la posición de ambos que le dio más seguridad para hablar.

- Mira, Noel, lo he estado pensando y es muy posible que te malinterpretara, tienes razón. - comenzó a decir la vouivre.- Pero no me negarás que tu reacción fue exagerada. ¡Te comportaste como si hubieras cometido un crimen! - le espetó cruzándose de brazos y mirando al draco seriamente.

Burdel de dama Espasmo (Archivo IV)

Burdel de dama Espasmo

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