Biblioteca Mágica
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Rocavarancolia Rol
49 participantes
- Rocavarancolia Rol
Biblioteca Mágica
02/08/11, 04:22 pm
Recuerdo del primer mensaje :
Edificio de mármol gris de tamaño medio visto desde el exterior, pero que en realidad cuenta con una gran cantidad de espacio en el interior debido a un hechizo. Dos grandes portones de madera permiten el acceso al interior.
El suelo es de madera, y lo único que se ve nada más entrar son hileras e hileras de estanterías con algunas mesas y sillas repartidas por los pasillos. La cantidad de estanterías es incomensurable y todavía más los libros y manuscritos de todo tipo que contienen. Se puede acceder a un segundo piso desde escaleras a ambos lados repartidas en varios puntos de la gigantesca sala principal, donde se repite el mismo entramado de estanterías y mesas.
Entre los estantes de apariencia normal y corriente destacan algunos ejemplares peculiares como libros voladores o libros enjaulados que parecen tener vida propia que se encuentran repartidos de forma aleatoria por el edificio.
La Biblioteca cuenta con una gran cantidad de hechizos anclados sobre ella que la hacen un lugar bien protegido, tanto de ataques desde el exterior como desde el interior. Aunque no solo cuenta con hechizos de seguridad. Uno de los artificios mágicos más destacables son los hechizos ilusorios y barreras que impiden el paso a los cosechados más allá de los primeros pasillos. Los cosechados tienen la sensación de que avanzar por toda la biblioteca, pero en realidad solo pueden moverse por una sección muy limitada de esta. Casi todos los grimorios sobre hechizos y runas, así como ejemplares sobre alquimia y bestiarios de transformaciones han sido movidos a la nueva biblioteca especializada: la Torre Doce. Quedan algunos grimorios básicos a los que tienen acceso los cosechados y la mayoría se encuentran en idiomas incomprensibles, aunque algunos cuentan con notas de traducción y hay algunos diccionarios.
El bibliotecario es Biblios, un espíritu ligado al edificio que conoce bien todas las secciones de la biblioteca y buena parte de los contenidos de los libros de las mismas. Suele aparecer para ayudar a los cosechados brevemente, y a los transformados si le llaman... Aunque no siempre.
NOTA: A disposición de los transformados hay amuletos logománticos variados que se pueden tomar prestados para leer dentro de la biblioteca. Nunca se pueden sacar de esta, pero se pueden traer materiales del exterior para leer aquí usándolos.
El suelo es de madera, y lo único que se ve nada más entrar son hileras e hileras de estanterías con algunas mesas y sillas repartidas por los pasillos. La cantidad de estanterías es incomensurable y todavía más los libros y manuscritos de todo tipo que contienen. Se puede acceder a un segundo piso desde escaleras a ambos lados repartidas en varios puntos de la gigantesca sala principal, donde se repite el mismo entramado de estanterías y mesas.
Entre los estantes de apariencia normal y corriente destacan algunos ejemplares peculiares como libros voladores o libros enjaulados que parecen tener vida propia que se encuentran repartidos de forma aleatoria por el edificio.
La Biblioteca cuenta con una gran cantidad de hechizos anclados sobre ella que la hacen un lugar bien protegido, tanto de ataques desde el exterior como desde el interior. Aunque no solo cuenta con hechizos de seguridad. Uno de los artificios mágicos más destacables son los hechizos ilusorios y barreras que impiden el paso a los cosechados más allá de los primeros pasillos. Los cosechados tienen la sensación de que avanzar por toda la biblioteca, pero en realidad solo pueden moverse por una sección muy limitada de esta. Casi todos los grimorios sobre hechizos y runas, así como ejemplares sobre alquimia y bestiarios de transformaciones han sido movidos a la nueva biblioteca especializada: la Torre Doce. Quedan algunos grimorios básicos a los que tienen acceso los cosechados y la mayoría se encuentran en idiomas incomprensibles, aunque algunos cuentan con notas de traducción y hay algunos diccionarios.
El bibliotecario es Biblios, un espíritu ligado al edificio que conoce bien todas las secciones de la biblioteca y buena parte de los contenidos de los libros de las mismas. Suele aparecer para ayudar a los cosechados brevemente, y a los transformados si le llaman... Aunque no siempre.
- Cómo se creó la Biblioteca Mágica:
- El proyecto inicial de construcción de la Biblioteca Mágica fue llevado a cabo por el Consejo tras la finalización del conflicto del regreso de Hárex y Hurza. Se recopilaron una enorme cantidad de libros y manuscritos a lo largo de los años con la colaboración de una buena parte de los ciudadanos y decenas de magos ayudaron en la elaboración del entramado de hechizos anclados que contiene el edificio. Uno de estos magos, Littero Ara, que se involucró tanto en el proceso como para perder la vida tras invocar a Bilbios y anclarlo a la biblioteca, culminó el proyecto con lo que es hoy en día. El catálogo de la Biblioteca siguió y sigue aumentando año tras año.
NOTA: A disposición de los transformados hay amuletos logománticos variados que se pueden tomar prestados para leer dentro de la biblioteca. Nunca se pueden sacar de esta, pero se pueden traer materiales del exterior para leer aquí usándolos.
- Evanna
Ficha de cosechado
Nombre: Rua
Especie: Humana. Sueca
Habilidades: Rapidez mental, valor, astucia
Re: Biblioteca Mágica
21/08/17, 05:26 pm
-Claro, aunque siento no serte de ayuda en la búsqueda- bromeo la evaki sobre su ceguera, como siempre hacía, mientras entraba a la biblioteca finalmente. Ya adentro supo que estaba rodeada de estanterías y cientos de libros cuyo contenido eran un misterio para ella- El no poder leer es una cosas de las que lamento de estar aquí ¿sabes?- dijo deslizando su mano por una estantería, podía verlos tomos todos mezclados, sus colores pero nada mas que eso- En mi mundo si había una forma de que pudiera leer incluso con mi ceguera, como olvide el idioma y el rocavarancoles no es igual, ya no me sirve. Lo hecho un poco de menos-recordaba que en la cosecha, hacia no mucho, cuando sus compañeros aprendían magia ella les pedía que lo dijeran en voz alta para poder aprenderse el hechizo, incluso si ella no podía realizarla, siempre creyó que conocer los hechizos le daría una ventaja al saber que efectos tenían y su funcionamiento. Y aun lo creía.
Solo que ahora no podía estar molestando constantemente a sus amigos o cualquiera que se le cruzara para que le leyera algo, necesitaba otro método que le permitiera ser mas independiente en ese campo.
-¿Crees que habría alguna forma de...no se...volver a leer?-pregunto Samika, viendo hacia donde sabia estaba la figura del demiurgo- Sin tener que curarme los ojos, quiero decir- añadió pues no quería eso. No tenía problemas con su visión, sentía que le seria mas difícil acostumbrarse a ver de nuevo.
Solo que ahora no podía estar molestando constantemente a sus amigos o cualquiera que se le cruzara para que le leyera algo, necesitaba otro método que le permitiera ser mas independiente en ese campo.
-¿Crees que habría alguna forma de...no se...volver a leer?-pregunto Samika, viendo hacia donde sabia estaba la figura del demiurgo- Sin tener que curarme los ojos, quiero decir- añadió pues no quería eso. No tenía problemas con su visión, sentía que le seria mas difícil acostumbrarse a ver de nuevo.
- Zarket
Ficha de cosechado
Nombre: Rádar
Especie: Carabés
Habilidades: Resistencia, velocidad natatoria, nociones de lucha
Re: Biblioteca Mágica
22/08/17, 12:45 pm
Pasaron a la biblioteca mientras Samika hablaba de sus problemas. A Lanor siempre le había apenado profundamente aquella discapacidad de su amiga, no imaginaba lo difícil que debía ser vivir sin ver. Su transformación le había facilitado aquello, cierto, pero seguía teniendo limitaciones como la de leer. Al demiurgo no poder leer se le antojaba una de las peores cosas que podría pasarle.
«Al menos exceptuando las variadas y desagradables situaciones que puede provocar Rocavarancolia» pensó, con cierto disgusto.
—Hmm, quizás... pueda hacerte alguna criatura —su tono no era precisamente optimista: más bien se le podría definir con palabras como indeciso y titubeante. El joven sabía que entraba dentro de las capacidades otorgadas por la Luna Roja hacer algo así, pero seguía sin estar seguro del todo acerca de sus propias capacidades innatas—. Me llevará tiempo, pero... Oiga —Biblios había aparecido de repente ante él, y el demiurgo aprovechó para preguntarle acerca de lo que necesitabay, de paso, meter algo de distancia con sus palabras anteriores—. ¿Sabe dónde hay algún libro de arquitectura demiúrgica básica?
—Sección undécima, estantería pi, quinta fila, décima columna, cara estenordeste. Procurad evitar las diagonales octava y duodécima, varios entes mágicos malignamente traviesos se han escapado de un libro.
El espíritu dejó a demiurgo y evaki tan de repente como había aparecido. El joven de Serpentaria se volvió hacia la humana, todavía con un dedo que alzado para pedir al bibliotecario que fuera más lento.
—Has... ¿Has escuchado lo mismo que yo?
No eran los espíritus lo que le preocupaban, sino más bien que la ristra de instrucciones carecía por completo de sentido para él.
«Al menos exceptuando las variadas y desagradables situaciones que puede provocar Rocavarancolia» pensó, con cierto disgusto.
—Hmm, quizás... pueda hacerte alguna criatura —su tono no era precisamente optimista: más bien se le podría definir con palabras como indeciso y titubeante. El joven sabía que entraba dentro de las capacidades otorgadas por la Luna Roja hacer algo así, pero seguía sin estar seguro del todo acerca de sus propias capacidades innatas—. Me llevará tiempo, pero... Oiga —Biblios había aparecido de repente ante él, y el demiurgo aprovechó para preguntarle acerca de lo que necesitabay, de paso, meter algo de distancia con sus palabras anteriores—. ¿Sabe dónde hay algún libro de arquitectura demiúrgica básica?
—Sección undécima, estantería pi, quinta fila, décima columna, cara estenordeste. Procurad evitar las diagonales octava y duodécima, varios entes mágicos malignamente traviesos se han escapado de un libro.
El espíritu dejó a demiurgo y evaki tan de repente como había aparecido. El joven de Serpentaria se volvió hacia la humana, todavía con un dedo que alzado para pedir al bibliotecario que fuera más lento.
—Has... ¿Has escuchado lo mismo que yo?
No eran los espíritus lo que le preocupaban, sino más bien que la ristra de instrucciones carecía por completo de sentido para él.
- Evanna
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Nombre: Rua
Especie: Humana. Sueca
Habilidades: Rapidez mental, valor, astucia
Re: Biblioteca Mágica
22/08/17, 04:02 pm
Los ojos de la evaki brillaron con ilusión y altas expectativas cuando Lanor menciono sobre la criatura. ¿Podría llegar a hacer eso? No conocía mucho de los tejemanejes de la transformación de Lanor ni del alcance de esta, recordaba claramente como en la luna le dio vida a su bufanda...algo que no tenía muy claro como consiguió hacerlo.
-¡Eso seria genial!...digo me vendría realmente muy bien, algo que me lea, que pueda llevar a cualquier parte como un pequeño peluche llavero o algo así- añadió Samika rápidamente con una sonrisa de oreja a oreja, emocionada, recordando esos pequeños llaveros de peluches de la tierra que se les pulsaba y cantaba una canciocita o algo así. ¿Podría hacer algo tan tecnológico? Aunque bueno no seria cantar sería leer. Para eso necesitaría una inteligencia algo mas avanzada. ¿Se le podía poner inteligencia a un objeto? ¿Y como le daba vida exactamente?
Samika no tuvo tiempo de hacer sus preguntas en voz altas pues escucho a Lanor dirigirse al fantasma y la repentina verborrea llegada de algún punto delante de ella hizo saltar la memoria de su cerebro por unos instantes. El rostro de Samika se transformo de la emoción al mas puro desconcierto. Se rascaba una mejilla confundida cuando las palabras de Lanor mostraron su mismo grado de confusión.
-Eh...creo...me he quedado en quinta fila, todo lo demás ha sido como una centella y me lo he perdido por completo.- aseguro la evaki con una sonrisa nerviosa- Tanta magia, tanta magia...pero no existe un bendito Accio cuando uno lo necesita. Aunque vamos, capaz con lo rebeldes que son estos libres ni viniera – negó la evaki, mirando hacia el borrón de Lanor y sintiendo un poco de curiosidad por el libro que deseaba buscar y por el cual había preguntado- Podemos empezar desde lo que si me entere...siento no poder serte de ayuda en la búsqueda, pero puedo hacerte compañía. -dijo la evaki sonriendole- ¿Quieres ser arquitecto? Trabajo de sobras vas a tener, hay mas casas en mal estado en esta ciudad que en condiciones- añadió pues que ya había estado en mas de una mientras volaba y sus ultrasonidos daban una muy buena imagen general del entorno-¿Cómo harías eso?, sino es problema preguntarte...si es arquitectura demiurgica supongo es algo de darle vida a objetos inanimados, ¿no? ¿Como haces eso? digo, lo de dar vida...nunca llegue a entenderlo. ¿Duele?- pregunto interesada, pues al fin de cuentas ella le había pedido de favor algo que le ayudara a leer, mínimo saber cuanto iba a costarle todo ese esfuerzo.
-¡Eso seria genial!...digo me vendría realmente muy bien, algo que me lea, que pueda llevar a cualquier parte como un pequeño peluche llavero o algo así- añadió Samika rápidamente con una sonrisa de oreja a oreja, emocionada, recordando esos pequeños llaveros de peluches de la tierra que se les pulsaba y cantaba una canciocita o algo así. ¿Podría hacer algo tan tecnológico? Aunque bueno no seria cantar sería leer. Para eso necesitaría una inteligencia algo mas avanzada. ¿Se le podía poner inteligencia a un objeto? ¿Y como le daba vida exactamente?
Samika no tuvo tiempo de hacer sus preguntas en voz altas pues escucho a Lanor dirigirse al fantasma y la repentina verborrea llegada de algún punto delante de ella hizo saltar la memoria de su cerebro por unos instantes. El rostro de Samika se transformo de la emoción al mas puro desconcierto. Se rascaba una mejilla confundida cuando las palabras de Lanor mostraron su mismo grado de confusión.
-Eh...creo...me he quedado en quinta fila, todo lo demás ha sido como una centella y me lo he perdido por completo.- aseguro la evaki con una sonrisa nerviosa- Tanta magia, tanta magia...pero no existe un bendito Accio cuando uno lo necesita. Aunque vamos, capaz con lo rebeldes que son estos libres ni viniera – negó la evaki, mirando hacia el borrón de Lanor y sintiendo un poco de curiosidad por el libro que deseaba buscar y por el cual había preguntado- Podemos empezar desde lo que si me entere...siento no poder serte de ayuda en la búsqueda, pero puedo hacerte compañía. -dijo la evaki sonriendole- ¿Quieres ser arquitecto? Trabajo de sobras vas a tener, hay mas casas en mal estado en esta ciudad que en condiciones- añadió pues que ya había estado en mas de una mientras volaba y sus ultrasonidos daban una muy buena imagen general del entorno-¿Cómo harías eso?, sino es problema preguntarte...si es arquitectura demiurgica supongo es algo de darle vida a objetos inanimados, ¿no? ¿Como haces eso? digo, lo de dar vida...nunca llegue a entenderlo. ¿Duele?- pregunto interesada, pues al fin de cuentas ella le había pedido de favor algo que le ayudara a leer, mínimo saber cuanto iba a costarle todo ese esfuerzo.
- Zarket
Ficha de cosechado
Nombre: Rádar
Especie: Carabés
Habilidades: Resistencia, velocidad natatoria, nociones de lucha
Re: Biblioteca Mágica
22/08/17, 05:11 pm
Al demiurgo le apabullaba tanto entusiasmo de Samika. Le quedaba tiempo para alcanzar el nivel en el que podría hacer una criatura así, y aquello le preocupaba. «No» intentó convencerse. Podría volverse un gran demiurgo, claro que podría.
—Sí... Estaría bien reconstruir algo de la ciudad —confirmó a su amiga, dando un cabeceo. Comenzó a andar hacia una zona más profunda de la biblioteca: por su tamaño su grupo nunca había estado en la parte más alejada de la puerta—. Quizás sea aquella zona la sección undécima... No sé.
»Arquitectura demiúrgica es darle vida a edificios —su aclaración estaba llena de orgullo, pensando en sus propios deseos de hacer algo así con su propia futura vivienda—. Dar vida... duele, sí —su confirmación vino acompañada de una caricia en su bufanda. Su expresión era distraída, perdida en los recuerdos de sus primeros días—. El proceso es imposible de explicar. Les dejo un pedazo de mi esencia vital, simplemente. Es... no sé, para mí es algo tan intuitivo y fácil como caminar, como mover los dedos.
—Sí... Estaría bien reconstruir algo de la ciudad —confirmó a su amiga, dando un cabeceo. Comenzó a andar hacia una zona más profunda de la biblioteca: por su tamaño su grupo nunca había estado en la parte más alejada de la puerta—. Quizás sea aquella zona la sección undécima... No sé.
»Arquitectura demiúrgica es darle vida a edificios —su aclaración estaba llena de orgullo, pensando en sus propios deseos de hacer algo así con su propia futura vivienda—. Dar vida... duele, sí —su confirmación vino acompañada de una caricia en su bufanda. Su expresión era distraída, perdida en los recuerdos de sus primeros días—. El proceso es imposible de explicar. Les dejo un pedazo de mi esencia vital, simplemente. Es... no sé, para mí es algo tan intuitivo y fácil como caminar, como mover los dedos.
- Evanna
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Nombre: Rua
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Habilidades: Rapidez mental, valor, astucia
Re: Biblioteca Mágica
02/09/17, 05:44 pm
Samika sonrió, pues aunque el demiurgo no resultaba tan efusivo como ella, realmente Lanor nunca había sido muy efusivo antes tampoco, se notaba por su voz que se sentía orgullosos por la labor que pensaba hacer.
-Vas a tener mucho donde escoger para hacer tu magia, incluso quien sabe, puede que en un futuro hasta nos ayudes con nuestras propias casa -rió la evaki que aunque no tenia problemas alguno viviendo en la sede desde hacia relativamente pocos tiempo, se conocía. Y tal vez no fuese en un día, una semana o en meses, pero en un futuro escogería vivir por su cuenta. La independencia era algo que siempre había buscado. Pero para eso quedaba aun mucho tiempo y no sabia que le deparaba el futuro y no pensaba ponerse a intentar averiguarlo. Lo que tuviese que pasara, que pasara, que ya se encargaría ella de lidiar con lo que fuera, como siempre había hecho.
La figura borrosa de Lanor se movía frente a ella, mientras recorrían la biblioteca hasta el supuesto lugar donde estaba el libro que el demiurgo buscaba, con toda su atención puesta en las respuesta a su pregunta. La evaki no pudo evitar arrugar la nariz al escucharle decir que dar vida le dolía y el ceño se acentuó aun mas cuando añadió que le daba una parte de si mismo a sus creaciones. Samika recordó su petición egoísta de hacerle un muñeco parlante.
-Lo siento, no lo sabia- dijo la evaki mordiéndose el labio inferior- Incluso si dices es intuitivo, me parece feo que yo te pida hacer algo por mi y tu tengas que dar una parte tuya...que supongo sera tiempo de vida, esencia, un trozo de tu alma o algo así ¿no? No se, me parece injusto que tu tengas que romperte...para que yo tenga lo que quiero- añadió la Samika dudosa, no es que quisiera desmerecer el trabajo de Lanor, ese era su don, su poder, como el suyo era el de eliminar magia. No es como sino pretendiera pagarle, pero dudaba que el dinero tuviese el mismo valor que alguna de las cosas que había mencionado.
-No se si te resultar insultante lo que digo pero, ¿seria posible trasmitir mi...lo que sea que tu trasmitas cuando das vida, a lo que creases para mi? - pregunto Samika, clavando su ojos amarillos en el demiurgo muy a pesar de no verlo con exactitud- Pienso que seria lo justo- añadió la evaki que aunque no sabía aun del todo como era el proceso y dudaba Lanor supiera explicarlo exactamente si decía que era algo medio intuitivo- Porque dudo que eso sea inagotable ¿cierto? Solo conozco a otro demiurgo aparte de ti, aunque claro eso lo averigüe hace poco cuando intentaba encontrarle para darle un buen puñetazo -añadió Samika sonriendo levemente como si nada al hablar de Doce.
-Vas a tener mucho donde escoger para hacer tu magia, incluso quien sabe, puede que en un futuro hasta nos ayudes con nuestras propias casa -rió la evaki que aunque no tenia problemas alguno viviendo en la sede desde hacia relativamente pocos tiempo, se conocía. Y tal vez no fuese en un día, una semana o en meses, pero en un futuro escogería vivir por su cuenta. La independencia era algo que siempre había buscado. Pero para eso quedaba aun mucho tiempo y no sabia que le deparaba el futuro y no pensaba ponerse a intentar averiguarlo. Lo que tuviese que pasara, que pasara, que ya se encargaría ella de lidiar con lo que fuera, como siempre había hecho.
La figura borrosa de Lanor se movía frente a ella, mientras recorrían la biblioteca hasta el supuesto lugar donde estaba el libro que el demiurgo buscaba, con toda su atención puesta en las respuesta a su pregunta. La evaki no pudo evitar arrugar la nariz al escucharle decir que dar vida le dolía y el ceño se acentuó aun mas cuando añadió que le daba una parte de si mismo a sus creaciones. Samika recordó su petición egoísta de hacerle un muñeco parlante.
-Lo siento, no lo sabia- dijo la evaki mordiéndose el labio inferior- Incluso si dices es intuitivo, me parece feo que yo te pida hacer algo por mi y tu tengas que dar una parte tuya...que supongo sera tiempo de vida, esencia, un trozo de tu alma o algo así ¿no? No se, me parece injusto que tu tengas que romperte...para que yo tenga lo que quiero- añadió la Samika dudosa, no es que quisiera desmerecer el trabajo de Lanor, ese era su don, su poder, como el suyo era el de eliminar magia. No es como sino pretendiera pagarle, pero dudaba que el dinero tuviese el mismo valor que alguna de las cosas que había mencionado.
-No se si te resultar insultante lo que digo pero, ¿seria posible trasmitir mi...lo que sea que tu trasmitas cuando das vida, a lo que creases para mi? - pregunto Samika, clavando su ojos amarillos en el demiurgo muy a pesar de no verlo con exactitud- Pienso que seria lo justo- añadió la evaki que aunque no sabía aun del todo como era el proceso y dudaba Lanor supiera explicarlo exactamente si decía que era algo medio intuitivo- Porque dudo que eso sea inagotable ¿cierto? Solo conozco a otro demiurgo aparte de ti, aunque claro eso lo averigüe hace poco cuando intentaba encontrarle para darle un buen puñetazo -añadió Samika sonriendo levemente como si nada al hablar de Doce.
- Zarket
Ficha de cosechado
Nombre: Rádar
Especie: Carabés
Habilidades: Resistencia, velocidad natatoria, nociones de lucha
Personajes :
- Spoiler:
- ●Bastel (antes Bran/Branniel): Trasgo de Ewa sexto sacerdote de la Secta, sádico, aficionado a matanzas y luchador en los bajos fondos. No tocarle los cojoncios, que muerde.
●Lanor Gris: demiurgo procedente de Carabás. Tímido, llorica y buena gente.
●Rádar (o Rad): astrario carabés tsundere hacia la magia, mandón, brusco y estricto. Fashion victim. Reloj andante.
●Galiard syl: mago rabiosamente rocavarancolés, despiadado antihéroe brutalmente pragmático y compasivo antivillano bienintencionado.
Armas :- Spoiler:
- ●Bastel (antes Bran): magia, garras, dientes y una espada de longitud media a larga. O lo que haga falta.
●Lanor Gris: magia y sus criaturas.
●Rádar (o Rad): espada de longitud media. Sus habilidades de desviación de hechizos.
●Galiard Syl: magia y, si hace falta, una espada de longitud corta a media.
Status : Jinete del apocalipsis (¡ahora con extra de torpeza social!)
Humor : En muerte cerebral.
Re: Biblioteca Mágica
02/09/17, 06:40 pm
Mientras paseaban por aquella zona el demiurgo no dejaba de echar pestes mentales. «¡¿Pero quién ha catalogado esto?! Menudo mal trabajo ha hecho». El joven no había visto nunca una biblioteca de papel antes de aquella, claro, pero estaba seguro de que había alguna forma mejor de ordenar todos aquellos libros.
Las palabras de Samika le conmovieron con una profundidad que le recordó a los vaivenes emocionales que había sentido con la Luna Roja en el cielo. Lanor negó con la cabeza, soltando una pequeña risa al oír lo último.
—No puedes darla, eso es algo que solo podemos hacer los demiurgos —su aclaración tenía un tono próximo al de una disculpa afectuosa, queriendo evitar la más mínima posibilidad de que su amiga se sintiera mal al saber aquello—. Y no te preocupes, en serio. Los demiurgos recuperamos nuestra esencia con el paso del tiempo. Solo corremos el riesgo de morir si damos vida a demasiadas criaturas con mucha rapidez.
Sus palabras poseían, quizás, un matiz de emotividad más intenso de lo necesario. Era algo provocado por el lugar donde ambos habían ido a parar, una sección de la biblioteca que, Lanor Gris supo desde el primer momento, nunca antes había pisado.
Había vida a su alrededor, en muchos libros, y quizás hasta en las estanterías. Notaba aquel pulso de pergaminos y papel, aquel crujir que sustituía a los corazones, el olor de tinta marchita y alientos antiguos, de polvo y saberes largo tiempo contenidos. Unos sonidos, olores y sensaciones que solo podían percibir los demiurgos, pero que existían por sí mismos.
Las palabras de Samika le conmovieron con una profundidad que le recordó a los vaivenes emocionales que había sentido con la Luna Roja en el cielo. Lanor negó con la cabeza, soltando una pequeña risa al oír lo último.
—No puedes darla, eso es algo que solo podemos hacer los demiurgos —su aclaración tenía un tono próximo al de una disculpa afectuosa, queriendo evitar la más mínima posibilidad de que su amiga se sintiera mal al saber aquello—. Y no te preocupes, en serio. Los demiurgos recuperamos nuestra esencia con el paso del tiempo. Solo corremos el riesgo de morir si damos vida a demasiadas criaturas con mucha rapidez.
Sus palabras poseían, quizás, un matiz de emotividad más intenso de lo necesario. Era algo provocado por el lugar donde ambos habían ido a parar, una sección de la biblioteca que, Lanor Gris supo desde el primer momento, nunca antes había pisado.
Había vida a su alrededor, en muchos libros, y quizás hasta en las estanterías. Notaba aquel pulso de pergaminos y papel, aquel crujir que sustituía a los corazones, el olor de tinta marchita y alientos antiguos, de polvo y saberes largo tiempo contenidos. Unos sonidos, olores y sensaciones que solo podían percibir los demiurgos, pero que existían por sí mismos.
- Evanna
Ficha de cosechado
Nombre: Rua
Especie: Humana. Sueca
Habilidades: Rapidez mental, valor, astuciaPersonajes :- DL/Dédalo: Cambiante, foner
- Dhelian/Evelhan Kaw: Brugho, daeliciano
- Samika: Evaki, humana
- Pelusa (Pam): Spriggan, Mona del queso.
- Rua: Unicornio Humana, Sueca. 1,76 sin plataformas.
Armas :- DL/Dédalo: Espada, magia y sus cambios
- Dhelian/Evelhan Kaw: Magia y estirges
- Samika: Puñetazos y patadas
- Pelusa (Pam): Cuchillo pelapapas y una honda con piedras
- DL/Dédalo: Cambiante, foner
Re: Biblioteca Mágica
08/09/17, 03:24 pm
La evaki arrugo un poco la nariz cuando este le explico que no podría ayudarle con lo de darle vida a su peluche parlachin, pues seguía sin agradarle mucho a la idea de endonarle todo el trabajo. << Si al menos pudiera, no se, coser >> pensó Samika resignada, que al menos en ese asunto, estaba con las manos atadas. Sería mucho mas sencillo pedir que alguien curasen sus ojos, definitivamente le quitaría problemas a los demás, pero incluso si había valorado la posibilidad, no le valía tanto la pena.
- Bien, bien no puedo hacer nada entonces, es un poco frustrante -admitió la evaki rascándose la nuca pensativa, viendo, o mas sintiendo la presencia de Lanor en aquel pasillo de libros que para ella solo significaba otra zona mas fuera de su alcance visual. Las emociones que Lanor transmitía con sus palabras era fuertes, como si brotara de algún lugar que hasta antes de la luna aprecia permanecer en reposo y ahora, por fin sus puertas habían sido abierta,s brotando todo de golpe. Lanor no había sido nunca excesivamente expresivo cuando eran cosechados, no emotivamente hablando claro, no podía juzgar sus expresiones faciales.
-Procura entonces no volverte muy loco dándole vida a cosas, sueles emocionarte demasiado cuando hablamos de magia, que supongo tu transformación te pide dar vida con la misma ansias que la mía me pide usar mis alas - rió suavemente Samika, tocando distraidamente el borde de madera que separaba una fila de libros de la de abajo- ¿Esta aquí lo que buscabas?- pregunto la evaki sin girarse a ver la figura borrosa de su compañero- ¿Porque decidiste este campo de oficio, ya que estamos? ¿Pensaste en esto cuando eras cosechado aun?- pregunto la evaki interesad,a pues ciertamente no sabía que imaginaba este que le ocurriría-¿Esperabas esto? Realmente no me he parado a preguntarle a los demás si su situación actual era lo que esperaban o mas bien andan decepcionados - continuo la evaki deslizando sus dedos por la madera, sin tocar los libros, que al no saber su contenido y consciente que había libros que podían morderte o cosas similares, prefería ahorrarse el mal rato.
-Hey, Lanor, ¿como nos clasificarías ahora según los estandares de tu anterior mundo?-pregunto la Evaki mirando en su dirección de forma algo traviesa y curiosa, otra cosa que había descubierto ocurría en Carabas hacía no mucho y que despertó un poco su interés.
- Bien, bien no puedo hacer nada entonces, es un poco frustrante -admitió la evaki rascándose la nuca pensativa, viendo, o mas sintiendo la presencia de Lanor en aquel pasillo de libros que para ella solo significaba otra zona mas fuera de su alcance visual. Las emociones que Lanor transmitía con sus palabras era fuertes, como si brotara de algún lugar que hasta antes de la luna aprecia permanecer en reposo y ahora, por fin sus puertas habían sido abierta,s brotando todo de golpe. Lanor no había sido nunca excesivamente expresivo cuando eran cosechados, no emotivamente hablando claro, no podía juzgar sus expresiones faciales.
-Procura entonces no volverte muy loco dándole vida a cosas, sueles emocionarte demasiado cuando hablamos de magia, que supongo tu transformación te pide dar vida con la misma ansias que la mía me pide usar mis alas - rió suavemente Samika, tocando distraidamente el borde de madera que separaba una fila de libros de la de abajo- ¿Esta aquí lo que buscabas?- pregunto la evaki sin girarse a ver la figura borrosa de su compañero- ¿Porque decidiste este campo de oficio, ya que estamos? ¿Pensaste en esto cuando eras cosechado aun?- pregunto la evaki interesad,a pues ciertamente no sabía que imaginaba este que le ocurriría-¿Esperabas esto? Realmente no me he parado a preguntarle a los demás si su situación actual era lo que esperaban o mas bien andan decepcionados - continuo la evaki deslizando sus dedos por la madera, sin tocar los libros, que al no saber su contenido y consciente que había libros que podían morderte o cosas similares, prefería ahorrarse el mal rato.
-Hey, Lanor, ¿como nos clasificarías ahora según los estandares de tu anterior mundo?-pregunto la Evaki mirando en su dirección de forma algo traviesa y curiosa, otra cosa que había descubierto ocurría en Carabas hacía no mucho y que despertó un poco su interés.
Invitado, sueñas con un mundo perfecto...
...tu paraíso personal...
...donde lloras tu imperfecta realidad
- Spoiler:
- Rua habla = #9932CC
Rua piensa = #CD5C5C
Dédalo piensa = #FFFAFA
- Zarket
Ficha de cosechado
Nombre: Rádar
Especie: Carabés
Habilidades: Resistencia, velocidad natatoria, nociones de lucha
Personajes :
- Spoiler:
- ●Bastel (antes Bran/Branniel): Trasgo de Ewa sexto sacerdote de la Secta, sádico, aficionado a matanzas y luchador en los bajos fondos. No tocarle los cojoncios, que muerde.
●Lanor Gris: demiurgo procedente de Carabás. Tímido, llorica y buena gente.
●Rádar (o Rad): astrario carabés tsundere hacia la magia, mandón, brusco y estricto. Fashion victim. Reloj andante.
●Galiard syl: mago rabiosamente rocavarancolés, despiadado antihéroe brutalmente pragmático y compasivo antivillano bienintencionado.
Armas :- Spoiler:
- ●Bastel (antes Bran): magia, garras, dientes y una espada de longitud media a larga. O lo que haga falta.
●Lanor Gris: magia y sus criaturas.
●Rádar (o Rad): espada de longitud media. Sus habilidades de desviación de hechizos.
●Galiard Syl: magia y, si hace falta, una espada de longitud corta a media.
Status : Jinete del apocalipsis (¡ahora con extra de torpeza social!)
Humor : En muerte cerebral.
Re: Biblioteca Mágica
08/09/17, 05:58 pm
Poco a poco, conforme miraba estantería por estantería buscando algún libro que le ayudara, Lanor se adentraba con Samika en la parte más profunda del lugar. Conforme esto pasaba comenzó a llegarles también el aroma a plata vieja. Era algo más o menos presente en aquella biblioteca, de lo cual el demiurgo no se había extrañado nunca. Allí, sin embargo, la intensidad de la magia era mayor y, por tanto, mayor era también el olor que desprendía.
—De momento no lo he encontrado —confesó. El consejo anterior de la evaki era algo que había agradecido profundamente, pero lo había dejado demaso avergonzado como para decirlo en voz alta—. Porque... alguien tiene que hacerlo. No sabía qué hacer, y entonces vi en uno de estos libros un grabado de la antigua Rocavarancolia —suspiró, todavía desbordado con aquellas sensaciones. Él no solo olía la plata vieja, sino el olor de vida apergaminada, de papiros húmedos y papeles secos. Y era especialmente frustrante porque no estaba seguro de dónde venían: ¿el libro con vida era aquel o el que estaba tres filas más allá? ¿Lo que sentía venía de los libros en sí, de la encuadernación, de las páginas o de otra cosa? ¿Esa vida era producto de un demiurgo o un efecto de la magia contenida en ellos, o en el lugar?—. Y bueno, me encontré con un fantasma. Era el de un piromante. Un brujo del fuego. Había querido ser arquitecto, hace mucho tiempo, antes de la guerra. Cuando me vio contemplando el grabado con tanta atención me sugirió esta profesión —inconscientemente frunció el ceño, preguntándose, no por primera vez, que maldita tara había llevado a los rocavarancoleses a aceptar ruinas como hogar—. Alguien tiene que hacerlo. Y aunque aquí hay... tanto... que sigo viendo como una aberración... También me gustaría contribuir a la grandeza de Rocavarancolia —en ese momento recordó a Tesón, recordó a Armonía, y a Emmit, y a Arik. Los ojos del demiurgo se empañaron y miraron alrededor, todavía con dudas. «¿Realmente un lugar que se levanta sobre pilas de niños muertos merece alguna clase de grandeza?».
La siguiente pregunta de su compañera le provocó una sonrisa. Una todavía triste, en especial al pensar en qué podrían haber sido aquellos compañeros.
—No, me esperaba algo peor, muchísimo peor, ¿recuerdas? Y al final tuve bastante suerte —que Arik, desde luego. Y mucha más que Ayne y que Eara. Lanor se pregunto quién de los dos había corrido la peor suerte con la Luna Roja en lo alto.
El joven había fruncido el ceño mientras hablaba. Había algo extraño en la vida de los libros que habitaban en el pasillo en el que acababan de entrar. Extraño y casi perturbador. Era una especie de hálito múltiple e inquietante, como si aquellos no fueran libros sino soles fantasmas que giraban uno alrededor del otro. Era algo que los separaba mucho de las obras vivas de Serpentaria, pero, a pesar de ello, la sensación también era idéntica a la que sentía en lo alto de la torre de hechicería.
Había dado un paso atrás, distraído, cuando le llegó la pregunta de la humana. Por un momento la miró sin entender, pero entonces comprendió qué quería. Su rictos varió entonces al de una incomodidad casi angustiosa.
—¡No, no, no! ¡No podría, nunca podría! —sus palabras estaban acompañadas de amplios movimientos en negación, tanto de los brazos como de la cabeza. Sus palabras se tiñeron de agradecimiento y de auténtico aprecio, con una expresión de gratitud pintada en su rostro y unos labios temblorosos ante lo que sentía por sus amigos—. Vosotros... valéis demasiado... No cabéis en los rankings carabeses. Como mucho compartiríais el primer puesto.
Tras el arrebato emocional fueron sus mejillas las que se entintaron del tono oscuro de su sangre. Lanor Gris apartó la mirada, preguntándose ahora qué pensaría su amiga.
—De momento no lo he encontrado —confesó. El consejo anterior de la evaki era algo que había agradecido profundamente, pero lo había dejado demaso avergonzado como para decirlo en voz alta—. Porque... alguien tiene que hacerlo. No sabía qué hacer, y entonces vi en uno de estos libros un grabado de la antigua Rocavarancolia —suspiró, todavía desbordado con aquellas sensaciones. Él no solo olía la plata vieja, sino el olor de vida apergaminada, de papiros húmedos y papeles secos. Y era especialmente frustrante porque no estaba seguro de dónde venían: ¿el libro con vida era aquel o el que estaba tres filas más allá? ¿Lo que sentía venía de los libros en sí, de la encuadernación, de las páginas o de otra cosa? ¿Esa vida era producto de un demiurgo o un efecto de la magia contenida en ellos, o en el lugar?—. Y bueno, me encontré con un fantasma. Era el de un piromante. Un brujo del fuego. Había querido ser arquitecto, hace mucho tiempo, antes de la guerra. Cuando me vio contemplando el grabado con tanta atención me sugirió esta profesión —inconscientemente frunció el ceño, preguntándose, no por primera vez, que maldita tara había llevado a los rocavarancoleses a aceptar ruinas como hogar—. Alguien tiene que hacerlo. Y aunque aquí hay... tanto... que sigo viendo como una aberración... También me gustaría contribuir a la grandeza de Rocavarancolia —en ese momento recordó a Tesón, recordó a Armonía, y a Emmit, y a Arik. Los ojos del demiurgo se empañaron y miraron alrededor, todavía con dudas. «¿Realmente un lugar que se levanta sobre pilas de niños muertos merece alguna clase de grandeza?».
La siguiente pregunta de su compañera le provocó una sonrisa. Una todavía triste, en especial al pensar en qué podrían haber sido aquellos compañeros.
—No, me esperaba algo peor, muchísimo peor, ¿recuerdas? Y al final tuve bastante suerte —que Arik, desde luego. Y mucha más que Ayne y que Eara. Lanor se pregunto quién de los dos había corrido la peor suerte con la Luna Roja en lo alto.
El joven había fruncido el ceño mientras hablaba. Había algo extraño en la vida de los libros que habitaban en el pasillo en el que acababan de entrar. Extraño y casi perturbador. Era una especie de hálito múltiple e inquietante, como si aquellos no fueran libros sino soles fantasmas que giraban uno alrededor del otro. Era algo que los separaba mucho de las obras vivas de Serpentaria, pero, a pesar de ello, la sensación también era idéntica a la que sentía en lo alto de la torre de hechicería.
Había dado un paso atrás, distraído, cuando le llegó la pregunta de la humana. Por un momento la miró sin entender, pero entonces comprendió qué quería. Su rictos varió entonces al de una incomodidad casi angustiosa.
—¡No, no, no! ¡No podría, nunca podría! —sus palabras estaban acompañadas de amplios movimientos en negación, tanto de los brazos como de la cabeza. Sus palabras se tiñeron de agradecimiento y de auténtico aprecio, con una expresión de gratitud pintada en su rostro y unos labios temblorosos ante lo que sentía por sus amigos—. Vosotros... valéis demasiado... No cabéis en los rankings carabeses. Como mucho compartiríais el primer puesto.
Tras el arrebato emocional fueron sus mejillas las que se entintaron del tono oscuro de su sangre. Lanor Gris apartó la mirada, preguntándose ahora qué pensaría su amiga.
- Evanna
Ficha de cosechado
Nombre: Rua
Especie: Humana. Sueca
Habilidades: Rapidez mental, valor, astuciaPersonajes :- DL/Dédalo: Cambiante, foner
- Dhelian/Evelhan Kaw: Brugho, daeliciano
- Samika: Evaki, humana
- Pelusa (Pam): Spriggan, Mona del queso.
- Rua: Unicornio Humana, Sueca. 1,76 sin plataformas.
Armas :- DL/Dédalo: Espada, magia y sus cambios
- Dhelian/Evelhan Kaw: Magia y estirges
- Samika: Puñetazos y patadas
- Pelusa (Pam): Cuchillo pelapapas y una honda con piedras
- DL/Dédalo: Cambiante, foner
Re: Biblioteca Mágica
08/09/17, 09:26 pm
Samika no era capaz de saber que clase de imagen habría visto el demiurgo para que se fascinase tanto por la majestuosidad de la ciudad años atrás. Ni siquiera podía imaginárselo. Su ecolocalizacion le daba formas a las cosas, sus ojos de cerca le daban colores mezclados, pero hasta ahí llegaba su capacidad de percepción. La parte artística no la tenia muy desarrollada por motivos evidentes.
Escucho atentamente pensativa, una singular forma de encontrar el oficio de tu vida, pero si era algo que le gustaba no le veía mucho problema.
-Darle algo de vida y color a la ciudad, no parece mala idea. - aseguro pues ella había visto la ciudad de alguna forma desde el aire gracias sus nuevas capacidades y la imagen recibida daba autentica pena y eso que ella solo era capaz de percibir las fachadas externas- Incluso sino poder ver los colores de aquello que construyas, si podre ver sus formas y estructura, así que estaré al pendiente de tus avances, aunque lleven tiempo...total, esta es mi casa ahora - añadió la evaki entretenida. No es como si viera a Rocavarancolia como un hogar idóneo ni nada similar, pero era plenamente consciente que no podría volver a su mundo, no mas que un día al año, como es agente que solo ve a su familia por navidad. No sabía cuanto tiempo viviría, si su tiempo de vida superaría al de sus hermanos, pues seguramente si lo haría al de sus padres, si algo no la mataba antes, claro. << Aun así, aunque sea un día al año lo visitare y veré como pasan los años para ellos, incluso sino saben quien soy >> seria algo triste, desde luego, pero les debía demasiado como para simplemente olvidarles como si jamas hubiesen existido, incluso si ellos se vieron forzados a hacerlo con ella.
-Neh, Lanor, hazte un buen arquitecto mágico, tarde 3 años, 5 o 10...para que de verdad sienta este lugar como un hogar – comento la evaki inmersa en sus pensamientos, de forma risueña, riéndose al percibir su reacción final a su comentario anterior. ¿Incapaz de catalogarlos en una jerarquía? Incluso sin poder verlo con exactitud, se notaba su nerviosismo. Samika se mordió el labio inferior aguantándose una risa, aunque no el impulso que le nació desde lo mas profundo ante las avergonzadas palabras de su compañero.
-¡Dios, eres demasiado adorable para soportarlo, lo siento! - Samika podía ser la persona mas dura existente, pero se ablandaba como la gelatina ante esas cosas, por lo que con una enorme sonrisa, abrazo con fuerza a Lanor, teniéndolo lo bastante cerca para percibir el rubor en su rostro, incluso si este era algo mas alto que ella. No aguanto y se termino riendo acercando una de sus manos a la mejilla de este- La ultima vez que te vi sonrojado, y creo que la única que te vi, tu piel aun tenía ese singular tono blanco algo amarillento...es la primera vez que veo tu nuevo tono de piel. Se te nota mas cuando te sonrojas -bromeo con cierta malicia, resultandole en cierta forma satisfactoria su respuesta. No le hubiese molestado que los metiera en una jerarquía, sinceramente no le habría importado, pero no haciéndolo también era capaz de notar la estima que el demiurgo les tenía. Las emociones debían estar haciendo un caos en el bastante singular.
-Gracias, por pensar todo eso –murmuro con al enorme sonrisa aun en su rostro- Perdimos a muchos amigos en este tiempo, pese a que no lo parezca no me olvido -añadió con la sonrisa titubeando durante unos momentos- La cosa pudo ser mucho peor, sin duda alguna, muchísimo peor...ha sido una pregunta tonta realmente, pues tampoco yo seria capaz de daros mas valor a uno que a otro. Probablemente arriesgaría mi vida por igual por cualquiera de vosotros...y sabiendo eso, me resulta curioso como puede unir a la gente pasar un año de penurias...o como puede conseguir destrozarlos -añadió recordando los momentos donde el ambiente se volvió tenso y difícil, cuando aun vivía Tesón, e incluso después. Realmente el tipo de convivencia marcaba diferencias, no era tonta, iban a convertirse en monstruos...incluso sino todos eran humanos originalmente, el rencor podía despertar en los peores momento si se lleva acumulando durante meses...por suerte ellos no tuvieron ese problema. Lo de Lemus no fue su culpa.
Escucho atentamente pensativa, una singular forma de encontrar el oficio de tu vida, pero si era algo que le gustaba no le veía mucho problema.
-Darle algo de vida y color a la ciudad, no parece mala idea. - aseguro pues ella había visto la ciudad de alguna forma desde el aire gracias sus nuevas capacidades y la imagen recibida daba autentica pena y eso que ella solo era capaz de percibir las fachadas externas- Incluso sino poder ver los colores de aquello que construyas, si podre ver sus formas y estructura, así que estaré al pendiente de tus avances, aunque lleven tiempo...total, esta es mi casa ahora - añadió la evaki entretenida. No es como si viera a Rocavarancolia como un hogar idóneo ni nada similar, pero era plenamente consciente que no podría volver a su mundo, no mas que un día al año, como es agente que solo ve a su familia por navidad. No sabía cuanto tiempo viviría, si su tiempo de vida superaría al de sus hermanos, pues seguramente si lo haría al de sus padres, si algo no la mataba antes, claro. << Aun así, aunque sea un día al año lo visitare y veré como pasan los años para ellos, incluso sino saben quien soy >> seria algo triste, desde luego, pero les debía demasiado como para simplemente olvidarles como si jamas hubiesen existido, incluso si ellos se vieron forzados a hacerlo con ella.
-Neh, Lanor, hazte un buen arquitecto mágico, tarde 3 años, 5 o 10...para que de verdad sienta este lugar como un hogar – comento la evaki inmersa en sus pensamientos, de forma risueña, riéndose al percibir su reacción final a su comentario anterior. ¿Incapaz de catalogarlos en una jerarquía? Incluso sin poder verlo con exactitud, se notaba su nerviosismo. Samika se mordió el labio inferior aguantándose una risa, aunque no el impulso que le nació desde lo mas profundo ante las avergonzadas palabras de su compañero.
-¡Dios, eres demasiado adorable para soportarlo, lo siento! - Samika podía ser la persona mas dura existente, pero se ablandaba como la gelatina ante esas cosas, por lo que con una enorme sonrisa, abrazo con fuerza a Lanor, teniéndolo lo bastante cerca para percibir el rubor en su rostro, incluso si este era algo mas alto que ella. No aguanto y se termino riendo acercando una de sus manos a la mejilla de este- La ultima vez que te vi sonrojado, y creo que la única que te vi, tu piel aun tenía ese singular tono blanco algo amarillento...es la primera vez que veo tu nuevo tono de piel. Se te nota mas cuando te sonrojas -bromeo con cierta malicia, resultandole en cierta forma satisfactoria su respuesta. No le hubiese molestado que los metiera en una jerarquía, sinceramente no le habría importado, pero no haciéndolo también era capaz de notar la estima que el demiurgo les tenía. Las emociones debían estar haciendo un caos en el bastante singular.
-Gracias, por pensar todo eso –murmuro con al enorme sonrisa aun en su rostro- Perdimos a muchos amigos en este tiempo, pese a que no lo parezca no me olvido -añadió con la sonrisa titubeando durante unos momentos- La cosa pudo ser mucho peor, sin duda alguna, muchísimo peor...ha sido una pregunta tonta realmente, pues tampoco yo seria capaz de daros mas valor a uno que a otro. Probablemente arriesgaría mi vida por igual por cualquiera de vosotros...y sabiendo eso, me resulta curioso como puede unir a la gente pasar un año de penurias...o como puede conseguir destrozarlos -añadió recordando los momentos donde el ambiente se volvió tenso y difícil, cuando aun vivía Tesón, e incluso después. Realmente el tipo de convivencia marcaba diferencias, no era tonta, iban a convertirse en monstruos...incluso sino todos eran humanos originalmente, el rencor podía despertar en los peores momento si se lleva acumulando durante meses...por suerte ellos no tuvieron ese problema. Lo de Lemus no fue su culpa.
Invitado, sueñas con un mundo perfecto...
...tu paraíso personal...
...donde lloras tu imperfecta realidad
- Spoiler:
- Rua habla = #9932CC
Rua piensa = #CD5C5C
Dédalo piensa = #FFFAFA
- Zarket
Ficha de cosechado
Nombre: Rádar
Especie: Carabés
Habilidades: Resistencia, velocidad natatoria, nociones de lucha
Personajes :
- Spoiler:
- ●Bastel (antes Bran/Branniel): Trasgo de Ewa sexto sacerdote de la Secta, sádico, aficionado a matanzas y luchador en los bajos fondos. No tocarle los cojoncios, que muerde.
●Lanor Gris: demiurgo procedente de Carabás. Tímido, llorica y buena gente.
●Rádar (o Rad): astrario carabés tsundere hacia la magia, mandón, brusco y estricto. Fashion victim. Reloj andante.
●Galiard syl: mago rabiosamente rocavarancolés, despiadado antihéroe brutalmente pragmático y compasivo antivillano bienintencionado.
Armas :- Spoiler:
- ●Bastel (antes Bran): magia, garras, dientes y una espada de longitud media a larga. O lo que haga falta.
●Lanor Gris: magia y sus criaturas.
●Rádar (o Rad): espada de longitud media. Sus habilidades de desviación de hechizos.
●Galiard Syl: magia y, si hace falta, una espada de longitud corta a media.
Status : Jinete del apocalipsis (¡ahora con extra de torpeza social!)
Humor : En muerte cerebral.
Re: Biblioteca Mágica
08/09/17, 10:08 pm
Sí, Samika tenía razón. Rocavarancolia era ahora su casa, la casa de todos ellos. Y, quizás, a pesar de todas sus aberraciones, a pesar de todo lo que habían sufrido, podrían estar allí de forma relativamente confortable. A pesar de todo era posible que la ciudad sí se mereciera aquello, y que el propio Lanor se mereciera dárselo. Sonrió, levemente, abrumado por la confianza de su amiga. Como mínimo podía intentarlo, al menos por ellos.
El abrazo lo dejó casi congelado en su postura, sin saber bien cómo reaccionar. La torpeza impregnó a sus brazos conforme los alzaba, dubitativo. Las alas de la evaki de ayudaban mucho, pero el joven, aun así, se lo devolvió. No era un abrazo fuerte, pero sí mostraba el profundo aprecio que Lanor Gris había ganado hacia aquellos con los que había convivido durante siete meses. Aquellos con los que había esperado y sufrido a la Luna Roja.
—No solo por las penurias. Nos hemos enfrentado juntos a Rocavarancolia, juntos sufrimos la Luna Roja, y juntos nos hemos hecho... o estamos haciendo, nuestro hueco en la ciudad —el corazón del demiurgo se llenaba de gratitud y calidez por cómo el grupo había permanecido con lazos estrechos siempre, incluso cuando Tesón y Armonía estaban con ellos—. Estaría bien que, cuando llegue el momento, todos intentemos ser vecinos. Vivir en la misma calle.
Había sido un impulso el que le había llevado a decir aquello, y a pesar de la vergüenza no se arrepentía. A aquel joven dador de vida no se le ocurría nadie mejor con quien compartir vecindario que aquellos niños que habían crecido junto a él.
El abrazo lo dejó casi congelado en su postura, sin saber bien cómo reaccionar. La torpeza impregnó a sus brazos conforme los alzaba, dubitativo. Las alas de la evaki de ayudaban mucho, pero el joven, aun así, se lo devolvió. No era un abrazo fuerte, pero sí mostraba el profundo aprecio que Lanor Gris había ganado hacia aquellos con los que había convivido durante siete meses. Aquellos con los que había esperado y sufrido a la Luna Roja.
—No solo por las penurias. Nos hemos enfrentado juntos a Rocavarancolia, juntos sufrimos la Luna Roja, y juntos nos hemos hecho... o estamos haciendo, nuestro hueco en la ciudad —el corazón del demiurgo se llenaba de gratitud y calidez por cómo el grupo había permanecido con lazos estrechos siempre, incluso cuando Tesón y Armonía estaban con ellos—. Estaría bien que, cuando llegue el momento, todos intentemos ser vecinos. Vivir en la misma calle.
Había sido un impulso el que le había llevado a decir aquello, y a pesar de la vergüenza no se arrepentía. A aquel joven dador de vida no se le ocurría nadie mejor con quien compartir vecindario que aquellos niños que habían crecido junto a él.
- Evanna
Ficha de cosechado
Nombre: Rua
Especie: Humana. Sueca
Habilidades: Rapidez mental, valor, astuciaPersonajes :- DL/Dédalo: Cambiante, foner
- Dhelian/Evelhan Kaw: Brugho, daeliciano
- Samika: Evaki, humana
- Pelusa (Pam): Spriggan, Mona del queso.
- Rua: Unicornio Humana, Sueca. 1,76 sin plataformas.
Armas :- DL/Dédalo: Espada, magia y sus cambios
- Dhelian/Evelhan Kaw: Magia y estirges
- Samika: Puñetazos y patadas
- Pelusa (Pam): Cuchillo pelapapas y una honda con piedras
- DL/Dédalo: Cambiante, foner
Re: Biblioteca Mágica
12/09/17, 06:25 pm
La evaki sonrió al sentir que el demiurgo correspondía a su abrazo, consciente de que este siempre había sido bastante tímido en este aspecto, contrario a ella de naturaleza mas efusiva. Lanor era delgado y definitivamente debería ganar algo de peso o musculatura, porque era de apariencia ligeramente mas alta que la suya, pero mas desgarbado que otra cosa. A su lado podría quebrarse como un palillo con simplemente apretar un poco, aunque seguramente esa era una característica que compartía con mucha otra gente de la ciudad teniendo en cuenta la fuerza de la evaki.
-Mm resulta un poco difícil de creer, que sobreviviéramos y hayamos cambiado, unos mas que otros- rió mirando a este señalando con entretenido su piel grisácea y a su vez a si misma- Por suerte incluso si algunos cambiamos mas exteriormente y otros mas por dentro, sigue existiendo en nosotros buena parte de lo que fuimos...espero que con el tiempo la ciudad no nos cambie enteramente convirtiéndonos en meros desconocidos, incluso si algunos dejaron su nombre atrás- añadió mirando a Lanor atentamente, no juzgandole sino mas bien como una especie de pedido mudo. La gente cambiaba en Rocavarancolia, en la Tierra y en cualquier parte por el simple hecho de que la madurez afectaba a todos en algún momento, la circunstancias y el tiempo no transcurrían en balde. No existía criatura alguna que se mantuviera estática toda su vida. Ella tan solo esperaba que esos cambios no hiciese que olvidasen lo que fueron ni lo que sufrieron para ser lo que eran ahora, ni aquellos que se perdieron por el camino, que dejasen de valorarlo como si nunca hubiese pasado, como algo sin valor. Tal vez era demasiado sentimental en ese aspecto, demasiado para alguien de naturaleza guerrera y que seguramente estando en el ejercito mancharía sus manos de sangre, pero era como un recordatorio de su humanidad. Un recordatorio tácito de que mucho antes de ser Samika, la evaki; fue Samika, la humana.
Incluso si posiblemente se endurecería con el tiempo, no quería perder la sonrisa y positivismo que siempre le había acompañado, era como su marca registrada.
-¿Quieres que vivamos todos juntos?- pregunto Samika sorprendida y curiosa, sin soltarlo aun de abrazo, pudiendo así ver mas claramente sus expresiones, que de estar a mas distancia sería algo imposible de realizar. Su única manera de ver esas cosas en los demás era en una invasión a su espacio que intentaba evitar por respeto, pero que en esa situación, simplemente se había dado de forma natural- Sería como vivir nuevamente en el torreón de Maciel, aunque sin la parte de tener que compartir mismo espacio vital, ni sufrir incómodos momentos donde una puerta este mal cerrada o un baño demasiado ocupado -comento riéndose porque recordaba vagamente que alguna vez ocurrió algo así, de que unos u otros se pillaron en medio de un cambio de ropa o esas situaciones que ocurrían normalmente cuando eran tanta gente en tan poco espacio.
Le alegraba que lo propusiera, realmente no se imaginaba estando muy lejos de sus compañeros, pues incluso si solo habían sido siete meses de convivencia real y estrecha, habían sido siete meses que habían tenido que compartir mas que con cualquiera otra persona con la que hubiesen vivido alguna vez. No era igual vivir en una ciudad donde tu vida a veces podían depender de la de un compañero, así como la suya dependía de ti, que estar en un mundo sin monstruos. O al menos no monstruos con colmillos y alas.
-Mm entonces tienes que hacerte cargo de remodelar bien nuestras casas, seras nuestro manitas personal. Eso si sufrirás arreglando mis tuberías y poniendo protecciones en mi casa, porque al contrario de ustedes, genios mágicos, yo tengo que ingeniármelas con el agua caliente -añadió Samika de forma divertida ante la imagen mental de todo aquello. Sin contar que cuando eso ocurriera tendría que ingeniárselas para no desarmar toda la magia que el resto crease con sus gritos anti magia
-Y hablando de cosas mágicas...¿conoces algún hechizo o algo que me permita vestirme sin tener que estar sufriendo con mis alas? No te imaginas lo que me ha costado ponerme esto- dijo alejándose un poco de el para señalar su top con un suspiro cansado. Vestirse era una odisea cada mañana- Pensaba preguntarlo en la Sede o algún compañero del ejercito, pero ya que estamos aquí- dijo haciendo referencia a estar con Lanor en la biblioteca, lugar donde mas fácilmente podría buscar algo si este no sabía.
-Mm resulta un poco difícil de creer, que sobreviviéramos y hayamos cambiado, unos mas que otros- rió mirando a este señalando con entretenido su piel grisácea y a su vez a si misma- Por suerte incluso si algunos cambiamos mas exteriormente y otros mas por dentro, sigue existiendo en nosotros buena parte de lo que fuimos...espero que con el tiempo la ciudad no nos cambie enteramente convirtiéndonos en meros desconocidos, incluso si algunos dejaron su nombre atrás- añadió mirando a Lanor atentamente, no juzgandole sino mas bien como una especie de pedido mudo. La gente cambiaba en Rocavarancolia, en la Tierra y en cualquier parte por el simple hecho de que la madurez afectaba a todos en algún momento, la circunstancias y el tiempo no transcurrían en balde. No existía criatura alguna que se mantuviera estática toda su vida. Ella tan solo esperaba que esos cambios no hiciese que olvidasen lo que fueron ni lo que sufrieron para ser lo que eran ahora, ni aquellos que se perdieron por el camino, que dejasen de valorarlo como si nunca hubiese pasado, como algo sin valor. Tal vez era demasiado sentimental en ese aspecto, demasiado para alguien de naturaleza guerrera y que seguramente estando en el ejercito mancharía sus manos de sangre, pero era como un recordatorio de su humanidad. Un recordatorio tácito de que mucho antes de ser Samika, la evaki; fue Samika, la humana.
Incluso si posiblemente se endurecería con el tiempo, no quería perder la sonrisa y positivismo que siempre le había acompañado, era como su marca registrada.
-¿Quieres que vivamos todos juntos?- pregunto Samika sorprendida y curiosa, sin soltarlo aun de abrazo, pudiendo así ver mas claramente sus expresiones, que de estar a mas distancia sería algo imposible de realizar. Su única manera de ver esas cosas en los demás era en una invasión a su espacio que intentaba evitar por respeto, pero que en esa situación, simplemente se había dado de forma natural- Sería como vivir nuevamente en el torreón de Maciel, aunque sin la parte de tener que compartir mismo espacio vital, ni sufrir incómodos momentos donde una puerta este mal cerrada o un baño demasiado ocupado -comento riéndose porque recordaba vagamente que alguna vez ocurrió algo así, de que unos u otros se pillaron en medio de un cambio de ropa o esas situaciones que ocurrían normalmente cuando eran tanta gente en tan poco espacio.
Le alegraba que lo propusiera, realmente no se imaginaba estando muy lejos de sus compañeros, pues incluso si solo habían sido siete meses de convivencia real y estrecha, habían sido siete meses que habían tenido que compartir mas que con cualquiera otra persona con la que hubiesen vivido alguna vez. No era igual vivir en una ciudad donde tu vida a veces podían depender de la de un compañero, así como la suya dependía de ti, que estar en un mundo sin monstruos. O al menos no monstruos con colmillos y alas.
-Mm entonces tienes que hacerte cargo de remodelar bien nuestras casas, seras nuestro manitas personal. Eso si sufrirás arreglando mis tuberías y poniendo protecciones en mi casa, porque al contrario de ustedes, genios mágicos, yo tengo que ingeniármelas con el agua caliente -añadió Samika de forma divertida ante la imagen mental de todo aquello. Sin contar que cuando eso ocurriera tendría que ingeniárselas para no desarmar toda la magia que el resto crease con sus gritos anti magia
-Y hablando de cosas mágicas...¿conoces algún hechizo o algo que me permita vestirme sin tener que estar sufriendo con mis alas? No te imaginas lo que me ha costado ponerme esto- dijo alejándose un poco de el para señalar su top con un suspiro cansado. Vestirse era una odisea cada mañana- Pensaba preguntarlo en la Sede o algún compañero del ejercito, pero ya que estamos aquí- dijo haciendo referencia a estar con Lanor en la biblioteca, lugar donde mas fácilmente podría buscar algo si este no sabía.
Invitado, sueñas con un mundo perfecto...
...tu paraíso personal...
...donde lloras tu imperfecta realidad
- Spoiler:
- Rua habla = #9932CC
Rua piensa = #CD5C5C
Dédalo piensa = #FFFAFA
- Zarket
Ficha de cosechado
Nombre: Rádar
Especie: Carabés
Habilidades: Resistencia, velocidad natatoria, nociones de lucha
Personajes :
- Spoiler:
- ●Bastel (antes Bran/Branniel): Trasgo de Ewa sexto sacerdote de la Secta, sádico, aficionado a matanzas y luchador en los bajos fondos. No tocarle los cojoncios, que muerde.
●Lanor Gris: demiurgo procedente de Carabás. Tímido, llorica y buena gente.
●Rádar (o Rad): astrario carabés tsundere hacia la magia, mandón, brusco y estricto. Fashion victim. Reloj andante.
●Galiard syl: mago rabiosamente rocavarancolés, despiadado antihéroe brutalmente pragmático y compasivo antivillano bienintencionado.
Armas :- Spoiler:
- ●Bastel (antes Bran): magia, garras, dientes y una espada de longitud media a larga. O lo que haga falta.
●Lanor Gris: magia y sus criaturas.
●Rádar (o Rad): espada de longitud media. Sus habilidades de desviación de hechizos.
●Galiard Syl: magia y, si hace falta, una espada de longitud corta a media.
Status : Jinete del apocalipsis (¡ahora con extra de torpeza social!)
Humor : En muerte cerebral.
Re: Biblioteca Mágica
03/02/18, 11:16 pm
El demiurgo sonrió con algo de torpeza ante la efusividad de Samika. Su amiga tenía siempre aquella característica que arrollaba a ciertas partes de la personalidad del demiurgo, pero con el tiempo había aprendido a apreciarla, incluso si seguía sin gustarle del todo. Pero aquello era parte del núcleo más puro de la personalidad de Samika, y solo por ello era valioso.
—No te preocupes, claro que haré vuestras casas —había una sonrisa a medias tímida y a medias dudosa allí. Lanor esperaba que pudiera hacer viviendas confortables y hermosas para sus amigos, pero en aquel momento no andaba particularmente seguro de poder hacerlas. «No te preocupes tanto por ello, te queda tiempo. Muchísimo. Tienes que estudiar bastante antes de poder hacer edificios» pensó, intentando enterrar dudas bajo determinación, aunque sabiendo que no lo conseguiría del todo—. En cuanto a magia así... Ahora mismo no se me viene nada a la mente, pero haberla seguro que la hay, si no hechizos entonces runas —le sabía mal dejar así a su amiga, así que a su declaración le siguió un intento de asegurarle que pronto sabría magia para ayudarla—. Pero bueno, estamos en Rocavarancolia, como alrededor de media población tiene que estar en tu situación. Seguro que encuentro algo rápido.
No tardaron en encontrar el libro que Lanor necesitaba y salir de allí, aunque en un momento dado tuvieron que desviarse. El demiurgo percibió algo que no le gustaba, un olor a viscosidad alquitranada que no podía describir, pero que sospechaba que quizás fueran los espíritus de los que había advertido el bibliotecario.
Sigue en la Torre Serpentaria.
—No te preocupes, claro que haré vuestras casas —había una sonrisa a medias tímida y a medias dudosa allí. Lanor esperaba que pudiera hacer viviendas confortables y hermosas para sus amigos, pero en aquel momento no andaba particularmente seguro de poder hacerlas. «No te preocupes tanto por ello, te queda tiempo. Muchísimo. Tienes que estudiar bastante antes de poder hacer edificios» pensó, intentando enterrar dudas bajo determinación, aunque sabiendo que no lo conseguiría del todo—. En cuanto a magia así... Ahora mismo no se me viene nada a la mente, pero haberla seguro que la hay, si no hechizos entonces runas —le sabía mal dejar así a su amiga, así que a su declaración le siguió un intento de asegurarle que pronto sabría magia para ayudarla—. Pero bueno, estamos en Rocavarancolia, como alrededor de media población tiene que estar en tu situación. Seguro que encuentro algo rápido.
No tardaron en encontrar el libro que Lanor necesitaba y salir de allí, aunque en un momento dado tuvieron que desviarse. El demiurgo percibió algo que no le gustaba, un olor a viscosidad alquitranada que no podía describir, pero que sospechaba que quizás fueran los espíritus de los que había advertido el bibliotecario.
Sigue en la Torre Serpentaria.
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.Personajes :
● Dirke/Ramas.
● Giz.
● Tap/Malahierba.
●Lara 37/Saria Omen.
● Rasqa: parqio transformado en moloch.
● Eitne.
Heridas/enfermedades : Eitne: le falta la pierna derecha de rodilla para abajo.
Status : Es complicado.
Humor : La gracia de dios.
Re: Biblioteca Mágica
25/04/18, 06:44 pm
De camino a la biblioteca, Saria se aseguró de dar las gracias de forma efusiva a Dhelian y explicó parte de lo que ocurría a sus amigos, siempre con lagunas y cierto aire de misterio, para que unieran hilos solo con la explicación final. Una vez dentro, se instaló en la mesa que tocaba y sacó de su bolsa sin fondo una bandeja de pastelitos variados. Pidió perdón al medio ghoul por no traer nada de picar para él y esperó a que se reunieran todos.
Una vez estuvieron listos, comenzó:
—Como les he ido contando a ellos —señaló a Dhelian, a Ozz y a Alice—, llevo desde hace meses sintiendo algo perturbador en la ciudad. Algo, no sé el qué, que ha provocado una ola de infortunios que abarca ya buena parte de Rocavarancolia. Se está extendiendo en circulos escalonados y creo que es la razón de todas las muertes que están ocurriendo, la razón también por la que tanta gente duerme mal. —Guardó silencio unos segundos—. Tal vez tenga que ver con lo que pasó a Marsi.
Sacó de su marsupio un mapa idéntico al que enseñó al Consejo y lo extendió sobre la mesa. En él, varios circulos concentricos mostraban las areas de expansión de la mala suerte. El epicentro era una pequeña área en un barrio al sudoeste.
—Hace poco que fui al Castillo y hablé con varios miembros del consejo (tenéis que conocer a dama Gato, que es muy maja). Les enseñé este mismo mapa, les expliqué lo que había descubierto y, por sus respuestas, creo que está pasando algo gordo. —Señaló la leyenda que había dibujado en una esquina del mapa—. Ahí podéis ver los incrementos de mala suerte según la zona.
Esperó a que le echaran un ojo antes de seguir hablando. Mientras tanto, no pudo evitar mirar las cifras y sentir un escalofrío, acompañado de sus peores pensamientos. Su pelaje se erizó, confiriéndole el aspecto de un pompón negro. La uniformidad en las cifras que mostraba la leyenda era, por sí solo, un mal augurio: ningún accidente podría provocar un caos tan bien ordenado.
Una vez estuvieron listos, comenzó:
—Como les he ido contando a ellos —señaló a Dhelian, a Ozz y a Alice—, llevo desde hace meses sintiendo algo perturbador en la ciudad. Algo, no sé el qué, que ha provocado una ola de infortunios que abarca ya buena parte de Rocavarancolia. Se está extendiendo en circulos escalonados y creo que es la razón de todas las muertes que están ocurriendo, la razón también por la que tanta gente duerme mal. —Guardó silencio unos segundos—. Tal vez tenga que ver con lo que pasó a Marsi.
Sacó de su marsupio un mapa idéntico al que enseñó al Consejo y lo extendió sobre la mesa. En él, varios circulos concentricos mostraban las areas de expansión de la mala suerte. El epicentro era una pequeña área en un barrio al sudoeste.
—Hace poco que fui al Castillo y hablé con varios miembros del consejo (tenéis que conocer a dama Gato, que es muy maja). Les enseñé este mismo mapa, les expliqué lo que había descubierto y, por sus respuestas, creo que está pasando algo gordo. —Señaló la leyenda que había dibujado en una esquina del mapa—. Ahí podéis ver los incrementos de mala suerte según la zona.
Esperó a que le echaran un ojo antes de seguir hablando. Mientras tanto, no pudo evitar mirar las cifras y sentir un escalofrío, acompañado de sus peores pensamientos. Su pelaje se erizó, confiriéndole el aspecto de un pompón negro. La uniformidad en las cifras que mostraba la leyenda era, por sí solo, un mal augurio: ningún accidente podría provocar un caos tan bien ordenado.
No llores por no poder ver tu pierna,
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
- TakGM
Ficha de cosechado
Nombre: Airi
Especie: Sanaí
Habilidades: Habilidad manual, memoria, imaginación.
Personajes :
● Gael/Koval: fuego fatuo terrícola.
● Kin: demonio raigaurum irrense.
● Ayne: anima sinhadre.
● Eara: sinhadre sin esencia.
● Nime: demonio mineral libense.
● Iemai: cercana, fallecida.
● Airi: sanaí.
Unidades mágicas : 8/8
Síntomas : Tendencia a alargar sus baños. Tiene episodios de disociación esporádicos cuando sale al patio.
Armas :
● Gael/Koval: espadas rectas, maza y quimeras.
● Kin: alfanje y guan dao.
● Ayne: sable.
● Eara: ballesta de repetición.
● Nime: dagas.
● Airi: vara y arco.
Status : (ノ☉ヮ⚆)ノ ⌒*:・゚✧
Re: Biblioteca Mágica
26/04/18, 12:02 pm
El grupo se había reunido donde decía la nota. Kin saludó al llegar y examinó las caras de los presentes con cierto temor de leer en ellas malas noticias. Al menos, no parecía algo urgente, o la nota habría dado más detalles.
Cuando Saria empezó a hablar, el raigaurum apretó los dientes. Lo que decía la mala sombra encajaba con lo que él mismo podía ver, pero saber que no era simple casualidad le había puesto mal cuerpo. Kin se acercó al mapa de Saria para verlo mejor y los garabatos sobre él le parecieron ominosos. ¿Cómo podía ser casual? Y lo que era peor: ¿el consejo sabía algo y todavía no había hecho nada? ¿O era tan terrible que no podían ni decirlo para que no cundiese el pánico?
El raigaurum trató de tranquilizarse convenciéndose de que estaba exagerando la situación. No se había levantado con buen pie, y eso debía estar pasándole factura.
—Pero... ¿tienes alguna idea o teoría sobre el motivo de esto? —dijo dando toquecitos con un nudillo sobre el mapa—. ¿Has visto algo que pueda ser lo que... lo que quiera que se está extendiendo?
A Kin le costaba imaginarse los porcentajes de Saria como algo que no tuviese ninguna forma física. Si aquel infortunio se extendía, ¿partía de algún sitio? ¿Se expandía como un líquido derramándose o se irradiaba desde un único lugar? Sus ojos estaban pegados en la zona del mapa donde los porcentajes eran más elevados.
Cuando Saria empezó a hablar, el raigaurum apretó los dientes. Lo que decía la mala sombra encajaba con lo que él mismo podía ver, pero saber que no era simple casualidad le había puesto mal cuerpo. Kin se acercó al mapa de Saria para verlo mejor y los garabatos sobre él le parecieron ominosos. ¿Cómo podía ser casual? Y lo que era peor: ¿el consejo sabía algo y todavía no había hecho nada? ¿O era tan terrible que no podían ni decirlo para que no cundiese el pánico?
El raigaurum trató de tranquilizarse convenciéndose de que estaba exagerando la situación. No se había levantado con buen pie, y eso debía estar pasándole factura.
—Pero... ¿tienes alguna idea o teoría sobre el motivo de esto? —dijo dando toquecitos con un nudillo sobre el mapa—. ¿Has visto algo que pueda ser lo que... lo que quiera que se está extendiendo?
A Kin le costaba imaginarse los porcentajes de Saria como algo que no tuviese ninguna forma física. Si aquel infortunio se extendía, ¿partía de algún sitio? ¿Se expandía como un líquido derramándose o se irradiaba desde un único lugar? Sus ojos estaban pegados en la zona del mapa donde los porcentajes eran más elevados.
- GiniroryuGM
Ficha de cosechado
Nombre: Rägjynn
Especie: mjörní
Habilidades: memoria, buen oído y don de lenguas
Personajes :
● Noel: Draco de Estínfalo de origen sueco.
● Archime/Krono Rádem: Kairós irrense.
● Irianna/Dama Enigma: Nebulomante idrina lacustre.
● Adrune: Gamusino sinhadre, edeel.
● Lethe: Horus, enderth.
● Rägjynn: mjörní.
● Naeleth: Bruja del Hielo, nublina.
Unidades mágicas : 8/8
Síntomas : Aumenta su resistencia progresivamente. El sangrado de sus ojos se detonará con más frecuencia.
Armas :
● Noel: hacha de dos manos y espada bastarda.
● Archime/Krono Rádem: sus monólogos sobre biomecánica avanzada.
● Irianna: arco y estoque.
● Adrune: lanza, espadas cortas y arco.
● Lethe: arco y lanza.
● Rägjynn: jō.
● Naeleth: arco, sai y báculo.
Status : Gin: do the windy thing.
Humor : REALLY NOT FEELIN' UP TO IT RIGHT NOW. SORRY.
Re: Biblioteca Mágica
26/04/18, 09:49 pm
El kairós se teletransportó a un lugar concreto que había escogido estratégicamente tiempo atrás, libre de paredes y donde era improbable que hubiese alguien, ya que la biblioteca la visitaba a menudo. Siempre utilizaba la intangibilidad de todas formas, pero las precauciones nunca sobraban por si se encontraba con algún imprevisto. Se encamino hacia las puertas del edificio, donde ya se encontraba reunido un buen grupo alrededor de Saria Omen. Archime saludó escuetamente y se limitó a esperar la explicación de la ordesa. Se inclinó para ver el mapa que la mala sombra les mostraba y comenzó a tratar de analizarlo mientras Saria hablaba.
—Parece que el epicentro se encuentra aquí —intervino tras Kin, señalando una zona al sudoeste del mapa, no demasiado lejos del torreón Maciel—. Tiene que tratarse de algo que se halle en esa zona. Una persona o un objeto que sea el origen de los desastres y esté interfiriendo con el mundo onírico. A juzgar por la forma en la que se produjo la extensión de la influencia del infortunio, es posible que se haya producido un efecto dominó de desgracias, fuese o no intencional. —Hizo una pausa en su razonamiento, antes de alzar la vista del mapa y dirigirla hacia la ordesa—. El hecho de que el Consejo no te proporcionase dos detalles creo que puede deberse a uno de los siguientes motivos: es un asunto demasiado peligroso en el que inmiscuirse o es alguna suerte de proyecto secreto. También cabe la posibilidad de que desconozcan la causa, pero lo considero improbable.
—Parece que el epicentro se encuentra aquí —intervino tras Kin, señalando una zona al sudoeste del mapa, no demasiado lejos del torreón Maciel—. Tiene que tratarse de algo que se halle en esa zona. Una persona o un objeto que sea el origen de los desastres y esté interfiriendo con el mundo onírico. A juzgar por la forma en la que se produjo la extensión de la influencia del infortunio, es posible que se haya producido un efecto dominó de desgracias, fuese o no intencional. —Hizo una pausa en su razonamiento, antes de alzar la vista del mapa y dirigirla hacia la ordesa—. El hecho de que el Consejo no te proporcionase dos detalles creo que puede deberse a uno de los siguientes motivos: es un asunto demasiado peligroso en el que inmiscuirse o es alguna suerte de proyecto secreto. También cabe la posibilidad de que desconozcan la causa, pero lo considero improbable.
- Jack
Ficha de cosechado
Nombre: Tawar
Especie: Repobladore de la montaña
Habilidades: Artesanía, habilidad manual y resistenciaPersonajes :
● Jack: Vampiro de humo terrícola.
● Atol/Skarog: Helión libense.
● Alice/Onyx: Onycemante terrícola.
● Tesón/Eterno: fantasma roquense, sin magia.
● Sinceridad: Argos magnético roquense de Tierra Bruja.
● Pefka: Lenguaraz hijo de Luna Kepryna.
● Tawar: Repobladore de la montaña
Unidades mágicas : 12/12
Síntomas : Pérdida gradual del miedo a salir al exterior. Al regresar de algunas salidas tendrá jaquecas, que aumentarán en intensidad cuanto más tiempo haya pasado fuera.
Armas : Jack: dos espadas. Magia.
Atol: lanza, espada y escudo. Magia.
Alice: magia y onyces. Espada o arco.
Sinceridad: arco, jabalinas, espada/lanza y escudo.
Pefka: lo que pille, normalmente machete y arco
Humor : Os falta bosque, gigantes
Re: Biblioteca Mágica
28/04/18, 04:44 pm
Aunque la bruja le preguntó antes de salir, prefirió esperar a llegar a la Biblioteca para darle sentido a las palabras de la ordesa. Hubo que esperar a que llegasen los demás, como Kin y Archi... y por fin Saria les contó lo que suscitaba tanto misterio. Según hablabla, Alice perdió la sonrisa que había regalado a los irrenses al llegar. Perdió también el apetito adquirido al ver los pastelitos de Saria.
Cuando hablaron los demás, se levantó y se cruzó de brazos. Miraba al mapa y los porcentajes, pero también a las onyces que les vigilaban desde las estanterías.
—No sabía que lo de dormir mal estuviera tan extendido... ni creí que las muertes tuvieran conexión. Sí sospechaba que algo está pasando: hay más onyces que nunca y no es muy buen augurio...
>>Pero... Si dices que podría estar relacionado con Marsi... —les miró, dubitativa, recordando las palabras de Archi—. Sabéis que voy a querer investigarlo. Pero si el propio Consejo no ha sabido decirte más y puede resultar tan peligroso... Creo que me viene grande. ¿No?
Por fin tenían una posible pista... Pero prefería no tener nada. ¿Cómo podía estar su muerte relacionada con esa ola de infortunios? ¿Qué podía haber hecho ella? Ni podrían investigarlo ni podrían pedir ayuda... Y si el Consejo o alguien encontraba a los culpables, ni saciaría su sed de venganza ni tendría que preocuparse por ese dilema. Pero quería preocuparse. Quería tener un motivo. No podía quedarse quieta a esperar que la situación se resolviera por otros medios u otros ciudadanos.
Negó con la cabeza.
—No quiero quedarme sentada a esperar que alguien aclare esto. Podríamos... No sé, tenemos conocidos con más años en la ciudad, podríamos preguntarles. Si nos afecta a todos...
Cuando hablaron los demás, se levantó y se cruzó de brazos. Miraba al mapa y los porcentajes, pero también a las onyces que les vigilaban desde las estanterías.
—No sabía que lo de dormir mal estuviera tan extendido... ni creí que las muertes tuvieran conexión. Sí sospechaba que algo está pasando: hay más onyces que nunca y no es muy buen augurio...
>>Pero... Si dices que podría estar relacionado con Marsi... —les miró, dubitativa, recordando las palabras de Archi—. Sabéis que voy a querer investigarlo. Pero si el propio Consejo no ha sabido decirte más y puede resultar tan peligroso... Creo que me viene grande. ¿No?
Por fin tenían una posible pista... Pero prefería no tener nada. ¿Cómo podía estar su muerte relacionada con esa ola de infortunios? ¿Qué podía haber hecho ella? Ni podrían investigarlo ni podrían pedir ayuda... Y si el Consejo o alguien encontraba a los culpables, ni saciaría su sed de venganza ni tendría que preocuparse por ese dilema. Pero quería preocuparse. Quería tener un motivo. No podía quedarse quieta a esperar que la situación se resolviera por otros medios u otros ciudadanos.
Negó con la cabeza.
—No quiero quedarme sentada a esperar que alguien aclare esto. Podríamos... No sé, tenemos conocidos con más años en la ciudad, podríamos preguntarles. Si nos afecta a todos...
No Hope. No Dreams. No Love.
My Only Escape Is Underground
My Only Escape Is Underground
- Evanna
Ficha de cosechado
Nombre: Rua
Especie: Humana. Sueca
Habilidades: Rapidez mental, valor, astuciaPersonajes :- DL/Dédalo: Cambiante, foner
- Dhelian/Evelhan Kaw: Brugho, daeliciano
- Samika: Evaki, humana
- Pelusa (Pam): Spriggan, Mona del queso.
- Rua: Unicornio Humana, Sueca. 1,76 sin plataformas.
Armas :- DL/Dédalo: Espada, magia y sus cambios
- Dhelian/Evelhan Kaw: Magia y estirges
- Samika: Puñetazos y patadas
- Pelusa (Pam): Cuchillo pelapapas y una honda con piedras
- DL/Dédalo: Cambiante, foner
Re: Biblioteca Mágica
29/04/18, 01:15 pm
En cuanto llegaron a al Biblioteca, Saria los los llevo a la zona de las maldiciones y cuanto llegaron sus compañeros, aquellos que pudieron llegar oque sus estirges lograron encontrar, Saria comenzó a explicarles el motivo por el que los había llamado a todos. Y desde luego lo que estaba contando no era para nada tranquilizador. La confusión se hizo patente en Evelhan durante algunos momentos mientras escuchaba, no comprendiendo al inicio de que estaba hablando realmente Saria, pero ver como sus amigos, que si aprecian haber captado lo que pasaba aportaban algunas cosas, al fin el brugho empezó, no a entender la situación, sino mas bien asimilarla y no le gustaba un pelo lo que estaba escuchando. Menos cuando Saria menciono a Marsi o que incluso el consejo de la ciudad había recibido esa misma información de la ordesa.
-Ha habido un notorio mal ambiente desde hace tiempo, mis estirges también han estado muy nerviosa últimamente, incluso empezaron a pelearse entre ellas sin razón y por mas que les cuestiono que ocurre ni siquiera ellas saben explicar el motivo, por lo que no son tontas rencillas por comida o sitio donde posarse- sacudió la cabeza el brugho apoyando lo que había dicho Alice sobre las onyces con su propio dominio, sin dejar de observar atentamente el mapa frente a ellos, especialmente la localización señalada por Archi, sintiendo como lentamente se iba formando un nudo en su estomago a tal grado que aunque Saria hubiese traído algo que el pudiera comer, no habría sido capaz de probar bocado.
Estaban siendo un día llenos de altibajos y empezaban a a ser realmente agotador cuando apenas podía dormir bien desde hacia algún tiempo. Descubrir que dormir mal aprecia tener un motivo y no solo eso le pasaba a mucha gente, con el añadido de las muertes incomprensibles era demasiado inquietante.
-Esto de acuerdo en que no podemos quedarnos de brazos cruzados. Si el Consejo esta haciendo algo con esto,esta bien...aunque esta claro que van especialmente lentos porque sigue muriendo gente, sigue creciendo el infortunio que Saria lo ve y seguimos teniendo pesadillas- indico Evelhan levantando la vista, mirándolos, mordiéndose el labio inferior con inquietud, de acuerdo con Alice en que quedarse quieto no era una opción- Esto es algo que nos ha afectado y nos sigue afectando directamente. Vamos a volvernos todos locos a este paso si somos incapaces de dormir sin sufrir pesadillas – siendo ademas,son solo lo único, sino que debido al propio estrés de no dormir al gente se volvía mas irritable y los conflictos se volvían mas y mas grandes. Erra tan fácil encender una llamita y que todo explotara en ese ambiente tan cargado que incluso cerrar los ojos era riesgoso.
<<-¿Que hay por esta zona?- pregunto Dhelian finalmente refiriéndose a lo que Archi había llamado el epicentro que se encontraba no muy lejos de Maciel- Tal vez echar un vistazo podría aportarnos algo.- añadió mirándolos al ver que opinaban. No dudaba ni por un momento en que Saria veía lo que veía, incluso si ellos no podían entender del todo del significado real de los números que ella podía percibir, si había ido a ellos al Consejo con aquellos datos que lo que veía era exorbitante incluso para lo normal en esa ciudad.
-Ha habido un notorio mal ambiente desde hace tiempo, mis estirges también han estado muy nerviosa últimamente, incluso empezaron a pelearse entre ellas sin razón y por mas que les cuestiono que ocurre ni siquiera ellas saben explicar el motivo, por lo que no son tontas rencillas por comida o sitio donde posarse- sacudió la cabeza el brugho apoyando lo que había dicho Alice sobre las onyces con su propio dominio, sin dejar de observar atentamente el mapa frente a ellos, especialmente la localización señalada por Archi, sintiendo como lentamente se iba formando un nudo en su estomago a tal grado que aunque Saria hubiese traído algo que el pudiera comer, no habría sido capaz de probar bocado.
Estaban siendo un día llenos de altibajos y empezaban a a ser realmente agotador cuando apenas podía dormir bien desde hacia algún tiempo. Descubrir que dormir mal aprecia tener un motivo y no solo eso le pasaba a mucha gente, con el añadido de las muertes incomprensibles era demasiado inquietante.
-Esto de acuerdo en que no podemos quedarnos de brazos cruzados. Si el Consejo esta haciendo algo con esto,esta bien...aunque esta claro que van especialmente lentos porque sigue muriendo gente, sigue creciendo el infortunio que Saria lo ve y seguimos teniendo pesadillas- indico Evelhan levantando la vista, mirándolos, mordiéndose el labio inferior con inquietud, de acuerdo con Alice en que quedarse quieto no era una opción- Esto es algo que nos ha afectado y nos sigue afectando directamente. Vamos a volvernos todos locos a este paso si somos incapaces de dormir sin sufrir pesadillas – siendo ademas,son solo lo único, sino que debido al propio estrés de no dormir al gente se volvía mas irritable y los conflictos se volvían mas y mas grandes. Erra tan fácil encender una llamita y que todo explotara en ese ambiente tan cargado que incluso cerrar los ojos era riesgoso.
<<-¿Que hay por esta zona?- pregunto Dhelian finalmente refiriéndose a lo que Archi había llamado el epicentro que se encontraba no muy lejos de Maciel- Tal vez echar un vistazo podría aportarnos algo.- añadió mirándolos al ver que opinaban. No dudaba ni por un momento en que Saria veía lo que veía, incluso si ellos no podían entender del todo del significado real de los números que ella podía percibir, si había ido a ellos al Consejo con aquellos datos que lo que veía era exorbitante incluso para lo normal en esa ciudad.
Invitado, sueñas con un mundo perfecto...
...tu paraíso personal...
...donde lloras tu imperfecta realidad
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Rua piensa = #CD5C5C
Dédalo piensa = #FFFAFA
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