Burdel de Dama Espasmo (Archivo I)

Recuerdo del primer mensaje :

Elegante, era la palabra apropiada para el edificio. Cain no estaba seguro de que Dirke supiese realmente donde les había llevado, pero eso ya no importaba. El lugar parecía deshabitado, y desde hace bastante tiempo, a juzgar por su aspecto dejado. Pero ese aire decadente hacía del sitio un lugar...
-Mágico...- susurró Caín dejando su cesta en el suelo
Nada más llegar, los chicos se habían dejado caer en los divanes y cojines del suelo, agotados por la carrera.

-Por ahí entra luz, forma parte del encanto de este sitio...- comenta Cain echándose hacia atrás en su puff- Pero sí estaría bien asegurar el sitio.

Me acerco a Cain:
-¿Quién es este chico?

-Somos...5 en total-respondo. ha venido otra chica-. hola, soy Aníbal. ¿Tu eres...?

-Me llamo Erika, ¿De donde vienes?

-De un torreón que se encuentra muy lejos.-digo. En un acto reflejo miro mi muñeca, donde tenía mi reloj siempre. Pero no hay nada. Suspiro.-Y debería volver ya a ver si hay algún cambio en mis compañeros. Hace tiempo que no se despiertan, y no me gustaría dejarles solos mucho tiempo.
Me levanto y voy hacia la puerta.
-Quedaos con los cuchillos que he traido. Y con el arco-añado. Me lo descuelgo de la espalda y lo dejo apoyado en una pared. Hago lo mismo con el carcaj-. En el torreón hay muchas armas. Quizá vuelva y os traiga más para que podáis sobrevivir mejor.
Les agradezco que me hayan dejado quedarme un rato y les invito a que vengan al torreón algún día. Después salgo fuera y me encamino al torreón.

(SIGUE EN LA PLAZA DE LAS COLAESPINAS)

Vuelvo a mirar el agujero -Si entra la luz puede entrar otras cosas…Por lo que he podido ver, la Sala de las termas es el lugar más seguro del edificio*me giro mirando las escaleras que conducen a las termas* podemos resguardarnos allí en el caso de un ataque…*vuelvo a mirar a Caín y a los demás*Por cierto alguien ha visto mi antigua ropa y un libro que se encontraba junto a ella?- mientras tanto un chico que no conozco se va...

Miro a Carmesí, sigue con el kimono:
-Ayer le tuve que dejar un kimono porque no sabía donde estaba su ropa.- Explico a los demás.
-Creo que me voy a ir a las termas, ¿Kaila te vienes?

- Vale- digo a Erika con una sonrisa.

-Pues nosotras nos vamos chicos.- Me dirijo a las termas junto con Kaila.
Abajo empiezo a preparar todo lo necesario:
-Últimamente no dejamos de tener visitas.

Despierto en mi cama, hecho un lío entre las mantas y mi ropa. Estoy desorientado. ¡Con la cabeza en los pies! <<¿Qué me ha pasado? A ver...ayer estuve en la cocina con Dirke, hablando de algo...>> hago memoria <<Y...ahora estoy aquí. Cansado. ¡Ah, sí, cansado por las alfombras! Y...bueno, imagino que me entraría sueño y me subí al cuarto...Quizá>> De todas formas, me ruge el estómago al levantarme y me voy al baúl. Cojo el primer kimono que pillo, uno púrpura liso con los bordes rojos, lo doblo y bajo a la cocina. Hago como anoche, cocino un poco de carne y me la como tranquilamente sentado a la mesa, pensando en tapar el agujero del techo <<Si entra agua, puede entrar otra cosa>> y en seguir practicando con mi látigo.

Un leve portazo en la puerta principal me hizo despertar de un sueño bastante extraño. Parecía haber estado durmiendo varios días pero realmente lo necesitaba, después de la paliza del otro día y que padezco de somnolencia, necesitaba planchar bien la oreja.

Aparte las rasgadas mantas rojas que me cubrían y abrí la ventana. Las oxidadas bisagras de esta chirriaron dejando entrar una leve brisa que agito mi pelo- Así que todo esto es real...- Mire por esta, la vista no era especialmente bonita de hecho incluso podía llegar a ser aterradora, recién sacada de una Heli de Tim Burtom...
Busque los pantalones por toda la habitación, acostumbraba a dormir en calzoncillos y en este lugar no sería menos. Note que en mi habitación había otra cama, desecha pero vacía.
-Donde narices estarán los pantalones- Me dispuse a probar mejor suerte en las otras estancias por si alguien lo hecho para lavar o quien sabe para que...

- Sí...¿Cuánta gente más habrá en esta ciudad?- digo, mietras ayudo a Erika a preparar lo necesario.

-Por lo que estamos viendo estos días, muchísima.- Me empiezo a desvestir.- Oye, ¿Te acuerdas de algo de tu pasado?

- Sí, lo recuerdo todo. ¿Tú te acuerdas del tuyo? - preguntos mientras me desvisto.

-Bueno, mi pasado lo recuerdo, pero está algo borroso por así decirlo.- Me meto dentro del agua.

Termino de comer, recojo el plato y los cubiertos, los friego y salgo de la cocina con intención de bañarme y cambiarme de ropa <<La ropa antigua necesita un lavado>> Bajo a la planta donde dormía el chico oriental <<Norou o Nuoro, algo similar>> Allí veo a Caín y al chico cuyo nombre no recuerdo muy bien.
-Buenas tardes.-saludo.-Voy a darme un baño y cambiarme de ropa.-<<¿Qué hago diciéndoles esto? ¿Qué les importa? Calla>> y sin más, sigo hacia la slaa de las termas, pero oigo voces <<Las chicas>> Me encojo de hombros y sigo hacia delante <<Que no miren>>
-Hola. Voy a...-<<Otra vez. ¿Qué les importa? Silencio>>

Me meto en el agua. Llega Jack.
- Buenas, Jack- le saludo.