Barrio de los Callejones sin Salida
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Rocavarancolia Rol
51 participantes
- Rocavarancolia Rol
Barrio de los Callejones sin Salida
03/08/11, 12:53 am
Recuerdo del primer mensaje :
En el lado más céntrico queda aún parte de este laberíntico montón de edificaciones sin orden aparente. Perderse es tan fácil como encontrarse alguna criatura hambrienta.
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
22/07/14, 08:44 pm
La sangre que manó de las diferentes heridas del hombre bestia acabó vertida sobre la ordesa gracias a la gravedad, pues, sin saber muy bien como, Lara había acabado atrapada debajo. Maldijo en silencio el dolor que le producía el bocado que aquella bestia le había metido en el pie y, hasta que no escuchó a Xalk, no pudo imaginarse qué había pasado. <<Casi lo tenía...>> se quejó mentalmente mientras se levantaba con cuidado de no apoyar el pie dolorido.
—¡No estoy bien! —gritó al bicho con la mirada turbada y un tono de voz demasiado alto para dirigirse a quien le había salvado el pellejo—. ¡OS PEDÍ QUE NO ME SIGUIERAIS! ¿TAN DIFICIL... ¡No, Xalk, no! —el bicho se acercaba a ella dispuesto a darle un abrazo, pero para la mala sombra no había pasado desapercibida la reacción de la criatura al tocarle. Además el hecho de que los números fueran ligeramente mayores alrededor de Xalk tampoco la entusiasmaba. Sin embargo, poco pudo hacer para evitar el abrazo. O el escozor—. ¡AAAAAGH! ¡QUITA! ¡POR TODA LA SUERTE! —Lara se rompió el abrazo con brusquedad para rascarse la piel. <<¡Joder! Pica. Pica. Pica>> .El hecho de tener un pelaje tan denso ayudó a retener parte de las toxinas, pero las que alcanzaron la piel, la hicieron arder especialmente—. ¡ESCUECES!, ASI QUE MANTÉN UN METRO DE DISTANCIA ENTRE NOSOTROS —continuaba gritando, pero no ya tanto por enfado como por lo horrible de los picores—. Y GRACIAS, AUnque lo tenía todo bajo control.
Respiró hondo y se calmó tanto como le permitían el desorden psicológico que tenía, así como el dolor y los picores. La madre no se paró a pensar en lo asquerosa que debía de estar ahora, bañada en sangre. Había algo que la preocupaba más. Indicándole a Xalk que mantuviera las distancias con un gesto de mano, se acercó a Kud y se agachó a su lado. Una parte de ella quería echar a correr y abandonarlos por su bien, pero tal y como estaba Kud y tal y como funcionaba Xalk, la mala suerte los acabaría marcando inevitablemente.
—¡Sois idiotas! ¡Estúpidos! ¡Imbéciles! —les insultó, todavía algo histérica, al tiempo que observaba las heridas del ruso peludo. No sabía si la energía o los conocimientos le darían para arreglarlo todo, pero procuraría al menos dejar a Kud funcional. Las manos le temblaban—. ¿Acaso hacéis así con todo? Si se abre un agujero en el suelo y os dicen que es peligroso por los muchómetros de profundidad que tenga, ¿también os tiráis a bomba puta? —<<¿Ibais a dejar que vuestra muerte pesara también sobre mi conciencia? ¿No veis que ya no puedo más?>>. Lara apretó los ojos y contuvo las ganas de llorar, que ya empezaban a ser algo constante en ella—. Te curo y os váis —acabó diciendo tajante, antes de comenzar los hechizos de curación.
—¡No estoy bien! —gritó al bicho con la mirada turbada y un tono de voz demasiado alto para dirigirse a quien le había salvado el pellejo—. ¡OS PEDÍ QUE NO ME SIGUIERAIS! ¿TAN DIFICIL... ¡No, Xalk, no! —el bicho se acercaba a ella dispuesto a darle un abrazo, pero para la mala sombra no había pasado desapercibida la reacción de la criatura al tocarle. Además el hecho de que los números fueran ligeramente mayores alrededor de Xalk tampoco la entusiasmaba. Sin embargo, poco pudo hacer para evitar el abrazo. O el escozor—. ¡AAAAAGH! ¡QUITA! ¡POR TODA LA SUERTE! —Lara se rompió el abrazo con brusquedad para rascarse la piel. <<¡Joder! Pica. Pica. Pica>> .El hecho de tener un pelaje tan denso ayudó a retener parte de las toxinas, pero las que alcanzaron la piel, la hicieron arder especialmente—. ¡ESCUECES!, ASI QUE MANTÉN UN METRO DE DISTANCIA ENTRE NOSOTROS —continuaba gritando, pero no ya tanto por enfado como por lo horrible de los picores—. Y GRACIAS, AUnque lo tenía todo bajo control.
Respiró hondo y se calmó tanto como le permitían el desorden psicológico que tenía, así como el dolor y los picores. La madre no se paró a pensar en lo asquerosa que debía de estar ahora, bañada en sangre. Había algo que la preocupaba más. Indicándole a Xalk que mantuviera las distancias con un gesto de mano, se acercó a Kud y se agachó a su lado. Una parte de ella quería echar a correr y abandonarlos por su bien, pero tal y como estaba Kud y tal y como funcionaba Xalk, la mala suerte los acabaría marcando inevitablemente.
—¡Sois idiotas! ¡Estúpidos! ¡Imbéciles! —les insultó, todavía algo histérica, al tiempo que observaba las heridas del ruso peludo. No sabía si la energía o los conocimientos le darían para arreglarlo todo, pero procuraría al menos dejar a Kud funcional. Las manos le temblaban—. ¿Acaso hacéis así con todo? Si se abre un agujero en el suelo y os dicen que es peligroso por los muchómetros de profundidad que tenga, ¿también os tiráis a bomba puta? —<<¿Ibais a dejar que vuestra muerte pesara también sobre mi conciencia? ¿No veis que ya no puedo más?>>. Lara apretó los ojos y contuvo las ganas de llorar, que ya empezaban a ser algo constante en ella—. Te curo y os váis —acabó diciendo tajante, antes de comenzar los hechizos de curación.
- Leonart
Ficha de cosechado
Nombre: Reina Tomoe
Especie: Humana, Asiática
Habilidades: Punteria, Reflejos, Oido Musical
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
24/07/14, 03:43 pm
Kudryavka
Débil y dolorido como estaba, apenas pudo emitir un quejido amenazante cuando vio que Xalkoth se abalanzaba sobre Lara para abrazarla. No parecia consciente de que su transformación, por algún motivo, provocaba una reaccion cutanea al contacto. Lara sin embargo, estaba cada onza de mal que se pudiera haber imaginado y más aún. El ruso no dijo nada, dejando que hablase la ordesta, pero cuando sentenció que no deseaba que la acompañasen, el chico si que habló.
-No se Xalk...-dijo, débilmente mientras Lara le curaba.-Pero si al fondo del pozo está una amiga que aunque no pida ayuda esta en peligro, si. Me lanzaria sin duda.-acabó por contestar con una brillante sonrisa, mientras se dejaba curar.
Débil y dolorido como estaba, apenas pudo emitir un quejido amenazante cuando vio que Xalkoth se abalanzaba sobre Lara para abrazarla. No parecia consciente de que su transformación, por algún motivo, provocaba una reaccion cutanea al contacto. Lara sin embargo, estaba cada onza de mal que se pudiera haber imaginado y más aún. El ruso no dijo nada, dejando que hablase la ordesta, pero cuando sentenció que no deseaba que la acompañasen, el chico si que habló.
-No se Xalk...-dijo, débilmente mientras Lara le curaba.-Pero si al fondo del pozo está una amiga que aunque no pida ayuda esta en peligro, si. Me lanzaria sin duda.-acabó por contestar con una brillante sonrisa, mientras se dejaba curar.
- Poblo
Ficha de cosechado
Nombre: Alyssa
Especie: Humana
Habilidades: Orientación, memoria y reflejos.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
25/07/14, 04:43 pm
No había entendido por completo lo que había pasado con el hombre bestia. Pero cuando la misma reacción se dio con Lara se dio cuenta de lo que pasaba. -¿¡Eh!? ¿En serio? ¿Hago daño al tocar ahora? ¡Ay! no lo sabía. Lo siento ¡lo siento! ¡LO SIENTO!-
Los acontecimientos se fueron sucediendo, y La pastora comenzó a curar a Kud, a quien el insecto había pasado por alto y sin reparar en sus heridas. Luego los sermoneó.
-No es lo mismo. No eres un agujero, eres nuestra compañera, y al parecer tampoco eres la única peligrosa. Es lógica de supervivencia: Unidos se sobrevive, separados se muere… aunque por lógica de supervivencia también hay que entender qué es lo que causa tantos problemas ahora que lo pienso… Lara ¿qué es exactamente lo que pasa?
No tenía ni idea de lo que se suponía hacía a la pastora peligrosa.
Los acontecimientos se fueron sucediendo, y La pastora comenzó a curar a Kud, a quien el insecto había pasado por alto y sin reparar en sus heridas. Luego los sermoneó.
-No es lo mismo. No eres un agujero, eres nuestra compañera, y al parecer tampoco eres la única peligrosa. Es lógica de supervivencia: Unidos se sobrevive, separados se muere… aunque por lógica de supervivencia también hay que entender qué es lo que causa tantos problemas ahora que lo pienso… Lara ¿qué es exactamente lo que pasa?
No tenía ni idea de lo que se suponía hacía a la pastora peligrosa.
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
26/07/14, 01:31 pm
Lara se mordió el labio de nuevo y negó con la cabeza. No estaban entendiendo nada y tan solo le dificultaban la toma de una decisión casi irremediable. <<Al fondo del pozo no hay una amiga, sino la muerte>>. La ordesa no entendía ese interés heróico en suicidarse, no en esos momentos. Querer morir teniéndolo todo era de locos. Su razón de vivir no había muerto esa noche, al contrario que la de la mala sombra. Ellos sí que estaban arriesgando demasiado por haber salido tra ella. Y no lo entendía. El desánimo acabó apoderándose de la madre de nuevo, que se dejó caer de culo cuando acabó de curar a Kud.
Agachó la mirada y meditó la pregunta de Xalk en silencio.
—No lo sé... Solo han cambiado mis ojos —aún no se había visto las orejas o la cola—, se han vuelto amarillos y ahora no dejo de ver cifras por todos lados... —alzó la vista un segundo hacia sus amigos con la intención de señalar los números—. Ahora mismo hay un veinticuatro a tu lado, Xalk. No, un veinticinco. Un veintinueve. Un treinta y siete... ¿No los veis, verdad? Pero se mueven y crecen y bajan y no sé qué narices son, pero parecen una prueba más de que estoy gafe y soy peligrosa. Creo que transmito la mala suerte igual que Xalk la urticaria... Y no quiero que sufráis por mi culpa, de verdad... Estáis mejor si os alejáis de mí.
Aquella frase la llevó a pensar en que, apenas unas horas antes, sus tres últimos bebés todavía vivían y que por protegerlos, los había expuesto directamente a su maldición. El ciempiés los había matado, pero había sido ella quien los había condenado a tan mala suerte. Y ahora solo tenía cadáveres que incinerar y un futuro negro por delante; ni una sola razón por la que vivir mereciera la pena. Lara estaba dispuesta a quedarse ahí sentada hasta que los serpelinos se acercaran a comérsela.
Agachó la mirada y meditó la pregunta de Xalk en silencio.
—No lo sé... Solo han cambiado mis ojos —aún no se había visto las orejas o la cola—, se han vuelto amarillos y ahora no dejo de ver cifras por todos lados... —alzó la vista un segundo hacia sus amigos con la intención de señalar los números—. Ahora mismo hay un veinticuatro a tu lado, Xalk. No, un veinticinco. Un veintinueve. Un treinta y siete... ¿No los veis, verdad? Pero se mueven y crecen y bajan y no sé qué narices son, pero parecen una prueba más de que estoy gafe y soy peligrosa. Creo que transmito la mala suerte igual que Xalk la urticaria... Y no quiero que sufráis por mi culpa, de verdad... Estáis mejor si os alejáis de mí.
Aquella frase la llevó a pensar en que, apenas unas horas antes, sus tres últimos bebés todavía vivían y que por protegerlos, los había expuesto directamente a su maldición. El ciempiés los había matado, pero había sido ella quien los había condenado a tan mala suerte. Y ahora solo tenía cadáveres que incinerar y un futuro negro por delante; ni una sola razón por la que vivir mereciera la pena. Lara estaba dispuesta a quedarse ahí sentada hasta que los serpelinos se acercaran a comérsela.
- Leonart
Ficha de cosechado
Nombre: Reina Tomoe
Especie: Humana, Asiática
Habilidades: Punteria, Reflejos, Oido Musical
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
28/07/14, 10:29 pm
Kudryavka
El chico permaneció en silencio cuando la ordesa habló y explico, lo que se suponia que eran, sus poderes. La chica habia estado inestable durante ya algún tiempo, con su paranoia y la necesidad de tener a sus crias a salvo. Al ruso no le extrañó que, con el trauma de perderlos, hubiera optado por ello. Mantuvo un silencio incómodo al principio, dirigiendo la mirada al suelo, para después encajarla con la de la mala sombra. Habia unido los puntos sobre
-Lara... No fue culpa tuya. No pienses eso. Fueran tus poderes o no, no estarias bajo la responsabilidad de sus muertes. Es... Esta ciudad quien tiene la culpa, pero no tú. Nunca empieces si quiera a culparte de las muertes. Porque nunca pararás, lo he vivido y no es un camino bonito.-guardó silencio unos instantes.-Yo... Nunca he sido el tipo con mejor suerte del mundo, quizás todo lo contrario, asi que no se si tus poderes podrian afectarme mucho...-comentó con una risilla debil.-...pero si algo se, es que no querria ver a una amiga con tal carga sobre sus hombros que decida aventurarse al peligro sola, aunque sea el pretexto de protegernos de si misma, no seré yo el cobarde que agache la cabeza y huya cuando se me necesita.-dijo con una sonrisa. Se incorporó y posó una de sus manos en el hombro de la ordesa.-Si hace falta, iré contigo a donde quieras ir. Pero no te dejaré ir sola.-
El chico permaneció en silencio cuando la ordesa habló y explico, lo que se suponia que eran, sus poderes. La chica habia estado inestable durante ya algún tiempo, con su paranoia y la necesidad de tener a sus crias a salvo. Al ruso no le extrañó que, con el trauma de perderlos, hubiera optado por ello. Mantuvo un silencio incómodo al principio, dirigiendo la mirada al suelo, para después encajarla con la de la mala sombra. Habia unido los puntos sobre
-Lara... No fue culpa tuya. No pienses eso. Fueran tus poderes o no, no estarias bajo la responsabilidad de sus muertes. Es... Esta ciudad quien tiene la culpa, pero no tú. Nunca empieces si quiera a culparte de las muertes. Porque nunca pararás, lo he vivido y no es un camino bonito.-guardó silencio unos instantes.-Yo... Nunca he sido el tipo con mejor suerte del mundo, quizás todo lo contrario, asi que no se si tus poderes podrian afectarme mucho...-comentó con una risilla debil.-...pero si algo se, es que no querria ver a una amiga con tal carga sobre sus hombros que decida aventurarse al peligro sola, aunque sea el pretexto de protegernos de si misma, no seré yo el cobarde que agache la cabeza y huya cuando se me necesita.-dijo con una sonrisa. Se incorporó y posó una de sus manos en el hombro de la ordesa.-Si hace falta, iré contigo a donde quieras ir. Pero no te dejaré ir sola.-
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.
Personajes :
● Dirke/Ramas.
● Giz.
● Tap/Malahierba.
●Lara 37/Saria Omen.
● Rasqa: parqio transformado en moloch.
● Eitne.
Heridas/enfermedades : Eitne: le falta la pierna derecha de rodilla para abajo.
Status : Es complicado.
Humor : La gracia de dios.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
29/07/14, 01:51 am
El gesto de Lara se torció conforme escuchaba el discurso de Kud, como si se hubiera roto algo por dentro y le doliera. Los ojos le escocían y, secos como estaban ya, la salvaron de volver a ponerse a llorar.
—¡No trates de consolarme como si fuera estúpida! —le gritó alzando la voz de más, antes de volver a perderla en apenas un hilillo y continuar casi susurrando. Como si hablara para ella misma y para nadie más—. Fui yo quien decidió traerlos cuando Rocavarancolia tan solo era una opción... ¡Fui! ¡Yo!—volvió a chillar—. Y no quiero que me mientas para que me pese menos.
Lara se había callado muchas cosas por no herir de más los sentimientos del humano, pero dudaba seriamente que pudiese hacerse ni una idea aproximada de lo que dolía perder a cinco hijos en tan pocos meses y tres en concreto de aquella manera tan horrible. Tampoco consideraba que hubiera nada en ella que ni Kud ni Xalk pudieran salvar. <<Ya estoy perdida. No soy más que la desgracia y la rabia que cargo>> se dijo a sí misma convencida. La ordesa suspiró insegura. La ira y la tristeza volvieron a mezclar sus límites confusos y el estadio de rabia anterior dio paso a uno de profunda pena. Y miedo. Y preocupación por sus dos compañeros. La madre sin hijos se hizo aún más sangre en el labio y la saboreó con desagrado.
—Mira, si os vais a poner así de tontos los dos, podemos volver —añadió a regañadientes—. Pero en cuanto lleguemos al torreón Maciel vais a hacer el puñetero favor de dejarme sola y no volver a acercaros a mí. ¿Estamos? —La ordesa clavó la mirada en ambos y la mala suerte volvió a liberarse, esta vez sin embargo, de forma moderada. <<Ya me escaparé cuando pueda>> finalizó en silencio, inconsciente de lo que acababa de desatar.
Lara estaba completamente segura de que era ella quien iba a salvar al par de inconscientes que le habían seguido. Y a diferencia de lo que habría esperado la ordesa hace meses. No se sentía recompensada de ninguna forma por ayudarles. Solo sentía una extraña carga moral que le incomodaba. Atrás se dejaría una plaza mucho más entera de lo que habría querido.
—¡No trates de consolarme como si fuera estúpida! —le gritó alzando la voz de más, antes de volver a perderla en apenas un hilillo y continuar casi susurrando. Como si hablara para ella misma y para nadie más—. Fui yo quien decidió traerlos cuando Rocavarancolia tan solo era una opción... ¡Fui! ¡Yo!—volvió a chillar—. Y no quiero que me mientas para que me pese menos.
Lara se había callado muchas cosas por no herir de más los sentimientos del humano, pero dudaba seriamente que pudiese hacerse ni una idea aproximada de lo que dolía perder a cinco hijos en tan pocos meses y tres en concreto de aquella manera tan horrible. Tampoco consideraba que hubiera nada en ella que ni Kud ni Xalk pudieran salvar. <<Ya estoy perdida. No soy más que la desgracia y la rabia que cargo>> se dijo a sí misma convencida. La ordesa suspiró insegura. La ira y la tristeza volvieron a mezclar sus límites confusos y el estadio de rabia anterior dio paso a uno de profunda pena. Y miedo. Y preocupación por sus dos compañeros. La madre sin hijos se hizo aún más sangre en el labio y la saboreó con desagrado.
—Mira, si os vais a poner así de tontos los dos, podemos volver —añadió a regañadientes—. Pero en cuanto lleguemos al torreón Maciel vais a hacer el puñetero favor de dejarme sola y no volver a acercaros a mí. ¿Estamos? —La ordesa clavó la mirada en ambos y la mala suerte volvió a liberarse, esta vez sin embargo, de forma moderada. <<Ya me escaparé cuando pueda>> finalizó en silencio, inconsciente de lo que acababa de desatar.
Lara estaba completamente segura de que era ella quien iba a salvar al par de inconscientes que le habían seguido. Y a diferencia de lo que habría esperado la ordesa hace meses. No se sentía recompensada de ninguna forma por ayudarles. Solo sentía una extraña carga moral que le incomodaba. Atrás se dejaría una plaza mucho más entera de lo que habría querido.
No llores por no poder ver tu pierna,
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
- Leonart
Ficha de cosechado
Nombre: Reina Tomoe
Especie: Humana, Asiática
Habilidades: Punteria, Reflejos, Oido MusicalPersonajes : Nia: Nayade
Toima: Argos Magnetico
Kudryavka: Vánara
Basilisco de Un Solo Ojo Cizaña
Lorenzo: Centauro
Reina: Cosechada
Heridas/enfermedades :- Heridas:
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
29/07/14, 02:23 am
Kudryavka
-Yo no intentaba...-dijo con una voz que acabó muriendo mientras Lara arrancaba en otra diatriba, con su genio y nerviosismo. Quizas Kud lo podria haber visto todo una muestra más del dolor de la madre que acaba de perder sus últimos hijos de golpe, despues de que durante meses, como con cuenta gotas, otros hubieran muerto antes. Pero Kud ahora mismo, tenia muy buenas intenciones y, la rabieta de Lara en respuesta, le dolió a partes iguales como se le hizo irritable. Nunca antes se habia sentido así, pero estaba demasiado mosqueado como para controlarse o darse cuenta de lo que pasaba por su mente.
Se puso en pie resoplando por lo bajo. Barriendose el polvo de los pantalones, se dirigió a la ordesa.
-Puede que no sepa lo que es perder a cinco crios, cierto. Pero de ahi a que digas que no se de lo que hablo, ahhh eso no... Eso ya si que no.-cerró los puños, controlando la rabia.
-Mi padre. Mi madre. Mi hermana no nata, mis tres tios, mi primer amor, mis dos mejores amigos estan en una jodida tumba bajo el suelo y yo lo vivi todo. Cada muerte, vi escaparse la vida de mis seres queridos y no tanto. Indiscriminadamente, algo se los llevaba uno detrás de otro. Y lo único que juntaba a todas las muertes era yo. Solo yo. ¿Crees que no entiendo por lo que estas pasando? ¿Que no he experienciado la pérdida? Pues lo siento mucho, pero no es asi. Me gustaria vivir en un mundo de yupi, pero no es asi.-el vánara clavó la mirada sobre la ordesa.-Dime, ¿soy el culpable de esas muertes? ¿Me deberia culpar a mi mismo? O, mejor, ¿deberia culpar a la bomba que pusieron en el coche de mi padre, a la avalancha de nieve que se llevó a mis tios, al tipejo que disparó a la chica que me gustaba en la frente? Culpa a la ciudad. No te culpes a ti misma. Tú no eres una mala madre. No hubieras traido a tus hijos a este agujero infernal de saber todos los peligros que entrañaban.-
Parpadeó una vez y luego siguió hablando.
-He venido, no.-se corrigió, señalandose a si mismo y al clinger.-Hemos venido para traerte de vuelta y demostrarte que no importa lo que pase, que nos importas lo suficiente como para atravesar viento y marea. A nosotros, y a los del torreon. Y tu nos llamas tontos. A todos.-su tono se habia ido picando en chillidos a medida que hablaba.-¿Así es como lo pagas? Personas que te quieren y buscan ayudarte como una red de seguridad porque somos un grupo unido. No... No pienso tolerar que...-cortó con la mirada compungida de dolor y tristeza.
Eso fue suficiente. El aprendiz se habia cansado de hablar y se dió cuenta que ni era el momento ni el lugar para aquella charla y menos con la ordesa tan inestable y con la pérdida fresca. Pero su orgullo se habia visto herido y, viniendo de alguien con quien habia compartido experiencias risas y lágrimas tan solo dolia más.
-¿Sabes que? Olvida todo lo que te acabo de decir. Tan solo con que vuelvas al torreón de una pieza me basta. No es hoy el dia para hacer cambiar el mundo.-
Se puso el bõ a la espalda, dirigiendose al clinger, volvió a hablar.
-Xalk, cuento con que la devuelvas sana y salva al torreón. Yo...-se giró ante los dos transformados y se acuclilló entonces, preparando otro salto.-Necesito darme un paseo para despejarme...-les informó con un tono cansado-Volveré dentro de una hora o... veinte... lo que necesite...-
Y, tras eso, sin mirar atrás, pegó un salto subiendose a un edificio alto. De ahí, navegó con otras acrobacias y saltos para internarse en la red de tejados conectados de rocavarancolia, sin rumbo, sin dirección, el joven vánara saltaria hasta quedar exhausto.
-Yo no intentaba...-dijo con una voz que acabó muriendo mientras Lara arrancaba en otra diatriba, con su genio y nerviosismo. Quizas Kud lo podria haber visto todo una muestra más del dolor de la madre que acaba de perder sus últimos hijos de golpe, despues de que durante meses, como con cuenta gotas, otros hubieran muerto antes. Pero Kud ahora mismo, tenia muy buenas intenciones y, la rabieta de Lara en respuesta, le dolió a partes iguales como se le hizo irritable. Nunca antes se habia sentido así, pero estaba demasiado mosqueado como para controlarse o darse cuenta de lo que pasaba por su mente.
Se puso en pie resoplando por lo bajo. Barriendose el polvo de los pantalones, se dirigió a la ordesa.
-Puede que no sepa lo que es perder a cinco crios, cierto. Pero de ahi a que digas que no se de lo que hablo, ahhh eso no... Eso ya si que no.-cerró los puños, controlando la rabia.
-Mi padre. Mi madre. Mi hermana no nata, mis tres tios, mi primer amor, mis dos mejores amigos estan en una jodida tumba bajo el suelo y yo lo vivi todo. Cada muerte, vi escaparse la vida de mis seres queridos y no tanto. Indiscriminadamente, algo se los llevaba uno detrás de otro. Y lo único que juntaba a todas las muertes era yo. Solo yo. ¿Crees que no entiendo por lo que estas pasando? ¿Que no he experienciado la pérdida? Pues lo siento mucho, pero no es asi. Me gustaria vivir en un mundo de yupi, pero no es asi.-el vánara clavó la mirada sobre la ordesa.-Dime, ¿soy el culpable de esas muertes? ¿Me deberia culpar a mi mismo? O, mejor, ¿deberia culpar a la bomba que pusieron en el coche de mi padre, a la avalancha de nieve que se llevó a mis tios, al tipejo que disparó a la chica que me gustaba en la frente? Culpa a la ciudad. No te culpes a ti misma. Tú no eres una mala madre. No hubieras traido a tus hijos a este agujero infernal de saber todos los peligros que entrañaban.-
Parpadeó una vez y luego siguió hablando.
-He venido, no.-se corrigió, señalandose a si mismo y al clinger.-Hemos venido para traerte de vuelta y demostrarte que no importa lo que pase, que nos importas lo suficiente como para atravesar viento y marea. A nosotros, y a los del torreon. Y tu nos llamas tontos. A todos.-su tono se habia ido picando en chillidos a medida que hablaba.-¿Así es como lo pagas? Personas que te quieren y buscan ayudarte como una red de seguridad porque somos un grupo unido. No... No pienso tolerar que...-cortó con la mirada compungida de dolor y tristeza.
Eso fue suficiente. El aprendiz se habia cansado de hablar y se dió cuenta que ni era el momento ni el lugar para aquella charla y menos con la ordesa tan inestable y con la pérdida fresca. Pero su orgullo se habia visto herido y, viniendo de alguien con quien habia compartido experiencias risas y lágrimas tan solo dolia más.
-¿Sabes que? Olvida todo lo que te acabo de decir. Tan solo con que vuelvas al torreón de una pieza me basta. No es hoy el dia para hacer cambiar el mundo.-
Se puso el bõ a la espalda, dirigiendose al clinger, volvió a hablar.
-Xalk, cuento con que la devuelvas sana y salva al torreón. Yo...-se giró ante los dos transformados y se acuclilló entonces, preparando otro salto.-Necesito darme un paseo para despejarme...-les informó con un tono cansado-Volveré dentro de una hora o... veinte... lo que necesite...-
Y, tras eso, sin mirar atrás, pegó un salto subiendose a un edificio alto. De ahí, navegó con otras acrobacias y saltos para internarse en la red de tejados conectados de rocavarancolia, sin rumbo, sin dirección, el joven vánara saltaria hasta quedar exhausto.
す 争 基 ま
べ は づ す
て 欺 い 。
の 瞞 て
戦 に い
— Poema de Despedida Japonés (Anónimo, Sin Datar)
べ は づ す
て 欺 い 。
の 瞞 て
戦 に い
— Poema de Despedida Japonés (Anónimo, Sin Datar)
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.
Personajes :
● Dirke/Ramas.
● Giz.
● Tap/Malahierba.
●Lara 37/Saria Omen.
● Rasqa: parqio transformado en moloch.
● Eitne.
Heridas/enfermedades : Eitne: le falta la pierna derecha de rodilla para abajo.
Status : Es complicado.
Humor : La gracia de dios.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
31/07/14, 12:20 am
Lara fulminó a Kud con la mirada y, por primera vez desde que la luna le había cambiado los ojos, deseó que su mala suerte se contagiara al humano para que se pegara la hostia de su vida. <<¿Pero qué coño se ha creído?>>. A Lara le habia ofendido que el muchacho se tomara su dolor como una competición para ver quién había sufrido más. Ella también había perdido familiares y le había dolido, pero era incomparable, simple y llanamente incomparable. Lara estaba segura de que Kud no podía saber lo que sentía porque no había sido padre. No había creado vida a partir de la suya. No sabía lo que significaba cargar en el vientre a cinco seres diminutos y quererlos antes de que fueran realmente algo. No había sentido las patadas, ni las arcadas o el dolor del parto. Ni el amor del parto. Kud no entendía nada porque solo era un crío inmaduro con la misma comida de olla que Lara había tenido una vez hacía no tanto tiempo.
Inconsciente de la carga de mal de ojo que movía, Lara dirigió la mirada de reojo a Xalk. Aquel discurso de mamonazo del mono había vuelto a inclinar la balanza hasta el odio de tal manera que ni sus compañeros se salvaban. Lara gafó a Xalk y gafó el suelo entre ambos. Y se gafó a sí misma de tal manera que no podía imaginárselo ni con el barullo de números que se había alzado alrededor. La mala suerte convirtió en un hecho lo que hacía tan solo unos segundos habían sido unas grietas improbables en el suelo y ahora se abrían paso por la roca como un cuchillo por la mantequilla, abrazándose entre ellas. Lara sintió el temblor a sus pies con el tiempo justo para retroceder antes de que un enorme boquete se abriese justo donde los había tenido puestos, comunicando con una caverna superior de los subterráneos. Una caverna ocupada por un par de criaturas en pleno sueño y con muy mal despertar.
Un rugido retumbó por toda la plaza y Lara retrocedió de nuevo, cayendo de culo. Trató de parar la caída y un par de piedrecillas del suelo se le clavaron en las palmas de las manos. <<Lo he vuelto a hacer>>. Supo entonces. <<Joder. Joder. Joder>>. Lara estaba empezando a olvidarse de los motivos que le habían llevado a salir y los que le habían obligado ahora a enfadarse. Un fuerte miedo paranoico pudo con ella y logró que solo fuera capaz de levantarse con más prisa que gracia, para buscar una vía de escape.
—¡POR TODA TU SUERTE, XALK! ¡CORRE! —si gritó algo más, se perdió con el ruido de fondo.
Al tiempo que Lara corría, lidiando con sus traspieses, del agujero emergían un par de felinos, primos gigantes de las panteras negras terrestres, pero de seis patas y con dos pares de alas de murciélago que habían olvidado cómo usar. Por suerte para Xalkoth y Lara, la mala suerte de la zona no los discriminaría y las dos bestias sufrirían varios resbalones antes de emprender la carrera. Seis patas eran muchas para cruzar suelo gafado.
Sigue en Maciel.
Inconsciente de la carga de mal de ojo que movía, Lara dirigió la mirada de reojo a Xalk. Aquel discurso de mamonazo del mono había vuelto a inclinar la balanza hasta el odio de tal manera que ni sus compañeros se salvaban. Lara gafó a Xalk y gafó el suelo entre ambos. Y se gafó a sí misma de tal manera que no podía imaginárselo ni con el barullo de números que se había alzado alrededor. La mala suerte convirtió en un hecho lo que hacía tan solo unos segundos habían sido unas grietas improbables en el suelo y ahora se abrían paso por la roca como un cuchillo por la mantequilla, abrazándose entre ellas. Lara sintió el temblor a sus pies con el tiempo justo para retroceder antes de que un enorme boquete se abriese justo donde los había tenido puestos, comunicando con una caverna superior de los subterráneos. Una caverna ocupada por un par de criaturas en pleno sueño y con muy mal despertar.
Un rugido retumbó por toda la plaza y Lara retrocedió de nuevo, cayendo de culo. Trató de parar la caída y un par de piedrecillas del suelo se le clavaron en las palmas de las manos. <<Lo he vuelto a hacer>>. Supo entonces. <<Joder. Joder. Joder>>. Lara estaba empezando a olvidarse de los motivos que le habían llevado a salir y los que le habían obligado ahora a enfadarse. Un fuerte miedo paranoico pudo con ella y logró que solo fuera capaz de levantarse con más prisa que gracia, para buscar una vía de escape.
—¡POR TODA TU SUERTE, XALK! ¡CORRE! —si gritó algo más, se perdió con el ruido de fondo.
Al tiempo que Lara corría, lidiando con sus traspieses, del agujero emergían un par de felinos, primos gigantes de las panteras negras terrestres, pero de seis patas y con dos pares de alas de murciélago que habían olvidado cómo usar. Por suerte para Xalkoth y Lara, la mala suerte de la zona no los discriminaría y las dos bestias sufrirían varios resbalones antes de emprender la carrera. Seis patas eran muchas para cruzar suelo gafado.
Sigue en Maciel.
No llores por no poder ver tu pierna,
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
- GiniroryuGM
Ficha de cosechado
Nombre: Rägjynn
Especie: mjörní
Habilidades: memoria, buen oído y don de lenguas
Personajes :
● Noel: Draco de Estínfalo de origen sueco.
● Archime/Krono Rádem: Kairós irrense.
● Irianna/Dama Enigma: Nebulomante idrina lacustre.
● Adrune: Gamusino sinhadre, edeel.
● Lethe: Horus, enderth.
● Rägjynn: mjörní.
● Naeleth: Bruja del Hielo, nublina.
Unidades mágicas : 8/8
Síntomas : Aumenta su resistencia progresivamente. El sangrado de sus ojos se detonará con más frecuencia.
Armas :
● Noel: hacha de dos manos y espada bastarda.
● Archime/Krono Rádem: sus monólogos sobre biomecánica avanzada.
● Irianna: arco y estoque.
● Adrune: lanza, espadas cortas y arco.
● Lethe: arco y lanza.
● Rägjynn: jō.
● Naeleth: arco, sai y báculo.
Status : Gin: do the windy thing.
Humor : REALLY NOT FEELIN' UP TO IT RIGHT NOW. SORRY.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
19/08/14, 09:46 pm
Irianna se mantuvo cerca de Eara, Ayne y la chica marioneta de la cual aún no sabía su nombre. Observó con interés, sin acercarse demasiado ya que se dirigió a la chica voluptuosa que la había incomodado antes, como realizaba una mezcla de hierbas que, según ella, curarían la herida que tenía la mujer en su rodilla. Sin que la idrina tuviese tiempo a reaccionar, la chica de tez extraña se alejó sin esperar ninguna clase de respuesta por parte de la que había atendido e Irianna, descruzándose de repente de brazos, salió tras ella con la intención de preguntarle su nombre.
Fue en ese momento en el que arrugó la nariz al notar aquella peste tan desagradable. No obstante, antes de que pudiera siquiera girarse para comprobar de donde procedía, la enorme bola ya había sido lanzada en su dirección. La chica gritó y cogió de la mano a la de los ojos dispares y tiró de ella para apartarla de la trayectoria de la montaña de excremento. Aunque la situación bien merecía abandonar todo adorno literario e Irianna consideraría adecuado afirmar que se les venía encima un montón de mierda.
—¡Cuidado! —exclamó mientras tiraba de la chica hacia atrás—. Tenemos que alejarnos de aquí —la apremió a continuación con evidente desagrado en su tono. Había podido echar un vistazo al gigantesco escarabajo que era el dueño de aquella porquería.
En la carrera que emprendió entonces, lamentando en ese momento que su falda no fuese precisamente lo más adecuado para ello, se detuvo un breve instante para subirse ligeramente la prenda y poder mover las piernas con más libertad, chocándose con alguien que iba delante suya en cuanto reanudó la marcha. Resultó ser el tipo rimbombante de la máscara, del cual solo recordaba que se llamaban Roaxen Ten de entre todo el largo título con el que se había presentado. Su nombre importaba poco en aquel momento, pues ambos se precipitaron al suelo en cuanto se produjo el choque. Irianna ahogó un grito mientras la gravedad la reclamaba para después golpearse contra la dura piedra.
—¡Lo siento mucho! —se apresuró a decir, maldiciendo su propia torpeza mientras se incorporaba todo lo rápido que podía, tendiéndole una de sus manos al enmascarado para ayudarlo a levantarse. No podían perder el tiempo con caídas, pensó con fastidio.
Fue en ese momento en el que arrugó la nariz al notar aquella peste tan desagradable. No obstante, antes de que pudiera siquiera girarse para comprobar de donde procedía, la enorme bola ya había sido lanzada en su dirección. La chica gritó y cogió de la mano a la de los ojos dispares y tiró de ella para apartarla de la trayectoria de la montaña de excremento. Aunque la situación bien merecía abandonar todo adorno literario e Irianna consideraría adecuado afirmar que se les venía encima un montón de mierda.
—¡Cuidado! —exclamó mientras tiraba de la chica hacia atrás—. Tenemos que alejarnos de aquí —la apremió a continuación con evidente desagrado en su tono. Había podido echar un vistazo al gigantesco escarabajo que era el dueño de aquella porquería.
En la carrera que emprendió entonces, lamentando en ese momento que su falda no fuese precisamente lo más adecuado para ello, se detuvo un breve instante para subirse ligeramente la prenda y poder mover las piernas con más libertad, chocándose con alguien que iba delante suya en cuanto reanudó la marcha. Resultó ser el tipo rimbombante de la máscara, del cual solo recordaba que se llamaban Roaxen Ten de entre todo el largo título con el que se había presentado. Su nombre importaba poco en aquel momento, pues ambos se precipitaron al suelo en cuanto se produjo el choque. Irianna ahogó un grito mientras la gravedad la reclamaba para después golpearse contra la dura piedra.
—¡Lo siento mucho! —se apresuró a decir, maldiciendo su propia torpeza mientras se incorporaba todo lo rápido que podía, tendiéndole una de sus manos al enmascarado para ayudarlo a levantarse. No podían perder el tiempo con caídas, pensó con fastidio.
- Leonart
Ficha de cosechado
Nombre: Reina Tomoe
Especie: Humana, Asiática
Habilidades: Punteria, Reflejos, Oido MusicalPersonajes : Nia: Nayade
Toima: Argos Magnetico
Kudryavka: Vánara
Basilisco de Un Solo Ojo Cizaña
Lorenzo: Centauro
Reina: Cosechada
Heridas/enfermedades :- Heridas:
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
19/08/14, 10:23 pm
Roaxen Tenvrai
El xolnita no habria alargado el estreche de manos de todas formas. No queria saber en que roña y suciedad habia tratado el Intara sus manos con anterioridad. Los xenos con la capacidad de volar avistaron torreones en las cercanias. Y entonces el grupo de la fuente se puso en marcha hacia los refugios.
La mente del genio táctico Roaxen Tenvrai daba mil vueltas por minuto, trabajando a gran velocidad. Intentaba recordar diferentes datos, enseñanzas y consejos para situaciones de emergencia como era aquella. Aun dentro de su ego, el ulterano era capaz de ver cuales eran sus puntos flacos y, las campañas alargadas, el ejercicio físico, o el combate mano a mano no destacaban en él. Se fue preparando mentalmente para hacer ciertas concesiones para con su persona para asi lograr aumentar sus posibilidades de supervivencia.
Miró a los xenos un instante. Ellos iban a acompañarle y servirle en aquella tarea. Lo supieran o no. Era capaz de sacrificarlos a todos y a cada uno de ellos con tan de asegurar, aunque fuera una infima diferencia, una mayor seguridad para su persona. Y, con respecto al Intara... las leyes y su credo le obligaban trabajar a su lado y asegurar la supervivencia de ambos, pero de terciarse, él seria el último sacrificio, puesto que el capellán era harto más importante que un gitano de una de las ciudades -barco. El xolnita tan solo esperaba no tener que recurrir a aquel sacrificio, aunque no se fiaba del todo del Intara y, mucho menos, cuando el capellán iba tan engalardonado en el oro Imperial.
Iban en su camino, cuando, derrepente, en su retaguardia, apareció una masa apestosa rodando que colisionó contra uno de los edificios. El noble sacó un pañuelo y se tapó la boca asqueado.
Su vista, a través del casco, no era nada maravillosa en cuanto a definición y, para antes de que tuviese que darse cuenta de que aquello distaba de ser otro compañero, el escarabajo gigante apareció, reclamando su trofeo y, a la vez, haciendo avances, sesgando al grupo en dos por lo sano.
-¡Horror! ¡Nos acosa un coleóptero calvo!-exclamó, con cierto horror pero tambien con incredulidad en su tono. Pronto alzó su voz, decidiendo exponer lo que estaba en las mentes de todos, habiendo algunos puesto en marcha la huida de antemano.-¡Aprisa! ¡Dejad a los demás tenemos que...-
En aquel momentó, un ser que, para otras personas hubiera sido poco más que una chica de peso pluma impactó a Roaxen Tenvrai en el pecho como si fuera un tren exprés. Perdiendo la respiración unos segundos, cayó al suelo con ella encima y juntos, chocaron contra el duro suelo. Una reprimenda asqueada comenzó a brotar de su garganta al segundo que se recuperó y se dió cuenta de lo que habia pasado. Habia sido la mujer-pez, la escritora, que en aquellos momentos se disculpaba y le ofrecia ayuda para levantarse.
Roaxen Tenvrai se mordió el labio, reteniendo las ganas de recriminar a la idrina por la diferencia del grosor del cabello y, sin tomar la ayuda de esta, se puso de pie y se barrió el polvo de encima. Ya tendria tiempo de recriminar a alguien cuando estuvieran a salvo. Le dedicó una mirada severa a la idrina, que no se alargó durante mucho por el caos y la desolación que estaba causando el escarabajo pelotero gigante. Se giró y volvió a bramar, retomando la carrera, dolorido.
-¡Replegaos sin temor ni duda, adelante!-
Habian emprendido la marcha y los sonidos del escarabajo pronto habian quedado ahogados por el silencio de la ciudad. Las calles eran todas igual de ruinosas y polvorientas. Roaxen Tenvrai estaba al final de su paciencia. Manchado, herido y su orgullo pisado por meros xenoides y conspiradores contra Ulterania, estaba apunto de estallar. No fue hasta el cuarto de hora andando, aparentemente sin llegar a ningún sitio, que se dió cuenta que habian vuelto a pasar por un sitio.
-¡Un momento!-bramó, alzando el puño para que se detuvieran. Tanto si lo hicieron como sino, se acercó a una pared cercana y la examinó de cerca, hablando para si mismo.-Hemos pasado por aquí antes, pero juraria que llevamos un buen rato manteniendo una misma dirección.-se frotó la barbilla, cubierta por el casco y se giró hacia los demás.
-No tiene sentido pero, creo que estamos atrapados en algún tipo de laberinto. Hemos pasado antes por aquí, estoy seguro.-les informó
Cogito Ergo Sum escribió:♚ Alabado sea Ul que haya logrado este trato tan limpiamente. En más de un sentido.
El xolnita no habria alargado el estreche de manos de todas formas. No queria saber en que roña y suciedad habia tratado el Intara sus manos con anterioridad. Los xenos con la capacidad de volar avistaron torreones en las cercanias. Y entonces el grupo de la fuente se puso en marcha hacia los refugios.
La mente del genio táctico Roaxen Tenvrai daba mil vueltas por minuto, trabajando a gran velocidad. Intentaba recordar diferentes datos, enseñanzas y consejos para situaciones de emergencia como era aquella. Aun dentro de su ego, el ulterano era capaz de ver cuales eran sus puntos flacos y, las campañas alargadas, el ejercicio físico, o el combate mano a mano no destacaban en él. Se fue preparando mentalmente para hacer ciertas concesiones para con su persona para asi lograr aumentar sus posibilidades de supervivencia.
Miró a los xenos un instante. Ellos iban a acompañarle y servirle en aquella tarea. Lo supieran o no. Era capaz de sacrificarlos a todos y a cada uno de ellos con tan de asegurar, aunque fuera una infima diferencia, una mayor seguridad para su persona. Y, con respecto al Intara... las leyes y su credo le obligaban trabajar a su lado y asegurar la supervivencia de ambos, pero de terciarse, él seria el último sacrificio, puesto que el capellán era harto más importante que un gitano de una de las ciudades -barco. El xolnita tan solo esperaba no tener que recurrir a aquel sacrificio, aunque no se fiaba del todo del Intara y, mucho menos, cuando el capellán iba tan engalardonado en el oro Imperial.
Cogito Ergo Sum escribió:♚ Las manos de los Intara, después de todo, son tan rápidas y largas como el grosor de las carteras de sus victimas.
Iban en su camino, cuando, derrepente, en su retaguardia, apareció una masa apestosa rodando que colisionó contra uno de los edificios. El noble sacó un pañuelo y se tapó la boca asqueado.
Cogito Ergo Sum escribió:♚ ¿Qué ES eso? Como sea otro xeno, voy a saltarme el protocolo diplomático habitual. Que su infecta y bulbosa mutante madre se acerque a él, que para algo lo trajo a este mundo
Su vista, a través del casco, no era nada maravillosa en cuanto a definición y, para antes de que tuviese que darse cuenta de que aquello distaba de ser otro compañero, el escarabajo gigante apareció, reclamando su trofeo y, a la vez, haciendo avances, sesgando al grupo en dos por lo sano.
-¡Horror! ¡Nos acosa un coleóptero calvo!-exclamó, con cierto horror pero tambien con incredulidad en su tono. Pronto alzó su voz, decidiendo exponer lo que estaba en las mentes de todos, habiendo algunos puesto en marcha la huida de antemano.-¡Aprisa! ¡Dejad a los demás tenemos que...-
En aquel momentó, un ser que, para otras personas hubiera sido poco más que una chica de peso pluma impactó a Roaxen Tenvrai en el pecho como si fuera un tren exprés. Perdiendo la respiración unos segundos, cayó al suelo con ella encima y juntos, chocaron contra el duro suelo. Una reprimenda asqueada comenzó a brotar de su garganta al segundo que se recuperó y se dió cuenta de lo que habia pasado. Habia sido la mujer-pez, la escritora, que en aquellos momentos se disculpaba y le ofrecia ayuda para levantarse.
Roaxen Tenvrai se mordió el labio, reteniendo las ganas de recriminar a la idrina por la diferencia del grosor del cabello y, sin tomar la ayuda de esta, se puso de pie y se barrió el polvo de encima. Ya tendria tiempo de recriminar a alguien cuando estuvieran a salvo. Le dedicó una mirada severa a la idrina, que no se alargó durante mucho por el caos y la desolación que estaba causando el escarabajo pelotero gigante. Se giró y volvió a bramar, retomando la carrera, dolorido.
-¡Replegaos sin temor ni duda, adelante!-
Habian emprendido la marcha y los sonidos del escarabajo pronto habian quedado ahogados por el silencio de la ciudad. Las calles eran todas igual de ruinosas y polvorientas. Roaxen Tenvrai estaba al final de su paciencia. Manchado, herido y su orgullo pisado por meros xenoides y conspiradores contra Ulterania, estaba apunto de estallar. No fue hasta el cuarto de hora andando, aparentemente sin llegar a ningún sitio, que se dió cuenta que habian vuelto a pasar por un sitio.
-¡Un momento!-bramó, alzando el puño para que se detuvieran. Tanto si lo hicieron como sino, se acercó a una pared cercana y la examinó de cerca, hablando para si mismo.-Hemos pasado por aquí antes, pero juraria que llevamos un buen rato manteniendo una misma dirección.-se frotó la barbilla, cubierta por el casco y se giró hacia los demás.
-No tiene sentido pero, creo que estamos atrapados en algún tipo de laberinto. Hemos pasado antes por aquí, estoy seguro.-les informó
Cogito Ergo Sum escribió:♚ Y puedo apostar mi pellejo que esto tiene que ver con una tecnologia a la cual el Imperio todavia no tiene opción de usar. ¡Ilusiones! ¡Engaños! ¡Herejia! ¡Son todo uno y lo mismo a la vez!
す 争 基 ま
べ は づ す
て 欺 い 。
の 瞞 て
戦 に い
— Poema de Despedida Japonés (Anónimo, Sin Datar)
べ は づ す
て 欺 い 。
の 瞞 て
戦 に い
— Poema de Despedida Japonés (Anónimo, Sin Datar)
- Dal
Ficha de cosechado
Nombre: Alec (Alasdair)
Especie: Humano; Escocés.
Habilidades: Fuerza bruta, nociones de lucha y resistencia.
Personajes :- Enredo : Humano Brujo de las Enredaderas.
- Surásara : Ulterana Naga.
- Varsai : Varmana Licántropo leopardo de las nieves.
- Eriel : Nublino.
Heridas/enfermedades : Finas cicatrices por todo el cuerpo.
Status : Perdido en la ciudad de los milagros y los portentos.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
19/08/14, 10:46 pm
El pequeño parqio se acercó a la niña y estiró el cuello dándole a entender que tenía vía libre para acariciarlo. Varsai posó su mano sobre el cuelo y la bajó y la subió, el tacto era suave y agradable. La varmana volvió a escribir en su libreta:
"Tienes unas escamas muy suaves y bonitas. Tú pareces muy simpático.
¿Te gustaría ser mi amigo?"
Acompañó la escritura con una sonrisa. Pronto se pusieron en camino y al poco un fuerte olor asaltó las fosas nasales de la niña, mirando en todas direcciones pronto localizó el foco. <<Hala, que bicho tan grande>> fue lo único que pensó antes de hacer como el resto y echar a correr detrás de ellos. El cascabel tintineaba al compás mientras ella corría y Varsai sonrió, a pesar de todo se lo estaba pasando bien.
Cuando se quiso dar cuenta del gran grupo que había inicialmente tan sólo quedaba la mitad. Le gustó ver a Rasqa volar por encima de ellos alegrándose de no haberse separado de él.
<<Por aquí ya hemos pasado>> pensó poco antes de que el chico de pelo rosa lo anunciara en voz alta.
"Quizá deberíamos haber girado a la izquierda en el último cruce" escribió intentando hacérselo ver a alguien.
"Tienes unas escamas muy suaves y bonitas. Tú pareces muy simpático.
¿Te gustaría ser mi amigo?"
Acompañó la escritura con una sonrisa. Pronto se pusieron en camino y al poco un fuerte olor asaltó las fosas nasales de la niña, mirando en todas direcciones pronto localizó el foco. <<Hala, que bicho tan grande>> fue lo único que pensó antes de hacer como el resto y echar a correr detrás de ellos. El cascabel tintineaba al compás mientras ella corría y Varsai sonrió, a pesar de todo se lo estaba pasando bien.
Cuando se quiso dar cuenta del gran grupo que había inicialmente tan sólo quedaba la mitad. Le gustó ver a Rasqa volar por encima de ellos alegrándose de no haberse separado de él.
<<Por aquí ya hemos pasado>> pensó poco antes de que el chico de pelo rosa lo anunciara en voz alta.
"Quizá deberíamos haber girado a la izquierda en el último cruce" escribió intentando hacérselo ver a alguien.
Soy Dal, hijo del Estío y el Crepúsculo. Señor del Vacío y Amo del Infinito. Destructor de Mundos y Artífice de Infiernos. Conde de la Nada y Duque de los Océanos. Rey del Purgatorio y Terror del Cielo. Marqués del Inframundo y Barón de la Muerte. Por todos estos titulos, Invitado, reclamo tu vida para mí .
- Seth
Ficha de cosechado
Nombre: Connor
Especie: Humano
Habilidades: Fuerza bruta, inmutabilidad, rapidez mentalPersonajes :
● Devoss: Humano (Países Bajos) Licántropo Tigre
● Maila: Humana (Hawaii) Bruja de la Arena
●Connor: Humano (Canadá)
Unidades mágicas : 8/8
Síntomas : Sufre episodios de insomnio. Tendrá episodios de vértigo postural, más frecuentes al levantarse tras dormir, que pueden durar desde minutos a varias horas.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
20/08/14, 12:47 am
Uno de los pajarracos empieza a dar señas de que ha encontrado un refugio y nos ponemos en marcha, ninguno de nosotros habla, todo es invadido por un inquietante silencio que me pone la piel de gallina, yo y los humanos seguimos unidos por razones obvias, sería estúpido ponerse en grupo con un alien.
Pero todo esto, queda atrás cuando huelo una horrible peste que me produce arcadas, al mirar hacia atrás veo una enorme bola de mierda, si, de mierda rocavarancolesa de la que surge una especie de escarabajo pelotero ¿Mira, pero si hay bichitos y todo? Parece que tiene intención de comernos y eso mismo demuestra, ya que se lanza hacia nosotros a por todas. Como es normal y obvio, empiezo a correr todo lo que puedo mientras observo como a mi alrededor cunde el pánico y lo que es peor: la separación del grupo.
Evidentemente no voy a huir de esa bestia solo, así que rápidamente busco seguir a alguien. A ver, a ver.... Ya sé, el tio listo de la máscara. Empiezo a correr detrás de el y de sus acompañantes, la chica plateada , la chica felina y la de los ojos de un color diferente.
-Joder, joder , joder-digo totalmente alterado cuando hacemos un alto al darnos cuenta de que andamos en círculos.- Deberíamos seguir andando un poco más aunque no parezca que nos persiga, ese bicho puede aparecer en cualquier momento... ¿Adónde se supone que vamos a ir ahora? Hemos perdido de vista a la mitad del grupo en un segundo ¿Cómo se supone que vamos a sobrevivir tanto tiempo aquí? Menuda mierda, vaya asco de sitio, tendría que haberme quedado más tiempo jugando al fútbol con Aloin y Berg... Así al menos no me habría encontrado al cabrón de Doce-. Entonces vuelvo a la realidad y aclaro lo que me ha pasado. - Lo siento.... chicos, seguro que no os estoy ayudando nada con mis tonterías.... perdonadme por favor-. Añado mientras dejo de andar en círculos.
-Creo que deberíamos marcar el terreno de alguna forma, no sé como pero al menos sabríamos orientarnos mejor ¿no?-.
Pero todo esto, queda atrás cuando huelo una horrible peste que me produce arcadas, al mirar hacia atrás veo una enorme bola de mierda, si, de mierda rocavarancolesa de la que surge una especie de escarabajo pelotero ¿Mira, pero si hay bichitos y todo? Parece que tiene intención de comernos y eso mismo demuestra, ya que se lanza hacia nosotros a por todas. Como es normal y obvio, empiezo a correr todo lo que puedo mientras observo como a mi alrededor cunde el pánico y lo que es peor: la separación del grupo.
Evidentemente no voy a huir de esa bestia solo, así que rápidamente busco seguir a alguien. A ver, a ver.... Ya sé, el tio listo de la máscara. Empiezo a correr detrás de el y de sus acompañantes, la chica plateada , la chica felina y la de los ojos de un color diferente.
-Joder, joder , joder-digo totalmente alterado cuando hacemos un alto al darnos cuenta de que andamos en círculos.- Deberíamos seguir andando un poco más aunque no parezca que nos persiga, ese bicho puede aparecer en cualquier momento... ¿Adónde se supone que vamos a ir ahora? Hemos perdido de vista a la mitad del grupo en un segundo ¿Cómo se supone que vamos a sobrevivir tanto tiempo aquí? Menuda mierda, vaya asco de sitio, tendría que haberme quedado más tiempo jugando al fútbol con Aloin y Berg... Así al menos no me habría encontrado al cabrón de Doce-. Entonces vuelvo a la realidad y aclaro lo que me ha pasado. - Lo siento.... chicos, seguro que no os estoy ayudando nada con mis tonterías.... perdonadme por favor-. Añado mientras dejo de andar en círculos.
-Creo que deberíamos marcar el terreno de alguna forma, no sé como pero al menos sabríamos orientarnos mejor ¿no?-.
- Aes
Ficha de cosechado
Nombre: Aniol
Especie: Humano
Habilidades: habilidad manual, automotivación, olfato fino.
Personajes : ●Ruth: Humana (Israel)
Demonio de Fuego
●Tayron: Humano (Bélgica)
Lémur
●Fleur: Humana (Francia)
Siwani
●Aniol: Humano (Polonia)
Unidades mágicas : 03/12
Síntomas : Querrá salir más del torreón. En ocasiones, aparecerán destellos de luz a su alrededor que duran un instante.
Status : KANON VOY A POR TI
Humor : Me meo ;D
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
20/08/14, 01:55 am
Uno de las aves vuela por encima de todos y fija su vista a lo lejos, nos indica que ha visto unos de esos lugares que al parecer nos dan protección, refugios. Comenzamos a caminar, yo con precaución y sin poder quitarme la imagen de esa bestia con alas sobrevolando nuestras cabezas. >>Todavía no me lo puedo creer, es impensable<<. Todavía no proceso todo esto, y el dolor de cabeza no desaparece.
Permanezco entre Samika y el chico que se fuma el cigarro, sin estar más cerca de uno que de otro y sin abrir la boca para absolutamente nada, ya tengo suficiente con tener que estar aquí como para tener una conversación con desconocidos, también sé que tarde o temprano deberé de hacerlo y salir de mi timidez, pero solo para sobrevivir y nada más.
Me aparto el pelo ya seco del chapuzón en esa fuente extraña hacia el lado derecho, dejándolo caer sobre un hombro para quitarme la calor que tengo encima. Un olor me desconcierta, parece que todos lo han notado.>> Al menos no estoy loca, de momento.<<. Es una extraña sensación a podrido, apenas puedo reprimir mis ganas de vomitar pero lo consigo cerrando los puños y respirando hondo. Me alerta un sonido que me hace girarme con velocidad hacia mi espalda, una gran bola de peste, mierda y todo lo que pueda provocar mal olor en esta ciudad rueda hacia nosotros. Me da tiempo a apartarme dando unos pasos atrás, lo he conseguido esquivar pero no debería alegrarme tanto. A lo lejos hay un...>>¡¿Dios mío, es eso un..Escarabajo gigante?¡, ¡Mi mayor pasión, los bichos grandes, parece que este lugar está preparado para todo. Y encima es ilógico, es al revés que en la Tierra, aquí los insectos son los que aplastan a los humanos.<<. Pego un grito atroz de horror y luego digo:
-¡Corred¡.
No veo a Samika ni tampoco al otro chico, ni siquiera me fijo por donde voy, solo me preocupo en correr sin parar de pensar en que puede seguirme aún detrás, no voy a dejar que esa cosa me alcance , solo me da tiempo a ver como el chico que indicaba que nos acercáramos a la fuente y la de piel plateada se chocan bruscamente y van al suelo. >>Lo que nos faltaba, encima no hay mejor momento para caerse<<. Tampoco me preocupo mucho, se incorporan y también huyen.
Cuando por fin creemos dejar a esa alimaña atrás caigo en que la mitad del grupo ha desaparecido, no sé donde andan y tampoco recuerdo en el momento de la separación, pero eso no importa. Un nuevo problema nos invade a los diez que estamos reunidos. Estamos totalmente perdidos, >>Osea ya lo estábamos, pero aún más todavía<<. El que va de morado es el que se da cuenta el primero, una vez informada yo también lo noto, es como si pareciese magia. El rubio propone distinguir el camino o algo parecido. >>¿A lo Hansel y Gretel?, no creo que funcione, pero es lo mejor que tenemos hasta ahora ¿No?<<. No digo nada y me acerco a la chica que espié en las mazmorras, la que no hablaba. Lo hago casi sin que me note, intentando leer lo que ha escrito en su libreta. >>Yo que sé, no sé ni cual es el último cruce<<. No iba a responder pero no puedo resistirme a sus ojos de niña, esa inocencia al mirar al bicho ese que vuela...
-No lo sé, quizás deberíamos quedarnos parados, a observar nuestra situación y pensar algún plan.-Hablo mirándola aunque alzo la voz un poco para que me escuchen todos.- Cualquier cosa es mejor que dar tumbos por aquí sin rumbo alguno.
>>Ten fe Ruth, pronto encontrarás el refugio, quizás no de inmediato, pero pronto.<<. Ahora mismo consolarme a mí misma, es lo mejor que sé hacer.
Permanezco entre Samika y el chico que se fuma el cigarro, sin estar más cerca de uno que de otro y sin abrir la boca para absolutamente nada, ya tengo suficiente con tener que estar aquí como para tener una conversación con desconocidos, también sé que tarde o temprano deberé de hacerlo y salir de mi timidez, pero solo para sobrevivir y nada más.
Me aparto el pelo ya seco del chapuzón en esa fuente extraña hacia el lado derecho, dejándolo caer sobre un hombro para quitarme la calor que tengo encima. Un olor me desconcierta, parece que todos lo han notado.>> Al menos no estoy loca, de momento.<<. Es una extraña sensación a podrido, apenas puedo reprimir mis ganas de vomitar pero lo consigo cerrando los puños y respirando hondo. Me alerta un sonido que me hace girarme con velocidad hacia mi espalda, una gran bola de peste, mierda y todo lo que pueda provocar mal olor en esta ciudad rueda hacia nosotros. Me da tiempo a apartarme dando unos pasos atrás, lo he conseguido esquivar pero no debería alegrarme tanto. A lo lejos hay un...>>¡¿Dios mío, es eso un..Escarabajo gigante?¡, ¡Mi mayor pasión, los bichos grandes, parece que este lugar está preparado para todo. Y encima es ilógico, es al revés que en la Tierra, aquí los insectos son los que aplastan a los humanos.<<. Pego un grito atroz de horror y luego digo:
-¡Corred¡.
No veo a Samika ni tampoco al otro chico, ni siquiera me fijo por donde voy, solo me preocupo en correr sin parar de pensar en que puede seguirme aún detrás, no voy a dejar que esa cosa me alcance , solo me da tiempo a ver como el chico que indicaba que nos acercáramos a la fuente y la de piel plateada se chocan bruscamente y van al suelo. >>Lo que nos faltaba, encima no hay mejor momento para caerse<<. Tampoco me preocupo mucho, se incorporan y también huyen.
Cuando por fin creemos dejar a esa alimaña atrás caigo en que la mitad del grupo ha desaparecido, no sé donde andan y tampoco recuerdo en el momento de la separación, pero eso no importa. Un nuevo problema nos invade a los diez que estamos reunidos. Estamos totalmente perdidos, >>Osea ya lo estábamos, pero aún más todavía<<. El que va de morado es el que se da cuenta el primero, una vez informada yo también lo noto, es como si pareciese magia. El rubio propone distinguir el camino o algo parecido. >>¿A lo Hansel y Gretel?, no creo que funcione, pero es lo mejor que tenemos hasta ahora ¿No?<<. No digo nada y me acerco a la chica que espié en las mazmorras, la que no hablaba. Lo hago casi sin que me note, intentando leer lo que ha escrito en su libreta. >>Yo que sé, no sé ni cual es el último cruce<<. No iba a responder pero no puedo resistirme a sus ojos de niña, esa inocencia al mirar al bicho ese que vuela...
-No lo sé, quizás deberíamos quedarnos parados, a observar nuestra situación y pensar algún plan.-Hablo mirándola aunque alzo la voz un poco para que me escuchen todos.- Cualquier cosa es mejor que dar tumbos por aquí sin rumbo alguno.
>>Ten fe Ruth, pronto encontrarás el refugio, quizás no de inmediato, pero pronto.<<. Ahora mismo consolarme a mí misma, es lo mejor que sé hacer.
"Ya No Hay Fuego, Pero Sigue Quemando."
"Son Un Sentimiento Suspendido En El Tiempo, A Veces Un Evento Terrible Condenado A Repetirse."
"Deja Que Tu Fe Sea Más Grande Que Tus Miedos."
"¡Se Lo Diré Al Señor Santa!"
- Muffie
Ficha de cosechado
Nombre: Szczenyak o Colmillo
Especie: vittya zawodny
Habilidades: Habilidad mental, habilidad manual y orientación
Personajes :
● Wednesday: Vouivre humana británica.
● Karime: Licántropa loba libense de la capital.
● Kimbra: Demonio rakshasa krabelinense Hija de Lunas engendro.
● Irenneil: Brujo de la cera aurva sinhadre.
● Edén Damkinea: Atlante daeliciano de la Ciudad del Norte.
● Szczenyak//Colmillo: vittya zawodny nómada.
Unidades mágicas : 5/5
Heridas/enfermedades :
● Ka: Le falta el ojo izquierdo.
● Colmillo: Tiene partido el colmillo derecho.
Síntomas : Gusto por dibujar trazos sin ton ni son cuando vacía la mente.
Armas :
● Wen: Guadaña doble y arco.
● Ka: Espadas gemelas, arco y dardos.
● Kim: Arco, machetes y dagas.
● Neil: Cuchara de madera y cera.
● Edén: Magia y sonrisas amables.
● Colmillo: inutilidad.
Humor : Absurdo
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
20/08/14, 02:17 am
Kimbra oyó los pasos acelerados de alguien acercándose a ella, se dio la vuelta para encontrarse con la chica de piel plateada arrugando la nariz y una bola de asquerosidad acercándose a ellas. La chica tiró de ella para que saliera de la trayectoria de la bola y ambas comenzaron a correr. No sería agradable que la bola impactara contra cualquiera de ellos, incluso podría causar algún accidente que incluyera heridos, por lo que la engendro vigiló mientras corría por si tenía que apartar del camino de la bola a alguien como había hecho la chica plateada, cuyo nombre recordaba como Irianna.
Cuando Irianna paró a remangarse la falda, Kimbra se preguntó el por qué de aquella de vestimenta. Aquella elección de atuendo era del todo inútil para moverse con facilidad y correr, como en aquella situación, y, puesto que lo más lógico en el caso de querer las piernas cubiertas por completo era la elección de pantalones o de faldas con rajas a los lados, a Kimbra le confundió. Aunque no era algo extraño, la vestimenta de los nuevos compañeros de Kimbra resultaba confusa para la engendro, sobre todo lo que el chico de pelo morado llevaba en la cara. ¿Sería un adorno excesivo o formaría parte de su fisionomía? Kimbra no podía ni pretendía preguntárselo, al menos no por el momento, y se limitó a ayudar a Irianna a levantarse, ya que había caído junto al chico del adorno facial excesivo, y a seguir al grupo corriendo.
En cierto punto el grupo se paró. EL número se había reducido visiblemente a la mitad y la engendro sospechó que el resto había sido perseguido por aquel extraño insecto gigante. “¿Sería comestible? ¿Habría que usar de cebo algún tipo de putrefacción o el alimento normal serviría?” se preguntó mientras el resto hablaba entre sí intentando deducir dónde se hallaban y cómo salir de ahí. Kimbra observó curiosa a los hablantes sin entender su punto. ¿Por qué huir de un lugar que no conocen para entrar a otro que tampoco conocen? ¿Por qué salir del resguardo de aquellas montañas para entrar en un territorio posiblemente peligroso?
"Rocavarancolia es una ciudad llena de misterios y sorpresas, como un acertijo complicado y excitante."
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.Personajes :
● Dirke/Ramas.
● Giz.
● Tap/Malahierba.
●Lara 37/Saria Omen.
● Rasqa: parqio transformado en moloch.
● Eitne.
Heridas/enfermedades : Eitne: le falta la pierna derecha de rodilla para abajo.
Status : Es complicado.
Humor : La gracia de dios.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
20/08/14, 02:33 pm
—No sé, ¿sí? —con el tiempo todo podía ocurrir, según el parqio, y Varsai parecía simpática. Todavía no entendía por qué morros la hembra tan solo escribía. <<¿Se habrá tragado su propia lengua?>>. Ni siquiera sabía si era posible. En un intento estúpido de comprobarlo, Rasqa abrió la boca y giró la lengua hacia atrás. Solo se hizo daño y acabó tosiendo. <<Pues se la habrán comido>>. Decidió. Porque no era normal no hablar.
No tuvo mucho tiempo más para pensar, pues pronto un olor nauseabundo le pegó en las fosas nasales. Rasqa compuso una mueca de asco y giró la cabeza para buscar el origen de aquel hedor, para ver enseguida una bola gigante conducida por un insecto gigante. Era la primera vez que veía uno de tal tamaño y le pareció mucho menos gracioso que los que perseguía por los prados de la isla central. El parqio se impulsó con las alas y alzó el vuelo siguiendo a Sekkeh y al del caparazón, cuyo nombre casi había olvidado del todo.
—¡Vuela con las piernas, Varsai! —fue todo lo que supo decirle para que corriera.
El dragoncillo se alzó en el aire para asegurarse de que la bola que fue tras ellos no pudiera darle de ninguna manera y, aunque no aminoró la marcha en ningún momento, tampoco aceleró, asegurándose de permanecer todo el tiempo entre la multitud. No tardó en darse cuenta de que se habían dividido. <<Podría ir a buscarlos...>> se dijo brevemente. Era demasiado peligroso para que lo considerara de verdad. <<Lo mismo se los han comido ya>> pensó ligeramente preocupado. Apenas conocía a los bípedos, por lo que tampoco les había cogido un cariño más fuerte que el ciclo natural de las cosas. Al fin y al cabo, los insectos gigantes eran un animal más y necesitaban comer.
Se había quedado con un grupo extraño: varias hembras (suponía que lo eran, pero no estaba seguro) y otros tantos machos, Sekkeh y Temprai entre ellos. Cada cual era más raro que el anterior y Rasqa hizo todo lo que pudo por quedarse con sus caras, su número y a ser posible sus nombres. <<Los necesitaré si conviviré con ellos>>. Aunque todavía no tenía claro que eso fuera a suceder, le parecía la opción más sensata después de ver semejante bicho. Por eso mismo, Rasqa no había hecho el esfuerzo de sobrevolar la zona y se había quedado volando a la altura de la mayoría de las cabezas bípedas. Como para él todas aquellas cuevas artificiales eran iguales desde esa altitud, no se llegó a percatar de que se habían perdido hasta que el de la concha se lo advirtió.
Sekk le sugirió que les sobrevolara para hacer de guía y Rasqa asintió enérgico al ulterno, agitando las alas con fuerza para alzarse. Estaba acostumbrado a hacer eso con los rebaños de prácticas, por lo que no le supondría ningún esfuerzo hacerles ese favor. Desde lo alto, las cuevas se veían con formas muy complicadas de poner en palabras para el parqio. <<Normal que se pierdan... Esto parece hecho para eso>>. Estaba convencido de ello.
—¡Cuando me digais! —Rasqa estaba listo para hacer lo poco que sabía hacer bien.
No tuvo mucho tiempo más para pensar, pues pronto un olor nauseabundo le pegó en las fosas nasales. Rasqa compuso una mueca de asco y giró la cabeza para buscar el origen de aquel hedor, para ver enseguida una bola gigante conducida por un insecto gigante. Era la primera vez que veía uno de tal tamaño y le pareció mucho menos gracioso que los que perseguía por los prados de la isla central. El parqio se impulsó con las alas y alzó el vuelo siguiendo a Sekkeh y al del caparazón, cuyo nombre casi había olvidado del todo.
—¡Vuela con las piernas, Varsai! —fue todo lo que supo decirle para que corriera.
El dragoncillo se alzó en el aire para asegurarse de que la bola que fue tras ellos no pudiera darle de ninguna manera y, aunque no aminoró la marcha en ningún momento, tampoco aceleró, asegurándose de permanecer todo el tiempo entre la multitud. No tardó en darse cuenta de que se habían dividido. <<Podría ir a buscarlos...>> se dijo brevemente. Era demasiado peligroso para que lo considerara de verdad. <<Lo mismo se los han comido ya>> pensó ligeramente preocupado. Apenas conocía a los bípedos, por lo que tampoco les había cogido un cariño más fuerte que el ciclo natural de las cosas. Al fin y al cabo, los insectos gigantes eran un animal más y necesitaban comer.
Se había quedado con un grupo extraño: varias hembras (suponía que lo eran, pero no estaba seguro) y otros tantos machos, Sekkeh y Temprai entre ellos. Cada cual era más raro que el anterior y Rasqa hizo todo lo que pudo por quedarse con sus caras, su número y a ser posible sus nombres. <<Los necesitaré si conviviré con ellos>>. Aunque todavía no tenía claro que eso fuera a suceder, le parecía la opción más sensata después de ver semejante bicho. Por eso mismo, Rasqa no había hecho el esfuerzo de sobrevolar la zona y se había quedado volando a la altura de la mayoría de las cabezas bípedas. Como para él todas aquellas cuevas artificiales eran iguales desde esa altitud, no se llegó a percatar de que se habían perdido hasta que el de la concha se lo advirtió.
Sekk le sugirió que les sobrevolara para hacer de guía y Rasqa asintió enérgico al ulterno, agitando las alas con fuerza para alzarse. Estaba acostumbrado a hacer eso con los rebaños de prácticas, por lo que no le supondría ningún esfuerzo hacerles ese favor. Desde lo alto, las cuevas se veían con formas muy complicadas de poner en palabras para el parqio. <<Normal que se pierdan... Esto parece hecho para eso>>. Estaba convencido de ello.
—¡Cuando me digais! —Rasqa estaba listo para hacer lo poco que sabía hacer bien.
No llores por no poder ver tu pierna,
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
- Aliera W
Ficha de cosechado
Nombre: Sigrún
Especie: Humano
Habilidades: Puntería, orientación y resistenciaPersonajes : Sigrún
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
20/08/14, 05:11 pm
Mientras se apartaba un poco de la ciega vestida de azul, vio aparecer otro pájaro gigante, que los miraba con desconcierto . Sigrún no tuvo tiempo de examinarla mucho. Primero llegó el olor, un olor fétido que le hizo arrugar la nariz, y después vio una bola gigante marrón y nauseabunda. Pero detrás de la bola apareció un escarabajo pelotero… con sed de sangre.
Sigrún retrocedió por puro instinto. Vio por el rabillo del ojo que la gatita se quedaba asombrada mirándolo, pero al final la cría reaccionó y hecho a correr. No tardó en imitarla.
No se fijó en los compañeros que también seguían al de morado, él sólo estaba pendiente del que llevaba el casco y nada más. Por suerte, siempre le había gustado correr y tenía bastante resistencia.
Tanto tiempo después que empezaban a arderle los pulmones, el de morado de nombre larguísimo se detuvo y dijo lo que algunos ya estaban pensando… se habían perdido y estaban dando vueltas. <<Estúpido. ¿Quién le ha mandado a éste dirigir nada?>>.
La mascota se ofreció a sobrevolar la zona para encontrar la salida. Instintivamente, Sigrún buscó al vikingo que, evidentemente, no era el dueño del lagarto, sino que éste era un participante más. Y, para su disgusto, había tomado el mismo camino. Se apoyó en una pared para recuperar el aliento. Los del otro grupo, perseguidos por el escarabajo, habían desaparecido. Tampoco le importó. Los tres pajarracos, Miss Modelito, el pelanas... no iba a echarlos de menos, desde luego. Y, como ya no tenía que matarlos sino simplemente sobrevivir, que se matasen entre ellos.
Sigrún retrocedió por puro instinto. Vio por el rabillo del ojo que la gatita se quedaba asombrada mirándolo, pero al final la cría reaccionó y hecho a correr. No tardó en imitarla.
No se fijó en los compañeros que también seguían al de morado, él sólo estaba pendiente del que llevaba el casco y nada más. Por suerte, siempre le había gustado correr y tenía bastante resistencia.
Tanto tiempo después que empezaban a arderle los pulmones, el de morado de nombre larguísimo se detuvo y dijo lo que algunos ya estaban pensando… se habían perdido y estaban dando vueltas. <<Estúpido. ¿Quién le ha mandado a éste dirigir nada?>>.
La mascota se ofreció a sobrevolar la zona para encontrar la salida. Instintivamente, Sigrún buscó al vikingo que, evidentemente, no era el dueño del lagarto, sino que éste era un participante más. Y, para su disgusto, había tomado el mismo camino. Se apoyó en una pared para recuperar el aliento. Los del otro grupo, perseguidos por el escarabajo, habían desaparecido. Tampoco le importó. Los tres pajarracos, Miss Modelito, el pelanas... no iba a echarlos de menos, desde luego. Y, como ya no tenía que matarlos sino simplemente sobrevivir, que se matasen entre ellos.
- Red
Ficha de cosechado
Nombre: Doe
Especie: Ninguna conocida
Habilidades: No tienePersonajes :
● Vacuum: Hado infernal originario de la Tierra.
● Saren: Selkie roc idrino.
● Keiriarei: Kitsune de nueve colas ulterana.
● Sekk: Berserker ulterano.
● Remilo: Brujo del cobre irrense.
● Qwara Khumalo: Ifrit sudafricana.
Re: Barrio de los Callejones sin Salida
20/08/14, 11:27 pm
En cuanto aquel penetrante olor inundó sus fosas nasales, Sekk giró la cabeza buscando el origen de dicha peste. Solo necesito un segundo para asimilar la enorme bola de excrementos que se les venía encima y a su monstruoso propietario, el mismo intervalo de tiempo que tardó en dar media vuelta y echar a correr como si le persiguieran los demonios. No frenó ni un ápice y no se paró a esperar a nadie, motivo por el cual avanzó en cabeza por aquella red de callejones sin preocuparse por la dirección. Solamente quería poner toda la distancia posible entre aquel engendro y su persona, y para cuando por fin se paró creía haberlo hecho.
El ulterano se apoyó en una pared para recuperar el aliento, momento que aprovechó para echar un vistazo a las personas que le había seguido. Eran más o menos la mitad del grupo que había abandonado la fuente, y el intara no acertaba a imaginar que le podía haber sucedido al resto. Tampoco estaba dispuesto regresar en su busca. Escuchó en silencio las palabras de sus compañeros sin participar en la conversación, pues prefería mantener vigiladas las inmediaciones mientras su respiración recuperaba un ritmo más normal, pero el comentario de su compatriota le hizo poner los ojos en blanco. Si creía de verdad que habían estado avanzando continuamente en la misma dirección, el xolnita tenía un sentido de la orientación pésimo.
Las evoluciones de Rasqa en el aire le dieron una idea y, llamando la atención del parqio, el chico le hizo una petición.
—¿Podrías sobrevolar la zona y guiar nuestros pasos? —preguntó, cambiando el peso de un pie al otro mientras se preparaba para echar a andar de nuevo— Es preciso que salgamos a una zona más abierta —añadió, más para sí que para el lagarto. Si permanecían más tiempo en aquellas callejuelas tan estrechas y el escarabajo gigante aparecía de nuevo, no tendrían forma de esquivar su acometida.
En cuanto Rasqa accedió, Sekk se puso en marcha avanzando a velocidad constante pero sin ser imprudente. Comprobaba cada esquina antes de doblarla y seguía las instrucciones que les iba dando el parqio al pie de la letra, atravesando aquel laberinto en dirección norte. Se mantuvo igual de silencioso que hasta el momento y no respiró tranquilo hasta que las calles empezaron a ensancharse. Estaban cerca de la salida.
Continúa en la Cicatriz de Arax.
El ulterano se apoyó en una pared para recuperar el aliento, momento que aprovechó para echar un vistazo a las personas que le había seguido. Eran más o menos la mitad del grupo que había abandonado la fuente, y el intara no acertaba a imaginar que le podía haber sucedido al resto. Tampoco estaba dispuesto regresar en su busca. Escuchó en silencio las palabras de sus compañeros sin participar en la conversación, pues prefería mantener vigiladas las inmediaciones mientras su respiración recuperaba un ritmo más normal, pero el comentario de su compatriota le hizo poner los ojos en blanco. Si creía de verdad que habían estado avanzando continuamente en la misma dirección, el xolnita tenía un sentido de la orientación pésimo.
Las evoluciones de Rasqa en el aire le dieron una idea y, llamando la atención del parqio, el chico le hizo una petición.
—¿Podrías sobrevolar la zona y guiar nuestros pasos? —preguntó, cambiando el peso de un pie al otro mientras se preparaba para echar a andar de nuevo— Es preciso que salgamos a una zona más abierta —añadió, más para sí que para el lagarto. Si permanecían más tiempo en aquellas callejuelas tan estrechas y el escarabajo gigante aparecía de nuevo, no tendrían forma de esquivar su acometida.
En cuanto Rasqa accedió, Sekk se puso en marcha avanzando a velocidad constante pero sin ser imprudente. Comprobaba cada esquina antes de doblarla y seguía las instrucciones que les iba dando el parqio al pie de la letra, atravesando aquel laberinto en dirección norte. Se mantuvo igual de silencioso que hasta el momento y no respiró tranquilo hasta que las calles empezaron a ensancharse. Estaban cerca de la salida.
Continúa en la Cicatriz de Arax.
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