Torreón Letargo (Archivo I)

Recuerdo del primer mensaje :

Llegamos a las afueras del torreón, que esta completamente cubierto de enredadera, a primera vista no se ve la puerta, así que me pongo a buscarla ...
-Ayudarme por favor - les pido a Elliot y a Gael - ...
Comienzo a golpear con la punta del bate suavemente sobre las enredaderas, esperando oír algo que no sea la madera golpeando contra la piedra bajo de las enredaderas ...

-Eso que dijo Elliot es una tontería -digo para mí mismo.
Ya solo queda Nia en la habitación de las personas con quienes tengo confianza. La miro, y esta vez hablo en voz alta, dirigiéndome a ella.
-Es una tontería, ¿verdad? Yo creo que nos llaman larvas porque solo somos críos. Tú eres de otro planeta. Tal vez la bicha de la fuente también lo sea, no creo que nadie pueda cambiar... así -sonrío cada vez más convencido de lo que digo. Pues claro, ¿qué va a ser si no?-. Somos humanos, no gusanos de seda... Bueno, tú... no -me sonrojo-, pero algo parecido -añado con tono de disculpa. Qué metepatas soy. Tengo que reprimir las ganas de darme un cabezazo.

De pronto, Elliot dice algo...Raro, pero...Raro...Pero...¿Posible? He visto magia...¿Por qué no eso?>> niego varias veces con la cabeza, bruscamente <<No puede ser, en absoluto. Además, es una hipótesis, paso, si es verdad lo veremos y si no, pues no>> Luego presto atención al niño y a la chica de los tentáculos <<¿Es de otro planeta?>> cuando lo escucho se me queda la cara de asombro impresionante varios minutos.

Nia asiente.
-A lo mejor nos vamos a convertir en mariposas...-sus manos imitan una mariposa.-De esas que vuelan...-le explica.- Pero no se...¿las larvas tienen sueños en los que se hacen daño?-

He perdido la noción del tiempo sumido en las maravillas de la naturaleza, el olor, los sonidos no podía verlo y por un momento fue como estar en mi hogar, lo echaba tanto de menos que la venda se empapo de mis lágrimas de felicidad, ahora el momento perfecto para quitarse la venda de los ojos ya que si me las quitará de día mis ojos sufrirían muchísimo. Mi corazón empezó a Latir, como si en una batalla me encontrara cuando poco a poco fui desliando la Venda negra de mi cabeza, dejándola caer en la hierba, una suave brisa acaricio mis cerrados ojos, y abrí los ojos lentamente*toc! toc ¡toc! el corazón parecía salirse de mi pecho* cuando abrí los ojos por completo una imagen borrosa de árboles balanceándose con la brisa, ahora las lágrimas de felicidad podían correr libremente por mi cara, cayendo al suelo y me sorprendo al poder escucharlas caer sobre la hierba << el entrenamiento ha sido agotador pero muy efectivo… >> cojo la cinta negra con que me tape los ojos y me recojo el pelo en una coleta alta con suma precisión, me limpio las lágrimas con la manga y me dispongo a subir con los demás pero no si antes volver a mirar atrás…

Miro el cielo negro, cavilando sobre lo que ha dicho Elliot ... ¿podría ser posible? ... transformarse en algo distinto a lo que somos ...
Elliot se sienta a mi lado en silencio, y me pregunta mi opinión sobre el tema, yo lo pienso antes de contestarle ... no quiero que mis palabras se entiendan mal ...
-Pues no se Elliot - le digo mirándole a los ojos - ... ¿tu que crees?, no seria una idea descabellada, pero aun así se me hace raro ...
Sigo escuchándola y sonrío tras su comentario, la miro divertido, trata de suavizar las novedades ...
-Te quedaría mejor lo de Catwoman - digo sonriendo, y poniéndome algo rojo de paso - ... pero esa es mi opinión - aclaro riendo - ....
Saco la guitarra de la funda y toco un poco, notas sueltas, para distraerme un poco ...

Oigo pasos y Norou viene con nosotros. Voy a saludarle pero me quedo pasmado al ver que no lleva las vendas, pero no digo nada y saludo como si no ocurriese nada
-Eh, Norou, estamos aquí.
Pero...¡desgracia! Empiezo a escuchar notas sueltas de guitarra y a respirar agitadamente por esto, así que me tapo los oídos y me intento alejar <<Maldita sea...>> para evitar recordar algo del pasado.

Entro dentro del edificio y escucho la voz de Jack, aun no veo bastante bien pero reconozco su figura, me acerco a él y comienza a sonar lo que parece ser un instrumento musical entonces Jack se tapa los oídos : -¿Pasa algo Jack?*pregunto extrañado*- El edificio es muy diferente al burdel en casi todo: -¿Habías estado alguna vez en un lugar parecido?* Pregunto a Jack con tono misterioso*

Norou se me acerca y me destapo los oídos
-No, no pasa...nada, nada de nada. En absoluto.-digo rápidamente.-Y...he visitado castillos en ruinas, esto puede ser o bien la torre del homenaje de alguno que haya desaparecido o bien un torreón cualquiera, levantado como defensa de algún sitio.
Y no sé por qué, pero me sienta mal mentirle acerca de lo de los oídos y la música, pero no puedo decirle nada, ahora nos llevamos bien, pero ¿quién me asegura que en un futuro no se aproveche de mis puntos débiles?

Nia ladea la cabeza para oir el instrumento de Vacuum. Entonces habla al grupo que tiene delante.
-Ese sonido...¿como lo hace?-
En Ulterania la musica no es concebido como algo "util" asi que no se promueve mucho y los musicos y los instrumentos son escasos, aunque si existen canciones pero sin musica.

-¿La guitarra dices, Nia? -pregunto extrañado-. Supongo que no tenéis guitarras... o algo así -me rasco la cabeza, dudando-. Al rasgar la cuerda hace ese sonido... en el agujero, el hueco de la madera... no sé explicarlo bien. ¿Por qué no subimos y le pedimos que te lo explique?

Nia cierra los ojos. A medida que escucha el sonido los tentaculos se levantan en el aire y, serpenteando, recuerdan a una cobra amenazante apunto de atacar. Nia escucha la oferta de Gael. Curiosa, decide aceptarla asintiendo rápidamente.
-¡Vayamos a espiarles!.-dice cogiendo de la mano a Gael y tirando de él. Finalmente suben y comienza a espiarles, asomandose por el marco de la puerta.
<<Ahi esta. Ese sonido. Me pregunto como lo hará...>>
-Chs. Silencio, o nos oiran....-
<<Nia, ellos no pueden oirme.>>
-Da igual, quiero parecer una espia, como salia en el cuento...-dice entrecerrando los ojos haciendose parecer interesante.
-¿Y funciona con electricidad?-le pregunta Gael.

Elliot se tumba y apoya la cabeza en las manos, parece que quiere alejar los pensamientos de su cabeza, yo no digo nada para no molestarla, sigo tocando tranquilo hasta que empieza a tararear, al principio no ubico la canción, pero al final la reconozco y me pongo a acompañarla con la con la guitarra, la miro y la animo a cantar con un gesto ... ¿cantara bien? ...
Sigo la melodía, esperando que se decida a cantar ... no se si lo hará, pero yo lo he intentado ... la música surca el aire con las corrientes de viento, ligera, como la niebla matutina ...
Oigo susurros a mi espalda, pero me da igual, no presto atención ... si quieren algo hablaran, y si no pues que escuchen, el ambiente ha refrescado ...
-¿Tienes frío? - le pregunto a Elliot - ... esta refrescando - comento mirando el cielo, cuya negrura se rompe a veces con destellos de fuego - ...

Nia me empuja por las escaleras y subo titubeando. No está bien espiar a la gente, yo solo quería unirme a ellos. Cuando llegamos arriba los observamos en silencio.
-Hay algunas guitarras que funcionan con electricidad -le explico en un susurro-, y suenan mejor, para mi gusto -añado sonriendo-, pero esa se puede tocar sin más, la mayoría de instrumentos no necesitan electricidad para sonar.

A Nia parece interesarle mucho la música, está muy entretenida escuchando.
-¿Nos acercamos más? No deberíamos... ya sabes, mirar desde aquí. Seguro que Vac te explica muchas más cosas sobre instrumentos, y mejor... -murmuro atropelladamente.

Nia niega con la cabeza.
-Harm dice que interrumpiriamos su ritual de no se que...Que al parecer es muy importante.-dice sin mucha confianza.-Los humanos sois extraños. ¿Y para que sirve ese sonido? ¿Que os da?-

-¿Rituaal? -pregunto extrañado enarcando una ceja-. No parece ningún... bueno, no importa. La música es... Uf, es demasiado abstracto para explicarlo. La música transmite muchas cosas, te pone feliz, te pone triste... o simplemente escuchas la melodía, o te dice algo la letra... Aggh, ¡qué difícil! Digamos que... la música hace feliz a la gente, o algo así. Seguro que te acaba gustando a ti también -termino con una sonrisa, asomándome un poco más para ver a Vac y Elli.

En ese momento ella se voltea y me ve. ¡Qué vergüenza! Me escondo detrás de Nia sonrojado. No parecía muy feliz de vernos allí, pero no sabía cómo decirle a Nia que quizá deberíamos irnos.