Conversación Rua y Toni en la habitación

Toni se sentó justo detrás de Rua, sin saber como empezar la conversación.

- Oye, perdona, que escuché antes, en la comida, que tenías un móvil. ¿Has intentado llamar a alguien? ¿Has visto si funciona?- Sonaba a ciencia ficción, pero tenía que saberlo con certeza, necesitaba escuchar la negativa directa para poder quedarse tranquilo.

Lo había sentido mirarle por algunos segundos, sin decir nada, por lo que la inesperada pregunta y mas aun que le preguntase algo como eso, hizo que parase momentáneamente en su búsqueda para mirarle. La obvia respuesta bailando en su lengua.

-Teniendo en cuenta que aquí no hay ni siquiera tuberías, enchufes, ni nada parecido, creo que debería ser obvio que tampoco hay señal -dijo ella suspirando, no atacándolo sino diciendo lo evidente, aunque bueno ella también había llegado a esa conclusión tras intentarlo- Pero no, no se puede hacer nada, también intente llamar a mi familia, pero nada. Incluso las letras de las canciones que tengo en el móvil han cambiado su idioma. Aun funciona, pero cuando se le termine la batería, adiós -añadió la sueca chasqueando la lengua volviendo su atención a la búsqueda que tenía.

Con la respuesta de Rua se topó con la realidad, una bocanada de agua fría que al llegar a su cuerpo era más tibia. Se esperaba la respuesta, era evidente, pero necesitaba oírla.

- Si, me lo esperaba, pero necesitaba comprobarlo, esto es una jodida putada.Hecho de menos muchas cosas y cuando te escuché hablando de móviles me pareció como si estuviera de nuevo en casa, me refiero a la Tierra, a nuestra Tierra.

- Sabes que ¿echo de menos? El chocolate, mi madre me lo traía casi todas las noches antes de dormir ¿Tu no echas de menos a tu familia?- de repente Toni se arrepintió de la pregunta, sintió que se metía de repente en la vida de Rua. Se sorprendió incluso del arrebato de sinceridad.

No entendía muy bien por que aquel chico venía ahí a contarle todo aquello, si era sincera, pero no iba a hacerles ascos a tener monólogos de fondo que amenizaran un poco la búsqueda. Al menos era algo mas tranquilizador que solo fuese una sola persona, en comparación con todas las que había abajo.

Lo miró por encima del hombro cuando este menciono que era lo que mas echaba de menos. El chocolate. Se relamió los labios ante la mención, mordisqueando su labio inferior golosa. ¡Oh dios, dulces! Si eso si que lo echaba de menos, ¿habría dulces en aquellas cestas?

-Bueno, no le diría que no a lo de los dulces -dijo Rua estando de acuerdo con ello, porque dudaba que fueran probar chocolate o algo parecido a eso en aquella ciudad- Aunque hecho mas de menos el tener agua caliente de forma sencilla.-añadió con un chasqueo de lengua, mirándolo con una ceja alzada cuando preguntó por su familia de forma tan inesperada. ¿Como habían pasado de echar de menos el chocolate a preguntarle si echaba de menos a su familia? Apenas llevaba dos días en aquel lugar.

-Ha pasado demasiado poco tiempo para que sienta morriña. He estado mas días que estos separados de mis madres en el pasado por causa de mi trabajo, así que aun no he recibido el golpe de realidad  - respondió Rua con claridad, mas que echarlas de menos por llevar tiempo alejadas, se sentía preocupadas por ella.

¿Como estaría llevando el que de pronto hubiera desparecido? ¿Estarían inquietas? Si, seguramente estarían removiendo cielo y tierra buscándola. Probablemente su madre Nora estaría recorriendo cada comisaria de la ciudad, mientras su mama Ebba estaría llamando a todos y cada uno de sus conocidos mientras Isak intentaba tranquilizarla. Al pensar en el sentimiento antes mencionado que había dicho no estar sintiendo aun, empezó a llenarla

- No...olvida lo que dije, las hecho de menos. He estado separados de ellas y de mi hermano antes por trabajo, pero de esta forma...es muy diferente- aseguro suspirando y guardándole una pizca de rencor en su mente por hacerle pensar en ello, ahora no podía evitar preocuparse por cuanto estaría sufriendo.

Le agradó que siguiera la conversación mientra seguía buscando ropa. Necesitaba hablar con alguien de algo que no fuera aquella situación.

- Ya, si te digo la verdad, yo echar echar de menos a mis padres no, pero la tranquilidad de mi casa si- Decir aquella frase le hizo reflexionar hasta qué punto echaría de menos a sus padres, por más tiempo que se llevase allí- Bueno, no tengo muy buena relación con mis padres, son un poco especiales.


- Oye una pregunta, ¿has dicho madres?- Toni no supo si había escuchado mal.

Para Rua aquella conversación era un tanto extraña, a pesar de ser en cierto forma tan normal. ¿Le preguntaba ella si echaba de menos a su familia, solo para luego decir que él no los echaba de menos? Aunque bueno, sabia de gente que podía pasarse semanas sin hablar con sus padres y no echarles nada de menos y no por eso no se querían. No era su caso desde luego.

Aunque bueno, si como el decía su relación con sus padres no era muy buena se hacía mas entendible también. Lo miró por un momento con detenimiento, el que lo expresara de esa forma tan poco especifica abría muchas posibilidades sobre el tipo de padres que tenía. Era difícil saberlo.

Aun así la pregunta sobre lo de sus madres le extrañó bastante. Sinceramente no creía poder ser mas clara en ese aspecto.

-Si, eso dije ¿que es lo que no entendiste exactamente? Tengo dos madres, se llaman Nora y Ebba; y un hermano pequeño llamado Isak. - explico sin ningún tipo de apuro y vergüenza, porque no tenia porque sentir algo así. Estaba inmensamente orgullosa de su familia. No habla ningún tipo de misterio difícil de descifrar o algo así en aquel asunto. Para Rua no era ajeno que el tipo de relación que tenían sus madres y el hecho de que tuvieran hijos no era precisamente aceptado en todos lados, su madre Nora especialmente le había contado muchísimas cosas al respecto sobre lo difícil que había sido para ellas el poder estar juntas antes de llegar a Suecia y asentarse en Estocolmo, lugar donde habían nacido tanto ella como su hermano.

-¿No has visto una familia formada por dos mujeres o dos hombres, que tengan hijos? ¿De donde eres? -preguntó Rua, porque al menos de donde ella venia no era tan raro, aunque sabia que era un caso especial, pero a saber de donde era ese chico y si la homosexualidad no estaría penado o algo así en su país.

- Oh, vaya, ¿yo? España, del sur, Andalucía, bueno Almería, está en el sur, en Andalucía- Toni tartamudeaba un poco por los nervios. Era hija de dos mujeres, a Toni esto le extrañó sobremanera y se dio cuenta por la contestación de Rua, que ella tambien se habia percatado de la extrañeza del español.

- No no, si lo entendí, pero no me lo esperaba, solo eso, en España no es muy común, yo no lo he visto mucho- Toni tenía la sensación de estar metiendo la pata continuamente pero Rua le caía bien, no quería molestarla.

- Oye ¿te puedo pedir un favor?- Toni decidió zanjar esa conversación, no iba a acabar bien si seguía preguntando- estoy completamente destrozado, necesito dormir un poco, aunque cumpla los estereotipos de los andaluces me podrías despertar si ves que duermo mas de lo normal, es decir, cuando pase un rato no demasiado largo ¿me podrías despertar?

La última pregunta fue la que mas verguenza le dio tramitar, por que la posibilidad de una negativa y por el nerviosismo de la información adquirida en aquella conversación.

Parecía que con sus palabras había provocado alguna especie de cortocircuito en la mente de Toni. Su antes voz segura y curiosa, se había convertido en un torpe tartamudeo, donde el simple hecho de intentar decir 'Soy andaluz y vengo de Almeria' parecía suponer un gran esfuerzo de conexión de cableado.

No tenía nada que decirle sobre si era o no común en su país, no estaba seriamente enterada de como funcionaban las cosas en cada país del mundo. Si sabía que la homosexualidad era aceptada en España, si la comparaba a otros lugares al menos. Y el “aceptada” entre comillado, porque imbéciles retrógrados que no tenían vida y preferían opinar de la ajena como si fueran a  darle un millón por cada burrada dicha, había en todas partes.

Rua lo miró por largos segundos, notando claramente incomodo por la situación. Trataba lo que para ella era normal con tanta poca naturalidad, que le hacia preguntarse cuan cerrado había sido el mundo en el que había crecido.

-Da igual, para mi es algo tan normal que a veces olvido que no es algo que suceda así en toda la Tierra. Aunque debería - respondió Rua despreocupada volviendo su atención a su quehacer, ya que con aquella charla se había frenado por completo en su inspección y debía intentar mínimo encontrar algo adecuado antes que empezase a anochecer o no vería un pimiento. Y aun había baúles que debía revisar. Ademas parecía que Toni había agotado sus baterías internas sobre el tema, pues no tardo mucho en pedirle si podía despertarle ya que necesitaba tomarse una siesta. Sonrió divertida cuando este mismo mencionó lo de que no quería alimentar el estereotipo, pues justamente había pensado en ello.

-No me importa hacerlo, aun tengo que estar un buen rato mas aquí buscando en los baúles. Eso si, si al tercer llamado no espabilas, te pateo fuera de la cama. Con mi hermano pequeño siempre funciona. Así que espero que seas de los que tienen un despertar fácil..por tu bienestar- dijo Rua con una media sonrisa dulce e inocente, pero que estaba mas bien toda llena de malicia y humor. Dicho aquello ya volcó toda su atención en su búsqueda, sin tener mucho mas que decir.