Burdel de Dama Espasmo (Archivo II)

Recuerdo del primer mensaje :

Gritos, una manzana, una persona moribunda... Las ideas y los sucesos se me agolpan en la cabeza, que me empieza a doler de la tensión del momento. Caín dice algo y me parece entender la palabra tablas. ¿Las necesitarán para curarlo? Y sin decir ni mu, corro hasta la habitación y traigo varias tablillas para que cojan la que más les cuadre. Las suelto en el suelo y retrocedo aterrado por la imagen. Siento un ligero picor en los ojos pero contengo las ganas de echarme a llorar como un idiota.

-Hola Jack - le saludo cuando pasa, Cain ya ha acabado de cenar - ... ¿te ha gustado la cena? - le pregunto - ... no se, hacia bastante que no freía nada - dio sonriendo - ...
Lo que pregunta solo lo puede responder Cain, así que espero su respuesta ... no se si quiere que intente quitar el dolor de cabeza ahora o mas tarde, así que espero que me lo diga el ... mientras tarareo suavemente, algo distraído, esperando alguna respuesta ...
Cain responde a Jack, pero se vuelve a tumbar, tapándose los ojos con el brazo y soltando en pequeño gemido ... mejor lo intento ya ...
-Vamos a ver - digo suavemente acercándome- ...
Levanto la cabeza a Cain y la pongo sobre mi regazo con cuidado de no marearle mucho, a la vez que me siento en la cama, me quito la guitarra y la dejo apoyada en la pared, saco el frasquito de bálsamo del bolsillo de la sudadera y me arremango, quito el tapón y me echo un poco del contenido del frasco en la punta de los dedos, los froto, esparciendo el bálsamo por mis dedos. y empiezo a masajearle las sienes a Cain con suavidad ... uno suave aroma a lavanda y olivas se extiende por la habitación ...

Dice que está mejor, pero sigue cansado, se le nota en todo lo que hace y en cómo habla. Luego miro a Vacuum y sonrío
-Me ha encantado esa cosa que acompañaba a la carne, aunque Caín cocina mejor.-digo riendo, después cierro la puerta y me apoyo en esta levemente.
Caín se acaba tumbando y luego Vacuum coge algo, se moja las manos y comienza a hacerle un masaje <<¿En las sienes? ¿Le dolerá la cabeza? Nunca he probado eso para el dolor de cabeza...interesante>> me cruzo de brazos y permanezco callado, en silencio, para no molestarles. Es más, no me atrevo ni a mover la cabeza, por miedo a cualquier mínimo ruido. Y lo mejor de todo es que Dirke sigue durmiendo como si nada, lo cual me hace sonreír, pero no reir, pues me tapo la boca antes con una mano.

Me incorporo a la cama y me froto los ojos con suavidad. Me percato de que es de noche, eso significa que he dormido todo el día, no puedo dormir tanto tiempo, y menos en este sitio.
Me levanto de la cama y me estiro, de lo primero que me acuerdo es del estado de Vacuum, Elliot y Cain, que tampoco estaba muy bien ayer.
Me pongo un kimono y salgo de mi habitación. El cuarto más cercano es el de Cain así que es el primero que visito, doy unos golpes suaves a la puerta, intentando hacer el menor ruido posible, seguidamente abro la puerta con cuidado. Intentaba no molestar pero parecía que dentro había una fiesta entre tanta gente. Entro al interior de la habitación y cierro la puerta. Me acerco a Jack mientras observo como Vacuum hace una especie de masaje a Cain:
-Hola, ¿Que tal esta?- Susurro mientras señalo a Cain.

Cain se queja un poco cuando Vacuum le hace moverse, pero enseguida se queda callado. Nota los dedos del griego en sus sienes y lo que en un principio es un suave dolor se transforma rápidamente en alivio. El aroma de la lavanda penetra en sus pulmones y todo su cuerpo se relaja. Cierra los ojos... la jaqueca, la presión, los nervios, todo se desvanece poco a poco. Su respiración se acompasa y empieza a hacer un ruido suave que casi parece un ronroneo.

Apoyado y en silencio, noto que el pomo gira y me aparto mientras alguien entra, es Erika y sonrío al verla <<Aunque hay algo que no me encaja...está...está...no sé...>> pienso al verla, pero la saludo con la mano y me llevo un dedo a los labios como pidiendo silencio, luego respondo casi en un susurro:
-Está mejor, y por lo que parece-pues Caín ahora parece mucho más relajado con el masaje.-ahora y en lo que queda de noche estará mejor.-termino de decirle, luego señalo a Dirke en la cama.-Y el peque durmiendo como si nada.-digo sonriendo.-Ah...en la cocina hay cena hecha, por si te entra hambre.

Me fijo en el masaje, parece tan relajante. En el otro extremo de la cama tal y como menciona Jack esta Dirke, durmiendo, sin percatarse de nada, un sueño bastante profundo por lo que parece:
-Ahora no tengo muchas ganas de comer.- Todo por culpa de los gases y el dolor de tripa, al parecer no pensaban irse de mi cuerpo tan fácilmente. Lo único que calmaba el dolor eran las infusiones que me preparaba Cain que funcionaban durante un par de horas.-Pero gracias.- Sonrio.

Llega Erika y la saludo con un gesto de cabeza, sigo con el masaje, le aparto un poco el flequillo rubio y tarareo distraído ... no se, miro a los chicos ...
-A lo mejor seria mejor que bajarais abajo - digo con voz suave al ver que Cain parece reaccionar bien la masaje - ... no se, para que descanse un poco ...
No se si me harán caso, yo sigo con el masaje y empiezo a tararear una nana sin letra ...
Miro al infinito distraído, mientras sigo con el masaje y la nana, me gustaría tener un piano, la nana suena mejor con un piano ...

Vacuum nos mira y nos habla, asiento cuando acaba y miro a Caín esperando que se recupere pronto <<No me gusta ver así a la gente con la que me llevo bien, no señor>>
-Dale buenas noches de nuestra parte, Vacuum.-le digo, luego Erika abre la puerta y salimos los dos, la cierro a mi espalda en silencio y miro a la chica, sin saber qué hacer o decir.-Er...¿Quieres hacer algo?
<<¿Ya se habrá derretido el hielo del ala? Ni idea...Si no lo ha hecho...tendremos helado de murciélago mañana de postre>> pienso y se me escapa una carcajada
-Perdón...

Me apoyo sobre la pared y escucho a Jack, ¿Qué hacer en este sitio? A estas horas de la noche era peligroso salir y dentro tampoco había mucha actividad:
-De momento no se me ocurre nada que podamos hacer, en este sitio poca cosa, además no hay nadie despierto.
Sin ninguna razón Jack se rie, no entiendo de que, pero me alegra el saber que alguien por aqui este feliz. Empiezo a andar:
-Por cierto Jack...cuando me has hecho la pregunta, he malpensado.- Le guiño el ojo y me rio.

Nia mueve la mano delante de la cara de elliot. Parece que se ha quedado empanada. Come algo y sale a explorar el edificio. Sube las escaleras y oye a gente activa. Ahi ve al chico de la otra vez, con la chica que vio en esa casa tan rara. Decide presentarse de una vez.
-Hola! Me llamo Nia. ¿Y vosotros?-

<<¿Que no se le ocurre nada? Eso es que no ha visto la tercera planta, jeje>> Voy a decirle lo de la tercera planta y de pronto dice algo de malpensar y me guiña el ojo...<<Oh...maldito estúpido...yo no había pensado eso...aunque...>> me abofeteo con la mano derecha y cambio de pensar rápidamente
-No es nada, un mosquito, se habrá escapado. Y...un momento.
Paso al cuarto de desuello, en esta misma planta, pero el ala sigue congelada como hace horas <<Hielo mágico...diantre>> Y sin sonreír salgo del cuarto, refunfuñando, pero vuelvo a sonreír, de forma siniestra esta vez
-¿Has estado en alguna habitación de la tercera planta alguna vez? Podríamos explorar el burdel si te apetece.-le digo, sin hacer mención alguna a lo de pensar raro, <<Aunque si dice de subir y ve los cuartos va a pensar peor, jeje>> pero interrumpo la sonrisa al ver a la chica de antes.-Hola, Nía, yo soy Jack.
<<Hum...malamente>>

Cain siente que va a dormirse en cualquier momento, estaba demasiado relajado. Entre el masaje, el olor del aceite y la nana... esa nana... le sonaba de algo pero no recordaba exactamente de que. Trata de seguirla él tambien cuando Vacuum ya ha repetido la melodía varias veces pero su voz se quiebra. Siente los ojos acuosos y una lágrima resbala de entre sus párpados cerrados. Hacía tanto tiempo que alguien no le cuidaba así...

Saludo a Nia que aparece de repente, a veces da miedo esa forma de aparecer tan siniestra que tiene:
-Me llamo Erika, aunque ya nos conocemos, ¿No? Eres la niña que nos encontramos en aquella casa.- Recuerdo perfectamente la angustia que senti al entrar alli y de repente ver como ya no era una chica. Un escalofrio me recorre el cuerpo.
Jack planea hacer algo, mejor, no me apetece estar quieta de brazos cruzados y si había otra planta que inspeccionar mejor aún:
-Vale vayamos, no la he visto nunca, aunque tendrás que hacer de guia.- Antes de ponerme en marcha me entra la curiosidad.- ¿Qué hay en la tercera planta?

-Si, soy yo que casa tan rara...-
-¿Guia? ¿Vais a alguna parte?-les pregunta curiosa, aunque habia oido algo de una tercera planta.
<<Por el tono me estoy imaginando cosas diferentes a las que tu, Nia>>
-¿Que cosas?-
<<Aun eres muy joven para saberlo...>>
-Joooo dime que cosas...-

<<La pequeña no debería subir...No sé...>>
-Nía, abajo hay una cena riquísima, ¿la has probado? Y hay unas termas en el sótano.-le digo, a ver si se va, luego miro a Erika y vuelvo a sonreir como un loco.-Yo te guiaré.
Echo a andar hacia los escalones y subo a la tercera planta
-Bienvenida a la planta de la lujuria, por así llamarla.-me echo a reir y entre risas, sigo diciéndole.-Ahora puedes pensar mal, aunque solo estoy bromeando, no te preocupes.

Me despido de la pequeña y subo las escaleras junto con Jack, su discurso de bienvenida por asi decirlo me asusta un poco, aunque si esta de broma mejor:
-Tranquilo me has asustado un poco pero yo soy así de asustadiza...y también muy malpensada.- Me echo yo también a reir.

Nia hace un puchero. Ya habia comido algo y los mayores no hace más que abandonarla aburrida. Con sigilo, comienza a seguirles.
<<¿Ha dicho Lujuria?>>
-Creo que si...-murmura Nia.-¿Que significa?-
<<...>>
-¿Harm?-