Torreón Letargo (Archivo VI)
+16
Giniroryu
Zarket
Lobo_Negro
Hiss
Rocavarancolia Rol
Kanyum
Seth
Naeryan
Lathspell
Evanna
Kial
Manasard
Yber
Jikan11
Red
Muffie
20 participantes
- Kial
Ficha de cosechado
Nombre: Hyun-Su
Especie: Humano
Habilidades: memoria, habilidad mental (acertijos, adivinanzas),astucia.Personajes : Hyun-su: el medio coreano medio estadounidense, serio, callado, cobarde, enclenque y egoista impulsado por su miedo.
altura: 1,77m
peso: 67 kg (estilizado)
edad: 15 años
Heridas/enfermedades : -Cicatrices en: mano, pecho, hombro y mejilla.
-Cojera por herida a medio curar en gemelo.
Torreón Letargo (Archivo VI)
22/11/15, 09:34 pm
Recuerdo del primer mensaje :
La chica a la cual le había dado el martillo utilizó éste para arrancar, de uno de los edificios en ruinas, una puerta un tanto podrida y así utilizarla de escudo <<no era el uso que esperaba que le diera>>. Una vez tuvo la puerta le devolvió el martillo.
Milo inició la carga contra las bestias avanzando seguros y a un paso ligero. Una de las ratas tiró una primera espina causando el sobresalto de Hyung. Si podían disparar nada les paraba de acribillarles a todos ellos. Claramente les superaban las ratas en número. Hyung se asombró, sus compañeros seguían avanzando, no se esperaba semejante envalentonamiento. Los que se habían quedado detrás empezaron a lanzar huesos y piedras que cogían del suelo << ¿¡Pero que hacen!? ¿¡Quieren que nos disparen a nosotros!?>>. Hyung se aparto del grupo alarmado esperando una lluvia de espinas hacia ellos. La mirada hacia él de una de las ratas al apartarse un poco le provoco un sobresalto. Sin embargo poco le importó a la bestia Hyung pues se giró de nuevo hacia los que se dirigían a las cestas. La estrategia de distracción había hecho poco pues todos ellos seguían sin haber recibido un disparó y las ratas se centraban en Milo, Rox y Rena. Finalmente llegaron y empezaron a agarrar las cestas, Rox perdió una debido a una espina que quedó cerca de darle en la mano. Consiguieron cinco y tiraron el resto distrayendo a unas cuantas ratas.
Tocaba huir, Los niños empezaron a correr Hyung aceleró << ¡no puedo quedarme atrás!>>. Hyung fue todo lo rápido que pudo dejando atrás a los demás. Frenó una vez una vez oyó el grito eufórico de Rox; estaban a salvo. La celebración de la victoria de Rox le provoco una risa tímida y bajita a Hyung. Era contagiosa su felicidad y por muy poco que hubiera hecho Hyung él también consideraba eso su victoria. El grupo se tomo un rato para recuperar el aliento y decidirse en que iban a hacer ahora. La atención de varios se dirigió a una especie de torre no muy lejos de allí. Finalmente se decidieron por avanzar hacía ésta para verla mejor.
Llegaron a la torre fácilmente. Menos mal no tuvieron problemas al continuar su camino hacia ésta. Hyung se paró ante ella y echó un vistazo largo. Aquel edificio de gran tamaño debía de tener un total de al menos tres plantas de bastante altura. Se encontraba rodeado de una franja de tierra y cubierto de enredaderas escondiendo lo que parecía la puerta, identificada como tal debido a que ésta daba a un puente levadizo que conectaba el torreón con la calle.
-Eso debe de ser la puerta. Aunque no estoy muy seguro.- dijo en un tono bajo. - Si queréis entrar ir vosotros primeros, pero tener en cuenta que allí podría haber cualquier cosa.
La chica a la cual le había dado el martillo utilizó éste para arrancar, de uno de los edificios en ruinas, una puerta un tanto podrida y así utilizarla de escudo <<no era el uso que esperaba que le diera>>. Una vez tuvo la puerta le devolvió el martillo.
Milo inició la carga contra las bestias avanzando seguros y a un paso ligero. Una de las ratas tiró una primera espina causando el sobresalto de Hyung. Si podían disparar nada les paraba de acribillarles a todos ellos. Claramente les superaban las ratas en número. Hyung se asombró, sus compañeros seguían avanzando, no se esperaba semejante envalentonamiento. Los que se habían quedado detrás empezaron a lanzar huesos y piedras que cogían del suelo << ¿¡Pero que hacen!? ¿¡Quieren que nos disparen a nosotros!?>>. Hyung se aparto del grupo alarmado esperando una lluvia de espinas hacia ellos. La mirada hacia él de una de las ratas al apartarse un poco le provoco un sobresalto. Sin embargo poco le importó a la bestia Hyung pues se giró de nuevo hacia los que se dirigían a las cestas. La estrategia de distracción había hecho poco pues todos ellos seguían sin haber recibido un disparó y las ratas se centraban en Milo, Rox y Rena. Finalmente llegaron y empezaron a agarrar las cestas, Rox perdió una debido a una espina que quedó cerca de darle en la mano. Consiguieron cinco y tiraron el resto distrayendo a unas cuantas ratas.
Tocaba huir, Los niños empezaron a correr Hyung aceleró << ¡no puedo quedarme atrás!>>. Hyung fue todo lo rápido que pudo dejando atrás a los demás. Frenó una vez una vez oyó el grito eufórico de Rox; estaban a salvo. La celebración de la victoria de Rox le provoco una risa tímida y bajita a Hyung. Era contagiosa su felicidad y por muy poco que hubiera hecho Hyung él también consideraba eso su victoria. El grupo se tomo un rato para recuperar el aliento y decidirse en que iban a hacer ahora. La atención de varios se dirigió a una especie de torre no muy lejos de allí. Finalmente se decidieron por avanzar hacía ésta para verla mejor.
Llegaron a la torre fácilmente. Menos mal no tuvieron problemas al continuar su camino hacia ésta. Hyung se paró ante ella y echó un vistazo largo. Aquel edificio de gran tamaño debía de tener un total de al menos tres plantas de bastante altura. Se encontraba rodeado de una franja de tierra y cubierto de enredaderas escondiendo lo que parecía la puerta, identificada como tal debido a que ésta daba a un puente levadizo que conectaba el torreón con la calle.
-Eso debe de ser la puerta. Aunque no estoy muy seguro.- dijo en un tono bajo. - Si queréis entrar ir vosotros primeros, pero tener en cuenta que allí podría haber cualquier cosa.
- InvitadoInvitado
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
13/09/16, 09:30 pm
Se fueron levantando uno a uno, uniéndose a la conversación. Pam parecía salida de algún juego o historia de ficción, algo que a Rena le hacía gracia, y como no, Nime y Adru ofrecían su punto de vista demasiado positivo como para ser realista, pero que ayudaba igualmente. Rena rio un poco incómoda con la intervención de la libense.
-No tentemos al destino- pidió.
Saludó a Hyung con un gesto de la mano. Parecía el único que había preferido no dormir con el resto del grupo. Tal vez tanta gente en un mismo cuarto era demasiado. << Luego yo me quejo de mi casa>> Quedaban pocos dormidos, aun así lo mejor sería controlar el volumen de la conversación.
-A sus órdenes capitán.- respondió levantándose tras Adru para cumplir también la petición de Eitne.
Fuera ya se veía el sol, con ese brillo desvaído que creaba un degradado de colores, no muy vivos, pero tampoco feos. Hacía fresco y olía a humedad, como si la ciudad quisiera confirmarles que la niebla de la noche anterior no había sido una ilusión.
-Hoy teníamos que crear un final nuevo para el cuento, ¿recordáis?
-No tentemos al destino- pidió.
Saludó a Hyung con un gesto de la mano. Parecía el único que había preferido no dormir con el resto del grupo. Tal vez tanta gente en un mismo cuarto era demasiado. << Luego yo me quejo de mi casa>> Quedaban pocos dormidos, aun así lo mejor sería controlar el volumen de la conversación.
-A sus órdenes capitán.- respondió levantándose tras Adru para cumplir también la petición de Eitne.
Fuera ya se veía el sol, con ese brillo desvaído que creaba un degradado de colores, no muy vivos, pero tampoco feos. Hacía fresco y olía a humedad, como si la ciudad quisiera confirmarles que la niebla de la noche anterior no había sido una ilusión.
-Hoy teníamos que crear un final nuevo para el cuento, ¿recordáis?
- Red
Ficha de cosechado
Nombre: Doe
Especie: Ninguna conocida
Habilidades: No tiene
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
14/09/16, 12:05 am
A Milo le alegraba que a Rox le gustara el desayuno e incluso le hacía gracia que le recordara a la comida de su madre, pero a pesar de aquel detalle seguía notando la tensión que le embargaba y necesitaba lograr que se relajara. Los amagos de sonrisa que intentaba solo servían para preocuparlo más, pero cuando se llevó la mano a los ojos para contener las lágrimas al irrense se le formó un nudo en la garganta.
—No hace falta que me las des, en serio, es lo menos que puedo hacer —murmuró en respuesta a su agradecimiento, removiendo la comida de su plato en un gesto nervioso—. Y asustarse por un par de sueños no es ridículo, no pienses eso, las pesadillas no son algo de lo que podamos reírnos. —añadió con tono serio, observando a la muchacha con atención. Necesitaba soltarlo y él estaba dispuesto a escucharla.
Guardó silencio mientras la coreana le hablaba de sus sueños, torciendo el hocico cuando menciono la mina irrense y le relató lo que había ocurrido en ella. ¿Cómo era posible que conociera algo así? ¿Acaso Rena le había contado a que se dedicaba y le había hablado de su lugar de trabajo? No tenía forma de saberlo y no la interrumpió, pero cuando mencionó al padre de su compatriota el norteño volvió a sentirse inquieto. Cada vez estaba mas claro que aquella pesadilla no era normal, pues había demasiados detalles ajenos a la humana y que esta, sin embargo, parecía conocer, pero no podía encontrarle el sentido a todo aquello. Le dio un sorbo a su infusión y se removió en la silla, visiblemente nervioso, pero se obligó a tranquilizarse y continuó escuchando a la medio australiana.
Rox era el único elemento común en todos aquellos sueños y Milo no veía ninguna otra conexión entre ellos, pero estaba bastante claro que no eran pesadillas normales. El irrense no las había experimentado de primera mano, pero ahora entendía el estado en el que se encontraba su compañera y se alegraba de que hubiera confiado en él para desahogarse.
—Son sueños muy raros, lo reconozco, pero los sueños no son reales —empezó cuando la humana finalizó su discurso, haciendo girar su taza entre las manos—. Lo que quiero decir es que no va a pasar nada malo, ¿de acuerdo? Dudo que tengan algún significado oculto, pero de tenerlo sabes que puedes contar conmigo para lo que sea. Estamos todos juntos en esto, Rox. —afirmó con rotundidad, dedicándole una sonrisa amplia.
Posiblemente fuera un pobre consuelo, pero poco más podía hacer en aquella situación. Los sueños y las pesadillas no eran algo tangible que pudiera manejar, pero estaría para apoyarla cuando despertara siempre que lo necesitara. Se terminó el desayuno con rapidez mientras esperaba su respuesta, retirando su plato a un lado para fregarlo más tarde y apurando un poco más lo que le quedaba de infusión.
—No hace falta que me las des, en serio, es lo menos que puedo hacer —murmuró en respuesta a su agradecimiento, removiendo la comida de su plato en un gesto nervioso—. Y asustarse por un par de sueños no es ridículo, no pienses eso, las pesadillas no son algo de lo que podamos reírnos. —añadió con tono serio, observando a la muchacha con atención. Necesitaba soltarlo y él estaba dispuesto a escucharla.
Guardó silencio mientras la coreana le hablaba de sus sueños, torciendo el hocico cuando menciono la mina irrense y le relató lo que había ocurrido en ella. ¿Cómo era posible que conociera algo así? ¿Acaso Rena le había contado a que se dedicaba y le había hablado de su lugar de trabajo? No tenía forma de saberlo y no la interrumpió, pero cuando mencionó al padre de su compatriota el norteño volvió a sentirse inquieto. Cada vez estaba mas claro que aquella pesadilla no era normal, pues había demasiados detalles ajenos a la humana y que esta, sin embargo, parecía conocer, pero no podía encontrarle el sentido a todo aquello. Le dio un sorbo a su infusión y se removió en la silla, visiblemente nervioso, pero se obligó a tranquilizarse y continuó escuchando a la medio australiana.
Rox era el único elemento común en todos aquellos sueños y Milo no veía ninguna otra conexión entre ellos, pero estaba bastante claro que no eran pesadillas normales. El irrense no las había experimentado de primera mano, pero ahora entendía el estado en el que se encontraba su compañera y se alegraba de que hubiera confiado en él para desahogarse.
—Son sueños muy raros, lo reconozco, pero los sueños no son reales —empezó cuando la humana finalizó su discurso, haciendo girar su taza entre las manos—. Lo que quiero decir es que no va a pasar nada malo, ¿de acuerdo? Dudo que tengan algún significado oculto, pero de tenerlo sabes que puedes contar conmigo para lo que sea. Estamos todos juntos en esto, Rox. —afirmó con rotundidad, dedicándole una sonrisa amplia.
Posiblemente fuera un pobre consuelo, pero poco más podía hacer en aquella situación. Los sueños y las pesadillas no eran algo tangible que pudiera manejar, pero estaría para apoyarla cuando despertara siempre que lo necesitara. Se terminó el desayuno con rapidez mientras esperaba su respuesta, retirando su plato a un lado para fregarlo más tarde y apurando un poco más lo que le quedaba de infusión.
- Lathspell
Ficha de cosechado
Nombre: Kyllikki Paasikoski
Especie: Humana
Habilidades: Buena menoria, muy buena, lealtad, y facilidad para los idiomas.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
14/09/16, 05:24 pm
Y la noche paso relatiiiivamente en calma. Una vez Eitne estuvo más calmado y limpio, los colchones que habían traído se ocuparon y todos trataron de dormir un poco. Y los sueños no fueron exactamente mucho mejores que la realidad.
Zob despertó bruscamente, sus ojos como platos y la boca abierta de terror, pero sin mas ruido que una bocanada brusca para tomar aire. Cuando reconoció el torreón solo se volteo y se tapó completamente la cabeza con la manta. No gritaría, porque no quería verse indigno, ni despertar a sus compañeros, pero más que nada no iba a gritar porque el pánico no lo dejaba. <<Fue solo un sueño, solo un sueño, solo un sueño...>> se decía a si mismo mientras las lágrimas empezaban a caer por sus ojos. Y el mundo a su alrededor volvía a moverse. Sintió unos pasos y como sus compañeros despertaba. <<Un simple sueño, una pesadilla, solo eso>> se repetía mientras su cerebro asimilaba retazos de las conversaciones de sus compañeros. Cuando Adru abrió la ventana no pudo evitarlo, cerró los ojos y se secó las lágrimas rápidamente con la manta antes de levantarse rápidamente y preguntarle a la sinhadre lo último que recordaba de su sueño.
- A-Adru, Adru, ¿hay nubes en el cielo? – no se le paso por la cabeza lo de “capitana”, en aquellos instantes Zobriel estaba más preocupado por desvanecerse y ser una nube de nuevo. Cuando sus compañeros lo miraron extrañados, no pudo disculparse, ni siquiera ruborizarse como habitualmente le hubiera pasado. Miro al daeliciano y no lo pudo culpar para nada de cómo había reaccionado a su sueño, y aunque no quería preocuparlo, tampoco pensaba que sería bueno callarse algo así. Además al menos Eitne ya no se sentiría como el único al que le paso. - Yoo...Eitne no ha sido el único en tener pesadillas, y en la mía, algo pasaba con las nubes. Debe ser cosa de La Ciudad, lo siento no...Quería alarmarlos. – termino sonrojándose un poco y ofreciéndoles una sonrisa que esperaba reflejara más calma de la que en verdad sentía el nublino.
Zob despertó bruscamente, sus ojos como platos y la boca abierta de terror, pero sin mas ruido que una bocanada brusca para tomar aire. Cuando reconoció el torreón solo se volteo y se tapó completamente la cabeza con la manta. No gritaría, porque no quería verse indigno, ni despertar a sus compañeros, pero más que nada no iba a gritar porque el pánico no lo dejaba. <<Fue solo un sueño, solo un sueño, solo un sueño...>> se decía a si mismo mientras las lágrimas empezaban a caer por sus ojos. Y el mundo a su alrededor volvía a moverse. Sintió unos pasos y como sus compañeros despertaba. <<Un simple sueño, una pesadilla, solo eso>> se repetía mientras su cerebro asimilaba retazos de las conversaciones de sus compañeros. Cuando Adru abrió la ventana no pudo evitarlo, cerró los ojos y se secó las lágrimas rápidamente con la manta antes de levantarse rápidamente y preguntarle a la sinhadre lo último que recordaba de su sueño.
- A-Adru, Adru, ¿hay nubes en el cielo? – no se le paso por la cabeza lo de “capitana”, en aquellos instantes Zobriel estaba más preocupado por desvanecerse y ser una nube de nuevo. Cuando sus compañeros lo miraron extrañados, no pudo disculparse, ni siquiera ruborizarse como habitualmente le hubiera pasado. Miro al daeliciano y no lo pudo culpar para nada de cómo había reaccionado a su sueño, y aunque no quería preocuparlo, tampoco pensaba que sería bueno callarse algo así. Además al menos Eitne ya no se sentiría como el único al que le paso. - Yoo...Eitne no ha sido el único en tener pesadillas, y en la mía, algo pasaba con las nubes. Debe ser cosa de La Ciudad, lo siento no...Quería alarmarlos. – termino sonrojándose un poco y ofreciéndoles una sonrisa que esperaba reflejara más calma de la que en verdad sentía el nublino.
- Kanyum
Ficha de cosechado
Nombre: Nohlem
Especie: Varmano granta
Habilidades: Puntería, intuición, carisma
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
16/09/16, 02:22 am
Para las pocas veces que levantó la mirada durante sus relatos no le gustó lo que vio. Los gestos que Milo había puesto al escuchar su sueño sobre la mina le confirmaron el peor de sus temores: no habían sido simples pesadillas, por mucho que él intentara hacerla creer que lo eran. Ocultó ese pensamiento en lo más profundo de su ser para no causar más problemas, tanto para el irrense como para si misma. Ya bastante se arrepentía de que la hubiera pillado con lágrimas en la cara.
—Sí. Solo son sueños... —se levantó profiriendo un suspiro corto y dando un golpe seco a la mesa con ambas manos como para reafirmarse—. Solo sueños. —no lo eran, pero no iba a solucionar nada a base de darle vueltas, o al menos no con el miedo tan reciente. La sinceridad en las palabras y sonrisa de Milo la reconfortó, motivo de más por el que mostrarse si no igual de ilusa que siempre, al menos agradecida—. Lo mismo te digo. No es justo que siempre sea yo quien te atosigue para contarte mis problemas... Si necesitas desahogarte alguna vez, no voy a ir a ningún lado.
Una sonrisa menos agridulce que las anteriores se dibujó en su rostro. El malestar seguía estando allí de forma sutil, mas el primer paso para superarlo ya estaba dado. Ayudó a recoger la mesa llevando los vasos y cubiertos, apartando a Milo en caso de que pretendiese lavar él.
—Dame, me encargo yo. Encima de que me como parte de tu desayuno... —le daba igual si el moreno se quejaba, era lo mínimo que podía hacer. Mientras se ocupaba de quitar los restos y mojar los platos, su mente divagó inevitablemente en la conversación que acababan de tener y como no, en el cuarto sueño. Los otros no habían sido mejores, pero las advertencias de la mona del queso eran suficiente como para no quitárselas de la cabeza—. Milo... Es una tontería, pero, ¿puedo pedirte otro favor?
Enjuagó y secó los platos con un trapo distraidamente, colocando cada cosa en su sitio sin hacer demasiado ruido. El sol se colaba cada vez más en el torreón, pero seguía siendo temprano y no quería ser culpable de despertar a nadie todavía.
—En la última pesadilla... Pam me dijo que si volvía a soñar con "vosotros" —hizo las comillas con los dedos— os acordaríais. E-En plan amenaza, vaya. Ninguno tenía pinta de haberme visto en la vida, pero... No sé. Tú parecías el más amable. Te di lástima. Me dio la impresión de que si hubiese podido hablar contigo en el sueño las cosas hubieran ido de otra forma, y a lo mejor hasta te acordabas de quien era. Ya te digo que es una tontería, pero me quedo más tranquila si... si sé algo más de ti ¿Algo que otros no sepan, quizás? No necesito nada importante, solo un detalle tonto. Así, si vuelvo a soñar algo como eso y "te lo digo", a lo mejor...
Se cruzó de brazos mientras reconsideraba la idea. Evaluó rápidamente a su compañero y esbozó una sonrisa fugaz en lo que hubo acabado, chocando un puño cerrado con su otra palma abierta.
—¡Un intercambio de info! ¿Te parece? A ver... Tengo dos lunares en mitad de la espalda y —bajó la voz antes de continuar, haciendo un mohín en lo que lo pronunció lo siguiente:— mi nombre entero es Roxanne. Pero por favor... no lo uses. —soltó una risa suave, muy corta, antes de mirarle—. Te toca.
—Sí. Solo son sueños... —se levantó profiriendo un suspiro corto y dando un golpe seco a la mesa con ambas manos como para reafirmarse—. Solo sueños. —no lo eran, pero no iba a solucionar nada a base de darle vueltas, o al menos no con el miedo tan reciente. La sinceridad en las palabras y sonrisa de Milo la reconfortó, motivo de más por el que mostrarse si no igual de ilusa que siempre, al menos agradecida—. Lo mismo te digo. No es justo que siempre sea yo quien te atosigue para contarte mis problemas... Si necesitas desahogarte alguna vez, no voy a ir a ningún lado.
Una sonrisa menos agridulce que las anteriores se dibujó en su rostro. El malestar seguía estando allí de forma sutil, mas el primer paso para superarlo ya estaba dado. Ayudó a recoger la mesa llevando los vasos y cubiertos, apartando a Milo en caso de que pretendiese lavar él.
—Dame, me encargo yo. Encima de que me como parte de tu desayuno... —le daba igual si el moreno se quejaba, era lo mínimo que podía hacer. Mientras se ocupaba de quitar los restos y mojar los platos, su mente divagó inevitablemente en la conversación que acababan de tener y como no, en el cuarto sueño. Los otros no habían sido mejores, pero las advertencias de la mona del queso eran suficiente como para no quitárselas de la cabeza—. Milo... Es una tontería, pero, ¿puedo pedirte otro favor?
Enjuagó y secó los platos con un trapo distraidamente, colocando cada cosa en su sitio sin hacer demasiado ruido. El sol se colaba cada vez más en el torreón, pero seguía siendo temprano y no quería ser culpable de despertar a nadie todavía.
—En la última pesadilla... Pam me dijo que si volvía a soñar con "vosotros" —hizo las comillas con los dedos— os acordaríais. E-En plan amenaza, vaya. Ninguno tenía pinta de haberme visto en la vida, pero... No sé. Tú parecías el más amable. Te di lástima. Me dio la impresión de que si hubiese podido hablar contigo en el sueño las cosas hubieran ido de otra forma, y a lo mejor hasta te acordabas de quien era. Ya te digo que es una tontería, pero me quedo más tranquila si... si sé algo más de ti ¿Algo que otros no sepan, quizás? No necesito nada importante, solo un detalle tonto. Así, si vuelvo a soñar algo como eso y "te lo digo", a lo mejor...
Se cruzó de brazos mientras reconsideraba la idea. Evaluó rápidamente a su compañero y esbozó una sonrisa fugaz en lo que hubo acabado, chocando un puño cerrado con su otra palma abierta.
—¡Un intercambio de info! ¿Te parece? A ver... Tengo dos lunares en mitad de la espalda y —bajó la voz antes de continuar, haciendo un mohín en lo que lo pronunció lo siguiente:— mi nombre entero es Roxanne. Pero por favor... no lo uses. —soltó una risa suave, muy corta, antes de mirarle—. Te toca.
- Red
Ficha de cosechado
Nombre: Doe
Especie: Ninguna conocida
Habilidades: No tiene
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
16/09/16, 07:52 pm
—Lo tendré en cuenta —respondió a su propuesta con una sonrisa, haciendo amago de empezar a fregar los platos antes de que la coreana se lo impidiera—. No es necesario, de verdad, había bastante comida y no me importaba compartirla… —intentó disuadirla, pero el tono tajante de su compañera no admitía discusión. Mientras ella fregaba el irrense cogió la escoba para barrer las migas del suelo, pero apenas le llevó unos instantes y sin nada que hacer, se apoyó en la encimera con expresión distraída.
Sus pensamientos vagaban irremediablemente hacia la conversación que acababa de mantener con Rox, tratando aún de encontrarle un sentido a todos aquellos sueños, pero por muchas vueltas que le daba no daba con nada sólido sobre lo que trabajar y su mente, poco a poco, se fue quedando en blanco. En aquel estado de trance, que en parte se debía a la falta de sueño, el tiempo parecía discurrir más despacio y el movimiento de las motas de polvo contra los rayos de sol que se filtraban por las ventanas resultaba hipnótico. No supo cuanto tiempo estuvo así, pero fue la voz de la medio australiana la que le devolvió a la realidad.
—¿Qué favor? —preguntó con cierta dificultad, volviendo a conectar los circuitos de su cerebro.
Escuchó a su compañera en silencio, jugueteando con una pieza de fruta que había cogido y sonriendo al comprender lo que le estaba pidiendo. No creía que fuera una tontería, de hecho parecía una buena idea, pero esperó a que la muchacha hablara primero. Se lo pensó durante unos instantes y tras esbozar una sonrisa fugaz y golpear su puño cerrado contra la palma abierta de su otra mano procedió a revelarle algo sobre si misma que los demás no sabían. Lo de los lunares le hizo gracia, porque él también tenía unos pocos y en su mundo no eran tan corrientes, pero lo del nombre le llamó bastante la atención.
—No lo usaré, tranquila —respondió con una leve sonrisa, considerando que contarle a cambio de la información—. Vamos a ver… Tengo cosquillas en la nuca, pero ni se te ocurra aprovecharte —advirtió en broma—, y mi nombre completo es Remilo. Mi padre me solía llamar Remi o Rem, pero desde que murió me presento siempre como Milo… —añadió, sus pensamientos momentáneamente muy lejos de allí—. Te agradecería también que no se lo dijeras a nadie. —concluyó con una media sonrisa.
Sus pensamientos vagaban irremediablemente hacia la conversación que acababa de mantener con Rox, tratando aún de encontrarle un sentido a todos aquellos sueños, pero por muchas vueltas que le daba no daba con nada sólido sobre lo que trabajar y su mente, poco a poco, se fue quedando en blanco. En aquel estado de trance, que en parte se debía a la falta de sueño, el tiempo parecía discurrir más despacio y el movimiento de las motas de polvo contra los rayos de sol que se filtraban por las ventanas resultaba hipnótico. No supo cuanto tiempo estuvo así, pero fue la voz de la medio australiana la que le devolvió a la realidad.
—¿Qué favor? —preguntó con cierta dificultad, volviendo a conectar los circuitos de su cerebro.
Escuchó a su compañera en silencio, jugueteando con una pieza de fruta que había cogido y sonriendo al comprender lo que le estaba pidiendo. No creía que fuera una tontería, de hecho parecía una buena idea, pero esperó a que la muchacha hablara primero. Se lo pensó durante unos instantes y tras esbozar una sonrisa fugaz y golpear su puño cerrado contra la palma abierta de su otra mano procedió a revelarle algo sobre si misma que los demás no sabían. Lo de los lunares le hizo gracia, porque él también tenía unos pocos y en su mundo no eran tan corrientes, pero lo del nombre le llamó bastante la atención.
—No lo usaré, tranquila —respondió con una leve sonrisa, considerando que contarle a cambio de la información—. Vamos a ver… Tengo cosquillas en la nuca, pero ni se te ocurra aprovecharte —advirtió en broma—, y mi nombre completo es Remilo. Mi padre me solía llamar Remi o Rem, pero desde que murió me presento siempre como Milo… —añadió, sus pensamientos momentáneamente muy lejos de allí—. Te agradecería también que no se lo dijeras a nadie. —concluyó con una media sonrisa.
- InvitadoInvitado
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
16/09/16, 10:38 pm
Zobriel despertó entonces, de forma mucho más silenciosa que Eitne la noche anterior pero igual de agitado. Rena frunció el ceño. Dejó que Adru respondiese a la pregunta que le había hecho el nublino y se acercó a él, poniéndole la mano en el hombro como gesto de consuelo.
-Ey, coleguita, ¿estás bien? ¿También una pesadilla?
No era raro que lo que estaban pasando en la ciudad les provocase pesadillas, lo raro sería que no las tuvieran, pero nunca había visto a nadie tan afectado por un sueño. Era raro, y le daba mala espina. << O a lo mejor es simplemente que en sus mundos son más blanditos y todo esto les afecta más>> pensó.
-Mira, vamos a hacer una cosa: ya que somos un montón despiertos vamos a dejar dormir a los que quedan y bajar a desayunar, ¿os parece? Ya está el sol bastante alto, y seguro que a todos nos sienta bien llenar el estómago y que nos dé el sol un poco.
Había que activarse cuanto antes o se pondrían a pensar demasiado en ello. Rena intentó convencerse de que en cuanto desayunasen y se pusiesen a limpiar o a entrenar o algo los ánimos subirían.
Se puso las botas sin abrochar y bajó con los que quisieron apuntarse. En cuanto vio a Milo y Rox en la cocina frunció el ceño.
-Vaya jetos. Supongo que tampoco habéis dormido mucho... -soltó algo intermedio entre un bufido y una risa- Hoy vamos a rendir del carajo, el torreón zombi.
Cogió un cuchillo y una hogaza de pan y se puso a cortar rebanadas y a repartirlas.
-Ey, coleguita, ¿estás bien? ¿También una pesadilla?
No era raro que lo que estaban pasando en la ciudad les provocase pesadillas, lo raro sería que no las tuvieran, pero nunca había visto a nadie tan afectado por un sueño. Era raro, y le daba mala espina. << O a lo mejor es simplemente que en sus mundos son más blanditos y todo esto les afecta más>> pensó.
-Mira, vamos a hacer una cosa: ya que somos un montón despiertos vamos a dejar dormir a los que quedan y bajar a desayunar, ¿os parece? Ya está el sol bastante alto, y seguro que a todos nos sienta bien llenar el estómago y que nos dé el sol un poco.
Había que activarse cuanto antes o se pondrían a pensar demasiado en ello. Rena intentó convencerse de que en cuanto desayunasen y se pusiesen a limpiar o a entrenar o algo los ánimos subirían.
Se puso las botas sin abrochar y bajó con los que quisieron apuntarse. En cuanto vio a Milo y Rox en la cocina frunció el ceño.
-Vaya jetos. Supongo que tampoco habéis dormido mucho... -soltó algo intermedio entre un bufido y una risa- Hoy vamos a rendir del carajo, el torreón zombi.
Cogió un cuchillo y una hogaza de pan y se puso a cortar rebanadas y a repartirlas.
- Evanna
Ficha de cosechado
Nombre: Rua
Especie: Humana. Sueca
Habilidades: Rapidez mental, valor, astucia
Personajes :- DL/Dédalo: Cambiante, foner
- Dhelian/Evelhan Kaw: Brugho, daeliciano
- Samika: Evaki, humana
- Pelusa (Pam): Spriggan, Mona del queso.
- Rua: Unicornio Humana, Sueca. 1,76 sin plataformas.
Armas :- DL/Dédalo: Espada, magia y sus cambios
- Dhelian/Evelhan Kaw: Magia y estirges
- Samika: Puñetazos y patadas
- Pelusa (Pam): Cuchillo pelapapas y una honda con piedras
- DL/Dédalo: Cambiante, foner
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
16/09/16, 11:36 pm
<<¿Que, por la suerte, ocurre hoy? >> pensó Pam sobresaltándose, concentrada como estaba en animar a Eitne, cuando Zobriel despertó también de otra pesadilla al parecer, casi tan bizarra como la que haba escuchado del propio Eitne. Uno que si la niebla era peligrosa, donde el era un monstruos y todos morian; otro preguntando sobre sino había nubes.
Pam siempre había pensado que los sueños y las pesadillas era solo eso, deseos y miedos que parecían cuando dormías, solo eso. Pues de haberse podido convertir en algo real y tangible, hacía tiempo que habría librado a su mundo de aquellos ordeses que la trataban como esclava.
<< Pero espera...eso es en mi mundo, en esta ciudad hay magia, casas nevadas y seres parlamente de mundos imposibles ¿porque no sueños volviéndose realidad o pesadillas que cobran vida?>> pensó Pam observando ahora a Zobriel con suma atención, pues el final de sus palabras crearon confusión. Eso de que esas pesadillas las provocaba la ciudad, era algo nuevo, y aunque le sonaba a cuento, la mona del queso no se cerraba a ningún tipo de descubrimiento, por absurdo que pudiera sonar ¿que mas cosas sabía aparentemente de aquel lugar? No pregunto nada aun así, viendo que Rena tenía razón y debían dejar dormir a los que quedaban.
Ademas, apenas había conseguido calmar a Eitne como para ponerse a preguntar a Zobriel que estaba también asustado. Ya tendría tiempo mas tarde, cuando estuviera con el hechizo.
Siguió a Rena hasta la primera planta, encontrándose que Milo y Rox ya estaba allí. Nuevamente ver a mas gente despierta antes que ella le provoco cierta zozobra, su psique advirtiéndole que no estaba haciendo bien su labor, años de costumbre firmemente arraigados en su conducta no era fáciles de olvidar: Nunca te podías levantar después que tus amos.
Y aunque aquellos gigantes sin pelo no eran sus amos, aquel pensamiento permanecía. Igual que el madrugar.
Un incomodidad leve pero latente, le hizo saludar con un gesto, pero no se sentó a desayunar, ni se acerco a la cocina tan siquiera. ¿Comer sin haber trabajado antes en algo? No era algo que la mona del queso supiera como hacer. Y queriéndose quitar esa sensación de inutilidad repentina, subió de nuevo hasta el cuarto para coger la ropa sucia de Eitne de la noche anterior y la sabana manchada para, todo en un montón, bajar con ellas. No haría caso si la llamaban, no pediría ayuda tampoco, tan solo saldría al patio cargada con las prendas y con un cubo preparado para ello, lavaría todo a mano de forma distraída y eficiente antes de tenderlo todo en las estacas de la estatua.
Solo cuando termino, no mucho después, Pam consiguió calmar su desasosiego y oliendo aun el desayuno, decidió entrar. Alguna vez había mencionado que "quien no trabaja no come" y eso era una realidad que también la incluía a ella. Siempre, estuviera donde estuviera, porque es lo que llevaba haciendo toda su vida. << Las costumbres no se olvidan fácilmente >> pensó frunciendo el ceño y chasqueando los dientes, tras darse cuenta al fin de todo lo que había hecho de forma automática. Entró de nuevo para, ahora si, prepararse su frugal desayuno de ramitas y frutas y sentarse junto a los demás.
Pam siempre había pensado que los sueños y las pesadillas era solo eso, deseos y miedos que parecían cuando dormías, solo eso. Pues de haberse podido convertir en algo real y tangible, hacía tiempo que habría librado a su mundo de aquellos ordeses que la trataban como esclava.
<< Pero espera...eso es en mi mundo, en esta ciudad hay magia, casas nevadas y seres parlamente de mundos imposibles ¿porque no sueños volviéndose realidad o pesadillas que cobran vida?>> pensó Pam observando ahora a Zobriel con suma atención, pues el final de sus palabras crearon confusión. Eso de que esas pesadillas las provocaba la ciudad, era algo nuevo, y aunque le sonaba a cuento, la mona del queso no se cerraba a ningún tipo de descubrimiento, por absurdo que pudiera sonar ¿que mas cosas sabía aparentemente de aquel lugar? No pregunto nada aun así, viendo que Rena tenía razón y debían dejar dormir a los que quedaban.
Ademas, apenas había conseguido calmar a Eitne como para ponerse a preguntar a Zobriel que estaba también asustado. Ya tendría tiempo mas tarde, cuando estuviera con el hechizo.
Siguió a Rena hasta la primera planta, encontrándose que Milo y Rox ya estaba allí. Nuevamente ver a mas gente despierta antes que ella le provoco cierta zozobra, su psique advirtiéndole que no estaba haciendo bien su labor, años de costumbre firmemente arraigados en su conducta no era fáciles de olvidar: Nunca te podías levantar después que tus amos.
Y aunque aquellos gigantes sin pelo no eran sus amos, aquel pensamiento permanecía. Igual que el madrugar.
Un incomodidad leve pero latente, le hizo saludar con un gesto, pero no se sentó a desayunar, ni se acerco a la cocina tan siquiera. ¿Comer sin haber trabajado antes en algo? No era algo que la mona del queso supiera como hacer. Y queriéndose quitar esa sensación de inutilidad repentina, subió de nuevo hasta el cuarto para coger la ropa sucia de Eitne de la noche anterior y la sabana manchada para, todo en un montón, bajar con ellas. No haría caso si la llamaban, no pediría ayuda tampoco, tan solo saldría al patio cargada con las prendas y con un cubo preparado para ello, lavaría todo a mano de forma distraída y eficiente antes de tenderlo todo en las estacas de la estatua.
Solo cuando termino, no mucho después, Pam consiguió calmar su desasosiego y oliendo aun el desayuno, decidió entrar. Alguna vez había mencionado que "quien no trabaja no come" y eso era una realidad que también la incluía a ella. Siempre, estuviera donde estuviera, porque es lo que llevaba haciendo toda su vida. << Las costumbres no se olvidan fácilmente >> pensó frunciendo el ceño y chasqueando los dientes, tras darse cuenta al fin de todo lo que había hecho de forma automática. Entró de nuevo para, ahora si, prepararse su frugal desayuno de ramitas y frutas y sentarse junto a los demás.
Invitado, sueñas con un mundo perfecto...
...tu paraíso personal...
...donde lloras tu imperfecta realidad
- Spoiler:
- Rua habla = #9932CC
Rua piensa = #CD5C5C
Dédalo piensa = #FFFAFA
- Kial
Ficha de cosechado
Nombre: Hyun-Su
Especie: Humano
Habilidades: memoria, habilidad mental (acertijos, adivinanzas),astucia.Personajes : Hyun-su: el medio coreano medio estadounidense, serio, callado, cobarde, enclenque y egoista impulsado por su miedo.
altura: 1,77m
peso: 67 kg (estilizado)
edad: 15 años
Heridas/enfermedades : -Cicatrices en: mano, pecho, hombro y mejilla.
-Cojera por herida a medio curar en gemelo.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
17/09/16, 12:32 pm
Durante el tiempo que pasaron en la habitación Hyung hizo poco más que un amago de cerrar las ventanas ante la petición del daeleciano. Finalmente se dirigieron hacia abajo <<ahora es el momento>>. El coreano, aunque se encontraba cerca de la puerta, retrasó su salida para colarse tras Eitne. Le dio dos toquecitos en el hombro y le susurró:
- ¿Te...Importa que hablemos en mi cuarto?- Necesitaba hablar con él, quizás así ya podría quitarse todo de la cabeza.
Cuando entraran ambos en la habitación Hyung no tardaría en preguntarle:
- ¿No te parece que lo que dije anoche tenía todo el sentido?- después de suspirar añadiría -Lo que dije no era nada malo y todos se pusieron muy bordes. No soy un aguafiestas, no lo soy... Soy realista.
- ¿Te...Importa que hablemos en mi cuarto?- Necesitaba hablar con él, quizás así ya podría quitarse todo de la cabeza.
Cuando entraran ambos en la habitación Hyung no tardaría en preguntarle:
- ¿No te parece que lo que dije anoche tenía todo el sentido?- después de suspirar añadiría -Lo que dije no era nada malo y todos se pusieron muy bordes. No soy un aguafiestas, no lo soy... Soy realista.
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.
Personajes :
● Dirke/Ramas.
● Giz.
● Tap/Malahierba.
●Lara 37/Saria Omen.
● Rasqa: parqio transformado en moloch.
● Eitne.
Heridas/enfermedades : Eitne: le falta la pierna derecha de rodilla para abajo.
Status : Es complicado.
Humor : La gracia de dios.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
17/09/16, 03:08 pm
Las palabras de Zob trajeron de nuevo el reconcome a la cabeza del daeliciano. Eitne quería aprender a evitarlo o incluso ser más fuerte que ese miedo que le carcomía, pero en aquel momento lo dejó tocado. <<No es casualidad>>. Se dijo. <<No puede serlo... >>. Siguió al resto rumbo a la cocina hasta que Hyung lo interceptó silenciosamente. Eitne asintió a su primera pregunta y pasó a la otra habitación con él, sentandose en la cama más cercana a la puerta.
—N-no lo sé... —Eitne no sabía muy bien qué decirle. Dio un par de toquecitos en el colchón, a su lado, convidando a Hyung a sentarse con él. Para Eitne tenía sentido solo en parte—. C-creo que t-todos aquí tenemos miedo —algo tan sencillo y lo acababa de descubrir hoy, hablando con Rena—. I-incluso los que no parecen asustados t-todo el tiempo, como nosotros dos. La m-magia es algo i-increíble, más aun para los que n-no la conocíais... Y es una de las p-pocas cosas b-buenas que pueden encontrar aquí.
Eitne se estaba sintiendo mayor de lo que era en aquel momento, a pesar de que solo repetía cosas que había oído a otros adultos antes, y se preguntaba si Hyung no se sentiría pequeño hablando con él.
—N-no les hagas c-creer que n-no pueden, p-porfa, aunq-que estés seguro d-de ello. La magia les d-distrae de lo m-malo, c-creo... —Eitne hizo una pausa y añadió—. ¿A t-ti qué es lo que te d-distrae?
—N-no lo sé... —Eitne no sabía muy bien qué decirle. Dio un par de toquecitos en el colchón, a su lado, convidando a Hyung a sentarse con él. Para Eitne tenía sentido solo en parte—. C-creo que t-todos aquí tenemos miedo —algo tan sencillo y lo acababa de descubrir hoy, hablando con Rena—. I-incluso los que no parecen asustados t-todo el tiempo, como nosotros dos. La m-magia es algo i-increíble, más aun para los que n-no la conocíais... Y es una de las p-pocas cosas b-buenas que pueden encontrar aquí.
Eitne se estaba sintiendo mayor de lo que era en aquel momento, a pesar de que solo repetía cosas que había oído a otros adultos antes, y se preguntaba si Hyung no se sentiría pequeño hablando con él.
—N-no les hagas c-creer que n-no pueden, p-porfa, aunq-que estés seguro d-de ello. La magia les d-distrae de lo m-malo, c-creo... —Eitne hizo una pausa y añadió—. ¿A t-ti qué es lo que te d-distrae?
No llores por no poder ver tu pierna,
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
- Kial
Ficha de cosechado
Nombre: Hyun-Su
Especie: Humano
Habilidades: memoria, habilidad mental (acertijos, adivinanzas),astucia.Personajes : Hyun-su: el medio coreano medio estadounidense, serio, callado, cobarde, enclenque y egoista impulsado por su miedo.
altura: 1,77m
peso: 67 kg (estilizado)
edad: 15 años
Heridas/enfermedades : -Cicatrices en: mano, pecho, hombro y mejilla.
-Cojera por herida a medio curar en gemelo.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
17/09/16, 10:00 pm
Siguió la oferta del daeleciano, y se sentó a su lado.
- ¡Yo no parezco asustado todo el tiempo!- <<No salir nunca no demuestra que esté asustado, que a otros les apetezca salir no es cosa mía>>. El sabía que era un cobarde pero no le gustaba que otros tuvieran esa opinión, irónicamente, le asustaba pensar en eso. El coreano siguió escuchandole, le fastidiaba darse cuenta de que Eitne no estaba de acuerdo con el. Y quizás aún más que su respuesta sonara tan madura, sobre todo siendo el daeleciano mucho más pequeño que Hyung.
- Bueno... No creo que el tema vuelva a salir, pero si lo hace me abstendré de opinar.- Suspiró y continuó - Hablar contigo me distrae un poco; y con Rox.- Desvió la mirada para seguir - Sobretodo cuando me dais la razón- Bromeó terminando con una pequeña sonrisa.
- ¿Como te encuentras desde lo de anoche?-
- ¡Yo no parezco asustado todo el tiempo!- <<No salir nunca no demuestra que esté asustado, que a otros les apetezca salir no es cosa mía>>. El sabía que era un cobarde pero no le gustaba que otros tuvieran esa opinión, irónicamente, le asustaba pensar en eso. El coreano siguió escuchandole, le fastidiaba darse cuenta de que Eitne no estaba de acuerdo con el. Y quizás aún más que su respuesta sonara tan madura, sobre todo siendo el daeleciano mucho más pequeño que Hyung.
- Bueno... No creo que el tema vuelva a salir, pero si lo hace me abstendré de opinar.- Suspiró y continuó - Hablar contigo me distrae un poco; y con Rox.- Desvió la mirada para seguir - Sobretodo cuando me dais la razón- Bromeó terminando con una pequeña sonrisa.
- ¿Como te encuentras desde lo de anoche?-
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.
Personajes :
● Dirke/Ramas.
● Giz.
● Tap/Malahierba.
●Lara 37/Saria Omen.
● Rasqa: parqio transformado en moloch.
● Eitne.
Heridas/enfermedades : Eitne: le falta la pierna derecha de rodilla para abajo.
Status : Es complicado.
Humor : La gracia de dios.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
17/09/16, 10:21 pm
Al principio, Eitne sintió algo de pánico. ¿Había dicho algo mal? Estaba usando las palabras de los mayores. Si sus palabras no valían con ellos mismos, ¿cómo lo iba a saber él? Por suerte, todo acabó indicando que no era el caso. La sonrisa de Hyung le ayudó a borrar todo el miedo que había contraído y le devolvió él otra.
—E-entonces tienes razón —Eitne arrugó la nariz y la boca y las agitó de un lado a otro en un gesto típico de su poblado. Significaba lo mismo que el guiño terrestre—. M-me alegra p-poder ayudarte —reconoció antes de que la última pregunta de Hyung le borrara la sonrisa del rostro.
Un tema peliagudo. Uno de los que él mismo quería evitar.
—N-no lo sé. Creo q-que y-yo tampoco l-les creo con lo de los s-sueños... —Eitne juntó las manos y las apretó entre sus muslos—. P-pero no se lo d-digas, porfa. E-es m-muy r-raro, n-no creo q-que fuera c-coincidencia... —hablaba en un tono de voz más bajo y tartamudeaba mucho más, lo cual era un indicativo de que el tema que trataba no le inspiraba ninguna seguridad—. ¿Q-qué crees t-tú? T-te p-prometo q-que te daré la razón.
Eitne necesitaba que fuera sincero.
—E-entonces tienes razón —Eitne arrugó la nariz y la boca y las agitó de un lado a otro en un gesto típico de su poblado. Significaba lo mismo que el guiño terrestre—. M-me alegra p-poder ayudarte —reconoció antes de que la última pregunta de Hyung le borrara la sonrisa del rostro.
Un tema peliagudo. Uno de los que él mismo quería evitar.
—N-no lo sé. Creo q-que y-yo tampoco l-les creo con lo de los s-sueños... —Eitne juntó las manos y las apretó entre sus muslos—. P-pero no se lo d-digas, porfa. E-es m-muy r-raro, n-no creo q-que fuera c-coincidencia... —hablaba en un tono de voz más bajo y tartamudeaba mucho más, lo cual era un indicativo de que el tema que trataba no le inspiraba ninguna seguridad—. ¿Q-qué crees t-tú? T-te p-prometo q-que te daré la razón.
Eitne necesitaba que fuera sincero.
No llores por no poder ver tu pierna,
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
- GiniroryuGM
Ficha de cosechado
Nombre: Rägjynn
Especie: mjörní
Habilidades: memoria, buen oído y don de lenguas
Personajes :
● Noel: Draco de Estínfalo de origen sueco.
● Archime/Krono Rádem: Kairós irrense.
● Irianna/Dama Enigma: Nebulomante idrina lacustre.
● Adrune: Gamusino sinhadre, edeel.
● Lethe: Horus, enderth.
● Rägjynn: mjörní.
● Naeleth: Bruja del Hielo, nublina.
Unidades mágicas : 8/8
Síntomas : Aumenta su resistencia progresivamente. El sangrado de sus ojos se detonará con más frecuencia.
Armas :
● Noel: hacha de dos manos y espada bastarda.
● Archime/Krono Rádem: sus monólogos sobre biomecánica avanzada.
● Irianna: arco y estoque.
● Adrune: lanza, espadas cortas y arco.
● Lethe: arco y lanza.
● Rägjynn: jō.
● Naeleth: arco, sai y báculo.
Status : Gin: do the windy thing.
Humor : REALLY NOT FEELIN' UP TO IT RIGHT NOW. SORRY.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
17/09/16, 10:22 pm
Para cuando se unieron Rena y Hyung a su tarea, Adru había abierto la mayoría de las ventanas a la velocidad propia de un torbellino, que es lo que probablemente la sensación que tendrían de que es lo que había pasado por el cuarto los que todavía se encontraban en los colchones del suelo. Se giró bruscamente hacia Zobriel cuando se dirigió a ella, volviendo a marearse ligeramente por la escasa delicadeza y le respondió con un gesto grandilocuente mientras sonreía.
—¡No! Ni una sola nube en el cielo, cadete. El día está despejado y hace un tiempo perfecto para mejorar el final del cuento —finalizó colocando un brazo en jarras y asintiendo con lo que pretendía ser solemnidad.
Pero al parecer el nublino no quería un parte meteorológico sino comprobar que la historia de la noche previa no se repetía y la edeel se rascó la cabeza, preguntándose por qué todo el mundo había tenido pesadillas aquella misma noche. No había oído gritar a Neil esa mañana, así que suponía que su aurva no las había tenido esta vez, pero tal vez sería mejor que le preguntase al respecto. ¿Sería aquella alguna conspiración de los encapuchados que estaban empleando magia para intentar impedirles descansar bien y que no pudieran contra ellos? Adrune consideraba la posibilidad muy seriamente.
En cualquier caso, aprobó la idea de la irrense y siguió sus pasos hacia la cocina. Por supuesto allí estaban Rox y Milo, aunque la sinhadre solo se dio cuenta del todo de que faltaban en el dormitorio cuando los vio: prestar atención a los detalles no era su fuerte, y de todos modos todavía seguía un poco grogui a pesar de lo que diese a entender con su exceso de vitalidad. Se fijó en las caras de todo a raíz del comentario de Rena y, aunque ella no notó demasiado cambio respecto a otros días, confió en el juicio de la irrense para hacer su siguiente pregunta.
—¿Vosotros también tuvisteis pesadillas? Zobriel acaba de contarnos la suya, Eitne no fue el único que soñó cosas desagradables esta noche —les informó mientras se sentaba en una silla. A continuación, antes de seguir hablando, colocó el dorso de su mano a un lado de su boca, como pretendiendo ser discreta pero sin variar un ápice su tono—. Todavía tengo que confirmar si Neil tuvo pesadillas, pero él no es ningún referente porque las tiene casi todos los días.
Su aurva todavía no había bajado y, cuando fue plenamente consciente de este hecho, se volvió a levantar rápidamente, dispuesta a prepararse ella misma el desayuno con todo lo que ello implicaba: si nadie la detenía el suelo acabaría cubierto de leche, restos de fruta y probablemente se las apañaría para hacerse algún corte en un dedo incluso si no llegaba a manipular un cuchillo.
—¡No! Ni una sola nube en el cielo, cadete. El día está despejado y hace un tiempo perfecto para mejorar el final del cuento —finalizó colocando un brazo en jarras y asintiendo con lo que pretendía ser solemnidad.
Pero al parecer el nublino no quería un parte meteorológico sino comprobar que la historia de la noche previa no se repetía y la edeel se rascó la cabeza, preguntándose por qué todo el mundo había tenido pesadillas aquella misma noche. No había oído gritar a Neil esa mañana, así que suponía que su aurva no las había tenido esta vez, pero tal vez sería mejor que le preguntase al respecto. ¿Sería aquella alguna conspiración de los encapuchados que estaban empleando magia para intentar impedirles descansar bien y que no pudieran contra ellos? Adrune consideraba la posibilidad muy seriamente.
En cualquier caso, aprobó la idea de la irrense y siguió sus pasos hacia la cocina. Por supuesto allí estaban Rox y Milo, aunque la sinhadre solo se dio cuenta del todo de que faltaban en el dormitorio cuando los vio: prestar atención a los detalles no era su fuerte, y de todos modos todavía seguía un poco grogui a pesar de lo que diese a entender con su exceso de vitalidad. Se fijó en las caras de todo a raíz del comentario de Rena y, aunque ella no notó demasiado cambio respecto a otros días, confió en el juicio de la irrense para hacer su siguiente pregunta.
—¿Vosotros también tuvisteis pesadillas? Zobriel acaba de contarnos la suya, Eitne no fue el único que soñó cosas desagradables esta noche —les informó mientras se sentaba en una silla. A continuación, antes de seguir hablando, colocó el dorso de su mano a un lado de su boca, como pretendiendo ser discreta pero sin variar un ápice su tono—. Todavía tengo que confirmar si Neil tuvo pesadillas, pero él no es ningún referente porque las tiene casi todos los días.
Su aurva todavía no había bajado y, cuando fue plenamente consciente de este hecho, se volvió a levantar rápidamente, dispuesta a prepararse ella misma el desayuno con todo lo que ello implicaba: si nadie la detenía el suelo acabaría cubierto de leche, restos de fruta y probablemente se las apañaría para hacerse algún corte en un dedo incluso si no llegaba a manipular un cuchillo.
- Kial
Ficha de cosechado
Nombre: Hyun-Su
Especie: Humano
Habilidades: memoria, habilidad mental (acertijos, adivinanzas),astucia.Personajes : Hyun-su: el medio coreano medio estadounidense, serio, callado, cobarde, enclenque y egoista impulsado por su miedo.
altura: 1,77m
peso: 67 kg (estilizado)
edad: 15 años
Heridas/enfermedades : -Cicatrices en: mano, pecho, hombro y mejilla.
-Cojera por herida a medio curar en gemelo.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
18/09/16, 12:46 am
No llegó a entender muy bien la respuesta de Eitne, ni el gesto con el que la acompañó. Pero dejó su desconcierto muy rápido atrás. Con su pregunta ahora Eitne se mostraba más preocupado. En Hyung se debatían dos respuestas. Antes no podría nunca haber pensado que un sueño tuviera ningún efecto en la realidad. Pero ahora ya se le habían presentado cosas que tampoco se hubiera creído. De cualquier manera era inevitable sentir miedo. Miedo ante la posibilidad. Ya en la tierra algunas pesadillas le habían forzado a salir para tranquilizarse.
- No puedo decirte que ha sido sólo un sueño porque no lo sé y en parte no lo creo. No puedo evitar sentir más miedo con la posibilidad de que sea real.- cogió aire antes de seguir. Un aire que al bajarle por la garganta se le hacía caliente y pesado.- Sólo puedo decir que siento que te haya tocado pasarlo a tí.- Y acercó, con cierto temblor y duda, la mano a la espalda del daeleciano, en un intento de mostrar su empatía.
- De cualquier manera fueron innecesariamente bordes conmigo anoche.- Y de esa forma volvió a pensar en si mismo. Todavía le daba vueltas al tema, aunque ahora lo trataba más de broma. Y así además relajaba el tono de la conversación.
- No puedo decirte que ha sido sólo un sueño porque no lo sé y en parte no lo creo. No puedo evitar sentir más miedo con la posibilidad de que sea real.- cogió aire antes de seguir. Un aire que al bajarle por la garganta se le hacía caliente y pesado.- Sólo puedo decir que siento que te haya tocado pasarlo a tí.- Y acercó, con cierto temblor y duda, la mano a la espalda del daeleciano, en un intento de mostrar su empatía.
- De cualquier manera fueron innecesariamente bordes conmigo anoche.- Y de esa forma volvió a pensar en si mismo. Todavía le daba vueltas al tema, aunque ahora lo trataba más de broma. Y así además relajaba el tono de la conversación.
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.
Personajes :
● Dirke/Ramas.
● Giz.
● Tap/Malahierba.
●Lara 37/Saria Omen.
● Rasqa: parqio transformado en moloch.
● Eitne.
Heridas/enfermedades : Eitne: le falta la pierna derecha de rodilla para abajo.
Status : Es complicado.
Humor : La gracia de dios.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
18/09/16, 12:36 pm
El niño agachó la mirada hacia sus manos, atrapadas aun entre las piernas.
—¿C-crees que si e-evitamos que ocurra lo q-qué soñé, podríamos p-prevenir lo que ocurrió al f-f-final? —se le ocurrió de pronto. Habían visto a la niebla y a la niña, pero Eitne no estaba fuera con ellas, sino en su cama. ¿Y si había sido un aviso? ¿Qué podía hacer él?—. S-si a-alguna vez v-vuelvo de una exc-c-cursión y m-me comporto raro, n-no dejes que e-entre, porfa.
Sobre lo otro, Eitne asintió. Tal vez sí que fueron demasiado bordes...
—¿Q-q-quieres que hable c-con ellos, si vuelve a ocurrir? —preguntó de pronto.
Tal vez su función en el grupo era evitar que los ánimos empeoraran, ayudar a la convivencia más que a decorar el torreón. O Tal vez... La abuela de Eitne era una de las mayores figuras de autoridad de su poblado y un ejemplo a seguir para el daeliciano, mucho más que sus propios padres, a pesar de que no les quisiera menos por ello. Tal vez Eitne debía seguir los pasos de su abuela para mantener el grupo a flote.
Eitne seguía pendiente de la conversación, pero al mismo tiempo elucubraba, sumergido en la fantasía de la que se acababa de convencer.
—¿C-crees que si e-evitamos que ocurra lo q-qué soñé, podríamos p-prevenir lo que ocurrió al f-f-final? —se le ocurrió de pronto. Habían visto a la niebla y a la niña, pero Eitne no estaba fuera con ellas, sino en su cama. ¿Y si había sido un aviso? ¿Qué podía hacer él?—. S-si a-alguna vez v-vuelvo de una exc-c-cursión y m-me comporto raro, n-no dejes que e-entre, porfa.
Sobre lo otro, Eitne asintió. Tal vez sí que fueron demasiado bordes...
—¿Q-q-quieres que hable c-con ellos, si vuelve a ocurrir? —preguntó de pronto.
Tal vez su función en el grupo era evitar que los ánimos empeoraran, ayudar a la convivencia más que a decorar el torreón. O Tal vez... La abuela de Eitne era una de las mayores figuras de autoridad de su poblado y un ejemplo a seguir para el daeliciano, mucho más que sus propios padres, a pesar de que no les quisiera menos por ello. Tal vez Eitne debía seguir los pasos de su abuela para mantener el grupo a flote.
Eitne seguía pendiente de la conversación, pero al mismo tiempo elucubraba, sumergido en la fantasía de la que se acababa de convencer.
No llores por no poder ver tu pierna,
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
- Kial
Ficha de cosechado
Nombre: Hyun-Su
Especie: Humano
Habilidades: memoria, habilidad mental (acertijos, adivinanzas),astucia.Personajes : Hyun-su: el medio coreano medio estadounidense, serio, callado, cobarde, enclenque y egoista impulsado por su miedo.
altura: 1,77m
peso: 67 kg (estilizado)
edad: 15 años
Heridas/enfermedades : -Cicatrices en: mano, pecho, hombro y mejilla.
-Cojera por herida a medio curar en gemelo.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
18/09/16, 01:08 pm
-Quizás yo pueda salir de excursión contigo para asegurarme que no pasa nada. Si te da por salir algún día, claro.- Lo que acababa de decir le había costado mucho al coreano. Por ningún medio le gustaría pisar aquella ciudad en ruinas.- Pero para asegurarnos que no te pasa nada es mejor quedarse aquí en el torreón.- Corrigió, esperando que Eitne nunca quisiera salir.
Tardó muy poco en responder cuando el pequeño daeleciano se ofreció a interceder por él.
- No no no, no te preocupes no es para tanto. Sólo quería desahogarme, esto acabará por olvidarse.- <<Dios lo que le faltaba a mi orgullo, que un niño me defienda>> Sabía que lo decía con su mejor intención posible, pero no era buena idea.
-Es sólo que echo de menos mi casa, a mi hermana, los días se me pasan lentos. Y me daba miedo pensar que lo de anoche se repitiera...- su voz se empezaba a cortar, su tono era más triste según continuaba.- Que encima me llevara a palos con la gente con la que conviviré durante este año, hasta que pueda volver.- Miro al daeleciano con los ojos acuosos. -¿Por qué nos han traído aquí?
Tardó muy poco en responder cuando el pequeño daeleciano se ofreció a interceder por él.
- No no no, no te preocupes no es para tanto. Sólo quería desahogarme, esto acabará por olvidarse.- <<Dios lo que le faltaba a mi orgullo, que un niño me defienda>> Sabía que lo decía con su mejor intención posible, pero no era buena idea.
-Es sólo que echo de menos mi casa, a mi hermana, los días se me pasan lentos. Y me daba miedo pensar que lo de anoche se repitiera...- su voz se empezaba a cortar, su tono era más triste según continuaba.- Que encima me llevara a palos con la gente con la que conviviré durante este año, hasta que pueda volver.- Miro al daeleciano con los ojos acuosos. -¿Por qué nos han traído aquí?
- YberGM
Ficha de cosechado
Nombre: Ulmara.
Especie: cercana alaí.
Habilidades: Velocidad, nociones de lucha y resistencia.
Personajes :
● Dirke/Ramas.
● Giz.
● Tap/Malahierba.
●Lara 37/Saria Omen.
● Rasqa: parqio transformado en moloch.
● Eitne.
Heridas/enfermedades : Eitne: le falta la pierna derecha de rodilla para abajo.
Status : Es complicado.
Humor : La gracia de dios.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
18/09/16, 03:13 pm
—N-no. No quiero salir... No d-de momento. M-muchas gracias.
Eitne se refería más bien a verse obligado a salir por las circunstancias y no tanto a hacerlo por su propio pie, pero el ofrecimiento le alivió muchísimo y le hizo asentir con fuerza. Conforme avanzó la conversación, Eitne acabó acariciandole el brazo a Hyung y con los ojos empañados, como él.
—L-lo s-siento mucho... —Eitne no sabía qué más decirle, hablaba de corazón. Él se sentía igual y sabía lo horrible que era de primera mano. Realmente le daba pena que Hyung se sintiera igual. Se mordió las uñas, combatiendo las ganas repentinas de volver a llorar. Cuando volvió a hablar, su voz temblaba; representaba sus nervios, su ansiedad—. N-n-no lo s-sé. S-se supone que so-somos especiales... Pe-pero...
Eitne no fue capaz de continuar. Varias lágrimas se le escaparon y se apresuró a limpiárselas con la manga. El muchacho subió los pies a la cama y se hizo un ovillo, enterrando la cara con la esperanza de que aquello fuera disimulo suficiente.
—N-no es justo.
El daeliciano no se sentía especial en Rocavarancolia, se sentía atrapado, aterrado.
Eitne se refería más bien a verse obligado a salir por las circunstancias y no tanto a hacerlo por su propio pie, pero el ofrecimiento le alivió muchísimo y le hizo asentir con fuerza. Conforme avanzó la conversación, Eitne acabó acariciandole el brazo a Hyung y con los ojos empañados, como él.
—L-lo s-siento mucho... —Eitne no sabía qué más decirle, hablaba de corazón. Él se sentía igual y sabía lo horrible que era de primera mano. Realmente le daba pena que Hyung se sintiera igual. Se mordió las uñas, combatiendo las ganas repentinas de volver a llorar. Cuando volvió a hablar, su voz temblaba; representaba sus nervios, su ansiedad—. N-n-no lo s-sé. S-se supone que so-somos especiales... Pe-pero...
Eitne no fue capaz de continuar. Varias lágrimas se le escaparon y se apresuró a limpiárselas con la manga. El muchacho subió los pies a la cama y se hizo un ovillo, enterrando la cara con la esperanza de que aquello fuera disimulo suficiente.
—N-no es justo.
El daeliciano no se sentía especial en Rocavarancolia, se sentía atrapado, aterrado.
No llores por no poder ver tu pierna,
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
las lágrimas te impedirán ver los cadáveres de tus amigos.
- Kial
Ficha de cosechado
Nombre: Hyun-Su
Especie: Humano
Habilidades: memoria, habilidad mental (acertijos, adivinanzas),astucia.Personajes : Hyun-su: el medio coreano medio estadounidense, serio, callado, cobarde, enclenque y egoista impulsado por su miedo.
altura: 1,77m
peso: 67 kg (estilizado)
edad: 15 años
Heridas/enfermedades : -Cicatrices en: mano, pecho, hombro y mejilla.
-Cojera por herida a medio curar en gemelo.
Re: Torreón Letargo (Archivo VI)
18/09/16, 03:50 pm
- No, no lo es- respondió a la idea de justicia. <<yo se que no soy especial>> los test decían que era listo pero nada increíble, y era más bien vago, eclipsando su única cualidad. En el resto de cosas no valía nada, era débil, cobarde, no había razones para traerle. No lo entendía.
Hyung se dió unos pocos minutos para recomponerse. Tras ello miró a Eitne, hecho una bola. Se limpió las lágrimas con el dorso de la mano izquierda y puso la otra en el hombro del niño dándole una corta caricia hacia la espalda.
- Sabes, mi hermano pequeño es como tu, bueno no como tu, sólo os parecéis en tamaño.- miró al daeleciano esperando que le mirara de vuelta. - Tras todo esto y si nos dejan visitar otros mundos antes de volver al nuestro, te llevaré al mejor Noraebang de toda Corea.
Hyung se dió unos pocos minutos para recomponerse. Tras ello miró a Eitne, hecho una bola. Se limpió las lágrimas con el dorso de la mano izquierda y puso la otra en el hombro del niño dándole una corta caricia hacia la espalda.
- Sabes, mi hermano pequeño es como tu, bueno no como tu, sólo os parecéis en tamaño.- miró al daeleciano esperando que le mirara de vuelta. - Tras todo esto y si nos dejan visitar otros mundos antes de volver al nuestro, te llevaré al mejor Noraebang de toda Corea.
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