Sede de los Taumaturgos (Archivo I)

Recuerdo del primer mensaje :

Llego a la inmediaciones del minarete de madera rojiza ... es un edifico increíble, con decoraciones que recuerdan la arquitectura árabe ..
-Vaya - digo mirándolo - ... seria un lugar fantástico para vivir - les comento a los otros - ... ¿sera seguro? ...
Estoy alerta, preparado para cualquier cosa ...

Les sonrío a mis dos nuevos compañeros.
-Gracias, sois muy amables. ¿De dónde habéis salido? Nosotros estábamos en unas mazmorras... nos despertamos allí. ¡Y había un gigante! -explico, poniendo énfasis en esto último.

- ¿Unas mazmorras? - repito. No parece un lugar muy agradable, aunque tampoco el nuestro. - Nosotros despertamos en unas ruinas. Cerca había una torre... Se nos caía encima, pero era el único sitio que teníamos.

-¡¿Un gigante?! ¿Os intentó atacar? -pregunto, asombrado. -Nosotros nos depertamos cerca de un torreón medio derruído, como dice Helli, pero... ¡vaya! de gigantes nada.

Fuimos recogiendo los restos de madera que quedaban de las casas derruidas, cada dos por tres miraba los alrededores, por suerte no oia nada. Me quedé mirando al castillo.
<<Esta tarde, cuando fuimos a beber a la fuente... Juraría haber oido un grito que provenia de ahi>>

Me desempané y junto a los otros dos, volvimos a la antigua sede de los piromanos.
-Bien, poned un poco de maderas y encendedlas a los lados de la puerta, el resto lo echaremos al cráter. Si lo encendemos, será como una calefaccion, el calor sube y calentara el edificio. Además, no hay nada inflamable.

-¿Se caía? Que miedo... Entonces ese sitio tampoco sirve para usar, supongo. -Escucho la pregunta del otro chico-. No, no nos atacó, estaba muerto. Y se va a pudrir allí y no podremos volver... ni quisiera volver a verlo. No sé qué va a ser de nosotros... pero este sitio tampoco me gusta.
"Creo que NADA aquí me gusta" pienso.

Niego con la cabeza.
- No, no creo - respondo. Suspiro. - A mí tampoco me gusta, pero por ahora es el único sitio donde podemos quedarnos.

Veo sentados en un escalón a Gael y a los dos chicos nuevos hablando. Me acerco a ellos un momento y les digo:
-Hola chicos, estoy cansado, me voy a dormir. Decidle a Alec y a los demás que cuando quieran cambiar de guardia, que me despierten. Gracias. Buenas noches . -Les dije con una sonrisa, intentando parecer tranquilo y siendo todo lo más amable posible que me dejaba el cuerpo tras un día estresante.
Me acerque a la esquina de un escalón y me acosté allí, intentando descansar un poco...

(Me voy chicos!! Cuando hagáis lo de la guardia despertarme y poned por ahí que hago la guardia o algo de eso xD. Hasta mañana!)

-Todo va a salir bien, seguro -les digo. Intento mostrarme optimista y pensar que es cierto. -Ayudemos a encender la hoguera, propongo.
Un chico nos da un recado, le sonrío y le digo que lo cumpliré.
Me levanto y me acerco a ToX al chico que parece el lider, cojo la madera y la tiro al cráter, como nos ha dicho.

Volvemos al edificio rojo y Alec sugiere encender fuegos en la entrada ...
-Mejor no - le explico - ... si lo hacemos atraeremos a todos los monstruos de la ciudad, seria como anunciar: "Aquí hay comida" - digo con voz de megafonía - ...
Me acerco al cráter y lanzo la leña abajo, mientras los otros dos hacen lo mismo ...
Bajo las escaleras con cuidado y hago un gran montón con la madera y lo enciendo con la antorcha ... subo las escaleras mientras el calo empieza a subir hacia arriba ...
Me acerco al grupo de las escaleras, y me siento por encima del último, pongo la guitarra sobre mis rodillas y empiezo a cantar "Welcome to the jungle" em voz baja, mientras me quedo algo ensimismado ...

Empiezo a sucumbir al cansancio y cierro los ojos. Por mi mente pasan imágenes de lo ocurrido hoy, un dia bastante ajetreado.

"Bueno, mañana será otro día" me digo a mi mismo, y me duermo.

Me siento cerca suya para descansar un momento. Llevaba un palo de la madera más dura que encontre. Saqué la navaja y empecé a afila la punta.
Scrush Scrush Scrush

-Es muy probable, ¿escuchaste la historia de la reptil? Hay que tener cuidado. -dije sin apartar la mirada de mi tarea.

Vuelvo al presente al oír la pregunta de Elliot ...
-Pues sinceramente, no creo que ande desencaminado - digo tranquilo - ... esta ciudad es muy peligrosa ... si queremos vivir - afirmo - tendremos que estar juntos ...
Luego me quedo mirando el techo de la torre, muchos metros por encima de nosotros ...

Me acerco tímidamente a los mayores. No sé si hablar o no de lo mismo que ellos, pero antes tomo la decisión de hablar de forma directa.
-El chico llamado Jau -lo señalo- dice que lo despertéis si hace falta para las guardias.
Acto seguido me siento ni muy cerca ni muy lejos y los dejo seguir hablando.

Escucho distraídamente la conversación y, poco a poco, me voy quedando dormida.

Me fijo en Gael, me caía bien, parecia reservado y algo cobarde, pero tenia algo que me llamaba la atención.
Me levanté y me senté a su lado.
-Gracias por decirnoslo. -dije sonriendo- Hoy has estado muy bien, aguantas todo esto bastante bien para la edad que tienes. A tu edad, yo estaría llorando sin parar. -dije riendo.

Busqué en el bolsillo de mi chaqueta los chicles, y saqué unos cuantos de varios sabores (fresa, menta, frutas del bosque, etc) y le ofrecí.

-Coje uno, te lo mereces.