Sueño de Aníbal

15/08/11, 12:07 am

Aníbal sentía el viento en su cara y al bramido del mar en sus oídos, estallando como estallaban los cañones en batalla. Su espada vibraba en su mano, deseosa de probar sangre enemiga. Los dos barcos estaban a punto de encontrarse y toda la tripilación aguardaba con los garfios y las armas preparadas para asaltar el otro navío, confiando ciegamente en su capitán, confiando en que les llevaría a la victoria una vez más. Aníbal sentía esa fe en él, esa confianza, que le animaba, le enchía de valor. Sus ojos brillaban con fuego, y en su rostro se dibujó una sonrisa orgullosa. En cuanto ambos barcos estuvieron lo bastante cerca, la batalla comenzó al grito de:
-¡¡AL ABORDAJE!!

15/08/11, 12:15 am

Cuando estamos lo suficientemente cerca del barco enemigo, mando que lancen los ganchos. Una vez amarrados en la cubierta enemiga, mando tirar del barco, acercándolo más. Mi tripulación está ansiosa por entrar en combate. Cuando mando que salten al otro barco, lo hacen sin dudar. Yo mismo me planto en cubierta y empiezo a rajar a todo el que se me pone por delante, con las espaldas cubiertas por mis más fieles marinos.

15/08/11, 12:36 am

Los enemigos caían como moscas ante el potente torbellino de sangre y destellos en que la espada de Aníbal se había convertido. No había piedad por ninguno de ellos por parte de su tripulación, que los estaba reduciendo sin apenas herirse.
En la cubierta del timón esperaba el capitán enemigo, con una espada ligera y gesto desdeñoso. Aníbal corrió a su encuentro con su arma alzada y un fuerte grito de guerra en la boca. Su espada era un arma singular, hecha toda ella de acero y con muescas de platino, tenía relieves que, se decía que le daban efectos mágicos. Mucha gente no se creía esto pero Aníbal lo sabía con certerza. Embistió contra su enemigo y de un solo golpe atravesó su espada y rebanó su cabeza.
Tras la muerte de su capitán, la tripulación del barco abordado perdió la moral y trató de huir, pero los piratas eran demasiado fuertes. Las cadenas de Emily atraparon a uno que pretendía saltar al agua y Abigail ensartó a dos marineros que trataban de atacar a Aníbal por detrás en un infame gesto de cobardía. Alexander, con su marillo al hombro, le trajo el grueso cofre de joyas y oro a su capitán.
Los piratas celebraron su jugosa captura abriendo un enorme barril de ron aquella noche. Sentados todos en círculo en la cubierta, Abigail se colocó al lado del capitán y lo invitó a bailar bajo la plateada luz de la Luna.

15/08/11, 04:18 pm

La lucha acaba pronto. Vencedores, saqueamos el barco. Esa noche lo celebramos como Dios manda. Abi me invita a bailar y yo acepro de buen grado. Bailamos durante gran parte de la noche sin descanso mientras el resto de la tripulación sigue festeando y dando buena cuenta del ron.

15/08/11, 04:57 pm

El efectro del alcohol y la comida hace que Aníbal se quede dormido. En su camarote, rodeado de los tesoros robados, sueña con las próximas aventuras, con las buenas compañías con el miedo en los rostros de sus enemigos, sueña con una sonrisa en sus labios. La luz de la luna ilumina el barco, pero no lo suficiento como para alcanzar las sombras que se mueven en las tinieblas. Algo saca a Aníbal de su sueño perfecto, alguien le patea fuera de la cama, haciéndole caer al suelo enredado en sus propias sábanas
-Despierta desgraciado-
Aníbal reconoce la voz de Abi. Cuando abre los ojos se la encuentra de frente, apuntándole con su espada. A su alrededor, su tripulación, sus compañeros, también le amenazaban con sus armas.
Aníbal tiene la esperanza de que pudiese ser una broma, de que ne cualquier momento todos estallarían en risas, pero las palabras de Abi caen sobre él como un jarro de agua fría
-Tus días de capitán han llegado a su fin

15/08/11, 05:03 pm

Cuando mi cerebro capta el mensaje, actuo rápido. Hago un barrido con las piernas y tiro a Abi al suelo. La desarmo rápidamente y cojo su espada. Sé que defenderme va a ser imposible, puesto que estoy solo, pero pienso vender cara mi vida.
-Malditos traidores...eso me pasa por confiar en vosotros...

15/08/11, 05:36 pm

La tripulacion ríe ante su bravuconería y Bonnie lo tumba de una patada en el estómago. Emily saca unos grilletes y lo aprisiona de manos y pies.
-Llevaos a esrte inútil -Farfulla Bonnie. Alexander lo agarra por las cadenas y lo arrastra por la cubierta sin importarle que su cara roce contra el suelo.
-Bueno, sirenita, esto va a ser muy divertido -dice el pirata con una sonrisa cruel en los labios. ata un extremo de la cadena a la barandilla y lo deja colgando ante la proa, cuyo mascarón había desaparecido. Desde una ventana, Bonnie ajusta sus cadenas para tenerlo bien sujeto. Le agarra la mejilla y ríe.
-Qué sirenita más bonita. Luego desaparece en su camarote.
Aníbal se queda solo y totalmente atado a la proa, con el agua salada entrándole por la nariz.

15/08/11, 05:41 pm

Me quedo sin poder moverme en la proa. no tengo ni idea de como he llegado a esto, pero el caso es que no puedo desatarme. Cuando me doy cuenta de que resistirse me será inútil, decido dejar de forzarme. igual necesitaré fuerzas para después.
-Serán estúpidos...esta me la pagan...aunque no sé a qué ha venido esto...estabamos muy bien antes...
Trato de discernir el por que de esta accion pero no puedo.

15/08/11, 05:49 pm

<<De verdad crees que vas a salir de esta? Pobre iluso...>> resuena una voz en su cabeza. Le resultaba familiar, pero no lograba reconocer de quien era...
la olas rompen contra su cuerpo, y el agua salada entra por su nariz y su boca llenando sus pulmones e irritando su garganta. El barco sube yb baja al son del mar y el viento. Un graznido se distingue a lo lejos, un conocido y desagradable graznido. Estirges. Llegan volando y le rodean, chillándole de forma estridente. Una lanza sus garras contra él y le hace un arañazo en la cara. Esa parece ser la señal, las otras empiezan a arañarle y a darle picotazos. Uno de ellos le da en un ojo, y lo saca de la cuenca con pasmosa facilidad. La estirge se lo traga y grazna de gusto, y las demás empiezan a pelearse por el otro. Decenas de picos atacan el único ojo sano de Aníbal, que no dura mucho como tal.
Aníbal se ha quedado ciego.

15/08/11, 05:53 pm

Grito tan fuerte como puedo. Pero es en vano. No veo nada...NO VEO NADA!
-(insert los peores insultos jamás creados).- grito a mi ex-tripulación, que seguro que me está viendo. Juro que, de algún modo u otro, pagarán por lo que me han hecho. Los maldigo con todas las maldiciones que sé...
Y el tiempo va pasando.

15/08/11, 06:07 pm

-¡Cállate, petardo! -gritan desde arriba. Alguien le tira una botella de cristal que impacta contra su cabeza.
Aníbal se queda quieto durante mucho tiempo, un tiempo que pasa volando en el sueño. Sin embargo tiene la impresión de que lleve semanas como mascarón de proa. Semanas soportando picotazos en la cara. Semanas tragando agua salada. Semanas oyendo los gritos de alegría de lo que una vez fue su tripulación.
Hasta que un día, alguien abre el ojo de buey que tiene al lado.
-Despierta, Aníbal -dice una voz femenina-. Te necesitamos -Reconoce que es la de Abigail. Unas manos retiran las cadenas de la madera para que el peso del antiguo capitán quede libre, aunque las que le sujetan siguen bien agarradas. Alguien lo sube de nuevo a la cubierta.

15/08/11, 06:10 pm

Me giro hacia la voz.
-Ah, ahora me necesitáis? ¿Después de dejar que me quede sin ojos y dejarme nosecuanto tiempo atado? ¿AHORA?

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