Sede de los Taumaturgos (Archivo I)

Recuerdo del primer mensaje :

Llego a la inmediaciones del minarete de madera rojiza ... es un edifico increíble, con decoraciones que recuerdan la arquitectura árabe ..
-Vaya - digo mirándolo - ... seria un lugar fantástico para vivir - les comento a los otros - ... ¿sera seguro? ...
Estoy alerta, preparado para cualquier cosa ...

Veo también a Elliot. Que se acerca y nos saluda.
-Buenos días! - Le sonrío.
-Bueno, ya vamos despertándonos todos poco a poco.
-Tengo hambre y sed, así que haber cuando vamos en busca de comida y agua. -Les digo y pongo una mueca neutral :/.

Elliot se despierta, viene hacia nosotros y nos saluda.

-Buenos dias, ¿qué tal estás? "le pregunto".

-Yo no he visto ninguna rata... pero podríamos buscarla, de todos modos, aunque Elliot tiene razón, supongo que habrán huido las pocas que hubiese aquí. Dijeron que había un rio cerca... pero no estoy muy seguro de que sea buena idea ir ahora solos. Cuando el resto despierte podríamos ir todos juntos, supongo, ellos también querrán beber "contesto a Ulises".

<<Ríos... Agua al exterior... Depredadores y monstruos cerca...<< Pienso tras oir el comentario de Dean.
-Bueno, esa es una opción,no se si es muy segura, pero se hablaran todas las opciones. -Comento.

-Hola, Elliot... Creo que pasaremos algo de hambre hasta la hora de las provisiones, entonces- suspiro.- Me sigue dando miedo esta ciudad, mucho miedo... Pero me parece que realmente ningún lugar es seguro.

Hice de tripas corazón para lo que iba a decir a continuación.

-Supongo... que os acompañaré a conseguir las provisiones, no puedo esconderme como un hámster por siempre mientras vosotros os arriesgáis. Sólo espero no ser una molestia, pero empiezo a sentirme muy inútil-termino apenado.

Tenía mucho miedo, pero quería ayudarles. De todos modos una vez superado el shock inicial ya había comenzado a comprender que en este lugar quedarse quieto es tan peligroso como no hacerlo.

-Es cierto, había un río... Espero que e agua sea potable.

-Ulises... aquí nadie es una molestia. Si nos han traido aquí es porque servimos para algo, así que tranquilo, que no eres inútil.

-Para ir a por las provisiones tenemos que organizarnos, nunca está de más tener apoyos. -Les comento y le sonrío a Ulises.
-Pero tampoco podemos ir muchos. Quien vaya al exterior tiene que ser rápido, y fuerte. Los más pequeños o débiles es mejor que no nos acompañen, podría convertirse en un riesgo si vamos muy numerosos. -Les digo.
<<Que digo, pero si habrá gente que no querrá ir a buscar provisiones, es lógico.<<
-Somos nueve, cuando, repito, cuando se despierten se organizará todo, yo me apunto para ir a por las provisiones, tengo que moverme. -Finalizo.
<<No te muevas tanto a ver si te terminas lesionando, grandullón.<< Pienso para mí.

-Yo, si se me permite, me apunto también a buscar las provisiones de las que nos hablaron. Quiero conocer un poco más de este lugar.

"No se si será buena idea moverme de este edificio, pero, este va a ser nuestro tercer día aquí y necesito salir a tomar algo el aire, no puedo estar siempre encerrado" pienso para mis adentros.

-Estoy de acuerdo con Elliot, ellos son quienes han tomado las decisiones por el momento y parece que todo ha salido bien por ahora. Esperemosles.

-Gracias, Dean... Es un alivio que todos seais tan amables.
Escucho a Jau con atención.

-Sí... supongo que tienes razón... Organizarse es muy importante.

Me río ante los apodos que le ha dado Elliot a Alec y Vacuum... pero la verdad es que les pegan.

Suspiro y me levanto. Me siguen doliendo bastante los músculos y creo que lo mejor será que no me quede sentado todo el tiempo, por lo que doy un pequeño paseo por la estancia.

Nia se levanta. Habia estado algo ida del mundo porque Harm habia estado toda el tiempo meditando y reflexionando sobre los idiomas perdidos. Lo poco que se habia enterado Nia era que tenian problemas y que se habian mudado.
-Nada...Todo el tiempo que llevaba dedicandole y nada...-dice Harm con su voz masculina.
-Bueno, bueno. No te preocupes. Conseguiste las primeeras palabras de la nada asi que no tardaran en volver.-
Se acerca a un grupo de chicos que ya se habian levantado.
-Hola! Para los que no me conozcais, soy Nia.-dice sonriendo, aun no le habian dicho que era un peluquero. Se les ve con miedo.-¿Que pasa?-

Escucho a Nia levantarse y presentarse a los que todavía no la conocen.

-Hola, Nia, buenos días. Estamos esperando a que se despierten todos para organizarnos para ir a buscar provisiones. También planeábamos ir al río para buscar agua...

Recordé lo mucho que le gustaba el agua a aquella extraña niña y supuse que le emocionaría la idea de ir al río.

-Buenos dias Nia, como dice Ulises, estamos esperando al resto. No creo que puedan tardar mucho en despertarse.

Nia abre mucho los ojos.
-¿¡Un río!?-dice con un chillidito.
-¡¡BIEN!!-dice dando un salto de alegria.
-La fuente esa era muy pequeña y no podia moverme bien...-
Se lleva un dedo a los labios dubiditativa y le pregunta a Harm (osea que parece que empieza a hablar sola)
-¿Habrá Kus-Kusu de río?-
<<No creo que los haya.>>
-Si...puede que tengas razón...Aunque en casa solo vivian en el mar...-
-Pues a esperar toca.-les dice a los chicos. Se cruza de brazos y comienza a dar pisadas suaves siguiendo un ritmo en una postura comica de espera.

-¿Kus-Kusu de río? ¿De qué hablas? "pregunto extrañado a Nia" No tengo ni idea de qué esta hablando, ni con quién.

Me despierto. Es algo tarde. Veo que hay un grupo de chicos que no conozco que ya se han levantado.

-Hola -saludo acercándome a ellos. -Me llamo Nikola Tesla.

Observo a Nia con cara de desconcierto.

-¿Con quién habla?- pregunto en voz baja a los demás.

Pero entonces otro de los chicos se despierta, es alguien a quien todavía no conozco. Me dirijo a él, asombrándome a mí mismo. Siempre había sido muy tímido, pero parece que en esta ciudad ya no había mucha cabida para la timidez. Aún así siempre me siento un poco inseguro hablando con el resto.

-Hola, Nikola... todavía no nos conocemos. Me llamo Ulises.

Pienso unos segundos y dubitativo le tiendo la mano.

Estrecho la mano de Ulises, sonriente.
-Encantado de conocerte. ¿Habláis de las provisiones? Me apunto a ir a buscarlas -sonrío, quiero ser útil.