Ruinas de Margalar

La miro, sonriendo.
-Me parece que lo del modo macho alfa sabes bien por quién va...
Cuando menciona otros modos "on", prefiero no arriesgarme a malpensar...
-No, de momento todo está apagado o fuera de cobertura...
Me encojo de hombros.
-No pienso quejarme si me contagio...

Pongo los ojos en blanco y me rio.
- Me da a pensar, sí... - contesto - pues si te dejas contagiar eres tonto - respondo - además, pensé que estabas pensando una manera de curarme... si caes enfermo no me servirás de nada - respondo mientras le doy otro golpecito en el hombro.

Me encojo de hombros y pongo cara de fastidio, pero termino apartándome.
-Bueeeno, lo que tú digas...
Parece que está más animada.
-Otra cosa en que yo tenía razón...la compañía te va bien.-le digo-. ¿Por qué nadie me hace caso?-pregunto al aire.

- Porque te pones muy mandón - le digo entre risas - además sabes que lo que te digo es verdad.
Cojo el cuchillo del suelo y vuelvo a mi tiro improvisado.

Me siento en un extramo de la habitación y me quedo observandola.
-Ni enferma paras de entrenar, ¿eh? Sí que tenías fuerzas, después de todo...
La miro con reproche fingido.
.¿Mandón? ¿Yoo? ¡Imposible!

- Tengo que hacer algo mientras estoy aquí tirada, ¿no? - le digo distraida - puesto que así tirada no puedo coger el arco - lo señalo - pues practico con los cuchillos.
- Yo saco fuerzas de todos los sitios, aunque no consiga levantarme del todo... sabré defenderme.
Le pongo un mohín.
- Sí.... mandón... modo ON - le digo entre risas.

-Pues haces bien...nunca se sabe lo que te puede pasar en esta ciudad.
La miro, divertido.
-Sí, modo mandón ON...esperate a que quiera saber cosas de tu vida, que entonces activaré el modo Prensa del Corazón...

- ¡No! Prensa del corazón, no - le digo agitando los brazos - que soy capaz de escaparme a rastras - le digo.
Comienzo a reir, y cambio a la mano izquierda en los tiros contra la silla. Parece que con ésa no me va tan bien, así que persisto.
- Prefiero no contarte más... con lo que sabes de mí es suficiente - digo.

Me río con ella.
-¿Ah, si? Pues no me des motivos para preguntarte...-bromeo.
Me encojo de hombros.
-Supongo que sí, sé muchas cosas de ti...
Observo como tira con la mano izquierda.
-Necesitas practicar con la zurda. Sigue intentándolo y te saldrá bien...

- No te he dado motivos - le digo con un mohín - si llevas una pequeña cotilla del corazón rosa en tu interior.. pues es problema tuyo - reí.
- Eso supones sí - le digo asintiendo pero sin dar a entender más.
Sigo practicando con la izquierda pero no hace más que rebotar.
- Y eso que me decías que lo tenías todo apagado... que no se te encienda esa vena, por favor...

-Tranquila, la mantendré a raya...-le digo, sonriendo-. y creo que tengo un pequeño sicario de la prensa rosa dentro...que le voy a hacer, soy cotilla.
Miro como sigue practicando.
-No te desanimes, que casi lo tienes...

Tiro una vez más y clavo el cuchillo.
- ¡Aaahh! es difícil - le digo.
Sigo intentándolo, embelesada.
- ¿Dónde conseguiste el libro?

Sonrío cuando lo clava.
-¿Ves? Lo has conseguido.
Me pregunta por el libro. Me encojo de hombros.
-En una biblioteca que hay en el norte. Lo malo es que sólo te deja coger uno por año...

- ¿En serio? - le digo - ¿y hay libros de magia?
Empiezo a pensar en como debe de ser ésa biblioteca.
- Mañana espero poder levantarme... bueno más bien espero que mañana la infección se haya ido.

-Pues igual...a ver si puedes pillar uno y tratamos de aprender algún hechizo...
La miro y veo que tiene más energía.
-Yo diría que en un dia o dos estarás curada...

- Si fueras mi doctor ya estaría curada - le digo de coña - voy a hacer por dormir un rato - le digo mientras me recuesto - tal vez luego esté de mejor humor.
Después cierro los ojos y hago por dormir.

(En un rato vuelvo)

Asiento.
-Dormir te hará bien...-le digo, pero ya se ha dormido. Me encojo de hombros y voy a buscar una manta. La tapo con ella. Acaricio su pelo y vuelvo al rincón, vigilante.