Plaza del Estandarte
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Rocavarancolia Rol
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- Rocavarancolia Rol
Plaza del Estandarte
02/08/11, 04:27 pm
Recuerdo del primer mensaje :
Enorme plaza repleta de estatuas blancas, muchas de ellas destruidas, que representan a criaturas de las más diversas especies enzarzadas en una violenta batalla.
En cada esquina de la plaza hay una torre, todas idénticas en altura y forma: la base y los dos primeros pisos tienen forma pentagonal, mientras que el resto de los edificios son rectangulares. Todas las fachadas tienen grandes ventanales con forma de arco de medio punto casi sin separación entre ellos.
Una de las torres está construida de mármol claro (cuya azotea parece haber estallado hacia fuera), otra de cristal y espejos (la fachada norte posee tantas grietas que parece una telaraña), otra de madera verdosa y la última, de la cual solo queda la primera planta, de hielo mágico de Arfes.
En cada esquina de la plaza hay una torre, todas idénticas en altura y forma: la base y los dos primeros pisos tienen forma pentagonal, mientras que el resto de los edificios son rectangulares. Todas las fachadas tienen grandes ventanales con forma de arco de medio punto casi sin separación entre ellos.
Una de las torres está construida de mármol claro (cuya azotea parece haber estallado hacia fuera), otra de cristal y espejos (la fachada norte posee tantas grietas que parece una telaraña), otra de madera verdosa y la última, de la cual solo queda la primera planta, de hielo mágico de Arfes.
- Aes
Ficha de cosechado
Nombre: Aniol
Especie: Humano
Habilidades: habilidad manual, automotivación, olfato fino.
Re: Plaza del Estandarte
22/02/19, 09:55 pm
Trama de los Sueños
El traqueteo del carruaje cesó al poco pero no el calor inusual que irradiaba Ruth, estaba segura de que jamás había alcanzado tal temperatura. Un fulgor inmenso se extendía por cada poro, y parecía querer saltar de su cuerpo para incinerarlo todo a su paso. Se sentía débil, sí, pero solo el fuego en estado puro podía reflejar la furia que anidaba en su pecho.
-Sabía que no tardarías en sacarlo, hermana- escuchó cuando la llevaron en volandas y la depositaron en el suelo. Ruth quiso retorcerse y gritar, matar a Marietta y Attilo. Y por supuesto, saber qué estaba pasando. La israelita levantó la mirada hacia una visión espeluznante.
La Plaza del Estandarte se alzaba ante ella sin elegancia y llena de sombras proyectadas por piras aquí y allá. La gente bailaba , reía y chillaba de euforia, todos ataviados de vestidos, trajes y máscaras misteriosas. Ruth no tardó en descubrir que las estatuas blancas características del lugar habían sido sustituidas por otras más grandes de fuego en relieve. Impresionantes moles que narraban historias de terror. La chica creyó distinguirse en varias, en una acuchillaba a una figura de Quemaduras por la espalda y en otra se alzaba por encima de un montículo de cadáveres de los que sin duda eran licántropos. No logró encontrar el rostro de Devoss.- la magia que hay en ti quiere emerger tras tanto letargo. Hoy es el día.
Y en medio de todo, Imre. Coronando un trono de varios metros construido con huesos y acero. Aunque parecía un demonio de fuego como ella había diferencias importantes, su piel parecía ser de lava líquida y todo el fuego que desprendía su cabello y cuerpo era de un azul brillante, casi cegador. Notó como las lágrimas se desparramaban sin control.
-¡Imre! ¡¿Por qué haces esto?!- chilló con rebeldía y a la vez, una profunda tristeza.
El rostro que decía ser Imre se afiló como las sombras que recorrían cada esquina, y su carcajada resonó con fuerza. Se hizo el silencio y todos se arrodillaron. Ruth escupió al suelo, a los pies del trono e intentó atacar de nuevo en vano. Habían clavado el otro extremo de la cadena que la sujetaba por el cuello al suelo y no podía moverse.
-Deberías preguntarte primero por qué estoy aquí, parece que el sello te ha borrado la memoria. Te creías la fuerte, la que merecía el don de la Luna pero una vez más te equivocaste. Diez años más tarde de tu cosecha me aceptaste...- levantó la voz con malicia- sin saber que había sobrevivido a costa de lanzar a mis compañeros contra el peligro para salvarme. Y después de eso... cuando nos unimos el fuego lo consumió todo. Todos los adoradores de la llama se veían excitados ante nuestra propuesta, deseosos. ¿Acaso no es eso lo que nos ata? El olor a … ¿quemado?.
Ruth parecía recordar, como pequeños flashes que la bombardeaban. Recordó a su hermana renaciendo de un fulgor azul, recordó a un Rasqa enloquecido que aprovechaba la oportunidad para alistarse a la causa y arrasar con pueblos enteros. Vio la masacre, el asesinato de Quemaduras y todos los poseedores del fuego que no estaban de acuerdo. Contempló el borrado de los licántropos y como Devoss conseguía escapar a tierras rebeldes. Y por último la traición. El sello que su hermana le lanzo ante todos.
-¡NO! ¡No he podido matar a mis amigos! ¡Y tu...!
-Vamos Ruth..., los mataste porque tú no tienes amigos. ¿No lo comprendes?. Tú y yo nunca los tendremos, siempre hemos pensado que lo equivocado estaba en ellos. Pero he tardado en entender que forma parte de nuestra naturaleza.
Ruth se revolvió en su sitio, la cadena del cuello empezaba a fundirse del calor y el hierro fundido resbalaba por su cuello sin hacerle daño.
-¡Mientes!
-Las reinas no tienen amigos, Ruth. Eres casi una igual a mí, la diferencia es que yo quiero ser la reina de las reinas. Y para eso tengo que eliminarte. Necesito tu poder. Y entonces... te unirás a las cenizas de nuestra madre.- y remató la frase con un odio tan punzante que la israelita percibió como la ensartaba con saña.
Imre levitó hasta ella, una daga envuelta en llamas y truenos refulgía en la mano de su hermana, y el murmullo de los presentes se alzaba hasta un salmodio entonado con locura y aullidos animales. Pegando todas sus pieles en un auténtico aquelarre. La Salamandra le hizo un pequeño corte en su mejilla, aquello si tuvo un dolor físico. Quería estrangularla entre sus manos.
-Me permitiré verte arder.
El traqueteo del carruaje cesó al poco pero no el calor inusual que irradiaba Ruth, estaba segura de que jamás había alcanzado tal temperatura. Un fulgor inmenso se extendía por cada poro, y parecía querer saltar de su cuerpo para incinerarlo todo a su paso. Se sentía débil, sí, pero solo el fuego en estado puro podía reflejar la furia que anidaba en su pecho.
-Sabía que no tardarías en sacarlo, hermana- escuchó cuando la llevaron en volandas y la depositaron en el suelo. Ruth quiso retorcerse y gritar, matar a Marietta y Attilo. Y por supuesto, saber qué estaba pasando. La israelita levantó la mirada hacia una visión espeluznante.
La Plaza del Estandarte se alzaba ante ella sin elegancia y llena de sombras proyectadas por piras aquí y allá. La gente bailaba , reía y chillaba de euforia, todos ataviados de vestidos, trajes y máscaras misteriosas. Ruth no tardó en descubrir que las estatuas blancas características del lugar habían sido sustituidas por otras más grandes de fuego en relieve. Impresionantes moles que narraban historias de terror. La chica creyó distinguirse en varias, en una acuchillaba a una figura de Quemaduras por la espalda y en otra se alzaba por encima de un montículo de cadáveres de los que sin duda eran licántropos. No logró encontrar el rostro de Devoss.- la magia que hay en ti quiere emerger tras tanto letargo. Hoy es el día.
Y en medio de todo, Imre. Coronando un trono de varios metros construido con huesos y acero. Aunque parecía un demonio de fuego como ella había diferencias importantes, su piel parecía ser de lava líquida y todo el fuego que desprendía su cabello y cuerpo era de un azul brillante, casi cegador. Notó como las lágrimas se desparramaban sin control.
-¡Imre! ¡¿Por qué haces esto?!- chilló con rebeldía y a la vez, una profunda tristeza.
El rostro que decía ser Imre se afiló como las sombras que recorrían cada esquina, y su carcajada resonó con fuerza. Se hizo el silencio y todos se arrodillaron. Ruth escupió al suelo, a los pies del trono e intentó atacar de nuevo en vano. Habían clavado el otro extremo de la cadena que la sujetaba por el cuello al suelo y no podía moverse.
-Deberías preguntarte primero por qué estoy aquí, parece que el sello te ha borrado la memoria. Te creías la fuerte, la que merecía el don de la Luna pero una vez más te equivocaste. Diez años más tarde de tu cosecha me aceptaste...- levantó la voz con malicia- sin saber que había sobrevivido a costa de lanzar a mis compañeros contra el peligro para salvarme. Y después de eso... cuando nos unimos el fuego lo consumió todo. Todos los adoradores de la llama se veían excitados ante nuestra propuesta, deseosos. ¿Acaso no es eso lo que nos ata? El olor a … ¿quemado?.
Ruth parecía recordar, como pequeños flashes que la bombardeaban. Recordó a su hermana renaciendo de un fulgor azul, recordó a un Rasqa enloquecido que aprovechaba la oportunidad para alistarse a la causa y arrasar con pueblos enteros. Vio la masacre, el asesinato de Quemaduras y todos los poseedores del fuego que no estaban de acuerdo. Contempló el borrado de los licántropos y como Devoss conseguía escapar a tierras rebeldes. Y por último la traición. El sello que su hermana le lanzo ante todos.
-¡NO! ¡No he podido matar a mis amigos! ¡Y tu...!
-Vamos Ruth..., los mataste porque tú no tienes amigos. ¿No lo comprendes?. Tú y yo nunca los tendremos, siempre hemos pensado que lo equivocado estaba en ellos. Pero he tardado en entender que forma parte de nuestra naturaleza.
Ruth se revolvió en su sitio, la cadena del cuello empezaba a fundirse del calor y el hierro fundido resbalaba por su cuello sin hacerle daño.
-¡Mientes!
-Las reinas no tienen amigos, Ruth. Eres casi una igual a mí, la diferencia es que yo quiero ser la reina de las reinas. Y para eso tengo que eliminarte. Necesito tu poder. Y entonces... te unirás a las cenizas de nuestra madre.- y remató la frase con un odio tan punzante que la israelita percibió como la ensartaba con saña.
Imre levitó hasta ella, una daga envuelta en llamas y truenos refulgía en la mano de su hermana, y el murmullo de los presentes se alzaba hasta un salmodio entonado con locura y aullidos animales. Pegando todas sus pieles en un auténtico aquelarre. La Salamandra le hizo un pequeño corte en su mejilla, aquello si tuvo un dolor físico. Quería estrangularla entre sus manos.
-Me permitiré verte arder.
- GiniroryuGM
Ficha de cosechado
Nombre: Rägjynn
Especie: mjörní
Habilidades: memoria, buen oído y don de lenguas
Re: Plaza del Estandarte
13/03/19, 04:55 pm
—Gracias, Naeleth, volveré a hablar contigo cuando lo tenga más claro.
Se despidió de la nublina, que seguía su camino en dirección a Serpentaria. Se la había encontrado y la nebulomante, tras saludarla y dudar un poco, había decidido pedirle hablar con ella sobre algo que le rondaba la cabeza desde el día de la pesadilla. La bruja le había explicado todo amablemente y le había confirmado que lo que le pedía era posible, pero Irianna tenía sus dudas.
Se dio la vuelta para observar una estatua que tenía a su espalda y fue cuando se dio cuenta de que no estaba sola aun si Naeleth ya se había marchado.
—Oh, hola, Vac —saludó al hado infernal acercándose a él—. ¿Estáis todos bien en el burdel? No te vi despierto en el salón del trono, aunque vi a tu hermano cargando contigo.
Se despidió de la nublina, que seguía su camino en dirección a Serpentaria. Se la había encontrado y la nebulomante, tras saludarla y dudar un poco, había decidido pedirle hablar con ella sobre algo que le rondaba la cabeza desde el día de la pesadilla. La bruja le había explicado todo amablemente y le había confirmado que lo que le pedía era posible, pero Irianna tenía sus dudas.
Se dio la vuelta para observar una estatua que tenía a su espalda y fue cuando se dio cuenta de que no estaba sola aun si Naeleth ya se había marchado.
—Oh, hola, Vac —saludó al hado infernal acercándose a él—. ¿Estáis todos bien en el burdel? No te vi despierto en el salón del trono, aunque vi a tu hermano cargando contigo.
- Red
Ficha de cosechado
Nombre: Doe
Especie: Ninguna conocida
Habilidades: No tiene
Re: Plaza del Estandarte
14/03/19, 11:15 pm
Vac paseaba por la plaza del Estandarte algo distraído con una bolsa en la mano. Había salido ha hacer unos recados y a la vuelta se había puesto a vagar, disfrutando de la leve brisa que soplaba desde el este, pero había perdido la noción del tiempo sin darse cuenta. Ni siquiera recordaba que camino había tomado para acabar allí, pero decidió aprovechar el viaje y se puso a observar las estatuas.
No fue su intención oír lo que oyó, pero sin quererlo captó el final de una conversación que debería haber sido privada. Terriblemente incómodo el hado espero tras una de las esculturas a que Naeleth se alejara antes de dejarse ver, saludando a la idrina con un gesto de la mano y una sonrisa avergonzada.
—Buenas, Irianna —le devolvió el saludo, asintiendo a su pregunta con la cabeza antes de responderle—. Si, algo mejor... Cain les ha dado a todos unos días de vacaciones para que puedan descansar en condiciones, así que están aprovechando el tiempo bien. ¿Vosotros como estáis? —inquirió, interesándose por ella y sus compañeros de cosecha—. Yo si que te vi cuando desperté, pero parecías ocupada.
Escuchó su respuesta en silencio, pero cuando le tocó hablar de nuevo no pudo posponerlo más y se apresuró a disculparse.
—Oye, siento haber escuchado tu conversación con Naeleth... —empezó, negando con la cabeza tras el desastroso inicio antes de corregirse—. El final de la conversación quiero decir. No era mi intención y ni siquiera puedo decir que me haya enterado de nada, pero de verdad que lo siento. —aclaró, rascándose la nuca con expresión abochornada.
No fue su intención oír lo que oyó, pero sin quererlo captó el final de una conversación que debería haber sido privada. Terriblemente incómodo el hado espero tras una de las esculturas a que Naeleth se alejara antes de dejarse ver, saludando a la idrina con un gesto de la mano y una sonrisa avergonzada.
—Buenas, Irianna —le devolvió el saludo, asintiendo a su pregunta con la cabeza antes de responderle—. Si, algo mejor... Cain les ha dado a todos unos días de vacaciones para que puedan descansar en condiciones, así que están aprovechando el tiempo bien. ¿Vosotros como estáis? —inquirió, interesándose por ella y sus compañeros de cosecha—. Yo si que te vi cuando desperté, pero parecías ocupada.
Escuchó su respuesta en silencio, pero cuando le tocó hablar de nuevo no pudo posponerlo más y se apresuró a disculparse.
—Oye, siento haber escuchado tu conversación con Naeleth... —empezó, negando con la cabeza tras el desastroso inicio antes de corregirse—. El final de la conversación quiero decir. No era mi intención y ni siquiera puedo decir que me haya enterado de nada, pero de verdad que lo siento. —aclaró, rascándose la nuca con expresión abochornada.
- GiniroryuGM
Ficha de cosechado
Nombre: Rägjynn
Especie: mjörní
Habilidades: memoria, buen oído y don de lenguas
Re: Plaza del Estandarte
15/03/19, 12:15 am
—Eso está bien, estoy segura de que es un descanso muy merecido —comentó a su respuesta—. Todos bien también, por suerte —respondió entonces a su pregunta. No podía evitar recordar a la chica que había encontrado muerta y pensar en lo mal que lo estarían pasando sus compañeros. Por suerte ella no tenía que lamentar a nadie—. Gahna me había asignado la tarea de buscar gente en las calles con la niebla —asintió ante su último comentario.
Estaba pensando en preguntarle hacia donde se dirigía por si coincidían en parte del trayecto cuando el hado realizó una confesión. En otro tiempo aquello le hubiese preocupado, pero en ese momento la idrina tan solo realizó un gesto con la mano de querer quitarle hierro al asunto.
—No te preocupes, sé que no lo harías a propósito. Y bueno… En realidad es un tema del que ya no me importa hablar con mis amigos. —Se quedó pensativa unos instantes antes de volver a hablar—. La verdad es que a lo mejor podrías ayudarme a tomar una decisión, ya que eres mucho más veterano en la ciudad que yo o Naeleth. Y también creo que a cuanta más gente cercana se lo cuente más me quitaré un peso de encima. Si no te resulta incómodo, claro.
No sabía cuánto había oído Vac de su conversación, pero posiblemente lo suficiente para poder decidir si prefería hablar del tema o no.
Estaba pensando en preguntarle hacia donde se dirigía por si coincidían en parte del trayecto cuando el hado realizó una confesión. En otro tiempo aquello le hubiese preocupado, pero en ese momento la idrina tan solo realizó un gesto con la mano de querer quitarle hierro al asunto.
—No te preocupes, sé que no lo harías a propósito. Y bueno… En realidad es un tema del que ya no me importa hablar con mis amigos. —Se quedó pensativa unos instantes antes de volver a hablar—. La verdad es que a lo mejor podrías ayudarme a tomar una decisión, ya que eres mucho más veterano en la ciudad que yo o Naeleth. Y también creo que a cuanta más gente cercana se lo cuente más me quitaré un peso de encima. Si no te resulta incómodo, claro.
No sabía cuánto había oído Vac de su conversación, pero posiblemente lo suficiente para poder decidir si prefería hablar del tema o no.
- Red
Ficha de cosechado
Nombre: Doe
Especie: Ninguna conocida
Habilidades: No tiene
Re: Plaza del Estandarte
17/03/19, 07:51 pm
Cuando Irianna le confirmó que todos sus amigos estaban bien el hado se alegró, pero fue el hecho de que le quitara hierro al asunto con respecto a su espionaje involuntario lo que de verdad le alivió. Por un momento había temido que la muchacha se enfadara, pero por suerte no había sido así, y además se planteaba preguntarle al respecto.
—Lo cierto es que no oí demasiado, así que no se de que va el tema, pero estoy dispuesto a escucharte si quieres hablar —le respondió—. No se si podré ayudarte, pero es lo menos que puedo hacer e intentaré ser de utilidad. —añadió.
No sabía si quería tratar el tema allí mismo o si prefería ir a otro sitio, pero dejó que fuera la bruja la que decidiera que paso dar a continuación. Había un banco cercano para sentarse si se decantaba por la primera opción, pero si no era así siempre podían ir a algún lugar tranquilo como la Bodega.
—Lo cierto es que no oí demasiado, así que no se de que va el tema, pero estoy dispuesto a escucharte si quieres hablar —le respondió—. No se si podré ayudarte, pero es lo menos que puedo hacer e intentaré ser de utilidad. —añadió.
No sabía si quería tratar el tema allí mismo o si prefería ir a otro sitio, pero dejó que fuera la bruja la que decidiera que paso dar a continuación. Había un banco cercano para sentarse si se decantaba por la primera opción, pero si no era así siempre podían ir a algún lugar tranquilo como la Bodega.
- GiniroryuGM
Ficha de cosechado
Nombre: Rägjynn
Especie: mjörní
Habilidades: memoria, buen oído y don de lenguas
Personajes :
● Noel: Draco de Estínfalo de origen sueco.
● Archime/Krono Rádem: Kairós irrense.
● Irianna/Dama Enigma: Nebulomante idrina lacustre.
● Adrune: Gamusino sinhadre, edeel.
● Lethe: Horus, enderth.
● Rägjynn: mjörní.
● Naeleth: Bruja del Hielo, nublina.
Unidades mágicas : 8/8
Síntomas : Aumenta su resistencia progresivamente. El sangrado de sus ojos se detonará con más frecuencia.
Armas :
● Noel: hacha de dos manos y espada bastarda.
● Archime/Krono Rádem: sus monólogos sobre biomecánica avanzada.
● Irianna: arco y estoque.
● Adrune: lanza, espadas cortas y arco.
● Lethe: arco y lanza.
● Rägjynn: jō.
● Naeleth: arco, sai y báculo.
Status : Gin: do the windy thing.
Humor : REALLY NOT FEELIN' UP TO IT RIGHT NOW. SORRY.
Re: Plaza del Estandarte
17/03/19, 11:55 pm
Irianna asintió y miró a su alrededor hasta dar con lo que buscaba: un lugar donde sentarse.
—Creo que prefiero hablar aquí mismo donde es improbable que vaya a pasar mucha gente, si no te importa.
Había señalado el banco con la cabeza y, tras tener la confirmación de Vac, se dirigió hacia allí y tomó asiento. Una vez el hado también lo hizo cogió aire y empezó a hablar.
>>Va a ser largo, porque tengo que empezar por el principio de todo esto y eso es hace ya cuatro años…
Por segunda vez la idrina contó aquella historia sin obviar detalles que fuesen necesarios. Le explicó brevemente como había conocido a Veril y como se le declaró y ella lo rechazó. Como ese fue el detonante de su obsesión y del infierno que vivió durante aquellos dos años hasta la noche de Samhein en la que él cruzó una línea y huyó de su propia casa, explicándole por qué sus padres no iban a creerla y como la aparición de Miseria Nombre había sido como un regalo del Reflejo. Le explicó lo manipulador que era Veril, los problemas que su acoso provocaron en su psique y el motivo por el que había tardado tanto en volver a pisar Idris.
Pero después también le habló de toda la gente que había conocido en la ciudad y que consciente o inconscientemente le había ayudado. Hizo hincapié en dama Diurna y la oportunidad de conocerlos. Le explicó que se había dado cuenta de que ya no era tan indefensa como se creía cuando Cerril y su secuaz intentaron emboscarla en la avenida estatuada.
—…Así que el violín no fue lo único que me traje de mi visita a Idris, sino también la satisfacción de haberle dado un buen guantazo a ese cerdo… Y espero que de haberle espantado lo suficiente para que al menos se lo piense antes de repetir la misma historia con otra persona.
La nebulomante se retiró el pelo de una oreja con nerviosismo y dedicó una sonrisa cansada a Vac.
>>Y… bueno, lo que hablaba con Naeleth, en definitiva… Me estoy planteando si debería eliminar las últimas secuelas de mi fobia mediante mentalismo. ¿Sería ese un signo de que en realidad nunca conseguí superarlo por mí misma o solo estoy siendo otra vez dura conmigo misma al pensar así? —negó con la cabeza—. He avanzado mucho, pero el día de la pesadilla… Soñé con él. Fue muy desagradable, y me hizo pensar demasiado al respecto.
Durante casi todo su relato, aunque se le podía notar una ligera angustia en su voz al recordar algunas de las peores partes, se había mantenido con una pose bastante neutra. La pesadilla, no obstante, estaba demasiado reciente y el ánimo de la idrina había decaído un poco.
—Creo que prefiero hablar aquí mismo donde es improbable que vaya a pasar mucha gente, si no te importa.
Había señalado el banco con la cabeza y, tras tener la confirmación de Vac, se dirigió hacia allí y tomó asiento. Una vez el hado también lo hizo cogió aire y empezó a hablar.
>>Va a ser largo, porque tengo que empezar por el principio de todo esto y eso es hace ya cuatro años…
Por segunda vez la idrina contó aquella historia sin obviar detalles que fuesen necesarios. Le explicó brevemente como había conocido a Veril y como se le declaró y ella lo rechazó. Como ese fue el detonante de su obsesión y del infierno que vivió durante aquellos dos años hasta la noche de Samhein en la que él cruzó una línea y huyó de su propia casa, explicándole por qué sus padres no iban a creerla y como la aparición de Miseria Nombre había sido como un regalo del Reflejo. Le explicó lo manipulador que era Veril, los problemas que su acoso provocaron en su psique y el motivo por el que había tardado tanto en volver a pisar Idris.
Pero después también le habló de toda la gente que había conocido en la ciudad y que consciente o inconscientemente le había ayudado. Hizo hincapié en dama Diurna y la oportunidad de conocerlos. Le explicó que se había dado cuenta de que ya no era tan indefensa como se creía cuando Cerril y su secuaz intentaron emboscarla en la avenida estatuada.
—…Así que el violín no fue lo único que me traje de mi visita a Idris, sino también la satisfacción de haberle dado un buen guantazo a ese cerdo… Y espero que de haberle espantado lo suficiente para que al menos se lo piense antes de repetir la misma historia con otra persona.
La nebulomante se retiró el pelo de una oreja con nerviosismo y dedicó una sonrisa cansada a Vac.
>>Y… bueno, lo que hablaba con Naeleth, en definitiva… Me estoy planteando si debería eliminar las últimas secuelas de mi fobia mediante mentalismo. ¿Sería ese un signo de que en realidad nunca conseguí superarlo por mí misma o solo estoy siendo otra vez dura conmigo misma al pensar así? —negó con la cabeza—. He avanzado mucho, pero el día de la pesadilla… Soñé con él. Fue muy desagradable, y me hizo pensar demasiado al respecto.
Durante casi todo su relato, aunque se le podía notar una ligera angustia en su voz al recordar algunas de las peores partes, se había mantenido con una pose bastante neutra. La pesadilla, no obstante, estaba demasiado reciente y el ánimo de la idrina había decaído un poco.
- Red
Ficha de cosechado
Nombre: Doe
Especie: Ninguna conocida
Habilidades: No tienePersonajes :
● Vacuum: Hado infernal originario de la Tierra.
● Saren: Selkie roc idrino.
● Keiriarei: Kitsune de nueve colas ulterana.
● Sekk: Berserker ulterano.
● Remilo: Brujo del cobre irrense.
● Qwara Khumalo: Ifrit sudafricana.
Re: Plaza del Estandarte
24/03/19, 07:59 pm
Tras asentir con la cabeza en señal de asentimiento a su petición de hablar allí mismo, Vac siguió a Irianna hasta un banco cercano y se sentó a su lado con suavidad, dejando la bolsa que llevaba a su lado en el suelo antes de dedicarle toda su atención a la idrina. Según las palabras de la muchacha iba a ser una historia larga, pero el hado no tenía prisa, y se limitó a animarla a continuar con una leve sonrisa.
La seriedad del relato no tardó en cobrar relevancia, no obstante, y a medida que la nebulomante desvelaba la trama la expresión del griego empezó a torcerse. Sus emociones se iban reflejando en su rostro una a una, pues el humano no era capaz de disimularlas frente a lo que le estaba contando, y fueron oscilando entre la repugnancia y la ira durante toda la historia. La conclusión le alegró en parte y esbozó una sonrisa burlona ante la mención del guantazo, pero a duras penas podía contener la rabia que bullía en su interior. Habría salido de buena gana en busca de Veril para arrancarle la cabeza en aquel mismo instante.
—Yo... —murmuró sin embargo cuando la idrina llegó a la parte de Naeleth, no muy seguro de que responderle. En un suspiro todo su enfado se había evaporado sustituido por un fuerte sentimiento de preocupación.
Por mucho que le asqueara la existencia de aquel sujeto la lacustre sabía cuidarse sola y había demostrado sobradamente que no necesitaba ser salvada, pero que se estuviera planteando recurrir a los servicios de un mentalista era ahora el punto fuerte de toda aquella historia. Entendía sus motivos y quizás era lo mejor para borrar por completo aquel episodio de su vida, pero el hado también creía que todas las experiencias vitales, por muy desagradables que pudieran ser, eran importantes. Dejar que alguien se le metiera en la cabeza y hurgara en su memoria se le antojaba aterrador.
—Lo siento mucho, Irianna —empezó después de dedicar unos segundos a aclarar sus ideas—. No miento cuando te digo que nunca había conocido directamente un caso como el tuyo... —dijo esbozando una mueca—. No sabría que hacer de estar en tu situación, la verdad, pero dudo mucho que eliminar los restos de la fobia con ayuda del mentalismo sea un símbolo de que no has hecho todo lo posible para superarlo —prosiguió—. Que Naeleth haga desaparecer las secuelas que dejó Veril en tu mente puede ser bueno para ti, para que lo que ocurrió no te condicione nunca más en el futuro, pero si fuera posible creo que no debería tocar tus recuerdos al respecto... —masculló dubitativo—. El mentalismo no es lo mio y no voy a fingir que se de lo que hablo, pero las personas estamos hechas de la suma de nuestros recuerdos. ¿Si olvidaras a Veril completamente no te olvidarías también de parte de ti misma? —preguntó, no muy seguro de si la muchacha le estaba siguiendo.
La seriedad del relato no tardó en cobrar relevancia, no obstante, y a medida que la nebulomante desvelaba la trama la expresión del griego empezó a torcerse. Sus emociones se iban reflejando en su rostro una a una, pues el humano no era capaz de disimularlas frente a lo que le estaba contando, y fueron oscilando entre la repugnancia y la ira durante toda la historia. La conclusión le alegró en parte y esbozó una sonrisa burlona ante la mención del guantazo, pero a duras penas podía contener la rabia que bullía en su interior. Habría salido de buena gana en busca de Veril para arrancarle la cabeza en aquel mismo instante.
—Yo... —murmuró sin embargo cuando la idrina llegó a la parte de Naeleth, no muy seguro de que responderle. En un suspiro todo su enfado se había evaporado sustituido por un fuerte sentimiento de preocupación.
Por mucho que le asqueara la existencia de aquel sujeto la lacustre sabía cuidarse sola y había demostrado sobradamente que no necesitaba ser salvada, pero que se estuviera planteando recurrir a los servicios de un mentalista era ahora el punto fuerte de toda aquella historia. Entendía sus motivos y quizás era lo mejor para borrar por completo aquel episodio de su vida, pero el hado también creía que todas las experiencias vitales, por muy desagradables que pudieran ser, eran importantes. Dejar que alguien se le metiera en la cabeza y hurgara en su memoria se le antojaba aterrador.
—Lo siento mucho, Irianna —empezó después de dedicar unos segundos a aclarar sus ideas—. No miento cuando te digo que nunca había conocido directamente un caso como el tuyo... —dijo esbozando una mueca—. No sabría que hacer de estar en tu situación, la verdad, pero dudo mucho que eliminar los restos de la fobia con ayuda del mentalismo sea un símbolo de que no has hecho todo lo posible para superarlo —prosiguió—. Que Naeleth haga desaparecer las secuelas que dejó Veril en tu mente puede ser bueno para ti, para que lo que ocurrió no te condicione nunca más en el futuro, pero si fuera posible creo que no debería tocar tus recuerdos al respecto... —masculló dubitativo—. El mentalismo no es lo mio y no voy a fingir que se de lo que hablo, pero las personas estamos hechas de la suma de nuestros recuerdos. ¿Si olvidaras a Veril completamente no te olvidarías también de parte de ti misma? —preguntó, no muy seguro de si la muchacha le estaba siguiendo.
- GiniroryuGM
Ficha de cosechado
Nombre: Rägjynn
Especie: mjörní
Habilidades: memoria, buen oído y don de lenguas
Personajes :
● Noel: Draco de Estínfalo de origen sueco.
● Archime/Krono Rádem: Kairós irrense.
● Irianna/Dama Enigma: Nebulomante idrina lacustre.
● Adrune: Gamusino sinhadre, edeel.
● Lethe: Horus, enderth.
● Rägjynn: mjörní.
● Naeleth: Bruja del Hielo, nublina.
Unidades mágicas : 8/8
Síntomas : Aumenta su resistencia progresivamente. El sangrado de sus ojos se detonará con más frecuencia.
Armas :
● Noel: hacha de dos manos y espada bastarda.
● Archime/Krono Rádem: sus monólogos sobre biomecánica avanzada.
● Irianna: arco y estoque.
● Adrune: lanza, espadas cortas y arco.
● Lethe: arco y lanza.
● Rägjynn: jō.
● Naeleth: arco, sai y báculo.
Status : Gin: do the windy thing.
Humor : REALLY NOT FEELIN' UP TO IT RIGHT NOW. SORRY.
Re: Plaza del Estandarte
24/03/19, 09:33 pm
Podía notar como el ánimo de Vac también había ido cambiando a lo largo de su relato, predominante siempre las emociones negativas que cabían esperar. Siempre que había explicado a algún amigo de la ciudad alguna parte de aquel relato de terror, diese más o menos detalles, actuaban acorde a lo que cabría esperar. Nadie la cuestionaba ni la culpaban. Nadie decía que exageraba o sugería que pudiese estar mintiendo. Ni la tachaban de infantil o inmadura por confesar que había adquirido una fobia. Era un alivio enorme que le producía una sensación que no estaba acostumbrada a sentir. Era extraño, incluso, pero se sentía bien. Negó con la cabeza cuando Vac empezó a hablar por fin.
—Me alegro de que sea así: ojalá nadie tuviera que pasar por algo parecido. Samika me dijo que en la Tierra había demasiados casos similares y ojalá ninguno de los humanos que conozco pueda sentirse identificado con mi experiencia.
A continuación permaneció en silencio y atenta a su consejo. Lo que decía el hado parecía tener mucho sentido y supo enseguida que había sido una buena idea hablar con él de aquel asunto. Estaba siendo sincero, admitiendo incluso que no era ningún experto y no tratando de imponerle su punto de vista.
—Temía estar siendo demasiado dura conmigo misma y creo que tus palabras me lo confirman —le respondió con más firmeza, recuperándose poco a poco de la angustia que le había hecho sentir la última parte de su relato—. Creo que sigo teniendo algo de miedo de no ser lo suficientemente fuerte, pero no debería sabotearme a propósito. Los recuerdos… No, no quiero olvidarme de él. Solo quiero que su presencia en mi mente se limite a ser eso, un recuerdo desagradable. Y no un lastre con el que cargue durante toda mi vida. Quiero recordar quién es porque de todas las experiencias se aprende, incluso de las malas. Aunque solo sea para saber cómo evitarlas en el futuro. —Se levantó del banco sin pensar demasiado—. Gracias, Vac. Lo pensaré bien de cualquier forma, pero me has sido de gran ayuda. —Sonrió con más confianza—. Espero algún día poder devolverte tanta amabilidad, en serio.
—Me alegro de que sea así: ojalá nadie tuviera que pasar por algo parecido. Samika me dijo que en la Tierra había demasiados casos similares y ojalá ninguno de los humanos que conozco pueda sentirse identificado con mi experiencia.
A continuación permaneció en silencio y atenta a su consejo. Lo que decía el hado parecía tener mucho sentido y supo enseguida que había sido una buena idea hablar con él de aquel asunto. Estaba siendo sincero, admitiendo incluso que no era ningún experto y no tratando de imponerle su punto de vista.
—Temía estar siendo demasiado dura conmigo misma y creo que tus palabras me lo confirman —le respondió con más firmeza, recuperándose poco a poco de la angustia que le había hecho sentir la última parte de su relato—. Creo que sigo teniendo algo de miedo de no ser lo suficientemente fuerte, pero no debería sabotearme a propósito. Los recuerdos… No, no quiero olvidarme de él. Solo quiero que su presencia en mi mente se limite a ser eso, un recuerdo desagradable. Y no un lastre con el que cargue durante toda mi vida. Quiero recordar quién es porque de todas las experiencias se aprende, incluso de las malas. Aunque solo sea para saber cómo evitarlas en el futuro. —Se levantó del banco sin pensar demasiado—. Gracias, Vac. Lo pensaré bien de cualquier forma, pero me has sido de gran ayuda. —Sonrió con más confianza—. Espero algún día poder devolverte tanta amabilidad, en serio.
- Naeryan
Ficha de cosechado
Nombre:
Especie:
Habilidades: Personajes :- CLICK:
- ● Shizel/Desidia: idrino transformado en skrýmir, albino y de ojos azules. Tiene buenas dotes sociales y una gran pasión por la magia; es embajador para el castillo.
● Taro: cosechado carabés, cabello negro y ojos amarillos. Practicante de parkour y siempre con unos discretos auriculares, le encanta la música y suele dudar de sus capacidades.
● Sox: (imagen pre-Luna) ángel negro carabés, rubio y de apariencia llamativa. Competitivo y racional, aspira siempre al rendimiento más alto y posee mucha determinación.
Unidades mágicas : DENIED
Armas :- CLICK:
- ● Shizel/Desidia: magia y esgrima idrina, con amplia preferencia por la primera.
● Sox: según la salida, ballesta simple con torno o sable. Al cinto siempre un puñal.
Status : Traumaturga
Humor : Productivo (lo intento)
Re: Plaza del Estandarte
09/04/21, 09:04 pm
El silencio desde la puerta del mesón fue corto.
—A nadie más desde entonces —dijo a media voz, pese a no ser una afirmación—. ¿Verdad?
Una historia donde el torturador era el héroe. Si aquello había estado anidando en Nubla, ¿qué le aguardaba en los antros de Rocavarancolia?
Ya no era el mismo niño iluso que había atravesado el portal. El ángel negro ya no cometió el error de creer que sentiría alivio si recibía la respuesta que prefería. Sox había aprendido a esperarse cualquier cosa de sus compañeros y no se engañaba: Arcan lo habría hecho durante la criba, lo habría hecho delante de ellos, de haberlo creído necesario. Incluso si el rapiña le juraba allí mismo que no había vuelto a matar una mosca desde entonces, Sox sabía que no era vinculante. La sombra que la Luna arrojaba sobre ellos había abrigado también bajo su ala a Obel. Para sobrevivir, para convertirse en quien realmente eran, cada uno tenía que ahondar a solas en lugares adonde los demás no estaban dispuestos a llegar.
—No quiero matar —dijo, y la afirmación, contrariamente a lo que esperaba, le hizo sentir más fuerte—. No habría podido, antes. Por mucho que… Habría hecho otra cosa —sacudió la cabeza, frustrado—. No es que quiera ahora. No quiero —ahora sí miró a Arcan. Tenía que comprenderlo. De entre todas las personas con las que Sox se hubiese imaginado compartiendo algo, Arcan habría sido la última durante la criba. La Luna se reía de él y sus expectativas—. Pero podría. Si me fuera la vida en ello. Si le fuera a otras personas.
Era en lo que le había convertido la criba, apenas el inicio de una eclosión cuyo desenlace final estaba aún por ver. El mismo poso insatisfecho en el fondo de su alma que se había revuelto de forma diferente al miedo o la repulsión, al rechazo básico de cualquier persona a lo que había provocado que Arcan se tomase la justicia por su mano. Subyacente a esas emociones aquel zarcillo se había rebullido dentro de él y clamaba ahora algo más, insatisfecho con sus propias palabras, sediento, pero no fue escuchado. Sox hablaba demasiado fuerte para escucharse a sí mismo.
—No quería oír esto —admitió. Todavía quería lavarse la cabeza con lejía—. Pero creo que lo necesitaba.
Había buscado historias de terror, armarse de indignación para mirar a la cara a Rocavarancolia, pero en realidad no las había necesitado. Intuir que había cosas peores a lo que le había contado Arcan le bastaba.
Estaba preparado.
—A nadie más desde entonces —dijo a media voz, pese a no ser una afirmación—. ¿Verdad?
Una historia donde el torturador era el héroe. Si aquello había estado anidando en Nubla, ¿qué le aguardaba en los antros de Rocavarancolia?
Ya no era el mismo niño iluso que había atravesado el portal. El ángel negro ya no cometió el error de creer que sentiría alivio si recibía la respuesta que prefería. Sox había aprendido a esperarse cualquier cosa de sus compañeros y no se engañaba: Arcan lo habría hecho durante la criba, lo habría hecho delante de ellos, de haberlo creído necesario. Incluso si el rapiña le juraba allí mismo que no había vuelto a matar una mosca desde entonces, Sox sabía que no era vinculante. La sombra que la Luna arrojaba sobre ellos había abrigado también bajo su ala a Obel. Para sobrevivir, para convertirse en quien realmente eran, cada uno tenía que ahondar a solas en lugares adonde los demás no estaban dispuestos a llegar.
—No quiero matar —dijo, y la afirmación, contrariamente a lo que esperaba, le hizo sentir más fuerte—. No habría podido, antes. Por mucho que… Habría hecho otra cosa —sacudió la cabeza, frustrado—. No es que quiera ahora. No quiero —ahora sí miró a Arcan. Tenía que comprenderlo. De entre todas las personas con las que Sox se hubiese imaginado compartiendo algo, Arcan habría sido la última durante la criba. La Luna se reía de él y sus expectativas—. Pero podría. Si me fuera la vida en ello. Si le fuera a otras personas.
Era en lo que le había convertido la criba, apenas el inicio de una eclosión cuyo desenlace final estaba aún por ver. El mismo poso insatisfecho en el fondo de su alma que se había revuelto de forma diferente al miedo o la repulsión, al rechazo básico de cualquier persona a lo que había provocado que Arcan se tomase la justicia por su mano. Subyacente a esas emociones aquel zarcillo se había rebullido dentro de él y clamaba ahora algo más, insatisfecho con sus propias palabras, sediento, pero no fue escuchado. Sox hablaba demasiado fuerte para escucharse a sí mismo.
—No quería oír esto —admitió. Todavía quería lavarse la cabeza con lejía—. Pero creo que lo necesitaba.
Había buscado historias de terror, armarse de indignación para mirar a la cara a Rocavarancolia, pero en realidad no las había necesitado. Intuir que había cosas peores a lo que le había contado Arcan le bastaba.
Estaba preparado.
"And if you gaze long enough into an abyss, the abyss will gaze back into you."
- Al veros conspirar... (CLICK):
- Al poner un evento... (CLICK):
- Durante el transcurso del evento... (CLICK):
- Reifon
Ficha de cosechado
Nombre: Nery´s
Especie: Frivy
Habilidades: Velocidad, agilidad, resistencia.Personajes :- Spoiler:
Armas :- Spoiler:
- Arcan Rel: Cuchillos de caza, espada de mano y media, hacha cazahombres.
- Dama Abrazos: Mandobles y manguales gigantes duales, balas cañon.
- Nery´s: Beyesha infinita. Esto que no sabe ni que es.
- Arcan Rel: Cuchillos de caza, espada de mano y media, hacha cazahombres.
Status : Cazador de la luna de sangre.
Humor : JAJAJAJAJA *se marcha riéndose*
Re: Plaza del Estandarte
10/04/21, 04:09 pm
—No —contestó con firmeza—, aunque me hubiera gustado hacérselo al cabronazo que mató a Nad. Desgraciadamente murió en la pesadilla, o eso dicen. Su nombre está marcado en los muertos de todas formas. —Había vieja resignación al decir aquello. Tampoco sabía del responsable de la cabra nigromántica y tras salvarles sería "deshonorable" para él ir a por Tuétano, aparte de que no quería hacer pasar por aquello a la pequeña de los caracoles. Ella no se lo merecía.
Al final no había quedado nada que "remendar" de lo que pasó en la criba, tan solo tragárselo sin poder hacer nada al respecto. Una espina tras otra clavada que los acompañaría por siempre.
Escuchó a Sox de nuevo mientras caminaban bajo el frio aire otoñal que permeaba ya la ciudad de nuevo y sin más volvió a asentir.
—Estarás bien entonces —declaró.
—Pero cuando llegue el momento estarás en desventaja sin tu magia, me temo que deberás prepararte el doble físicamente para cuando eso pase. —Las palabras de Arcan dejaban caer sin mucha sutileza que acabaría por suceder y era así porque no se fiaba de aquella ciudad y sus artimañas. Nunca sabías lo que se escondía tras cada esquina.
—Haz que Tayron te ancle algunos conjuros o que te transfiera magia el mismo. Aprovechad las fuerzas de cada uno.
Al final no había quedado nada que "remendar" de lo que pasó en la criba, tan solo tragárselo sin poder hacer nada al respecto. Una espina tras otra clavada que los acompañaría por siempre.
Escuchó a Sox de nuevo mientras caminaban bajo el frio aire otoñal que permeaba ya la ciudad de nuevo y sin más volvió a asentir.
—Estarás bien entonces —declaró.
—Pero cuando llegue el momento estarás en desventaja sin tu magia, me temo que deberás prepararte el doble físicamente para cuando eso pase. —Las palabras de Arcan dejaban caer sin mucha sutileza que acabaría por suceder y era así porque no se fiaba de aquella ciudad y sus artimañas. Nunca sabías lo que se escondía tras cada esquina.
—Haz que Tayron te ancle algunos conjuros o que te transfiera magia el mismo. Aprovechad las fuerzas de cada uno.
- Equilibrio:
Un blanco mas oscuro que el negro.
Un negro mas claro que el blanco.
El gris se desborda en mil tonos.
Y el arcoiris se hunde en monotonia.
Vivimos caminando el sendero dejado por los muertos.
Mientras brindamos nueva muerte a nuestro paso para extenderlo.
- Naeryan
Ficha de cosechado
Nombre:
Especie:
Habilidades:
Personajes :- CLICK:
- ● Shizel/Desidia: idrino transformado en skrýmir, albino y de ojos azules. Tiene buenas dotes sociales y una gran pasión por la magia; es embajador para el castillo.
● Taro: cosechado carabés, cabello negro y ojos amarillos. Practicante de parkour y siempre con unos discretos auriculares, le encanta la música y suele dudar de sus capacidades.
● Sox: (imagen pre-Luna) ángel negro carabés, rubio y de apariencia llamativa. Competitivo y racional, aspira siempre al rendimiento más alto y posee mucha determinación.
Unidades mágicas : DENIED
Armas :- CLICK:
- ● Shizel/Desidia: magia y esgrima idrina, con amplia preferencia por la primera.
● Sox: según la salida, ballesta simple con torno o sable. Al cinto siempre un puñal.
Status : Traumaturga
Humor : Productivo (lo intento)
Re: Plaza del Estandarte
13/04/21, 12:40 am
La mención al asesino de Nad le dio pausa. Era extraño, pensar en que había muerto y Sox ni siquiera le había visto la cara. ¿Qué clase de cierre era aquél? El ángel negro no sentía ninguno. La última vez que había percibido algo parecido había sido en la Luna Roja, el brusco cerrar de sopetón de un portón a sus espaldas.
—Le buscaste, entonces —quiso confirmar.
Apretó los labios. Había estado posponiéndolo hasta ahora, pero Arcan tenía razón. Era una imprudencia ir a pecho descubierto por Rocavarancolia cuando Tay podía echarle una mano.
—Gracias —le costó menos de lo que esperaba decirlo—. Si alguna vez necesitas…
¿Qué, exactamente? ¿Que le advirtieran si se veía en peligro de convertirse en lo que despreciaba? ¿Que le recordaran en qué no debía convertirse? ¿Que no le dejaran perderse? Sox ya no estaba tan seguro de ser la persona indicada para nada de eso, incluso aunque Arcan lo necesitara. Hacía tiempo que no estaba completamente seguro de nada. En ocasiones recordaba al carabés que atravesó el portal y le echaba de menos. Le habría venido bien aquella certeza que le permitía estar seguro de tantas cosas equivocadas.
—Algo —finalizó—. Ya sabes dónde buscarme.
—Le buscaste, entonces —quiso confirmar.
Apretó los labios. Había estado posponiéndolo hasta ahora, pero Arcan tenía razón. Era una imprudencia ir a pecho descubierto por Rocavarancolia cuando Tay podía echarle una mano.
—Gracias —le costó menos de lo que esperaba decirlo—. Si alguna vez necesitas…
¿Qué, exactamente? ¿Que le advirtieran si se veía en peligro de convertirse en lo que despreciaba? ¿Que le recordaran en qué no debía convertirse? ¿Que no le dejaran perderse? Sox ya no estaba tan seguro de ser la persona indicada para nada de eso, incluso aunque Arcan lo necesitara. Hacía tiempo que no estaba completamente seguro de nada. En ocasiones recordaba al carabés que atravesó el portal y le echaba de menos. Le habría venido bien aquella certeza que le permitía estar seguro de tantas cosas equivocadas.
—Algo —finalizó—. Ya sabes dónde buscarme.
"And if you gaze long enough into an abyss, the abyss will gaze back into you."
- Al veros conspirar... (CLICK):
- Al poner un evento... (CLICK):
- Durante el transcurso del evento... (CLICK):
- Reifon
Ficha de cosechado
Nombre: Nery´s
Especie: Frivy
Habilidades: Velocidad, agilidad, resistencia.Personajes :- Spoiler:
Armas :- Spoiler:
- Arcan Rel: Cuchillos de caza, espada de mano y media, hacha cazahombres.
- Dama Abrazos: Mandobles y manguales gigantes duales, balas cañon.
- Nery´s: Beyesha infinita. Esto que no sabe ni que es.
- Arcan Rel: Cuchillos de caza, espada de mano y media, hacha cazahombres.
Status : Cazador de la luna de sangre.
Humor : JAJAJAJAJA *se marcha riéndose*
Re: Plaza del Estandarte
22/04/21, 04:48 pm
Asintió de manera tácita sin mirarle si quiera, dejando que el sombrero expresase más movimiento que el mismo. Aunque las siguientes palabras le confundieron de sobre manera.
No lo expresó exteriormente, tan solo miró hacia arriba al carabés a los ojos.
¿Qué estaba pasando? Aún recordaba las midas, la vigilancia durante meses. Aquella sensación se le hundía en el pecho y le ponía enfermo incluso ahora haciendo que su primer impulso fuera apartarse, la desconfiada.
Pero aún mas meses habían pasado. Su vida había cambiado tanto, él había cambiado tanto... Ni siquiera su nombre prevaleció al paso del tiempo. Tan solo una sonoridad remota que se hacía un eco del pasado.
Nuevos amigos, los pequeñajos con los que disfrutaba pasar el tiempo, Maher, algún que otro veterano como Samika, Sekk o Ralene. Pese a considerarse solitario había acabado encontrando confort en la gente a su alrededor. Y aquella nueva calma se sobrepuso a sus viejas emociones.
«Algo debe haber pasado...» —concluyó tras calmarse.
—Lo tendré en cuenta —declaró en un tono serio y firme que indicaba que no era solo algo dicho para que le dejara en paz, si no que tomaría en verdad su palabra.
No lo expresó exteriormente, tan solo miró hacia arriba al carabés a los ojos.
¿Qué estaba pasando? Aún recordaba las midas, la vigilancia durante meses. Aquella sensación se le hundía en el pecho y le ponía enfermo incluso ahora haciendo que su primer impulso fuera apartarse, la desconfiada.
Pero aún mas meses habían pasado. Su vida había cambiado tanto, él había cambiado tanto... Ni siquiera su nombre prevaleció al paso del tiempo. Tan solo una sonoridad remota que se hacía un eco del pasado.
Nuevos amigos, los pequeñajos con los que disfrutaba pasar el tiempo, Maher, algún que otro veterano como Samika, Sekk o Ralene. Pese a considerarse solitario había acabado encontrando confort en la gente a su alrededor. Y aquella nueva calma se sobrepuso a sus viejas emociones.
«Algo debe haber pasado...» —concluyó tras calmarse.
—Lo tendré en cuenta —declaró en un tono serio y firme que indicaba que no era solo algo dicho para que le dejara en paz, si no que tomaría en verdad su palabra.
- Equilibrio:
Un blanco mas oscuro que el negro.
Un negro mas claro que el blanco.
El gris se desborda en mil tonos.
Y el arcoiris se hunde en monotonia.
Vivimos caminando el sendero dejado por los muertos.
Mientras brindamos nueva muerte a nuestro paso para extenderlo.
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