Séptima cosecha - Inscripción y fichas

Recuerdo del primer mensaje :

El plazo de inscripción empieza ahora, y terminará el 26 de octubre a las doce de la noche. Es importante que no os despistéis y respetéis dicho plazo, aunque la cosecha en sí dé su pistoletazo de salida unos días más tarde.

Es obligatorio colgar la ficha aquí para constar como inscrito, de la forma estipulada en las normas y de acuerdo a la plantilla proporcionada abajo. Se recomienda un repaso de las reglas a los veteranos, y una lectura completa a los recién llegados.

Código:


[b]Personaje:[/b]

[b]Especie:[/b]

[b]Descripción física:[/b]

[b]Personalidad:[/b]

[b]Habilidades:[/b]

[b]Pasado:[/b]

[b]Otros:[/b]

En cuanto a la hoja de personaje en vuestro perfil, recordad que es obligatorio para todos rellenar los campos de PJ, especie y habilidades (puesto que son los que aparecen en cada post, bajo el avatar del usuario, y facilitan considerablemente las cosas). Completar los demás campos es opcional.

Se recuerda que aquellos que quieran pueden rolear cómo los cosechan directamente en el tema para cada mundo vinculado, en lugar de realizar un flashback en las mazmorras. Si en lugar de dicho flashback o de un post único en el mundo correspondiente preferís un rol detallado con el cosechador, poneos en contacto con el propietario del PJ o PNJ correspondiente. Si tenéis alguna duda sobre quién es tal persona, preguntad a los GM. La lista de cosechadores está aquí. Todo esto es opcional.

En el caso de veteranos recuerdo que es obligatorio postear en el censo de PJs las fichas que queden pendientes hasta la quinta cosecha (inclusive) para poder acceder a la participación en la presente. Podéis consultar dicho censo aquí.

Personaje: Remilo.

Especie: Irrense.

Descripción física:
Milo tiene dieciocho años, mide alrededor de 1'80 y pesa unos 72 kilos. La vida en el camino le ha moldeado y, al estar siempre en movimiento, está en muy buena forma física. El frío de su mundo le ha curtido la piel, que aun así es algo más pálida que la media de sus congéneres, y tiene alguna que otra cicatriz (ninguna demasiado destacable) como consecuencia de pequeños accidentes en el transcurso de sus viajes en solitario.
Sus ojos, ligeramente rasgados, son de un llamativo color dorado, y su cabello, fino y algo desordenado, es prácticamente negro. Lo lleva corto por comodidad, pero de crío solía hacerse crestas y peinados similares, costumbre que abandonó con la edad. Suele esgrimir una amplia sonrisa en todo momento, sonrisa que sigue brillando en su mirada aun cuando la situación le exige seriedad.

Llega a la ciudad vestido con unos pantalones oscuros, unas zapatillas negras, una camiseta blanca y una sudadera gris con capucha. Lleva además una parka larga de color rojo oscuro que tiene varios bolsillos y una bufanda para protegerse del frío. Su brazo izquierdo es biónico y suele llevarlo arremangado.

Personalidad:
Extrovertido y de risa fácil, Remilo es un chico directo y decidido que suele decir lo que piensa sin andarse con rodeos. Tiene bastante tacto, aun así, y se muestra amigable con todo el mundo, pero a veces su espontaneidad puede resultar chocante. Amable, simpático o bromista son adjetivos que le describen bien, pero también tiene un temperamento muy fuerte que saca a relucir cuando algo le molesta de verdad. El estar continuamente en movimiento no ha contribuido a engrosar su lista de amistades, pero los pocos amigos que tiene saben que siempre podrán contar con él cuando le necesiten.
Es también algo payaso y, precisamente por eso, se esfuerza en verle siempre el lado bueno a las cosas, tratando por todos los medios de hacer sentir bien a las personas que le importan aunque la situación sea difícil. Su capacidad para restarle importancia a los problemas resulta asombrosa y por eso nunca parece desanimado, pero a la larga se le acaban echando todos encima si no tiene a nadie con quien reírse de ellos.

Habilidades: Resistencia, rapidez mental, reflejos.

Pasado:
Remilo nació en un pueblo minero del norte, alejado de las grandes capitales, y ya desde crío apuntó maneras como gamberro ocasional. Su juntaba con otros niños de su barrio que, influenciados por los antisistema, se vestían con ropa llamativa y lucían peinados estrambóticos. Esto cambio cuando su padre murió en un accidente de trabajo, pues su madre, harta de que no hiciera nada de provecho, le obligó a dejar a un lado sus amistades para que se centrara en sus estudios. El chico cedió, preocupado por el futuro de su familia a pesar de su corta edad, e hincó los codos como el que más. Obtuvo unos resultados excelentes en los test de aptitud que les hacían a los doce años, destacando sobre todo en programación y redes, pero cuando llegó la hora de trasladarse a la ciudad para especializarse el muchacho se echó atrás. Nunca había estado de acuerdo con la gestión de los recursos por parte del gobierno, por lo que entrar a formar parte de el a un nivel tan alto se le antojaba repulsivo, así que recogió sus cosas y huyó de casa, buscando a sus antiguos amigos para desaparecer del sistema de forma definitiva.
Tras pasarse a la clandestinidad, Milo continuó con su formación y acabó convirtiéndose en un hacker muy conocido entre la comunidad antisistema, por lo que nunca ha permanecido mucho tiempo en el mismo sitio. Aun así siempre se ha asegurado de que a su familia no le falte de nada, pero se cuida mucho de que no les relacionen con él.

Cuando dama Yttria le encuentra en una estación de tren el día de la cosecha no necesita mucho para convencerle de ir a Rocavarancolia. La magia siempre es un buen incentivo, pero la posibilidad de encontrar algo en esa ciudad que desacredite la autoridad del gobierno irrense es un premio demasiado jugoso para que alguien como él lo deje escapar.

Otros:
-Tiene HOC-2 (Hipoglucemia Crónica tipo 2), una enfermedad hereditaria que consiste en la preservación de grandes reservas de grasa parda en el cuerpo tras la niñez y un metabolismo anormalmente acelerado. Tiene una temperatura corporal ligeramente más alta que la media y facilidad para conservar el calor, sin embargo su cuerpo consume una gran cantidad de glucosa, de ahí que alcance la hipoglucemia con facilidad. Para paliar estos efectos debe consumir muchos más glúcidos que una persona sana.
-Come una barbaridad y no es raro verle con algo en la boca, pero aparentemente no gana peso.
-Siempre se presenta como Milo, pues desde que su padre murió nadie le llama por sus otros dos diminutivos: Rem o Remi.
-Le encantan la música, la nieve y los insectos.
-Si pasa mucho tiempo solo tiende a pensar en voz alta, pero en ocasiones lo hace sin más si se le olvida que hay alguien delante.
-Bromea con frecuencia y nunca pierde la oportunidad de picar a sus amigos, disfrutando como un enano cuando estos le replican de la misma forma.
-Es ambidiestro.
-Llega a la ciudad con unos cascos inalámbricos al cuello y lo que lleva en los bolsillos: un kit portátil de herramientas y un bote de aceite para el mantenimiento de su brazo, tres bollos de leche envasados y un paquete de cacahuetes con miel.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Adrunelia.

Especie: sinhadre.

Descripción física: chica de catorce años, de 1,63 de estatura y de cuerpo delgado pero bastante fibroso. De su rostro destacan las abundantes pecas y una cicatriz en la nariz que se ganó el día de su Unión; no es infrecuente verla cubierta de pequeñas lesiones que normalmente no sabe cómo se hizo. Cuenta con bastante fuerza para su edad aunque no lo aparenta. Su cabello es de un tono entre púrpura y violeta, con largos tirabuzones que caen por la parte delantera de su cabeza, mientras que lleva el pelo recortado por la parte trasera y un flequillo descuidado. Suele llevar plumas de color naranja como adorno en el pelo. Sus ojos, de un gris muy oscuro que la hubiesen marcado como sacerdotisa de haber faltado aurvas en su año de Unión, la señalan como edeel. Es zurda y suele tener una marca o moretón en la mano izquierda.

Habitualmente le gusta vestir con tonos marrones y rosa claro, aunque no le da demasiada importancia a su aspecto. Llega vestida con una camiseta rosa y unos pantalones holgados de color marrón, además de un poncho corto también de este color.

Personalidad: hiperactiva y alegre, nunca para quieta. Es extrovertida y habladora, además de testaruda. De naturaleza optimista, temeraria y curiosa, es una niña poco sensata y que no parece conocer el miedo. A pesar de que tiene buenas aptitudes físicas y es capaz trepar casi cualquier muro o árbol a un ritmo envidiable, es irónicamente una persona bastante patosa. Es habitual verla en el suelo tras alguna caída absurda o golpeándose contra cosas por ir acelerada a todas partes. Además se le dan fatal las manualidades y, en consecuencia, la cocina. A pesar de todo, ella suele mostrar interés por ayudar a su aurva a cocinar, cosa que suele producir terror en él y cualquiera que se encuentre cerca porque si algo puede salir mal en una cocina, saldrá mal si Adru se encuentra rondando por allí. Le encantan los dulces, especialmente los que prepara Neil, gracias a quien adquirió el gusto por ellos, y la comida en general, por lo que también tiene la costumbre de meter la mano en la comida a medio preparar, otro detalle que saca de quicio a su aurva y que es lo que le granjeó su marca en la mano izquierda.

Habilidades: fuerza bruta, agilidad y resistencia.

Pasado: de familia agricultora, Adru se crió en una modesta casa de campo. Su padre Yrdel era un edeel de origen humilde, que se casó con la edeel de su madre, Nora, para así unir a las familias, ya que el aurva de su padre y la edeel de su madre también habían establecido una relación sentimental. Fue la edeel de su madre, Yaiza, la que insistió en ponerle a Adru un nombre largo y pomposo, más propio de familias de alto estatus. El aurva de Yrdel, Theron, falleció cuando Adru tenía seis años debido a una enfermedad. Adru, quien lloró más que nunca en su vida tras la muerte de Theron, consiguió sobreponerse gracias al buen ambiente familiar y la entereza con la que Yaiza logró superar la depresión inicial, por lo que cuando habla sobre el aurva de su padre lo hace para rememorar buenos recuerdos sobre él, historias que habitualmente le cuenta a Neil.
Los adultos se dedicaban principalmente al huerto, con la ayuda ocasional de Adru, quien compensaba su torpeza con su dedicación y su resistencia innatas. Cuando no estaba ayudando con el huerto se la podía encontrar habitualmente subida a algún árbol o correteando por los campos circundantes, rodando por el suelo, escalando muros, etc. También le gusta escuchar a su madre tocar la flauta, observar a Neil haciendo manualidades o cocinando (generalmente poniéndole nervioso ya sea consciente o inconscientemente) y molestar a su aurva en general de cualquier forma que se le ocurra.
Adru es algo más cercana a su padre que a su madre debido a que tiene una personalidad más similar a la suya, extrovertida y alegre, aunque por suerte Yrdel siempre fue bastante más sensato que su hija. Heredó de él el color gris de sus ojos, aunque los de su padre son más claros, y de su madre el tono de su cabello que es casi idéntico en ambas.
La relación con Neil, no obstante y aunque tan solo ha transcurrido un año desde su Unión, es estrecha e igualitaria, fruto de la personalidad de ambos y el ambiente familiar. Lo considera su hermano pequeño (a pesar de que tienen la misma edad).

Otros: no para quieta incluso durmiendo, otra característica que tiene que sufrir Neil ya que duermen en la misma cama. Así mismo, le gusta inventarse historias de terror que le cuenta a su aurva para asustarlo por diversión.
Cada vez que intenta hacer algún chiste falla estrepitosamente, ya que su sentido del humor deja bastante que desear.
No soporta su nombre completo y únicamente reconoce como válido que se llama “Adrune”, que es como se suele presentar, aunque insiste en que la llamen solo Adru.

Imagen:

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Irenneil.

Especie: sinhadre.

Descripción física: Es un chico de catorce años que aparenta tener 11-12. Sus rasgos son muy aniñados. Mide 1’50 y es delgado, pero no en exceso. Es un poco debilucho, pero es bastante habilidoso con las manos. Su pelo es azul claro, liso y algo largo sin llegar a ser melena, pero manteniendo un mechón más largo en el lado derecho de su cabeza que suele llevar trenzado y decorado con dos plumas pequeñas de color naranja que le regaló Adrune cuando se unieron. Tiene algunas pecas en la nariz. Sus ojos varían del turquesa claro al azul hielo y por lo general se suelen ver de un tono bastante claro, por lo que, de haber sobrado aurvas en su año de Unión, probablemente él habría sido descartado y sacrificado. Por el contrario, el claro de sus ojos fue una de las razones por las que le emparejaron con Adrune, además del accidente que ambos protagonizaron, entre otras cosas. Tiene algunas cicatrices y ampollas en las manos por las heridas que se hizo mientras aprendía a cocinar, tallar y moldear.

En su ropa predominan los colores claros, sobre todo el violeta y el verde. Y, aunque le gustan, no es tanto por su elección como porque la mayoría se trata de ropa heredada de Nora y Theron. Llega a Rocavarancolia vestido con un pantalón pirata violeta, una camiseta holgada de manga corta verde claro, un jersey con capucha encima del mismo violeta que el pantalón y una bufanda del mismo verde que la camiseta.

Personalidad: Es un niño tranquilo, risueño, cariñoso y trabajador. Aunque parece tímido, es bastante sociable. También es bastante miedoso, inseguro, de llanto fácil si se le provoca bien y tiene poco o nada de estomago para lo desagradable como la sangre y las vísceras. Tiene una gran habilidad manual e imaginación, lo que le viene muy bien a la hora de practicar sus dos grandes amores: la escultura y la repostería. No suele dejar que nadie se acerque a su cocina mientras él está trabajando, consecuencia de haberse acostumbrado a que Adrune se empeñe en querer ayudarle, lo que suele decantar en una serie de consecuencias catastróficas. Además, suele dar un fuerte golpe con su cuchara de madera a todo aquel que meta la mano en la comida mientras cocina, puesto que también se ha acostumbrado a que a su edeel le guste robar comida de esa manera. Aun así, tiene a Adru como su catadora oficial y se suele poner muy nervioso cuando esta tarda en dictaminar la calidad de lo preparado. Para su suerte, la comida que hace suele gustarle a la edeel, ya que si no fuera así, probablemente se deprimiría.

Habilidades: Artesanía, imaginación y habilidad manual.

Pasado: Neil fue un estudiante bastante básico, pero que destacaba en las manualidades, por lo que a nadie extrañó que quisiera centrar su educación en la artesanía. Cuando se enteró de que había tantos edeel como aurvas de su año se alegró bastante, ya que uno de sus mayores miedos era ser descartado. Tuvo la suerte, por increíble que esto suene, de ser unido a Adrune, ganado a su vez dos madres y un padre.

Neil suele dedicarse a las tareas de la casa, a veces ayudado por Nora, la madre biológica de Adru, aurva de Yaiza y pareja de Yrdel, y aunque lo normal es que los adultos y Adrune sean los que se encarguen del huerto, en más de una ocasión ha tenido que arrimar también él el hombro.

Su pasatiempo favorito es practicar el arte de la escultura mientras Nora toca la flauta. Son los momentos en los que más se relaja y se deja llevar. También le gusta escuchar las historias que le cuenta su edeel sobre Theron, el aurva de Yrdel y pareja de Yaiza, que murió cuando Adrune solo tenía 6 años. La adulta con la que mejor se lleva es Nora, por todas las cosas que tienen en común, aunque eso no hace que tenga menor afecto por sus otros dos padres.

La relación con Adrune, por otro lado, es muy estrecha. Se quieren como hermanos y, aunque su edeel busca cualquier excusa para fastidiarle y asustarle, Neil no es capaz de estar mucho tiempo enfadado con ella. Además, se siente protegido al estar en su presencia e irónicamente el estar con ella le tranquiliza.

Otros:
- En origen su nombre era Neil, pero cuando se unió a Adrune, Yaiza le añadió el “Iren” para que su nombre fuera a juego con el de su edeel. Le hizo gracia y no le desagrada del todo, por lo que no le molesta presentarse así, aunque todos lo llaman Neil.
- Lleva dos tobilleras de grilletes con argollas, una en cada pie. Usa como cinturón una cadena gruesa, pero ligera, que le ayuda a que los pantalones heredados que le vienen grandes no se le caigan.
- Es muy friolero, sobretodo en la mitad superior de su cuerpo, por eso siempre viste sudaderas y su bufanda.
- Le encanta cocinar y lo hace bastante bien, sobre todo la repostería.
- Es un gran escultor a pequeña escala. Su escultura a gran escala todavía se está puliendo y mejorando, pero no suele tener mucho tiempo para dedicarle a ella. Sus materiales predilectos suelen ser la madera, la arcilla y la cera, en ese orden.
- Le molesta mucho que le miren por encima de su hombro y que le respiren cerca de la cara.
- Duerme siempre al borde de la cama prieto contra la pared, metiéndose casi en el pequeño hueco entre esta y la cama. Duerme más apretado o menos dependiendo siempre de cuanto miedo tenga al acostarse. Los días de mayor terror, duerme literalmente entre la pared y la cama, encogido y tapado hasta la cabeza. Esto suele dejar el resto de la cama a su edeel para que se mueva a placer.
- Sus cuatro objetos más preciados son aquellos que su familia le regaló cuando se unió a ellos: las plumas que lleva en el pelo y que le dio Adru; la bufanda que siempre lleva al cuello, que pertenecía a Theron y que le regaló Yaiza; la larga cadena que le regaló Nora y que usa como cinturón, y la navaja para tallar que le regaló Yrdel.
- Por supuesto, esos cuatro objetos viajan con él a Rocavarancolia.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Spoiler:

Personaje:Rena.

Especie:Irrense.

Descripción física:Unos centímetros por encima de la altura media, de constitución fuerte y con caderas anchas. Tiene una musculatura bien formada no solo gracias a su trabajo, sino por haber sido ya de niña bastante activa, y por preferencias estéticas, aunque mantiene una capa de grasa que hace que su cuerpo no sea excesivamente fibroso. Su piel es color canela, con algunas cicatrices menores en el brazo y piernas sobretodo, por accidentes tontos. Tiene la cara redondeada, hocico algo ancho con un septum adornándolo, y boca carnosa. Sus ojos son almendrados, de color marrón oscuro. Lleva dos aros metálicos finos en la oreja izquierda, en la parte superior. Su pelo es naturalmente rubio, pero lo suele llevar teñido, en esta ocasión de verde brillante, rapado casi en su totalidad salvo el flequillo y las patillas. Debido a problemas hormonales a veces se le hinchan los pechos, y ya han tenido que extirparle los dos inferiores por riesgo de cáncer de mama. Su brazo mecánico es el derecho, decorado con llamas azules en la parte del antebrazo.

Llega a Rocavarancolia con ropa de salir: El traje térmico negro, vaqueros rotos super cortos, botines militares morados brillantes, una chaqueta verde fosforito y gafas de pasta. También lleva maquillaje ligero oscuro.

Sus pintas:

Personalidad:Rena es bastante sociable, le gusta estar rodeada de gente y le gusta sentirse parte de un grupo. Es muy leal y cariñosa con sus amigos, y salvo si es una persona que le cae realmente mal, siempre intenta ayudar a quien lo necesita si está en su mano. Es muy expresiva y sincera, y es fácil ver si alguien le gusta o no. Generalmente descarada al mentir cosa que se ha vuelto contra ella muchas veces.  

Muy agresiva en términos irrenses, tiende a reaccionar de forma brusca y a ser demasiado directa, lo que le ha costado mas de una llamada de atención en su entorno.
Aún así su violencia no tiene nada de sutil, no manipula, no agrede por lo bajo, no disimula para quedar bien, insulta a la cara y te la parte si lo ve conveniente, en el momento. Aunque debido a su forma de ser a veces también puede partírtela desde el cariño. Luego la mayoría de las veces se arrepiente y pide perdón.

Tiene poca paciencia y se aburre con facilidad, aun así es diligente con sus obligaciones y nunca haría un trabajo chapucero, incluso si es algo que le disgusta.

Es bastante insegura con respecto a sus propias habilidades intelectuales, y su impulsividad no es algo de lo que se sienta realmente orgullosa, por mucho que finja lo contrario.


Habilidades:Fuerza bruta, habilidad manual, automotivación.

Pasado:Rena nació en el seno de una familia minera, en un pueblo aburrido con un solo centro comercial. Ya de pequeña era un mal bicho, bastante bruta y más activa que la media, para desgracia de los demás niños del pueblo. Su forma de ser le costó pasar mucho tiempo sola, ya que no agradaba a la mayoría de sus compañeros, por lo que tuvo que ir suavizandose hasta que aprendió a socializar debidamente. Se creó un grupo de amigos reducido pero fiel, a los que no les molestaban tanto sus maneras pero que si lo hacían tenian la confianza para decírselo. La acompañaron hasta casi el final de su educación obligatoria, y con dos o tres aún mantuvo el contacto después.

Cuando tenía ocho años su madre volvió a quedarse embarazada, pero por un fallo del tratamiento en lugar de otro hijo como había planeado, se vio con tres, dos chicos y una chica. Salieron mucho más tranquilos, para alivio de sus padres.Tienen bastante buena relación, y Rena los adora, a pesar de lo mucho que los chincha y los molesta.

Nunca fue buena estudiante. Perdió el interés rápidamente en el colegio y eso le costó que al acabar la educación obligatoria la metieran a trabajar en la mina como a sus padres casi automáticamente, cosa que no le hace ninguna ilusión. Odia verse encerrada en su pueblo sin ninguna opción diferente que el camino que había seguido toda su familia desde siempre y va alternando la culpa entre el sistema y ella misma, decantándose por la primera la mayor parte del tiempo.

Ve en Rocavarancolia la oportunidad definitiva para trazar un nuevo camino, y conseguir una vida más interesante, así como una forma de demostrarse a sí misma y a los demás que de verdad tiene alguna habilidad especial, que vale para algo más que picar piedra.  

Otros:
-Usa gafas para leer, aunque también como complemento cuando se arregla.

-El verde y el morado son sus colores preferidos.

-Le encantan las arañas.

-Partió su implante al mes de que se lo pusieran, y desde entonces su madre la obliga a ir con un kit portatil de reparación y mantenimiento.

-Se lleva a gritos con su madre pero en realidad tienen muy buena relación.

-Tiene en su habitación un calendario de chicos con uniformes de mecánico y manchados de aceite de motor en posiciones sugerentes.

-Ha tenido un par de novios en persona y otros tantos por internet, y le fastidia no poder conocer en carne y hueso a más gente.


Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Eorlir

Especie: Sinhadre (edeel)

Descripción física: Edeel de 15 años. Mide 1'65m, de complexión media. Sus ojos son violeta oscuro, mientras que su pelo es azul muy oscuro. Tiene el pelo recortado en algunas zonas, mientras que en otras el pelo le cae en trenzas largas. Le gusta vestir con colores rojos y verdes un poco oscuros. De hecho, llega a Rocavarancolia con una camisa roja con estampados verdes y unos pantalones verdes que se transparentan un poco por las piernas. Usa una sola pluma azul como adorno, que le cuelga de una de las trenzas que le caen por atrás. Tiene una fuerza física y resistencia medias: aunque se ha entrenado en combate, no es una disciplina que le interesara especialmente, prefiriendo ejercitar la mente.

Personalidad: Prefiere pensar antes de actuar: a priori parece que tiene una personalidad muy pasiva, que se deja arrastrar por los demás y, de hecho solo adopta una personalidad más dominante con su aurva, pero en realidad siempre esta analizando la situación. Tiene una mente analítica por lo general. Su hobby es el arte, más concretamente la pintura, aunque tampoco le hace ascos a diseñar alguna escultura que otra o componer melodias más bien sencillas. Sus pinturas son conocidas, y algunas de ellas las han adquirido los sacerdotes de Firande. La pintura es la única cosa en el mundo capaz de hacer que pierda la noción del tiempo y hacerle mostrar alguna emoción sin que se dé cuenta. También tiene nociones de cocina, más por curiosidad que por necesidad, aunque por lo general delega esa tarea a su aurva.
Es protector con su aurva, aunque es algo brusco con ella y le repite constantemente que debe aprenderse a valer por si sola. Es lo que considerariamos un tsundere. La única forma de que pierda los estribos y adopte una personalidad más preocupada y lanzada es que su aurva se encuentre en peligro, aunque posteriormente volverá a su personalidad reservada.

Habilidades:  Habilidad mental, planificación, dibujo.

Pasado: Nacido en Firande, de familia noble. Además de ser educado de forma convencional, destacando en las tareas administrativas y económicas, Eorlir se volcó desde muy pequeño a la pintura, aprendiendo y practicando hasta que un sacerdote adquirió una de sus obras cuando el tenia 13 años, justo cuando se unió con Ina, su aurva. A partir de entonces se esforzó cada vez más en mejorar, y en el momento en que lo cosecharon, ya le conocían y respetaban por su talento y juventud.
Su personalidad aparentemente reservada ocasionó alguna preocupación a sus padres, ambos edeeles, puesto que consideraban que su deber como edeel era someter a su aurva. Al principio no prestaba atención, pero a medida que pasaba el tiempo y la presión familiar se hacía más pesada, decidió adoptar una actitud muchísimo más dominante delante de sus padres, actitud que abandonó automáticamente al irse a vivir con Ina, tres meses después de su Unión.
Su relación con Ina se basa en la protección: el, como edeel, protege a su mitad aurva. Aunque manifiesta abiertamente un deseo de que se valga por sí misma, en su fuero interno prefiere seguir protegiendola, siendo a veces un poco sobreprotector. También es bastante posesivo: un mes antes de la cosecha, un edeel le pidió permiso para mantener una relación cruzada con Ina, a lo que él se negó rotundamente. Aunque no le hace ascos a salir a pasear o a quedar con otros artistas y compartir sus obras, y tiene que soportar ir a eventos sociales, lo que el odia y los pasa obligado cumpliendo las normas mínimas de protocolo, prefería estar en casa, en compañía de su aurva, mientras pinta, llevando una vida bastante tranquila por el momento.

Otros: Su padre es viudo. El aurva de su padre murió en circunstancias misteriosas, aunque oficialmente se catalogó como accidente. Aunque él se interesó por el tema, no investigó y aceptó la versión oficial, aunque dentro de él sigue sintiendo curiosidad sobre las verdaderas circunstancias de su muerte.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Ain

Especie: Humano

Descripción física: Con 16 años Ain tiene un cuerpo poco desarrollado para su edad, no es muy alto (mide 1,68), de no ser por el ejercicio que practica, apenas tendría musculo, en cuanto al peso se diría que está en su peso ideal aunque él se ve delgado y apenas tiene pelo por el cuerpo. En cuanto a su rostro, sus ojos son lo más llamativo, de un bonito color verde y miel, también destaca una cicatriz de tamaño considerable en la mitad de su cara que no recuerda como se la hizo. Tiene el pelo negro, lo suele llevar bastante desastroso, ya que se lo corta el mismo.
En cuanto a su ropa, suele vestir lo primero que pilla del armario, ya que su aspecto físico no le importa demasiado.

Personalidad: Ain es una persona una bastante inquieta y curiosa. Desde siempre le ha costado relacionarse, por lo que al principio puede parecer algo distante, pero cuando coge confianza se vuelve más gracioso y amable con sus amigos, pero sobretodo leal. Ain siempre intenta evitar los líos ya que no le gusta ser el centro de atención. Le gusta pasar tiempo solo, pensando en sus cosas o en chorradas. Le gusta hablar bastante pero la charla insustancial le aburre. No es de las personas que se callan las cosas, suele ser bastante sincero pero siempre intenta decir las cosas de la mejor manera posible. Rara vez se enfada si una situación le molesta, de hecho cuando se enfada parece que está tranquilo, pero su mirada cambia y pasa a dar un poco de miedo. Esto solo le ha pasado un par de veces cuando de verdad le molestaron, estas historias no suele contarlas, ya que no le gusta esa faceta suya.  

Habilidades: Nociones de Lucha, Planificación, Rapidez Mental

Pasado: Ain nació en Estados unidos, su padre era astrónomo y su madre diplomática en la embajada china. Ain no tiene apenas recuerdos de su padre, ya que murió cuando el apenas tenía tres años, dos años después del fallecimiento de su padre se mudó con su madre a China, a un pueblo cercano a Pekín, donde residía su familia materna. Cuando cumplió 10 años su madre se mudó a la ciudad, dejándolo al cuidado de su abuelo con el que no mantenía una relación muy estrecha. Su abuelo era muy tradicional, por lo que casi obligaba a Ain a estudiar toda la tradición china incluidas artes marciales en un colegio para hijos de diplomáticos. Ain no estaba muy contento con esto y aprendía pero después de seis años algo se le quedaría.  Un par de años después, tras pasar una época difícil en la escuela conoció a los que serían sus dos mejores amigos: William, hijo del embajador de Inglaterra y Jacob que casi no hablaba de su familia, pero sabía que era de Australia. Con ellos adquirió su pasión por los videojuegos. Por mala suerte estuvo poco tiempo con ellos, al ser hijos de diplomáticos como el nunca permanecían mucho tiempo en un mismo sitio por lo que primero Jacob y después Will regresaron a sus países de origen.
A partir de aquí la vida de Ain se volvió monótona, todas las semanas se resumían en lo mismo, ir al instituto, estudiar y entrenar. Alguna vez salía a comer o a cenar con algunos amigos pero no solía hacerlo mucho.  El único momento donde no sentía que todo era igual era cuando echaba el poco tiempo libre que tenía jugando a videojuegos solo o junto a sus amigos, haciendo que desapareciese la distancia que los separaba.
Aquella noche había llegado de entrenar, todo el cansancio se le acumulaba, la semana de exámenes pesaba en él, entró en la habitación y se sentó delante del ordenador. La competición estaba cerca y debían de clasificarse. Pero mientras se conectaba todo el cansancio acumulado le vino de repente y se quedó dormido frente al ordenador.

Otros:
-Aunque no destaca por ello no se le da mal dibujar y le gusta, sobre todo paisajes y personajes que podría usar para un videojuego.
-Su sueño es llegar a crear un gran videojuego, por lo que tenía pensado estudiar programación.
-La noche de la cosecha llevaba puesto un pantalón de chándal una camiseta de entrenamiento y una sudadera negra.
-En el bolsillo derecho lleva un pequeño iPod y unos cascos.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Innadriel  

Especie: Sinhadre

Descripción física: Niña de quince años. Mide 1,58 más o menos y está bastante delgaducha y débil. Sus ojos aguamarina claro la marcan como aurva. Tiene el pelo de color violeta claro, que suele llevar corto salvo la parte izquierda, que lleva recogida en trenzas. Se sonroja con facilidad, lo que hace contraste con su piel clara.
Le gusta vestir de colores claros, en especial de rosa y azul. Cuando llega a la ciudad, lleva un vestido de tirantes rosa con detalles en azul claro, con un corte asimétrico (más largo a la derecha que a la izquierda), una cadena en el cuello y un grillete en el tobillo izquierdo.

Ina:

Personalidad: Ina es una niña bastante tímida. Ante alguien que no conoce, su reacción será quedarse callada y en segundo plano, y si se le habla se le sacará poco más de palabras sueltas o frases muy cortas. A pesar de esto, es bastante amigable y cariñosa cuando conoce a alguien y gana confianza.  Es muy cobarde y se asusta con facilidad. Suele pasar más tiempo en su mundo feliz que en la realidad, y es su edeel el que tiene que sacarla reiteradamente de allí. Es torpe a la hora de hacer cualquier cosa, sobre todo si requieren cualquier actividad física y además se distrae con facilidad, por lo que suele tener marcas de golpes o alguna cicatriz en brazos o piernas. Se le da bien cocinar, aunque siempre lo niega si alguien se lo dice.
Es bastante emotiva y es fácil herirla sin querer con palabras que para otro no hubieran sido más que un insulto. Es de lágrima fácil y suele dejar que sea su edeel quien la defienda de todo.

Habilidades: Orientación, imaginación, memoria

Pasado:Nacida en Firande, era una estudiante bastante decente, aunque demasiado tímida como para dar el primer paso a la hora de socializar. Vivía más en su mundo que en la realidad, pero siempre fue consciente de que tal vez llegara a ser descartada si había demasiado aurvas, su mayor miedo.  

Nunca destacó en nada debido a su torpeza natural, salvo en la cocina, aunque tuvo sus más y sus menos con esta al principio también. Tras la ceremonia de unión, perdió el contacto con los pocos amigos que tenía, para irse a vivir con su edeel y su familia. Sus padres nunca le cayeron bien, aunque fuera solo por cómo querían que Eorlir la tratara.

La relación que tiene con su edeel no la desagrada, además de que se siente cómoda y protegida con él, aunque cree que a veces puede llegar a ser demasiado posesivo, aunque no ha llegado a decírselo.


Otros:
-Odia su nombre completo, por lo que siempre se presenta como Ina.
-Le gusta dibujar, aunque no destaque en ello, y se considera infinitamente inferior a Eorlir  en cualquier aspecto artístico, por lo que prefiere mirarle en silencio mientras él dibuja.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Nime, hija de Salima.

Especie: Libense.

Descripción física: Niña de ocho años, rechoncha y de complexión más bien ancha, que mide 129 centímetros. Tiene la cara redonda, con una nariz respingona, labios finos y mejillas coloradas. Sus ojos son de color amarillo, con las características pupilas verticales de los libenses, y ligeramente rasgados. El pelo es espeso y ondulado, de color negro, y lo lleva con una raya al medio, bastante corto y capeado. Tiene la piel pálida, de un tono levemente rosado, y colecciona pequeñas cicatrices en las rodillas y algún que otro sitio más de caerse en las calles empedradas de su ciudad. Sus manitas regordetas tienden a estar pegajosas de jugar con la porquería.

Personalidad: Es esencialmente un trasto. Le gustan las travesuras, jugar, molestar y saltarse normas, con varias lógicas excepciones. Aunque pueda ser capaz de seguir las órdenes que le den mujeres mayores que ella, si estas provienen de un chico (y aún más si tiene confianza con él), va a tener que vérselas con su terquedad. Le gusta ignorarlos a propósito, hacer lo contrario de lo que le dicen, o simplemente burlarse de ellos; aunque lo haga de forma amistosa, no le falta malicia. También tiende a enfurruñarse cuando nadie le sigue la corriente. Puede llegar a ser bastante mandona donde hay confianza, es raro que muestre vergüenza o arrepentimiento, y sabe mentir cuando la ocasión lo requiere. Eso no quiere decir que las trastadas que cometa sobrepasen la gravedad de las de cualquier otro crío, pero le gusta tentar a la suerte con frecuencia.
Con todo, es una niña alegre y cariñosa a su manera. Es capaz de distinguir cuándo no es un buen momento para molestar a alguien, aunque su criterio no incluye tantas situaciones como a la gente de su entorno le gustaría. Sabe mantener la motivación y enfrentarse a problemas con bastante entereza. No se considera miedosa y adora la aventura, sobre lo que suelen versar la gran mayoría de juegos con sus amigos, en los que demuestra ser bastante imaginativa. Es capaz de encontrar un juguete o juego en cualquier cosa. También adora ir los espectáculos nocturnos para niños a escuchar historias épicas o ver trucos de magia. Le gusta la comida calentita pero suele quemarse la lengua al comerla. No se pierde una siesta.

Habilidades: Espontaneidad, automotivación, imaginación.

Pasado: Nació en una colonia costera de Libo, donde su familia se sustentaba dedicándose a la pesca. Vivía con su madre, Salima, su padre, Virik, y sus dos hermanos mayores, Ivel, de quince años, y Sisek, de diez, en una casa cerca del puerto. Adoraba a sus hermanos tanto como meterse con ellos. Ivel, apocado y responsable, tuvo que aguantar la peor faceta de la niña, que disfrutaba de hacerlo sufrir para ocultar sus trastadas o tratar de hacerla entrar en razón, además de usarlo de colchón con frecuencia. Sisek era uno de sus compañeros de juego habituales, siguiéndola como un perro fiel, al ser más parecido a ella en edad y personalidad que su hermano mayor, pero mucho menos lanzado y, generalmente, arrepentido de cada trastada justo al terminar de llevarla a cabo. Pasaban mucho tiempo fuera de casa jugando, cuidando de los gatos callejeros o explorando.
Salima no podía evitar mimar a su única hija, a pesar de las broncas legendarias que ha llegado a echarle. Era una persona mucho más severa que Virik cuando se enfadaba, porque si era el padre quien la reñía la lección no quedaba igual de bien aprendida. Ella era alegre y explosiva; él, bonachón y agradable, y siempre ha atendido a sus hijos con dedicación.

Otros: Llega a la ciudad con unas botas de cuero fino bastante altas, de color marrón con cintas negras, unos pantalones cortos negros con un cinturón de cuero trenzado, y una camiseta corta de tela vaporosa azulada cubierta por un chaleco negro ceñido. En el cuello lleva una gargantilla de cuero, y habría tenido algún complemento más si no tuviese tendencia natural a perderlos. Tiene restos de maquillaje azul en los ojos, puesto por su madre, y emborronado porque siempre olvida que lo lleva. En el bolsillo del pantalón guarda un escarabajo y una cochinilla muertos que recogió cuando nadie miraba. Es miope, pero ni siquiera ella se ha dado cuenta.

Dibujo de Nime.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Barael.

Especie: Nublino.

Descripción física: Nublino de metro cincuenta y cuatro, de constitución normal en su mundo. Tiene dieciséis años, pelo ligeramente largo y de color grisáceo oscuro. Ojos de una tonalidad lila oscura que dan la sensación de estar mirando más allá de lo que tiene enfrente. Rasgos ligeramente afilados y piel poco más oscura que la media. Sus manos presentan pequeñas marcas de heridas hechas mientras ayudaba a reparar los carros y de hacer pequeños juguetes o figuras.

Personalidad: Es calmado y no tiende a mostrar emociones más allá de la curiosidad si no tiene confianza así como no siente ningún compasión a gente no cercana a él, siendo muy frió y calculador al punto de presentar rasgos de psicopatía. Muy curioso, algo amable aunque directo con lo que piensa. Está muy atento a su alrededor hasta que encuentra algo curioso o interesante y entonces se centra en ello perdiéndose en sus pensamientos. Es muy protector con su hermano y aunque suele ser afable puede perder los estribos fácilmente si alguien actúa en contra suya sin razón. Siempre antepone precaución a temeridad salvando el caso en que su hermano o alguien con quien haya conectado estén en peligro. Siente mucha curiosidad hacia la magia de los rocavarancoleses, pareciéndole ésta muy práctica, pero nunca quiso convertirse en un dios.

Habilidades: Habilidad manual, reflejos, artesanía.

Pasado: Barael fue el hijo primogénito de la familia y el mayor de ambas aunque en sus primeros recuerdos su hermano dos años menor Eriel y otros dos nublinos mellizos de la familia hermanada ya se encontraban  presentes. Desde pequeño adoptó un fuerte papel de hermano mayor queriendo ser un ejemplo para sus hermanitos por lo que se volvió un chico diligente que ayudaba en todo y a todos los que podía trabajando sin cesar, además, no le gustaba quedarse mucho tiempo quieto. Cuando cumplió ocho años un nuevo hermanito nació y Barael insistió prácticamente en cuidarlo como si fuera suyo, le encantaba tener otro pequeño en su familia. Su rutina era sencilla, por la mañana se levantaba muy temprano para ayudar en todo lo que le mandaran, vigilaba y cuidaba de sus hermanos y  revisaba los carros de vez en cuando.  Por la tarde se dedicaba o bien a hacer figuras o juguetes si podía o a pasear recogiendo hierbas medicinales, de té o bayas comestibles. Cuando su hermano Eriel empezó a volverse perezoso Barael se culpó en parte a sí mismo, pero en vez de deprimirse, redobló esfuerzos y empezó a reñir a su hermano cada vez que lo veía holgazanear. En sus pasos por  Varanublia aprovechaba para ojear,  y si podía comprar, juguetes, herramientas y artilugios hechos en esta, para luego tratar de replicarlos para sus hermanos, pero sobre todo le gustaba observar  las demostraciones. Cuando ocurrió el desastre de Varanubliagálago Barael tenía casi trece años y la familia y él aunque no estaban presentes si que recibieron la noticia bastante rápido. Esto marco en cierto modo a Barael, la magia es tan útil como peligrosa, como cualquier herramienta, pensó. No mucho después, con la pre-madurez y lo que esto conlleva, tuvo su primer roce sexual con el primogénito de la otra familia que era pocos meses menor que él. Fue este el que se le acercó primero y en un principio Barael se dejo hacer, pero más tarde se soltó y también tomó parte en la acción. Algo antes de ser cosechado, empezó una relación la hija mayor de la otra familia, sin dejar a su amante, sin embargo por mucho cariño que les tuviera, no se sentía plenamente enamorado de ninguno de ellos. Su vida había sido pacífica y bastante plena, pero al ver que su hermano Eriel había sido escogido y  con la posibilidad de aprender a usar la magia Barael decidió adentrarse en este nuevo mundo.

Otros:
-Cuando llega a la ciudad lleva un poncho de color verde y morado oscuro con puntos distribuidos por la parte superior del poncho, representando una pradera de noche con un cielo estrellado. Debajo lleva una camisa de lana con unos pantalones a juego, ambos de color gris azulado.
-Es zurdo de nacimiento pero con los años se acostumbró a usar también la diestra como resultado de facilitarse tareas manuales.
-Los roces con sus nuevos compañeros están haciendo que su psicopatía vaya a peor, cerrando cada vez más el cerco de confianza y volviéndolo menos amable.
-Nunca se había llegado a enfadar tanto como lo está haciendo ahora.
-Odia deber nada a nadie y siempre devuelve un favor.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Nombre: Eriel

Especie: Nublino

Descripción física: Nublino de metro cincuenta con poca constitución. Tiene catorce años, pelo corto, encrespado y de color negro. Ojos grises y vivos que suelen fijarse en todo lo que le rodea pero no suelen quedarse quietos en un único lugar. De rasgos bastante comunes y piel un poco más oscura que la media. Dientes ligeramente torcidos de color blanco. Tiene una pequeña cicatriz en el antebrazo izquierdo por una caída aparatosa cuando era más pequeño. Está un poco rellenito ya que, a pesar de llevar una vida nómada pasaba la mayor parte del tiempo posible sentado.

Personalidad:Chico alegre de risa fácil y bastante soñador. Es curioso y valiente y no dudará en salir en defensa de su familia o amigos si siente que estos están en peligro. Pero no confunde valentía con temeridad y es lo suficientemente inteligente para saber cuándo es mejor dejar correr las cosas. Es amable y no le importa compartir lo que tiene, pero si alguien toca sus cosas sin permiso tiende a enfadarse. Cree que Rocavarancolia es la ciudad de los dioses y que todos cuantos habitan en ella son también dioses.

Habilidades:Valor, vista de lince y puntería.

Pasado: Eriel nació un par de años después que su hermano. Se crió con Barael y el resto de la familia nómada a la que pertenecían. Vivió viajando por los caminos con los animales de pastoreo, de vez en cuando pasaban por algún pueblo o ciudad pero nunca llegó a tener amistades fuera de la tribu, siendo su relación más fuerte con su hermano. Con los años tuvo otro hermano más pequeño. Ayudaba con las cosas de la tribu pero prefería pasarse el tiempo sentado pensando cómo sería ir a Rocavarancolia (a menudo regañado por su hermano mayor por ello) o leyendo los pocos libros que caían en sus manos. Siempre fue un niño decidido que no se amilanaba ante un reto y cuanto mayor el reto mejor. Viaja a Rocavarancolia encantado por la oportunidad de probarse a sí mismo y el poder convertirse en un dios.

Otros: Llega a la ciudad con un poncho azul eléctrico con nubes y pájaros bordados. Debajo lleva una camisa y un pantalón de color gris oscuro.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Mónica Gutiérrez.

Especie: Humana (Española, madrileña de las afueras).

Descripción física: Mónica tiene 15 años y es de una altura media (1.65) aunque en su clase es considerada más bien bajita. Tiene el pelo liso y castaño, por debajo del pecho, y los ojos también castaños con pestañas rubias, una nariz pequeña y respingona y labios finos. Es una chica delgada y poco voluptuosa, más bien torpona aunque nada muy bien, por lo que tiene la espalda fuerte. Se ruboriza y palidece con facilidad, y cuando está enfadada o triste se le enrojece la nariz. Detesta la visión de sus pies y por eso intenta llevar siempre zapato cerrado.
Mónica suele vestir más bien sport, con pantalones vaqueros, camisetas de hombre (generalmente de su hermano) porque le gustan más esos estampados que los que se puedan ofrecer en las de la sección de chica, y sus viejas zapatillas de deporte. Además, nunca sale de casa sin un anillo engarzado en un collar y una colección de coleteros en la muñeca.

Personalidad: Es una chica algo torpe, bastante quejica (una reina del drama), enamoradiza, con un carácter algo arisco (a pesar de lo cual le gusta hacer gracias que la mayoría de las veces sólo le divierten a ella) y olvidadiza. No tiene vergüenza. Ella dice que es pacifista y contraria a la violencia, pero la verdad es que cuando se encuentra bajo mucha presión o está muy enfadada tiene prontos bastante feos y agresivos. Si hay algo que no le gusta es estar rodeada de mucha gente, le incomodan esas charlas “insustanciales”, como las llama, pero lo disimula bastante bien y coge confianza con rapidez por lo que resulta una persona de conversación fácil. Ella misma reconoce que no tiene muchos amigos, pero que no los echa de menos porque le bastan su hermano mayor, Jonás, al que adora, y su amiga Sara. Es una persona muy apegada a su familia, con la que le gusta pasar muchos ratos, y le encanta organizar “noches de cine” en las que poder sentarse en el sofá, ponerse ciega a palomitas y ver películas una tras otra. Por último, le tiene verdadero asco a la suciedad, los gérmenes, bacterias y cualquier amenaza de virus o enfermedad.

Habilidades: Espontaneidad, automotivación, imaginación.

Pasado: Mónica vivió, desde que nació y hasta los seis años, con sus padres y su hermano en una casa a las afueras de Madrid, pero cuando cumplió los seis perdió a su madre de una rápida enfermedad infecciosa de la que nadie se dio cuenta hasta que no fue demasiado tarde. Tras morir su madre dejando atrás un gran cúmulo de deudas Mónica, su padre y su hermano se trasladaron a una caravana, que es en la que viven actualmente. Que ella sepa, no tiene más familia que con la que vive, por lo que les tiene mucho apego. Desde que su madre murió ha desarrollado una especie de fobia hacia la suciedad (si algo está sucio tiene que limpiarlo o irse a otro sitio, ya que le da mucho repelús [su hermano suele fastidiarla con eso]) y cualquier indicio de enfermedades (toses, carraspeos) por lo que si algo o alguien que esté cerca suyo está sucio o tiene algún viso de poseer alguna enfermedad no puede evitar ponerse su mascarilla y repartir gel antibacteriano entre los que la rodeen.
Mónica es una chica algo peculiar, nunca necesitó a nadie excepto a su familia por lo que siempre fue considerada algo solitaria (a pesar de lo cual nunca le faltaban compañeros de juegos ya que la consideraban muy divertida precisamente por sus peculiaridades); y fue en la E.S.O cuando encontró a una chica con la que tenía mucho en común, su mejor amiga Sara, a la que hoy en día considera parte de su familia. Son inseparables. Jonás es su otro mejor amigo, con el que siempre sabe que puede contar y que siempre está chinchándola, pero al que adora con locura.
No le gusta hacer las tareas de la casa tales como limpiar, planchar o cocinar, opina que hay montones de cosas más interesantes que hacer en vez de eso (como dormir), pero como debido a su fobia no puede ver nada sucio, el lugar en el que esté tratará de mantenerlo limpio como los chorros del oro. También tiene unas vagas nociones de cómo cocinar, intentará no hacerlo si puede evitarlo pero si considera que la persona que va a hacer la comida no tiene las manos limpias o no mantiene unos mínimos de higiene se encargará ella de ponerse a cocinar.
Cuando fue cosechada estaba en una fiesta en una discoteca a la que su hermano le había obligado a ir porque perdió una apuesta. Esa misma apuesta especificaba que tenía que ir vestida con un disfraz rosa muy pomposo de princesa, unas zapatillas de plástico con pompones rosas y tacón sonoro en plan caballo, una corona de plástico, un bolso de pompones y mucho maquillaje (todo esto Mónica lo detesta); además de 50 estampitas de la Virgen del Pilar que tenía que ir dando a los chicos diciendo “Toma, este es mi número, <<Call me maybe>>” ya se lo pidieran ellos o cuando ella quisiera ligar (también obligada por su hermano, era parte de la apuesta) que ha ido perdiendo (o dando) hasta que sólo le han quedado veinte. Como se puede esperar, no está de muy buen humor, ni cuando estaba en la fiesta ni cuando despierta en Rocavarancolia.

Otros: Aparece en Rocavarancolia vestida con un disfraz de princesa rosa de tul, una corona de plástico dorado, un bolso pequeño en el que lleva sus “imprescindibles”, unas zapatillas de tacón de plástico del chino, el maquillaje todo corrido y el pelo revuelto (sí, como si estuviera haciendo “el camino de la vergüenza” por Rocavarancolia).
Siempre lleva consigo una “bolsita de imprescindibles”, que esta vez se las arregló para encajar dentro de un bolso rosa de pompones (también parte del disfraz) y que contiene: un gel desinfectante, una bolsita de toallitas húmedas olor Nenuco, polvos compactos, un mini-kit de cepillo y pasta de dientes, un peine, pastillas varias (un paracetamol y un ibuprofeno), tres tiritas, una mascarilla anti-gérmenes, pañuelos de papel, una compresa y un tampón. Además también lleva su DNI, cinco euros, un boli bic, un folio doblado y veinte estampitas de la Virgen del Pilar.
Siempre tiene las piernas llenas de moratones porque se va chocando con los muebles ya que va siempre deprisa a todas partes y no le importa que los muebles estén en medio (su filosofía de vida es que las cosas tienen que reorganizarse a su alrededor).
A pesar de que le encantan las películas románticas y las de Disney detesta tener que vestirse “como una señorita”, por lo que casi nunca se pone faldas y mucho menos vestidos. Sin embargo tiene predilección por las sombras de ojos.
Como nunca se acuerda de los nombres de la gente les va poniendo motes a cada cual más ridículo (y riéndose para sus adentros).
Le encanta incomodar a la gente, y tratará de hacerlo cuanto, donde y como pueda, ya sea planteando temas escatológicos como bromas de mal gusto como preguntas entrometidas.
Si le ha caído bien alguien le dejará llamarle Mon, el modo en que le llaman su padre, su hermano y Sara.
Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Spoiler:

•Nombre: Pam (su apodo es Pelusa)

•Especie: Mono del queso, Ordesta.

•Descripción física: Se trata de un niña de trece años, cuya estatura no alcanza el metro por muy poco, midiendo exactamente 98 centímetros, de piel extremadamente blanca, bastante delgada a pesar de tener piernas bastante fuertes y manos trabajadas. Es completamente calva, teniendo apenas un pelusilla del mismo color que su piel, en su pubis, piernas y cejas, donde es algo mas oscura. Estás ultimas enmarcan uno grandes ojos de color lavanda pálido debido a una mutación que posee su cuerpo, posee labios pequeños y facciones redondeadas, recordando a los de una muñeca de porcelana (o a las Dollfie). La mutación que hace que sus ojos tengan ese extraño color lavanda, no solo afecta a estos sino que hace que sea imposible para ella el tener hijos. Debido a esto, sus hormonas están revolucionadas y es totalmente incapaz de segregar leche alguna. A simple vista puede parecer un chico ya que no tiene pecho alguno y su condición de mujer solo es notable por sus genitales.

Tiene varias cicatrices bastante profundas cubriendo su espalda, ya viejas, debido a los golpes que recibía en la granja donde se crió.

•Personalidad: Es bastante huraña a pesar de su apariencia de muñequita dulce, desconfiada y le cuesta mucho abrirse con la gente, nunca alza la voz, no sonríe prácticamente nunca y es realmente difícil hacerla reír. Es servicial porque le han enseñado a serlo a base de golpes con el fin de quitarle la rebeldía, una que aun permanece bajo capas de buen comportamiento. Es realmente inteligente y de muy rápido aprendizaje, tanto a nivel academice y practico, como estudiando a la gente que le rodea con el fin de saber si el trato le beneficia o no.

Cuando se suelta y la capa de fingida sumisión es apartada, es capaz de mostrar ciertos matices de su personalidad que por lo general permanecen escondidos, como es su humor negro o su lengua afilada. Es descarada, crítica y peleona, mirando siempre por ella misma antes que por los demás por que es la única forma de sobrevivir como esclavo. Bastante astuta para salirse con la suya evitando los castigos, aunque eso suponga lanzar a otros a los lobos.

Odia su condición de esclava y a su propia raza por ser tan estúpidamente sumisos. Por su crianza, el pensar dejar a alguien atrás no le es importante y no sufrirá por ello, incluso si eso implica dejarlo morir, no dirigiéndole mas que un pensamiento. Sobretodo si esa persona le disgusta.

Con la gente que pueda ganarse su respeto o incluso su aprecio, puede llegar a ser bastante atenta. No es un mal bicho siempre, simplemente no ha tenido motivos para ser amable con nadie y esa parte de su personalidad aun necesita salir a la luz.

•Habilidades: Habilidad manual, Velocidad, Don de lenguas.

•Pasado: Al igual que otros muchos monos del queso nació en un granja del Feudo 69, uno de los mas importantes y ricos en cuanto a la cría de monos del queso. Su mutación fue bien conocida desde que nació siendo visible en sus ojos lavanda, en contraste con la gran mayoría de azules y verdes. Esta condición no le supuso un problema a Pelusa durante su tiempo en la granja, creció y aprendió todo lo que era necesario para sobrevivir y a su vez fuese útil para sus amos, desde estudios hasta algo de entrenamiento personal. Vio a muchos compañeros de su misma raza crecer junto a ella aprendiendo realmente rápido a no alzar la voz, no levantar la cabeza sino se lo pedían, callar y obedecer en una total sumisión y eso a Pelusa le fastidiaba.

Al contrario de sus congéneres la total sumisión no le gustaba, no veía sentido a que siendo mas inteligente y capaces  que las bola de pelos, como ella llamaba a los ordeses, tuviesen que ser sus esclavos. Cuando tuvo edad suficiente, Pelusa empezó a criticar, protestar y rebelarse contra el yugo de sus criadores, manteniendo un pensamiento propio lejos del colectivo de su propia manada. Aquello le supuso varios castigos, tanto de golpes como dejándola sin comida y Pelusa se sentía frustrada y fastidia a partes iguales. Llegando incluso a odiar a su propia raza, que serviciales, la entregaban a los ordeses en cuanto la veían haciendo cualquier cosa mal, o incluso sino lo hacia, solo para mostrar cuan obedientes eran.

Pelusa empezó a volverse huraña rechazando el contacto con todos los de su raza y aprendiendo a mantener su rebeldía bajo llave para evitarse los castigos. La cosa no mejoro mucho tras su primera relación con un mono del queso con el fin de criar y producir la leche, algo que le era impuesto en la granja. Ninguna de las dos cosas sucedió, no solo era estéril sino que su mutación afectaba también a su producción de leche y eso para sus criadores significaba que era una rareza cara como exhibición, pero inservible para la producción. Pero gracias a que en el Feudo 69, no se podía matar a los monos del queso, fue entregada a familia feudal del Feudo 720, el hogar de las putas, donde su condición era un extra interesante.

Su nombre fue cambiado a Pam, nombre que no termina de gustarle, por su dueño y era exhibida a ojos de los ordeses curiosos; pues para incrementar su rareza y la extravagancia de su mutación, le entregaron ropa usada. Pam tenia que tragarse sus palabras y ser servicial, no le gustaba que los ordeses le acercaran las manos para tocar su piel, curiosos por que no emanara leche. Debía callarse su frustración y sus ganas de patearlos, pues allí esa mutación era lo que la mantenía viva.

Como esclava su labor era encargarse de la limpieza, la comida y de la costura, siendo lo ultimo lo que mas le gustaba. En ocasiones y a petición de su amo, se encargaba también de enseñarle a leer y a escribir a los ordeses prostitutos de la familia. No le gustaba su vida, era inteligente y capaz, pero debía vivir todo el tiempo solo al servicio de aquellos peludos, totalmente aburrida en un constante día repetitivo. Algo que le molestaba pues si no fuera esclava podría hacer muchas cosas con libertad.

Cuando Dama Aroma fue a por ella, no se lo planteo, ni lo pensó tan siquiera. Le daba igual donde fueran mientras no tuviese que seguir allí.

•Otros: -Llega a la ciudad con un poncho hecho de piel de animal, algo deshecho y viejo, de color beige con cuello blanco de pelitos y que debido a su estatura le llega por debajo de las rodillas. También trae puesto un pequeño delantal sobre el poncho, sujetando este contra su cuerpo. No lleva nada debajo.
-En el bolsillo del delantal tiene un pequeño cuchillo de cocina.
-En su muñeca lleva un par de pulseras: una de ellas con un rollo de hilo atado y otra con una esponja con agujas clavadas, debido a su labor como costurera.
-Es ambidiestra.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Melodía, posteriormente Sinceridad.

Especie: Roquense.

Descripción física: Tiene 14 años. Estatura media, ojos negros. Sus plumas son de colores que oscilan entre el marrón, gris y verde, todos oscuros. Es abajera, como demuestran unas alas de las que está bastante orgullosa (mentira: solo lo dice en ciudades del Coro). Su voz no le permitió pasar los exámenes de canto (mentira: fingió para no aprobar), así que pronto le destinaron al gremio de los Cazadores. Era prácticamente voluntaria y en el norte casi todos lo son, así que no había mucho más que hablar. Como hembra que es, tiene una bonita cresta en lo alto de la cabeza. Le gusta llevar cuentas, collares, pulseras, “tobilleras roquenses”... Además, su gusto por la caza exige un entrenamiento duro que se refleja en su condición física.

Personalidad: en general es una luchadora, por motivos tanto individuales como “de grupo”. Muy crítica con ella misma y su trabajo, ya sea la cacería o ayudar en Tierra-Bruja con lo que se tercie. Prefiere la acción al aburrimiento, por lo que aunque no sea temporada de caza o las reservas estén al tope, no es raro verla salir a explorar o a perseguir presas para mejorar. Siempre quiere mejorar en lo que hace, sea lo que sea. Ve el mundo como un lugar en el que solo sobrevive la comunidad más unida y más fuerte, lo que se demuestra con la dominación casi total del Coro en su mundo, pero cree que Tierra-Bruja tiene posibilidades si se mantienen unidos. También es un tanto mentirosa. Le cogió el gusto a mentir a la gente en las ciudades del Coro y lo tiene tan interiorizado que lo hace como algo natural. En Tierra-Bruja le enseñaron que sus mentiras más grandes tienen que apoyarse en mentiras pequeñas repartidas a lo largo del tiempo para convencer a cualquiera que desconozca la verdad. Tiene, por tanto, que recordar qué ha dicho a qué roquense, cuándo, y por qué, para que su red de mentiras se mantenga. No obstante, cuando se le escape alguna por error, se corregirá.

Habilidades: astucia, nociones de lucha y puntería (ambas con armas de caza).

Pasado: cazadora en su ciudad natal del norte, siempre dio indicios de no participar de muchas ideas impuestas por el Coro y su estricta religión. Era eficiente en sus labores, pero no terminaba de encajar. Directamente, no encajaba porque no gustaba de participar en los cantos diarios obligatorios, aunque lo hacía por su propio bien. O al menos lo hizo hasta que todo cambió. Era hija de una familia muy religiosa, y eso solo puede acabar de dos formas: o que los descendientes sigan la tradición religiosa o que rompan con ella. Melodía intentó mantenerse en equilibrio entre ambas tendencias, por su propio bien, hasta que todo cambió.

Un día, varios cazadores fueron acusados de herejía tras volver de una expedición en la que ella había participado. Muchos se desentendieron del asunto y volvieron a sus tareas mientras empezaban a criticar el comportamiento de los apresados, mientras que Melodía se interesó por lo sucedido e intentó no separarse de la comitiva, pero acabaron obligándole a alejarse. No pasaron apenas unos días cuando, en otra expedición, una paisana le salió al paso. Por su culpa perdió su pieza, pero gracias a ella todo cambió. Le ayudó a terminar la cacería y luego conversaron sin volver a la ciudad, lejos de miradas inoportunas. Resultó que su nueva amiga, Sinrastro, era exploradora de Tierra-Bruja y se había unido a las comunidades de roquenses que allí habitaban después de que un familiar suyo revelara su homosexualidad, y en lugar de elegir la muerte o ingresar en los Gemidos, se fugó. Colaboraba con varios grupos que se dedicaban a liberar presos “herejes” en las ciudades controladas por el Coro. Le contó varias de las cosas que hacían y cómo funcionaban, todo resumido, y Melodía se apuntó sin pensarlo. De no haberlo hecho, Sinrastro habría tenido que silenciarle, pero eso nuestra roquense no lo sabe. Después de ese día, Sinrastro y Melodía mantuvieron el contacto y colaboraron, la una oculta más allá de la frontera y la otra metida en el meollo de la ciudad. Aprovechando sus expediciones de caza, a veces fingía perderse, y otras veces las cacerías se alargaban por varios días por el clima... y por sus encuentros en Tierra-Bruja. Quien sospechase algo de sus largas ausencias pronto lo olvidaba al ver el montante de piezas que Melodía traía a su vuelta. Realmente, lo que sucedía era que los de Tierra-Bruja cazaban por separado y con ella como parte de su entrenamiento “militar” y le ofrecían piezas para que tuviera coartada al volver... Y, mientras, le instruían en el arte de la mentira y en sus formas de sacar gente de las ciudades. Con el tiempo, hicieron de ella una infiltrada bastante capaz. Además, gozaba de buena reputación entre su gremio, lo que evitaba cualquier posible sospecha. Tuvo que cambiar de deseo, ¡pues habría sido absurdo mantener el que le habían puesto sus padres dadas las circunstancias! En Tierra-Bruja, su gente le llamaba Sinceridad. Con ellos al menos lo era.

Otros: lo que más le gusta de la caza es meterse de lleno en la naturaleza y valerse por sí misma (o confiar en su equipo en caso de ser expedición conjunta). Rastrear y perseguir a su presa con la habilidad y el sigilo necesarios, ocultar sus propias huellas y rastros, orientarse por el terreno e incluso construir refugios temporales para las largas cacerías. Cuando tiene tiempo libre o cuando está de descanso en Tierra-Bruja, se acerca a los chamanes que se lo permiten para observarles, atenderles e incluso preguntar qué hacen, de nuevo si se lo permiten, con curiosidad. Todo el asunto de los hechizos le atrae bastante y el monopolio del Coro sobre la magia es lo que más rabia le da. Entre eso y su gusto por la caza, no sería difícil convencerla de ir a Rocavarancolia.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Eitne

Especie: daeliciano de las aldeas independientes.

Descripción física: 7 años, apariencia de unos 10 terrestres. Mide 1.34 y está bastante gordito. Al ser de los poblados, su piel es de un tono morado muy oscuro (Algo más oscuro que esto). Tiene los ojos de color rosa algodón de azúcar, muy grandes y expresivos. Su cara es redondita y tiene unos mofletes particularmente prominentes. Su pelo es de color azul claro, muy rizado y algo largo, llegando a taparle el cuello. Cruza el portal con toda su melena recogida en un quiqui en lo alto de la cabeza y una corona de flores.

Personalidad:Muy influenciable. Se muestra tímido hasta que coge confianza con la gente y le sale el extrovertido que lleva dentro. Concibe el mundo de forma muy sencilla, con ideas de cartón. Es muy muy muy nervioso. Y muy miedoso. Y muy llorica. Tiene problemas para afrontar todo lo que se sale de su zona de confort, la cual es sorprendentemente pequeña. Esto le lleva a frustrarse y enfurruñarse con facilidad, pero a pesar de todo es un niño que aprende y se corrige rápido. Tiene mucha imaginación y la desarrolla en relación a la religión: se cuestiona la apariencia de las cosas que le rodea en el mundo del demiurgo. Tiene mucha autoestima, se siente a gusto tanto con su cuerpo como con sus aptitudes.

Habilidades: memoria, orientación y habilidad mental.

Pasado:Nació en una de las aldeas más pequeñas, nieto por parte de madre de una de las brujas dulces. Sus padres carecen de magia y suelen trabajar en la zona de siembra. Tuvo (ha tenido) una infancia tranquila, sin sorpresas de mal gusto ni sucesos trágicos que le marcaran. Era amigo de un par de muchachillos de edades similares a la suya con los que solía organizar peleas de bolas de barro. Disfrutaba ayudando a su abuela con la decoración durante las fiestas y fue durante la preparación de una de ellas cuando le cosecharon. Dama Puntada se le presentó en una pausa que Eitne se había tomado para hacer pipí, mientras pintaban un monolito en el bosque cercano al poblado.

Otros:
—Viste un peto verde de pata corta con estampados de flores y una camiseta de tirantes de color amarillo pastel con nubes naranjas dibujadas en el pecho. Sus calcetines son de rayitas de colores y va calzado con unas zapatillas muy simples de lona, cubiertas de dibujos de frutas con carita superpuestas entre ellas. El diseño es diferente para cada pie. Los cordones tienen el aspecto de regalices.
—El peto tiene un bolsillo pequeño en el que guarda un pintauñas comestible de color amarillo limón y un juego de canicas.
—En el brazo izquierdo lleva varias pulseras hechas con paja de un naranja pastel, bastante suave. Están entrelazadas entre sí.
—Cuando se pone nervioso, suda mucho y se come las uñas.
—Le encanta pringarse y adora que le monten a lomo del ganado.
—Es tartamudo.
—Va por su segunda modificación corporal: la primera es un tatuaje en el brazo derecho que simula varias manchas de acuarela (más o menos así) y el segundo es un pendiente en la oreja derecha, con la apariencia de una rama atravesándole el lóbulo, de la cual cuelga un racimo de uvas diminuto, tallado en madera. Ambos son regalos de su abuela.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Zobriel

Especie: Nublino

Descripción física:  Zob mide un metro y cincuenta y dos centímetros. Tiene 16 años y es de constitución delgada, el cabello le llega a la altura del hombro, es lacio y de tonalidad gris oscuro con dos mechones blancos en el lado derecho, uno de estos mechones lo lleva siempre atado con algo en la parte final. Tiene la piel de color gris oscuro en contraste con el gris bastante claro de sus ojos, su mirada es directa pero no amenazante. no es atlético, de ningún modo, pero tiene bastante resistencia debido a sus trabajos diarios de pastoreo. Posee una pequeña cicatriz detrás de la oreja izquierda.

Personalidad: Es un chico calmado, jamas se inmiscuye en conversaciones ajenas pero siempre esta atento a las cosas que se dicen alrededor suyo. Detesta  las discusiones y la bulla ensordecedora. Es muy cortés con la gente, incluso con la que no se lleva bien con el, tarda mucho en enojarse en serio con alguien y no recuerda haberlo hecho nunca. Le gusta ver las lunas de su planeta en las noches y disfruta también las estrellas, practica que sus padres jamas pudieron corregirla. A pesar suyo siente mucha emoción por su llegada a Rocavarancolia, aunque,  siempre en conflicto, no sabe que pensar del futuro que le espera. Zob es atento y aunque algo reservado ayuda en la medida de sus posibilidades.

Habilidades:  Buen oído, lealtad,rapidez.

Pasado:  Zobriel fue un hijo mas dentro de una familia rural, un tanto lejos de la ciudad pero aun así altamente ilusionada con Rocavarancolia. Cuando nació, su abuela le dio un nombre que el aun no sabe si es suyo, o perteneció a algún miembro que "fallo" en la ciudad. Su abuela mas que entusiasta, era fanática, y alentaba a  todos y cada uno de los nietos de su casa a tratar de ser dignos de Rocavarancolia. Nadie sabe, o al menos nadie quiso decirle, porque  ella consideraba tanto a la ciudad roja, el caso es que desde los 5 años no paro de decirle que su máxima aspiración debería  ser convertirse en un ángel mas de la ciudad. Obedientemente el fue un buen niño, pero a medida que paso el tiempo, primos y primas sufrían el mismo trato apremiante, lo que lo llevo a dudar de el cariño de su abuela, para él, era mas bien como una granja de posibles candidatos, con los que ella se sentiría superior a otras familias, aunque jamas menciono nada de esto a nadie. Con los eventos desatados en Varanublagalago, los cuchicheos de los Fuy tuvieron una rendija por donde entrar, y todas las creencias de su niñez tambalearon. La presión se hizo mas fuerte día a día, al punto de que él empezo a recluirse de su familia un tanto. Con la llegada de la cosecha, lo enviaron a el y los demás niños de la casa a la ciudad. Una ves allí entre tanta gente y algarabía Zob empezó a desear de verdad ser digno de ir a Rocavarancolia, quizá para probarle a su abuela que no era una mera mercancía, o quizá para llegar a ser mas de lo que es y no sentirse una mercadería. Aunque tenia miedo de convertirse en demonio, como decían los lejanos Fuy, acepto de inmediato ir cuando vio la majestad de la cosechadora, emocionado anheló mas que nunca ser elegido, quizá por parte de su condicionamiento de niño, para ir a la ciudad que poblaba sus sueños y pesadillas.

Otros: Llega a la ciudad con un poncho café, con dos rayas verdes verticales en el centro y debajo una camisa de lana crema con 4 esferas rojas en la parte delantera del cuello. los pantalones también son de tonalidad crema aunque mas oscura.

Spoiler:

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Personaje: Nadzieja Sikorski.

Especie: Homo Sapiens de Bruselas (Bélgica) en la tierra.

Descripción física: Nadzieja es una niña de 10 años que mide un metro treinta más o menos. Tiene el pelo naranja, lacio y muy estropeado. Su rostro es redondeado y con unos ojos  almendrados de un color marrón muy oscuro y con una nariz pequeña y algo puntiaguda. Su cuerpo es delgaducho aunque aún conserva la barriguita de bebé, además está salpicado de pecas pero sobre todo en la cara y en la zona de los brazos y hombros. Lo que menos le gusta de su cuerpo son sus orejas de soplillo las cuales tapa con su abundante cabellera. Suele ir vestida con ropa que le queda grande, siendo los ponchos sus prendas favoritas.

Personalidad: Pesimista y muchas veces tremendista. Extremadamente cobarde, se asusta de casi todo. Es una persona muy poco empática, le han enseñado a despreciar y evitar la “debilidad” por lo que muchas veces se siente incómoda o molesta con los otros, también tiene muchos conflictos internos a causa de esto pues es una niña muy llorona y se siente avergonzada y humillada por su propia actitud. Es una niña muy educada aunque algo brusca en las formas. No suele decir lo que realmente piensa, suele hablar con medias verdades con tal de no dar su opinión real o información sobre sí misma, entiende que mentir está mal pero no le importa hacerlo de vez en cuando si eso la ayuda en sus propósitos (ya sea divertirse, conseguir algo, etc.). Y puede que no le guste dar su opinión ni hablar de ella misma pero, cuando los temas de conversaciones salen de ese ámbito puede llegar a mostrarse hasta entusiasmada. Nadzieja es mezquina en muchas de sus acciones sin pretenderlo, viendo bromas inocentes en pequeñas crueldades. Gusta de reír y sonreír mucho, a pesar de que ella misma no es ni muy alegre ni graciosa (los chistes malos son los únicos que se sabe). Es bastante tranquila en general, prefiere jugar sola pero no estar sola puesto le da miedo. Es activa en lo que le interesa pero si la actividad o parte de ella no le interesa se puede volver muy vaga y caprichosa. Y es desconfiada con prácticamente todo.

Habilidades: Resistencia, oído musical e imaginación.

Pasado: Nadzieja es la segunda hija del matrimonio Sikorski. Nació en Bruselas y nunca ha salido de la ciudad más que para ir a pequeñas excursiones. Su familia es tradicionalmente católica, de clase media y está compuesta por 5 miembros: los padres y los 3 hijos entre los que Nad se incluye. Su padre es de origen polaco mientras que su madre es belga. Su hermana mayor Celine tiene 12 años, ella tiene 10 y su hermano pequeño Thomas tiene 5 años. Su madre les dio una educación muy estricta a todos sus hijos (no a nivel escolar sino a nivel conductual) mientras que su padre se desentendió de ellos la mayoría del tiempo sólo dedicándoselo en ocasiones muy puntuales. Los padres nunca esperaron de sus hijos ni las mejores notas ni una obediencia ciega, solo buscaban que estuviesen bien educados. Por otra parte fomentaron la paciencia y el aguante a las críticas y a las malas situaciones, pues consideraban que la vida era dura y que nada era fácil por lo que quejarse y llorar no era ni bueno ni adecuado, por lo que su padre solía tender a humillarlos en esas situaciones. En la casa se había establecido una extraña competencia por ser lo que los padres esperaban de ellos. Por lo que Nadzieja siempre ha tenido muchas peleas con su hermana mayor Celine. por el contrario con el pequeño Thomas siempre se ha llevado bien y le tiene un cariño especial, pues además de no esperar de ella nada más que compañía, es el único de la familia (aparte de ella) que tiene el pelo naranja (ya que su padre es castaño y tanto su madre como su hermana son rubias).

Otros:
-Ha llegado a la ciudad con un pijama largo de dos piezas de Frozen azul celeste y unos calcetines naranjas con topos verdes.
-Nadie la llama por su nombre completo, hay diferentes variantes: Nad, Nadzia, Nadja, Nadia, Nat…
-Canta bastante bien pero no suele hacerlo.
-Es muy caprichosa con la comida.
-Tiene un don natural para estropear el noble arte culinario.
-Le encantan los calcetines estrambóticos.

Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.

Nadzieja:

Personaje: Rigel (Siete)

Especie: Idrina (costa)

Descripción física: Rigel ronda el metro setenta y tiene un aire aniñado. Es delgado, puede que de más, tiene los ojos grandes y pestañas abundantes. El pelo apenas empieza a cubrirle las orejas. Sobre la nariz tiene algunas motas más claras, igual que en los hombros. De lejos uno no distingue el pequeño glifo que forma la cicatriz en su brazo, en forma de siete (numeración idrina).  
Rigel no tiene el color del agua en los ojos, ni la calidez de los amarillos ambarinos. Sus iris están en el limite entre el amarillo y el verde.  
(this)

Llega con dieciocho años, vestido con pantalones pesqueros azul marino, sandalias de cuero y una camisa blanca.
Personalidad: Honesto como corresponde a un idrino costero, Rigel no consigue ser estoico ni valiente y lo disimula callandose. Por supuesto, el silencio no significa que la gente no lea su cobardía antes o después, y él a cambio percibe el desdén y la decepción que provoca su falta de carácter. No es de susto fácil y es muy poco quisquilloso pero lidia mal con las emociones ajenas y con involucrarse en temas delicados. Hace lo que puede por superarse.

Habilidades:
oido musical, reflejos, orientación
Pasado:
Rigel era parte de los que asistían a las clases al final de la jornada, a pesar de no tener una ambición definida ni unas dotes sobresalientes. Más mayor hizo un par de viajes al interior a cambio de cargarse de trabajo. Encuentra agradable la cortesía disimulada de los lacustres aunque no encaja en absoluto entre ellos.
Otros:
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Un puñal hecho de sueños para acabar con las pesadillas.