F.O.N.E.R.A.

Sin perder un segundo Shizel le relató al cambiante, muy entusiasmado, todas las cosas exóticas (para él, al menos) que había podido vislumbrar en la mente de los foner extracúpula. Ver la naturaleza estaba muy bien, pero lo que verdaderamente fascinaba al idrino de los nuevos mundos vinculados era la gente. El mentalismo junto a los hechizos de camuflaje le habían entregado un regalo valiosísimo: poder mezclarse entre la multitud y aprender de ella.

El skrýmir empezó a caminar en el aire cuando estuvieron a una distancia corta de los saurópodos. Miró a DL.
-¿Sabes crearte alas?- le preguntó, mirándole expectante la espalda como si esperara que le creciesen ipso facto. Sólo le había visto usar hechizos de levitación hasta el momento, pero podía deberse a que simplemente no le había visto nunca practicando esos apéndices.
-No creo que se dén cuenta. Un corte debe ser como si les picara un mosquito- observó según ascendía-. Pero mejor hacerlo lejos de las patas por si acaso.

No hubo incidentes con la recogida de muestras de por sí, pero pasado un tiempo Shizel advirtió la presencia de los terópodos que acechaban en la espesura. Ni se molestó en señalárselos a DL, dado que suponía que ya los había detectado antes.
-Sería prudente irse.

Toda la explicación de Shizel lejos de aburrirle le entusiasmo, era igual que si le estuviese hablando de los habitantes de un mundo ajeno al suyo y por tanto para DL resultaba igual de interesante que cuando le hablaba sobre Idris, por ejemplo. Tras tomar muestras que guardo cuidadosamente en su bolsa de las plantas no carnivoras de alrededor, levito hacia el lomo del sauropodo para tomar muestras de su sangre, escuchando curioso la pregunta que le hizo Shizel y que miro a su espalda como esperando que las alas salieran por ciencia infusa. Aquello le hizo bastante gracia.

-Puedo si, aunque no intente volar con ellas, no es tan fácil como se pinta eh...hasta una cola es mas fácil de mover que las alas. Tal vez algún día de estos le pida alguna clasecita de vuelo a alguien con alas y que no me patee mucho por ello-añadió con cierto humor, no se había puesto ene ello pero algún día lo haría-Ese día me asegurare de que no andes cerca...- añadió DL con cierto humor, pues sabia que el día que intentase volar su dieta seria principalmente de tierra.

A pesar de la conversación y de que su atención estaba muestra en la recogida de muestras, sus sentidos estaban percatándose de los alrededor. El tener un cerebro con cavidad suficiente para estar en varias cosas a la vez ayudaba a eso. Escucho el movimiento de hojas pero no le dio importancia hasta que noto que se acercaban, pasos de alguna criatura de un tamaño considerable. Eso en fonera abarcaba un gran numero de especies. Cuando DL informo poco después que debía marcharse DL guardo las muestras que había tomado y le observo.

-Voy a acercarme y tomar muestras, están pendientes probablemente de las crías, nosotros en comparación somos únicamente un aperitivo sin importancia. Por si acaso aléjate de los adultos, si notan la presencia de estos se pondrán nerviosos. -añadió DL alejándose de Shizel levitando mientras modificaba  su cuerpo piel, ropa y todo lo que le cubría para tomar la tonalidad verdosa del las plantas de alrededor. Elimino su olor para que los reptiles no pudieran olfatearlo, del ruido no tenia que preocuparse, dado que su ropa formaba parte de su propio cuerpo y esta no hacia el menor ruido. Se acerco lentamente primero tentando el terreno por si era capaz de notarle, pero no era el caso por lo que camuflándose se acerco a uno de los enormes reptiles que estaba mas avanzado, de los cinco que podían ver, levitando cerca de su lomo.

Tras eso y con cuidado hizo un leve corte en su lomo, cerca de la cresta de su espalda, para tomar las muestras de sangre, acariciándolo de forma superficial mientras cortaba apenas la piel rugosa, tan leve como el roce de una hoja. ¿Estaba asustado? No, no realmente, eran reptiles...grandes pero simples reptiles, no tenían magia, ni protección contra esta, nada de lo que pudiera encontrarse en Rocavarancolia. Aun así fue prudente y conciso, eran depredadores peligrosos al fin de cuentas, perfectos ejemplares de una maquina de matar. "Resulta un poco increíble encontrarme cerca de esta bicho mientras sigue vivo y vigilante" dejo el pensamiento en su cabeza para Shizel así como una imagen del reptil al que estaba viendo en esos momentos.

-Jo, ¿por qué?- se quejó por vicio cuando DL le aseguró de que las prácticas de vuelo serían fuera de su vista. En realidad lo comprendía perfectamente, y no insistiría por educación.

Shizel se tensó instintivamente cuando el foner se acercó a los depredadores, pero para su sorpresa éstos no hicieron ademán de atacarle. No sabía qué había hecho exactamente, pero a veces podía subestimarse lo versátil de un cambiante. Sin embargo el skrýmir no se relajó hasta que su amigo volvió a su lado. No quiso contactar telepáticamente con él mientras, para evitar desconcentrarle por todos los medios.
-Ya van dos muestras inesperadas- comentó mientras volvían a ponerse en camino-. Por lo demás no lo sé, pero en el frente de los animales seguramente tengas a Giz contento.

Se adentraron en el bosque, y en cierto punto decidieron seguir el curso de un riachuelo: cerca de él habría tanto vegetación como animales, y por tanto más posibilidades de encontrar lo que buscaban. Se detuvieron al llegar a su origen: una cascada, o lo que a ojos de Shizel era la pobre imitación de una.
Aunque vigorosa, el agua parecía insalubre de alguna manera. Quizá a ojos de un observador neutro no, pero a ojos de un idrino, acostumbrado a ríos y lagos límpidos y cristalinos, ofrecía una imagen lamentable.
-Mmm- no hizo ningún comentario y examinó los alrededores, pensativo-. ¿Quieres recoger algo aquí, o remontamos río arriba?
Shizel no era un naturalista ni una persona de campo: era un niño de ciudad de la cabeza a los pies. Escudriñar la vegetación le aburría, de modo que si DL decidía recoger muestras se quedaría esperando desidiosamente, con los brazos cruzados.

Tras terminar DL volvió junto con Shizel sin olvidarse de las ultimas  palabras dichas por el idrino antes de que se fuera por las muestras, recuperando su tonalidad del cuerpo normal mientras hablaba

-En cuanto a lo de antes...Créeme, no querrías verme perder el poco orgullo que me queda-añadió DL con humor al notar su queja, cosa que no le molesto en realidad-Aunque cuando aprenda puedo darte un paseo, sin necesidad de levitación- añadió mirándolo con buen humor y cierta malicia, pues eso significaría que Shizel tendría que darle un voto de confianza y no usar la magia. Tras decir aquello dió el visto bueno a cambiar de lugar, antes de que los depredadores decidieran ir a por su almuerzo.

Decidieron adentrarse en el bosque, de cierto espesor y un poco agobiante, la presencia del rió fue una bendición para DL aunque el no pondría la mano en el fuego, o en este caso en el agua por la pureza de sus aguas. Su experiencia con ríos no era buena, y aunque escasa, el hecho de que este corriera a gran velocidad no ayudaba tampoco demasiado. Quitando eso y la cascada que si que llamo su atención, la vegetación de ese lugar era un tanto diferente a la de la espesura del bosque, podía ver la presencia del mugo y de algunos tipos de hongos adheridos a la rocas cercanas por la humedad.

-Te estas aburriendo a rabiar, siento esto...debí asegurarme de que no cayésemos tan lejos de la cúpula-dijo DL afirmando mas que preguntando, mientras cortaba uno de los hongos y metiendolo en la bolsa sin tocarlo, ante la posibilidad de que fuese venenoso, que no seria raro en su mundo-Tal vez no sea prudente, pero...echar un vistazo no dañara ¿envías un pulso por si notas seres inteligentes cerca? Se que hay savras que viven en el bosque -añadió tomando las muestras del musgo de las rocas y poniendo atención a mas que el ruido del río. Estaban bastante descubiertos y eso quisiera o no le tensaba.

Shizel no supo si sentirse ilusionado, desconfiado o ambas cosas a la vez ante la oferta futura de que DL le diese una vuelta. Lo más probable sería que en ese momento tuviera un hechizo levitatorio en la punta de la lengua, por si acaso. Se fiaba de su amigo, pero eso tampoco era razón para correr riesgos.

El skrýmir se preguntó si algo en su postura le había traicionado o si DL ya le conocía lo bastante como para saber que se aburría con facilidad.
-No, no- la educación le requería negarlo, sin embargo-. Sabía a lo que venía cuando acepté acompañarte. No me esperaba una feria.
Asintió cuando el foner le pidió localizar posibles presencias con un pulso telepático. Con la mirada fija en ninguna parte repitió el procedimiento que llevaba haciendo periódicamente desde que habían llegado, y para su sorpresa aquella vez la respuesta fue afirmativa.
-Vaya- murmuró sin darse cuenta, escudriñando las mentes de los savra, pasando las páginas de su conciencia superficial para hojear, aunque sin la ayuda del lenguaje, los motivos que subyacían al conflicto.

Cuando terminó dio un silbido admirativo.
-Menos mal que no remontamos la cascada inmediatamente- le refirió a continuación a DL la información que había obtenido. Al final se quedó indeciso: ardía de curiosidad por echar un vistazo, máxime cuando había dominado previamente hechizos de camuflaje, pero era una parada injustificada en su viaje y no debería proponerla. Se removió en el sitio, inquieto.

A pesar de que Shizel dijera que no a lo de aburrirse, no se lo creía, tal vez no fuese un idrino con la capacidad de ver en los gestos pero algo había prendido de Shizel de tanto tiempo de convivencia, eso y que la luna le había dado un buen don como observador. No insistió mas en eso.

Su atención no fue tomada de nuevo hasta que Shizel dio muestras de haber notado algo, tras recoger las muestras de esa zona e incorporarse le miro con curiosidad ante lo que sea que pudiera estar viendo a través del pulso telepático.

-Veo que pareces haber encontrado algo- murmuro esperando que la mente del idrino volviera y le explicara lo que había podido notar en las mentes ajenas. La descripción dado por el skrymir le dio una imagen bastante claro de lo que ocurría y de las dos especies que se estaban enfrentando- Los que tiene ese caparazón son Carcha y los otros son Macar, aunque no sabría decirte si difieren mucho de los que conocí en la cúpula.- añadió viendo a Shizel inmerso en sus pensamientos. El motivo de que esas dos tribus pudieran enfrentarse le resultaba completamente extraño...había visto convivir  a estos con cierto nivel de respeto en la cúpula, imaginarlos enfrentándose le resultaba un poco sorpresivo. Como si estuvieran en plena etapa salvaje.

Sea como fuese, aquello era un regalo, si conseguía acercarse lo suficiente obtendría muestras de ambas razas y de paso averiguaría un poco mas de como vivían los savras en ese ambiente tan extraño para el. No le importaba cambiar un poco el rumbo de sus planes, iba a conseguir algo jugoso de todos modos si lo hacia bien.

-Vayamos a ver, estarán lo suficiente distraídos en darse golpes que ni nos prestaran atención. - añadió no sin cierta impaciencia, agarrándolo de la mano para llevárselo hacia la espesura cercana al rió para hacer un pequeño rodeo y no darse de bruces contra el enfrentamiento. Cuando ya empezó a escuchar los gritos y gruñidos, en un idioma que una vez fue medianamente comprensible, cambio la tonalidad de su piel camuflándose con el color verdoso de los arbustos que los rodeaban.

Shizel sonrió como un crío cuando los planes de DL coincidieron con su capricho de querer ver qué pasaba. Siguió al foner, soltándose con delicadeza de su mano en cuanto vio una oportunidad de hacerlo sin parecer forzado, y cuando llegaron a la linde del claro usó un hechizo de tiniebla para camuflarse en una parte particularmente frondosa del bosque. Esperó, expectante, a ver cómo se desarrollaba el curso de los acontecimientos.

Al llegar la trifulca había dado fin, el resultado era la carcha como vencedores y el grupo de macar que había sobrevivido huyendo. De alguna forma era de esperar, los carcha poseía aquel caparazón que casi les servia de armadura, su desventaja radicaba mas en su lentitud abismal en comparación a los otros reptiles. DL se mantuvo entre los arbustos hasta ver como Carcha se alejaban llevando consigo a los dos puertos de su grupo y el premio, dejando atrás los cuerpos de los Macar asesinados.

No fue hasta que DL se aseguro que estaba a cierta distancia que salio de entre los arbustos, acercándose al cuerpo de unos de los Macar, acuclillándose a su lado para observarlo atentamente. A pesar de saber que era seres inteligentes, con capacidad de sentir y hablar, en aquellos momentos, ya muertos como estaban, no podía verlos como algo mas que otro reptil muerto. Lamentarse seria estúpido, allí ponderaba la ley del mas fuerte y ellos había perdido. No tenía mas.

-Mataros les saldrá caro a esos pocos Carcha- murmuro para si pensativo, sabiendo de la lentitud de estos y de la fiereza de los Macar cuando se agrupaban. Por ello y haciéndose a la idea de que irían por sus muertos, tomo muestras de la sangre y piel del reptil, guardándolo en su bolsa agudizando su oído para notar si volvían por los cuerpos- Shizel, los Macar seguramente atacaran de nuevo...son así de cabezotas. Podemos seguir a los Carcha, seguramente habrá una pelea mas adelante. ¿Que opinas? Tal vez podamos llegar a su aldea - pregunto al tiempo que se levantaba tras tomar todas las muestras posible de un par de reptiles. Esperaba que Giz no tuviese necesidad de muestras de seres vivos para ello, aun así se asegurar de hechizar las muestras para conservarla frescas.

Cuando no hubo moros en la costa Shizel comandó a las tinieblas que se dispusiesen girando en círculo en torno a sus pies, como jirones de bruma, no queriendo disiparlas aún para ahorrar energías si se veía obligado a volver a conjurarlas. Debía admitir que el efecto era estéticamente muy satisfactorio.

Rastreó las mentes de los carchas que se retiraban, y en ellas halló imágenes más o menos vívidas de lo que esperaban que llegase al claro, aunque sin saber su idioma le era imposible obtener más información.
-Si hay un buen momento para recoger muestras, es ahora- informó a DL. No le siguió para recoger las muestras, prefiriendo quedarse en la espesura y vigilar. Podían ser todo lo rocavarancoleses que quisieran, pero un flechazo en la cabeza o en el corazón podía matarles de la forma más tonta, lo que le recordó aplicarse una protección física.

Desde allí observó con expresión apática los cadáveres de los savra. Para no dejarse impresionar por aquella escena ayudaba mucho el que le recordasen más a algunos monstruos a los que se había enfrentado en Rocavarancolia que a lo que él consideraba por defecto como gente. Aún así no tenía por qué mirar la carnicería más de lo necesario, y así pues desvió consecuentemente la mirada hacia otro lado.

-Todo lo que sea observar me parece bien- dijo con llaneza cuando el foner preguntó-. Mientras no suponga desviarse de tu objetivo, claro. No sería conveniente olvidarse de lo que hemos venido a hacer aquí.

Volvió a reunirse con el skrymir alejándose de los cuerpos al empezar a escuchar el movimiento de hojas ala distancia pero acercándose a ellos.

-Mi objetivo eran las muestras y ya las estoy tomando. Es mas, tengo bastante mas de las que esperaba conseguir-admitió el cambiante acercándose a el y alejándose entre los arbustos para seguir el rastro de los carcha- Te invite a venir y solo hemos estado de vagabundeo, veamos si encontramos el poblado Carcha, yo tampoco se como viven y aunque no entendamos ni media de lo que dicen supongo que algo sacaremos ¿O prefieres volver ya?- pregunto mirando a Shizel mientras avanzaban, pues no estaba seguro sino estaría ya cansado de corretear por todo el bosque. Ademas, tal vez fuesen imaginaciones suyas, pero parecía empezar a notar cada vez menos luz colándose entre los arboles. No le hacia especial gracia que se hiciera de noche en aquel lugar.

-No estoy seguro de los Carchas tienen llamas, pero podemos ir a ver, si consigo la muestra de estas ya podríamos irnos- añadió el cambiante mientras ojeaba con distracción las copas de los arboles por encima de sus cabezas, altas a rabiar. Notaba movimiento allí arriba, o mas concretamente lo escuchaba. Eran chasquidos, chasquidos intermitentes  como el de dientes o pinzas, de origen que prefería no averiguar- Y movámonos de aquí, creo que los cadáveres atrajeron a algo mas que a sus congéneres vivos- añadió mirando al skrymir con aprensión avanzando con mayor rapidez del lugar mientras se colocaba un protección encima.

-De acuerdo entonces- murmuró Shizel, y envió un pulso mental en la dirección por la que se habían marchado los carchas. Si los macar terminaban por alcanzarles, rastrearía en sus mentes la localización aproximada de la aldea.

Siguieron sus pasos, y con el tiempo llegaron al poblado de la tribu. Se mantuvieron en las afueras de éste, con precaución. El skrýmir hizo uso de niebla mágica para asegurarse de que nadie doblaba la esquina de la casa tras la que estaban ocultos.
-Ahora es el momento justo: estarán distraídos con el cadáver de ese... lo que sea- dijo Shizel echando expectante un vistazo a los alrededores, volviendo a dejar que las tinieblas le envolvieran por completo, convirtiéndole prácticamente en invisible-. Y después llegarán los macar a armar estropicio. Si puedes imitar a alguno de los carcha puedes hacerte pasar por... no sé si aquí tienen mozos de cuadra- terminó un poco dubitativo- y tomar tus muestras. Ve. Yo te espero aquí.
Era curiosa la seguridad en uno mismo que granjeaba la magia. Su tranquilidad ante la perspectiva de que lo descubriesen era genuina.

La llegada al poblado transcurrió sin problemas, aunque empezaba oscurecer DL tan solo tenia que cambiar su visión para adaptarla mejor a la reducción de luz. Shizel se aseguro que nadie se acercara a donde se habían escondido antes de que DL decidiera el curso de acción.

-Transformarme en carcha seria la ultima opción, si me viesen y me hablaran estaría en problemas - añadió DL ante la opción dada por el skrymir, mientras intentaba eliminar todo olor que pudiera transmitir su cuerpo- Ten cuidado de que te huelan- le aviso al skrymir antes de escabullirse por la parte de atrás de la casa, activando la runa con el hechizo de tinieblas que llevaba en el antebrazo izquierdo, cubriéndose con esta como si fuese una armadura para poder así moverse entre las casas, volviéndose igual de invisible que el propio skrymir. Aprovechando aquello se movió con agilidad por entre las casas, agudizando su olfato para buscar algún olor que fuese diferente al del cadáver traído por los carcha y de los propios carcha. El poblado no era excesivamente grande, pero dado el tamaño de los carcha, sus casas no eran precisamente pequeñitas en tamaño y moverse por la aldea aprecia mas difícil al intentar no dejarse oír, pues no podía ser visto u olido.

En un par de ocasiones estuvo a punto de toparse con un pequeño niño carcha y una hembra, pero consiguió tomar el camino de los arbustos tras una de las casas, encontrando por fin el lugar donde tenían atadas a un pequeño grupo de llamas. Suspirando aliviado se acerco a los peludos animales que parecieron oírle pues levantaron de golpe sus cabezas y movieron sus orejas en su dirección. "Joder, que oído tienen" se dijo al ver que acercarse iba a ser un problema. Si le oían se pondrían nerviosos y llamarían la atención de sus cuidadores, que aunque no estaban a la vista, no debían estar muy lejos.

No le quedo otra que esperar a que se calmaran antes de poder acercarse, ahora si asegurándose de no hacer ruido. No seria igual que cuando saco las muestras de los reptiles, los mamíferos eran mas sensitivos, y ya ni de los herviboros que siempre estaban en alerta permanente. Por lo que cuando estuvo lo suficientemente cerca de una de las llamas, lanzo un hechizo de parálisis para que no se moviera y así poder coger muestras de su sangre y pelo sin que se pusiera inquieta. No tardo demasiado y en cuanto termino  de guardar las muestras a buen recaudo, la libero del hechizo viendo como el animal trastabillaba para alejarse, al no saber que le había pasado.

DL no se quedo a ver si eso llamaba la atención de sus cuidadores, se fue por donde había venido para volver a encontrarse con Shizel. El aire traía el ruido de pisadas y olor ya conocido que no mucho antes había tenido al alcance de su mano. Los macar venían a por mas y ellos debían irse de allí antes de encontrarse en medio de la pelea en plena noche.

"Shizel, los macar se acercan y parecen ser bastantes" advirtió al idrino esperando que este pudiera verlo y se alejara de la aldea. Encontrarlo para el no seria un problema.

Shizel había pretendido esperar pacientemente, de verdad. Pero desde aquel sitio no conseguía ver nada, y la niebla mágica obviaba detalles como la luz ambiental y para qué mentir, era más aburrida que explorar por uno mismo.
"Sólo será un momento", se prometió a sí mismo cuando se deslizó fuera de su lugar de espera a un nuevo hueco entre casas, y de ahí a otro y otro y otro más hasta que se descubrió recorriendo la aldea entera oculto bajo su camuflaje de sombras. "Enseguida estoy de vuelta y DL ni se dará cuenta."

El skrýmir se lo tomó como el juego que no era: era divertido jugar al escondite con los savra, buscar huecos donde ocultarse cuando miraban en su dirección y colarse rápidamente calle abajo en el momento justo. Aunque no entendía lo que decían, le resultó fascinante ver más de cerca cómo vivían, y con el entusiasmo se le fue el tiempo. Llegado un momento Shizel envió un pulso telepático para localizar dónde estaba DL, y se llevó un susto cuando vio que estaba en su punto de encuentro original. Le faltó tiempo para llegar allí a toda prisa, maldiciendo mentalmente.
-¿Nos vamos entonces?- preguntó cuando llegó con la sonrisa de quien no ha roto un plato. Esperaba que el foner no hubiese llegado a percatarse de su ausencia.

Al llegar al punto donde había dejado a Shizel y no verlo se inquieto, debían marcharse ya pues los Macar se acercaban con rapidez. Por un momento le vino la absurda idea de que alguno de los habitantes del pueblo se hubiese dado cuenta de su presencia, algo estúpido si lo pensaba con mas calma, ya que este llevaba el hechizo de tinieblas. Shizel se podía valer perfectamente solo pero la inquietud no se le fue hasta que no lo volvió a ver, sonriendo como si nada hubiese pasado. El alivio del cambiante fue evidente cuando suspiro.

-Sonara absurdo teniendo magia y eso, pero me he dado un buen susto al no verte aquí. Creía que te había pasado algo -admitió DL mirándolo con reproche mientras se alejaba de allí rápidamente, no quedaba mucho para que llegaran la otra tribu de savras. Suspirando miro al idrino por encima del hombro, tras el susto inicial solo podía pensar que las acciones del skrymir eran las propias de una travesura y aquello le hacía un poco de gracia-¿Descubriste algo interesante en tu pequeña aventura?- pregunto sonriendole divertido dándole a entender que si se había dado cuenta de su travesura, al tiempo que se alejaba del pueblo. Le gustase al idrino o no, le conocía bastante bien, puede que muchísimas cosas se le escapasen pues no era un idrino al fin y al cabo, pero el trato con este y lo que sentía por el le había hecho bastante mas observador a sus actitudes. Tuvieron que dar un rodeo para evitar a los Macar, pero aquello en vez de alejarlos termino acercándolo mas al inicio del bosque. Lo que se volvió mas molesto del camino de vuelta fueron las plantas y las raíces del suelo creadas para hacerles tropezar de un modo u otro. Lo primero que DL pudo admirar tras salir del bosque fue el cielo nocturno de su mundo Era mas impactante que el de Rocavrancolia, acostumbrado a casi la total negrura del cielo durante la mayoría del tiempo.

-Hoy ha sido la primera vez que veo el cielo de mi mundo sin la cúpula, tanto por el día como ahora, por la noche- murmuro DL admirativo y un poco incomodo por sus propias palabras, no es que tuviesen realmente mucho significado. Era mas sorpresa por la situación- Quien me diría que no estaría huyendo al tan solo verlo -añadió divertido como una broma interna recordando el desastre que fue cuando llego a Rocavarancolia.