Torreón Letargo (Archivo I)

Recuerdo del primer mensaje :

Llegamos a las afueras del torreón, que esta completamente cubierto de enredadera, a primera vista no se ve la puerta, así que me pongo a buscarla ...
-Ayudarme por favor - les pido a Elliot y a Gael - ...
Comienzo a golpear con la punta del bate suavemente sobre las enredaderas, esperando oír algo que no sea la madera golpeando contra la piedra bajo de las enredaderas ...

Nia se desilusionó un poco. Por un momento podia imaginarse la escena. Entrar en casa como si nada hubiera pasado...bueno,si. Gael habia pasado. Probablemente su padre le levantaria en volandas y le preguntaria a donde ha ido su pelo. Nia rio para sí misma, imaginandose la escena. Por un momento se preguntó si su hermano lo estaba haciendo bien en esa escuela privada del estado. ¿Como era su nombre? ¿Centro de deten... Bueno, daba igual. Su hermano se las podia apañar.
-Yo tambien quiero visitar tu casa algun día-dijo con un puchero. Se hizo el silencio y Gael lo rompio preguntandola a donde queria ir.
-Como quieras. Ahora mismo me da igual.-admitio. Siempre que pudiera pasar tiempo con él, le valia.

-Vamos a la terraza, ¡a ver las estrellas! -Tiro de ella escaleras arriba y al llegar el viento nocturno nos da en la cara, haciéndonos estremecer.
Noto que se me pone la piel de gallina y le digo a Nia que espere un momento. Bajo hasta la tercera planta entre pequeñas risitas y saco una manta de mi propia cama a tirones. Subo con cuidado de no tropezarme con ella, aunque la perspectiva me parece más bien graciosa, y al llegar le enseño la manta hecha una bola. La extiendo en el suelo y me siento casi en el centro pero en el borde. La invito a sentarse a mi lado con la mano y cuando lo hace cojo la esquina de la manta que queda más cerca y nos la echo encima. Ella hace lo mismo y quedamos cubiertos hasta los hombros. La miro y me río.
-Aquí se está muy bien. ¡Fíjate cuantísimas estrellas! Y antes ninguna. Ninguna, ¿lo puedes creer? -Hago una mueca-. Quién tendría la feliz idea... -me echo a reír me olvido del tema del que estaba hablando-. Bah, qué más da. ¿Puedes contarme cosas de tu casa, de tu... mundo o lo que sea? -Bostezo ruidosamente-. Debe de ser muy... divertido.
Se me entrecierran los ojos, no sé cómo puedo dormir tanto... pero dormir es bueno, y tranquilo, y reparador. Se me cae la cabeza a un lado y la apoyo en el hombro de Nia.
-Me encanta dormir -murmuro con los ojos cerrados y sin perder la sonrisa bobalicona.

-¡Las estrellas son divertidas! ¡Son como pequeñas bombillas, pero en el cielo! Pero...¿quien las encenderá?-se pregunta Nia, arrimandose todo lo que puede a Gael. Gael le pregunta por su casa, su planeta. Nia no sabe muy bien por donde empezar.
-Pues...hay mucho mar...Y cosas divertidas...¡Podemos hacer un picnic en la playa! Y no se...-ahora mismo tenia la cabeza un poco mal para pensar en que contarle. El bostezo se le contagia. Le entraba sueño cuando estaba tan junta a él. Podia notar su respiración y eso la calmaba. Arrima su cara a la suya y nota su olor. Era un olor curioso, que Nia nunca habia olido. Pero sin duda le gustaba. Aunque no sabia muy bien porque. Gael menciona que le encantaba dormir. Nia sonrie. A ella tambien le gustaba pero no dijo nada, como, si romper aquel silencio mágico fuera un pecado imperdonable. Se agarro a su camiseta y sus ojos comenzaron a pesarla. Finalmente, se quedó dormida con Gael como la última cosa que vio.

Cain se despertó desorientado, no se acordaba apenas lo que había ocurrido el día anterior... y el otro? Qué había hecho los últimos dos días? Los recuerdos fueron acudiendo a su cabeza; Vacuum... un monstruo, un bicho... el miedo lo invadió todo y al notarle a su lado se abrazó con fuerza a çel y le besó con ansia, con necesidad. No quería perderle, no quería... Una extraña sensación se apoderó de él... En miedo se fue esfumando poco a poco y el beso se fue haciendo cada vez más suave... Vacuum estaba allí, ahí mismo, ¿por qué tenía miedo de perderle, no iba a irse a ningún sitio? <<Mírale, está dormidito...>> pensó, bajando por la barbilla del griego con una sonrisa. Dejó la cabeza sobre su pecho y empezó a imitar una esperie de ronroneo. SE sentía... liberado, ligero, como si todo fuera un sueño. Era una especie de extraña euforia, solo que estaba tan... tranquilo... tan relajado... <<Mi cuerpo es de humo>> pensó divertido, frotándo la cabeza con el cuerpo de Vacuum. Todo le parecía de pronto tan increíblemente suave... Y ya había olvidado el motivo de su terror... Vacuum estaba allí mismo, debajo de él. Alzó un poco la cabeza y vio a Elliot al otro lado. También estaba allí. Se rió de lo absurdo de su miedo y le agarró la mano a Elliot para mordisquearle las puntas de los dedos mientras continuaba ronroneando.

Elliot parece despertar y dice algo que Cain no termina de comprender <<Angeles?>> Intenta decir algo pero todo queda en un suspiro y un murmullo incoherente. Siente los labios de la pelirroja y los devora, saboreándolos... suelta un quejido lastimero cuando se separan pero luego vuelven a él, con un sabor distinto... Cain rodea a Elliot con los brazos y la mece a un lado y a otro, besándole el cuello, rodeándole con las piernas para que no escapara. Sin duda era como estar en un sueño y no sabía cómo responder a la pelirroja, pues ni el mismo sabía si era real... Siguió rodando con Elliot, dejando marcas en su cuello, sus hombros, sus pechos... hasta que la cama se terminó. Cain no le dio importancia a esto, creyendo que seguirían rodando, flotando en el aire...

PUM!!

-Aunch...- se queja Cain en tono no demasiado efusivo cuando su cuerpo impacta contra el suelo, con Elliot aún abrazada.

La boca de Cain contra la mía me despierta, o no ... no lo se, parece que aun sueño, el beso se va suavizando y su boca baja por mi mentón hasta descansar sobre mi pecho. Elliot despierta a mi lado y mira a Cain, que esta mordisqueando la punta de sus dedos. Le besa y salta sobre mi, para caer encima de él, se besan con ganas, yo les miro con una sonrisa distraída, me siento raro, sin duda debo de estar soñando ... los brazos de Elliot me atraen hacia ellos, yo me acerco y beso primero a la pelirroja y después a Cain, pero algo me molesta, una duda sin resolver, algo importante creo ... tengo que moverme. Cain y Elliot caen de la cama, y por poco me tiran a mi, parece que Cain se hace daño, pero no parece grave, solo ha sido un golpe de nada. ¿Dónde estoy? ... Letargo, por la luz parece Letargo. ¿Y a donde tengo que ir? ... hmmm, no lo recuerdo, pero tengo que ir. Me levanto como flotando y me pongo los pantalones, la camiseta gris y la bufanda, me calzo una de las Converse y me intento poner la otra saltando a la pata coja. Tropiezo con el cordón y caigo de espaldas junto a Cain y Elliot.
-¡Auch! ... duele - digo con voz quejumbrosa, les miro y me río, olvidándome del dolor - ... os quiero - digo besándolos con ganas, por unos momentos me dejo lleva, acariciándoles suavemente, rozándoles con los dedos, con cuidado, como con miedo a deshacerlos. Pero la duda vuelve a mi cabeza, necesito saber, necesito entenderlo ... me termino de calzar sentado en el suelo ...
-Tengo que ir a mirar una cosa - digo con voz suave al oído de los dos- ... me esperareis ¿no? ...
Me pongo en pie y me encamino a las escaleras, bajo como si flotara y tropiezo en los dos último escalones, caigo rodando y me pongo en pie sin dar muestras de dolor, a pesar del rasguño de las manos, que me manchan de sangre las manos. La miro con curiosidad, resbalar entre los dedos y realizo el hechizo de curación con una sonrisa ... me acerco a la cocina y me como una manzana azul distraído con la luz verde que entra por la ventana. Me la termino y me bebo una vaso de agua, aunque me empapo, ya que la mitad me la echo encima. Agarro la guitarra y en el último instante, antes de salir por la puerta, sujeto el mango de la espada y salgo por la puerta arrastrándola. Cierro tras de mi y empiezo a caminar con una sonrisa en la cara, mi mirada brilla divertida, despreocupada ... no siquiera se aun donde tengo que ir ... comienzo a tararear en voz baja, con una duda no resuelta en la cabeza, ¿que duda sera? ...

Continúa en la Biblioteca Mágica.

Caminando, veo una figura irse a lo lejos y la fulmino con la mirada <<Ha salido del torreón...¿Quién sería?>> Pero no la sigo, solo llego al lugar de la pared de donde le he visto salir y miro las plantas como si fueran comestibles pero me pincho cuando alargo la mano y paso a buscar la entrada del torreón. Doy con ella y paso al interior en silencio, cierro a mi espalda y miro a la última planta del edificio, pero empiezo a marearme por la sensación y bajo la cabeza. <<¿A quién me encontraré en el sueño? Entro en el torreón y empiezo a subir escaleras arriba, buscando a la gente, aunque de momento no encuentro a nadie. Voy husmeando y al fin llego a donde todos duermen y donde he dormido alguna que otra ocasión. Llego jadeando, llevo subiendo como dos horas y casi trepando de escalón a escalón...
-Arf...arf...
Entro en la sala y fulmino cada una de las camas con la mirada, cubriéndome los ojos con la mano, la luz es rara y me molesta aunque lleve el antifaz. <<Y el ambieeeente está rarrroooo>> pienso mientras, tambaleándome, voy mirando las camas, buscando alguien despierto o a alguien que aparezca en mi sueño. Con una sonrisa, me agacho en el suelo y voy arrastrándome bajo las camas <<Quizá pueda asustar a alguien que esté durmiendo>> y sigo arrastrándome, llenándome de polvo pero no me importa, hasta que respiro demasiado hondo y me llevo un cabezazo contra la cama de encima, haciendo gran estrépito pues llevo el cráneo de rata como casco. Intento salir pero me golpeo con algo blandito que no se mueve
-Aparrrtaaaa. Grrrr.-gruño.
Y sigo empujando la cosa con la cabeza, sin poder ver qué es realmente. Pero según sigo empujando, empiezo a "despertar" y a darme cuenta de que no es un sueño de verdad. <<¿Que...qué? ¿Eh...>>