Torreón Letargo (Archivo I)

Recuerdo del primer mensaje :

Llegamos a las afueras del torreón, que esta completamente cubierto de enredadera, a primera vista no se ve la puerta, así que me pongo a buscarla ...
-Ayudarme por favor - les pido a Elliot y a Gael - ...
Comienzo a golpear con la punta del bate suavemente sobre las enredaderas, esperando oír algo que no sea la madera golpeando contra la piedra bajo de las enredaderas ...

Me despierto con la cabeza hecha un lío, acurrucado sobre la cama de cualquier forma y todavía por encima de las sábanas. Recuerdo que ayer cuando me quedé dormido me daba todo igual, pero ahora siento frío en los pies, los brazos... Me levanto de un salto, que me deja mareado unos instantes, y echo una carrera rápida hasta el puesto de vigilancia, allí está Nia... no, Harm. Todos los demás todavía duermen.
-Buenos días. -Su brazo... ¿es cosa mía o está muy rígido? No parece herida, herido, o lo que sea. No encuentro más palabras para intercambiar con él, lo de ayer ha sido demasiado para todos.
Vacuum y Elliot duermen, y recuerdo entonces a Cain, Cain, el burdel. Todos esos lobos...
Me meto de nuevo en la cama para entrar en calor, esta vez pasándome las sábanas por encima. Elliot se despierta entonces. Parece preocupada, bueno ¿quién no lo iba a estar? Y no hay comida para nadie, solo estamos rodeados de cadáveres. No pueden ni siquiera desayunar.
Tomo mi decisión enseguida. ¿Quién puede salir si no estando las cosas como están? Lobos por todas partes, a saber qué peligros más. Helli todavía duerme, así que debo ir yo. No pienso despertarla, después de todo lo que ha hecho ayer. Ya hay bastante energía de nuevo en los amuletos, puedo ir al burdel a ver qué ha pasado. Seguro que estarán bien, ellos son fuertes... pero aún así tengo que ir, y volver de nuevo aquí a traer cestas. ¡Claro! El hechizo de comunicación del otro día, el que vi en el libro. Me levanto y busco el libro, que por suerte no sufrió ningún daño y lo busco de nuevo. Si abrimos un portal de comunicación podemos saber siempre cómo están los otros, o si hay alguna novedad por la ciudad.
Me calzo rápidamente y me pongo mi chaqueta, me guardo el libro bajo el brazo y subo a la terraza. En las escaleras me encuentro a Elliot, que sube con el pelo mojado. Me paro un segundo y le digo, sin dejarla replicar:
-Me voy al burdel a ver cómo están los demás y abrir un portal de comunicación. -Señalo el libro y prosigo mi camino.
Arriba paso entre los cadáveres de los lobos. No soy capaz de mirar a ese otro cadáver de lo que una vez fue un amigo, pero prefiero que eso no me detenga. Ya en la terraza levanto el vuelo y miro en todas direcciones. ¿Nada? ¿Se habrán ido definitivamente? No nos podemos confiar. Me pongo en marcha hacia el burdel y trato de ir lo más rápido posible.

(Sigue en el Burdel de dama Espasmo).

Harm dedicó una mirada a Gael cuando esté le dio los buenos dias. Recordaba que Nia tenia que decirle algo al infante humano, pero ahora mismo no era importante, asi que lo dejó pasar. ¿Se iba? Eso parecia, a avisar al Burdel. Entonces él saldria tambien. A medida vio al chico alejarse en la distancia. Habia alguien más despierto: Elliot. La encontró en la terraza. Su voz grave rompio el silencio del lugar.
-¿Puedes tomar mi turno de guardia? Tengo que salir.-le preguntó, sin sentimiento alguno reflejandose en el rostro.
Elliot asintio levemente y se puso en el puesto de vigilancia. Harm bajó a la armeria y volvio a pertrecharse, como ayer. Por desgracia, su brazo izquierdo estaba resultando un problema. El arma al hombro y un buen puñado de cuchillos en el cinto. Se crujio el hombro y salio de una vez, a paso veloz, a encontrar una respuesta a toda esta pesadilla de locura infinita.
(sigue en la biblioteca mágica)
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No habiendo solventado sus dudas, Harm, volvio, derrotado al torreón que sin embargo seria retrasar el problema. Se aseguró de todos los cierres al entrar y subio al puesto de vigilancia donde, tras agradecerselo, recuperó su puesto en la vigia.

Harm rodó sobre sus pies al notar el contacto de la saliva del insecto. Con el semblante tranquilo, pero serio desenvaino su arma y retiró, con algo de complicación, los seguros hasta que la cadena cayó laxa a sus pies.
<<Ha debido de seguirme...>>pensó
Abrio la boca y siseo a la criatura mostrando los afilados dientes de sierra.
<<Espera un momento, ¿he oido a esta bestia hablar?>>
-Bestia, ¿que buscas aqui?-bramó su potente y grave voz. Por probar, no perderia nada. Si no, esta vez no habia nadie a su lado para interrumpir su arma asi que podria defenderse mejor y con algo de estruendo, alguien subiria. La mano derecha de Harm tamborileo por el mango del arma mientras el otro brazo, caia por los costados. Suerte que no iba a empuñarlo como una espada. Los colmillos del lobo estaban frios.

Harm dio un salto hacia atras y asio el mango con fuerza y de una sacudida, todas las cuch¡llas se levantaron y, en fila, se clavaron en el edificio, peligrosamente cerca de la "cabeza" de la criatura. Harm dio un tirón y la cadena recogio las cuchillas que volvieron a caer a sus pies. Harm amenazó a la criatura con el mango del arma.
-No pienso atacarte, a no ser que seas tu el que me ataque.-empezó.-Veo que tienes algo que otras bestias carecen, asi que creo que merece la pena escucharte. ¿Como sabes de la existencia de Nia? ¿De que larvas y mariposas estas hablando? y ya de paso...-la mirada de Harm se volvio sombria.-¿Que pasará cuando venga la Luna Roja?-
Este ser sabia bastante más que cualquier otro cosechado. Si estuviese en posición para ello, lo enjaularia y lo estudiaria, puesto que, o bien seria otra raza inteligente del espacio exterior, como los humanos, o era un ser...."magico".

<<Hoy en día no enseñan modales a los niños>> se lamentó el adepto de Ewa, cogiendo la cadena de la espada con las manos desnudas. Escupió, y una sustancia negra y viscosa como el alquitrán se extendió por las cuchillas, derritiéndolas una a una. Luego se puso en pie y agarró la cabeza de Nia, que le cabía entera en una sola mano. La alzo en el aire sin esfuerzo alguno, haciendo que su voz sonase en su cerebro como un chirrido insoportable <<La larvas insolentes que no saben ni aceptan a las superiores mariposas, escupen y escupen sus inútiles conocimientos y lloran y lloran cuando estos no funcionan, pero nunca van a funcionar, no aquí. No podrás proteger a tu larvita, es más, dañas a tu larvita porque crees que podrás apartarla de la Luna, pero al Luna es sabia y cruel, la Luna sabe lo que las larvitas necesitan, y elige quienes serán las mejores mariposas. Tu tiempo de larvita acabó, parásito, deja de jugar con algo que no puedes controlar>>

En cuanto empezó a derretirse Harm soltó el arma y se preparó para clavarle un cuchillo en su cara pero la bestia fue más rápida y le alzó por la cabeza. Pataleando intento soltarse pero el agarre del ser era potente y no podia escurrirse.
-No lloro. Ni ahora ni nunca. Todo esto tiene una explicación, lo que pasa es que lo pones en adivinanzas, "las mariposas" tienen la culpa de creer que "las larvas" se convertirán en "mariposas", cuando no existen ni mariposas, ni larvas. Tan solo una panda de tarados dedicados a su mundo impermeable de misterio, creyendose superiores...¿O me equivoco?-
La mano derecha Harm se posó en la muñeca de la criatura y empezó ha hacer fuerza para aplastarle la muñeca y que asi, se liberase. Sin embargo, continuo hablando.
-Puedo tener el aspecto de una niña, pero creo que tengo la suficiente experiencia para decirte que no pongo en peligro alguno a Nia al apartarla de la locura de esta ciudad...-

Me despierto con frío, miro a mi alrededor, algo me falta ... Elliot no esta, y Cain no ha regresado durante la noche, creo. Me incorporo con un suspiro, y me visto en silencio, unos pantalones cortos a la altura de la rodilla de color negro, una camiseta gris de manga larga y la sudadera, me pongo la bufanda y me cuelgo la guitarra al hombro. Pienso en lo que hacer, al final decido subir a la cuarta planta, cuando llego observo el panorama en silencio, hay seis cadáveres de lobo repartidos por la habitación, debajo de uno de ellos esta el de Ulises. Vuelvo a bajar a la tercera planta y agarro una sabana de uno de los arcones, sube de nuevo y con cuidado arrastro los cadáveres de los lobos cerca de la escalera, amontonándolos, para que sea mas fácil recogerlos luego. Una vez acabo me acerco al cuerpo del niño, me arrodillo a su lado, con las sabana entre las manos, su rostro esta tranquilo, perecería dormir de no ser por el cuello desgarrado y el charco de sangre a su alrededor. Lo envuelvo en la sabana con cuidado, mi rostro esta vacío de expresión, pero por dentro estoy llorando. Levanto el cuerpo del chico, no pesa apenas nada y eso me turba aun mas, parece tan frágil entre mis brazos. Bajo hasta la primera planta con mi siniestra carga, allí veo a Elliot, sentada en un sillón, pero prefiero hacer esto solo, así que tras saludarla salgo solo al patio. Dejo el cuerpo de Ulises junto a la tumba de Tesla y cojo una pala del cobertizo. Cabo una tumba junto a la de Tesla, y cuando acabo deposito el cuerpo del muchacho en su interior, aun envuelto por la sabana. Lo cubro de tierra y señalo el lugar con otra piedra, como con la de Tesla, dejo unas flores sobre ella y me quedo un minuto, pero no aguanto mas ... no puedo seguir aquí fuera, así que entro de nuevo y me dirijo a donde Elliot, le abrazó con fuerza y busco sus labios para tranquilizarme, me quedo unos segundos así, abrazado a la pelirroja, tranquilizándome, pero aun no he acabado ...
-Ayúdame por favor - le susurro al oído - ... aun quedan los lobos arriba ...
Subo las escaleras hasta la tercera planta y despierto a los durmientes, Alec, Jau, Helli y Adara, que me acompañan junto con Elliot hasta la cuarta planta ...
-Bueno, vamos a sacar a lo bichos - les aclaro - ... cogedlos entre dos, Helli puede hacer levitar a otro mas y Jau puede con dos el solo ...
Nos ponemos a ello, Jau arrastra a dos, Adara y Alec arrastran a otro, Elliot y Helli llevan otro, ademas del que Helli hace levitar, y yo llevo otro ... me adelanto por las escaleras, el cuerpo del lobo va golpeando uno a uno contra los escalones, lo bueno es que no mancha la estar la sangre seca, antes de irnos Helli realiza un hechizo de limpieza que limpia la sala de sangre y pelos, una vez abajo abro la puerta con cuidado y miro al exterior, no se ve nada, pero se siente a los carroñeros rondar en la oscuridad ... agarro la espada a la entrada del torreón y hago un esfuerzo para arrastrar el lobo de una sola pata, aunque así pesa mas ...
-Rápido - les digo echando a correr hacia una casa abandonada a unos doscientos metros del torreón - ...
Dejo el cadáver del lobo en la puerta y aferro la espada con las dos manos esperando a los demás, cuando los demás dejan el resto de cadáveres, regresamos corriendo hacia el torreón, formando un grupo compacto, los sonidos de los carroñeros, que ya dan buena cuenta de los cadáveres queda detrás nuestro, una vez en el torreón cerramos tras de nosotros y yo me acerco a Elliot, para estrecharla con fuerza ... le acaricio la cara y me subo a la segunda planta, hago un par de viajes llevando agua, con la ayuda del hechizo de levitación es mas fácil subir el agua. Una vez lleno el baño me desvisto y me meto en la bañera, cierro lo ojos y trato de dejar la mente en blanco, de olvidar los problemas ...l

Harm cayó al suelo. El canturreo habia sido estrambotico. Incluso juraria haber oido a Nia hablar durante él. Habia sido su imaginación. Seguro. Nia estaba sometido en un profundo coma impuesto por él. Quizas aquella criatura tenia razón, quizas deberia enfrentar, aunque fuese poco a poco a la ciudad. Era terrible que unos infantes tuvieran que pasar por esto. Pero si aquel hombre no habia mentido. Solo seria un año. Y ya habian pasado unos cuantos meses. Con ese pensamiento, bajó más abajo del torreon, con la herida en la mano. Aparte de una ducha y una curación debia replantearse como afrontar esta ciudad. Cuando entró a la cocina, con la mano ensangrentada, maldijo. En este tiempo no se habia dado cuenta de que a Nia le quedaba poco de vida si no ponian una solucion. Su enfermedad estaba causada por la Luna. La Luna. Ese astro. Tenia que saber más y su arma se habia vuelto inefectiva. O hablaba con Vacuum o....

Cain descendió seguido de Gael en el patio del torreón Letargo. Vio una nueva tumba junto a la de Tesla, pero no tenía ningún nombre, por lo que no podía saber a quién pertenecía. Entró en el torreón dejando sus cosas en una mesa. Elliot estaba en un sofá, así que se acercó a ella y la abrazó con fuerza, besándola. Realmente había temido por su vida, y se alegraba de que estuviese bien. Le contó todo lo ocurrido y subió al baño donde le había dicho que estaba Vacuum. Abrió la puerta sin llamar y entornó después de entrar
-Hola...- dijo con media voz. Se arrodilló frente a la bañera y le rodeó con los brazos- Siento... haberme ido de pronto, pero tenía miedo por ellos, y luego allí estaba preocupado por vosotros- rió con amargura y le besó, saboreando sus labios, recorriéndolos. Cuanto los había echado de menos... -pero estáis bien los dos...

Unos brazos rodeándome me sacan de mi ensimismamiento, abro los ojos parpadeando y enfoco la vista para ver el cabello rubio de Cain, le rodeo con mis brazos y le estrecho con fuerza, escuchándole, feliz de que este bien, recibo sus labios con ganas, encantado de saborear su aroma de nuevo, notando en sus labios el de Elliot también, me pongo de pie en la bañera ...
-No te preocupes Cain, tenias que hacerlo, tenias que ayudar a los del burdel, es normal - digo alcanzando una toalla y secándome con ella - ... Ulises, uno de los chicos de aquí murió - digo con voz apagada - , pero nosotros estamos bien si, aunque nos hirieron, Elliot tiene cicatrices en la espalda, y yo tengo un zarpazo para añadir a la colección - digo rascándome la nueva cicatriz - ... la pelirroja cada vez se parece mas a nosotros - digo con voz triste refiriéndome a sus cicatrices - ... lo pase mal cunado la vi herida, ¿a ti no te hirieron verdad? - le pregunto mientras me visto - ... al menos el Estigma te protege, me alegro ...
Me calzo las Converse sin atar y le conduzco fuera del baño, hacia las escaleras y para abajo, le rodeo la cintura con un brazo mientras bajamos, feliz de que este bien, restriego mi cabeza contra su hombro y sonrío contento ... una vez abajo saludo a Gael y beso a Elliot, cuando veo a Harm parpadeo sorprendido, parece que esta herido, me acerco a el con prisa y le miro la mano, se la han atravesado con algún tipo de aguja, me arrodillo a su lado y mientras le limpio la herida y se la cura me cuenta lo que ha sucedido en el tejado, no digo nada, y cuando me cuenta que cree que Nia esta enferma recuerdo que el y Gael aun no saben lo que pasara tras la Luna, me incorporo cuando la herida se cierra y me lo llevo hasta el salón, sentándolo con Gael ...
-Harm - comienzo - ... Nia no se esta muriendo, solo ... solo está - << ¿Solo está? - pienso - ... eso no es solo ... >> - ... Harm, Nia esta cambando, todos lo estamos haciendo - digo pasando la mirada de Gael a Harm - ... esos síntomas tan raros que tenéis - digo señalando las canas de Nia - ... son indicios del cambio, yo también tengo, mi espalda es mucho mas flexible, y me ha dado por comer hojas, y lo raro es que me quitan el hambre - les muestro como cruje mi espalda al doblarme hacia delante y poner el torso paralelo a las piernas, me pongo derecho de nuevo - ... cuando llegue la Luna Rojo no moriremos chicos, nos convertiremos en otra cosa, dejaremos de ser lo que somos - concluyo, les dejo pensar en mis palabras mientras preparo al sencillo de cena con la ayuda de Cain y de Elliot - ...

Harm fruncio el ceño durante toda la explicación.
<<¿Como que cambiaremos? ¿Que tipo de logica hay en eso? Claro está que explicaria muchas cosas...pero...>>
La cara de Vacuum no dejaba lugar a dudas, no mentia. Aunque los terricolas tenian sus "bromas", esto no parecia una de ellas. Ese ser...Con eso se referia a lo de "larvas y mariposas".
Harm comenzó a tartamudear, mientras sus esquemas se desmoronaban.
-P-p-pero...esto no es lo que nos dijo aquel hombre...¿Y cambiamos, para convertirnos en que? Más monstruos, como los de afuera...o el que me acaba de atacar.-
El pelo se le erizó y una gota de sudor frío se le deslizo por la espalda.
-No se como le voy a contar esto a Nia...-admitio, derrotado. Luego se realizo en una cosa.
-¿Significa que algunos, no seran como han sido?, que cambiaran para no volver?-
La idea de ver a cualquiera de sus compañeros transformado en un monstruo no le dejaba mucha opcion de no contarselo a Nia.
-Esta ciudad....es de locos...-terminó murmurando, aunque tenia una calma por dentro. Nia no iba a morir.

Cain rozó la cabeza de Vacuum con la suya mientras bajaban. Vacuum les contó a los niños lo que ocurriría tras la Luna, ¿acaso no lo sabían ya? Cuando La cría de la voz profunda describe al monstruo se queda pensativo... Le suena, le suena mucho
-Es la misma cosa que atacó a Dirke y Kaila una vez- recordó cuando Kaila se lo describió, debía de ser aterrador, se le ponían los pelos de punta solo de imaginar a una criatura así y que ellos podrían convertirse en algo como él...- Podría haberte matado... -fue con Vacuum y Elliot a preparar la comida, pero no prestó mucha atención a lo que hacía. Pensó en el chico que recién habían enterrado fuera, Ulises... y pensó en Gilbert... No había tenido mucho tiempo de hacerlo, demasiadas preocupaciones, demasiado estrés, pero ahora que estaba tranquilo, no podía sino lamentarse por el pelirrojo. Pensó en como lo habían echado a los lobos, sin pensar- Nosotros...- se le quebró la voz, por lo que aguardó antes de continuar- perdimos a uno de los nuestros... Un lobo se coló en el burdel y lo despedazó y... les lanzamos el cadáver a esas bestias- dicho así, en ese instante, le sonaba horrible, repugnante- Usamos a uno de los nuestros como carnaza... -dejó lo que estaba haciendo y se frotó las manos.

Llegamos al torreón y Cain se adelanta al entrar. Yo me detengo un momento ante la nueva tumba que ha aparecido al lado de la de Tesla. Las miro a ambas y cierro los ojos. Ojalá pudiera prometerles que haría algo al respecto, pero no es así. Solo somos críos engañados para llegar a una ciudad endemoniada. Continúo hasta la torre y pongo las cestas sobre la mesa de cocina, y me quito la coraza, tendiéndosela a Elliot. Antes de nada cojo un par de frutas y quito el libro de la cesta. Me las como rápidamente mientras pienso en qué habitación podemos hacer el hechizo. Pensando y pensando, llego a la conclusión de que donde menos molesta es en el estudio. Me estremezco al pensar en ello, pero es verdad, es el lugar más adecuado. No está maldito, y no va a quedarse sin uso.
Mientras pienso en todo esto Nia... Harm vuelve, y poco después Vac y Cain lo hacen también. Nia está herida y Vac la cura antes de que yo me de cuenta de eso. Le iba a pedir disculpas cuando nos lleva al salón y empieza a hablar. No lo interrumpo ni una sola vez. Le doy vueltas en silencio a lo que ha dicho. Convertirse en mosntruos, le había dicho al mono. Se suponía que debía haberle creído, ¿pero cómo iba a creer semejante estupidez? Pero ahora ahora se me hace evidente. Pues claro, todos estamos cambiando, la luna se acerca. ¿Y yo he cambiado? Me quedo en blanco. Físicamente, no, pero tal estoy cambiando por dentro. Sí, de eso no me cabe duda. Incluso me estoy tomando la noticia con apatía, ¿qué más nos puede pasar? ¿Es peor que cambiemos que lo que le ha pasado a Ulises o a Tesla? Pero... ¿entonces qué seremos? ¿Monstruos como la bicha de la fuente? ¿Como lo que atacó a Nia tal vez? ¿Como el mono, con... cualquier cosa de ahí afuera? ¿Incluso los lobos?
Sacudo la cabeza. ¿Qué más vamos a perder? Y los demás... ¿desde cuándo lo saben? Pero lo saben, y lo han aceptado. Y yo prometí ser tan fuerte como ellos. No vamos a perder nuestra humanidad, no, no puede ser. Me levanto y voy a la cocina, donde están haciendo algo para cenar.
-No voy a tener más miedo -anuncio-. Lo que sea, será. ¿Abrimos ese portal?
Entonces voy a bajar al sótano a por cristales cargados, y al hacerlo encuentro de nuevo esa extraña sensación que me impide permanecer allí abajo. Algo tan antinatural y sin sentido... Cojo los amuletos rápidamente y subo de nuevo arriba.
-Creo que tengo un... un cambio o lo que sea. No soy capaz de estar en lugares cerrados, no puedo respirar. El sótano me ahoga. El calor excesivo también -les comento.