Torreón Letargo (Archivo I)

Recuerdo del primer mensaje :

Llegamos a las afueras del torreón, que esta completamente cubierto de enredadera, a primera vista no se ve la puerta, así que me pongo a buscarla ...
-Ayudarme por favor - les pido a Elliot y a Gael - ...
Comienzo a golpear con la punta del bate suavemente sobre las enredaderas, esperando oír algo que no sea la madera golpeando contra la piedra bajo de las enredaderas ...

Yip sigue a Helli hasta la armeria, expectante.

-Yujuuuuuuuuuuuuu-grita Yip al encontrarse las mismas espadas que tenía, pero de madera, y sonriendo las empuña-muchas gracias Jeli digo... Helli, eso, era Helli, bueno si necesitas algo, ya sea entrenar o lo que sea llamame-y riendo sube las escaleras con sus dos nuevas adquisiciones y la espada que había bajado para enseñar a la chica, después de guardar las espads de verdad, comienza a entrenar con las de madera, concetrándose totalmente en cada golpe

El grito de alegría de Yip llama mi atención y dejo de buscar. Parece que ha encontrado lo que buscaba, porque se despide con rapidez, muy contento, y va a entrenarse.
- Eh... Vale... Adiós - digo entrecortadamente, sorprendida por la celeridad con la que se marcha. Me encojo de hombros, cojo un par de dagas que podré manejar fácilmente y salgo de la armería. Elliot y Vacuum no están en el torreón. Me pregunto adónde habrán ido y espero que no estén en apuros. Subo de nuevo a la habitación y me centro otra vez en el libro de magia, un poco preocupada por ellos.
<<Seguro que se las arreglan>>, me digo para tranquilizarme y concentrarme. Si estoy distraída, no me saldrá ningún hechizo.

Llegamos a la carrera al puente que da al torreón, cargando a Elliot con un brazo, llamo tres veces a la puerta de debajo de las enredaderas, al momento al cabo de un minuto abre Helli con prisa, sabia que eramos nosotros, por la forma de llamar ... paso delante de los demás y me disculpo unos minutos, mientras ellos entran y se acomodan ... subo las escaleras de dos en dos y dejo a Elliot en su cama, la desvisto, quitandole el kimono, el calzado y los pantalones y la arropo con las mantas, acomodándole la cabeza en la almohada la dejo durmiendo ... vuelvo a bajar ... todos ya están medio acomodados, y supongo que hay hambre, así que me dirijo a la cocina ...
-Elliot ya duerme - les digo dejando la espada y el escudo apoyados en la pared, a la entrada - ... os haré algo de cena ...
Dejo la guitarra y la cazadora colgadas del respaldo de una silla y me remango la sudadera, me lavo las manos y saco verdura y carne de la cesta, corto la carne en tiras y los pimientos, o algo que se le parece bastante también en tiras, pico algo de cebolla y la pongo a pochar en aceite caliente, cuando esta pochada, añado la verdura y después la carne, previamente sal-pimentada, lo salteo todo bien y lo sirvo en una fuente, para servirlo en la mesa ... por supuesto preparo mi habitual macedonia con una pizca de canela, me lavo las manos, pongo la mesa con ayuda y me siento a ella, esperando a que se sienten los demás ...
-Cuando queráis - les invito a sentarse con un gesto, espero que les guste - ...

Abro la puerta del torreón. Vacuum entra con urgencia, llevando a Elliot en brazos, y tras él vienen tres personas más. Los saludo con una cabezada. Vacuum deja a Elliot en su habitación y se pone a preparar la cena. Lo miro, preocupada.
- Vacuum... ¿Qué ha sucedido? ¿Dónde habéis estado? - pregunto, inquieta. Por lo que parece, hoy no lo han pasado nada bien...
<<Tendría que haber ido con ellos>>, pienso. Me muerdo el labio mientras espero la respuesta de Vacuum.

Cain entra y saluda a Helli con un gesto. No le da tiempo a ayudar a Vacuum con la cena, o más bien el griego no le deja. Se sienta en la misma silla que las otras veces que había estado allí y cuando la comida está lista empieza a cenar, pero no come demasiado. Mira a Vacuum con preocupación cuando Helli hace la pregunta.
-Digamos que... hemos descubierto algunas cosas. Juguetea con sus talismanes, había empezado a ponerse nervioso. La curiosidad inicial había dado paso a una inseguridad y un miedo a lo desconocido. A él no le importaba realmente ser un monstruo, siempre se había sentido como uno, siempre había estado alejado de la normalidad, de los ''humanos'' Pasa los dedos por su anticristo y enreda con la cadena. <<Y los demás?>> Seguirían tratándole los demás como ahora? Había visto sus reacciones, sabía lo que pensaban de todo esto pero, llegarían aaceptar el cambio? El suyo, el de los demás? Y cambiarían solo exteriormente o tambien afectaría a su personalidad. Eso era tal vez lo que más le preocupaba...

Llegamos a toda velocidad a la puerta del torreón y casi me caigo al suelo al parar bruscamente, pero consigo mantenerme en equilibrio ayudado por Martalar. Esta saluda a la otra chica y pasa al interior detrás de Cain, yo la imito y me apoyo en el muro de la cocina a respirar, me tranquilizo y saludo a Helli con un hola cansado. Huele a comida...<<Qué rápido es Vacuum...>> Y nos sentamos a cenar. Cuando está todo listo, empiezo a cenar, con hambre, pero lentamente. Cain empieza a contar lo sucedido pero se distrae con sus talismanes y ahora parece pensativo. <<¿Tendré que darles yo la noticia? No quiero estropearlo...>> Así que miro a Vacuum, como intentando decirle que lo cuente él. Creo saber lo que está pensando Cain...Antes no ha reaccionado apenas a las reflexiones e hipótesis de transformarnos, quizá lo esté asimilando ahora...Pero...¿Qué será de él y Vacuum? Sacudo la cabeza, no quiero ni pensarlo. Pero...¿Qué será de nosotros, del grupo, de la gran familia, si nos transformamos? ¡No quiero pensarlo! <<No hay que preocuparse, ya nos ocuparemos cuando suceda>> ¡Pero no quiero que suceda! ¿O sí? ¿Y si nos ayudase a sobrevivir? ¿Y si...? No...Basta de "ysis". Ahora toca cenar, mañana ya se verá lo que sucede. Además, esa Luna puede salir tanto mañana como dentro de cien años, ya veremos lo que sucede. Y como siga así, el plato se me va a enfriar, así que sigo cenando.

Todos comienzan a cenar, y Helli pregunta que ha pasado, Cain empieza a contarlo, pero se queda callado, Jack me mira y me hace el gesto de que continúe, suspiro y me limpio la boca ...
-Veras Helli ... ¿recuerdas aquello que nos contaste de que el hombre enmascarado te dijo que eramos larvas? - le pregunto, claro que lo recuerda - ... pues ya sabemos a que se refería, de aquí a un tiempo u astro rojo, una Luna Roja, para ser exactos, surgirá en el cielo ... y cuando eso ocurra, nos ... nos cambiara Helli, nos transformara en algún ... algún tipo de monstruo, no sabemos si nos cambiara mentalmente también, ni si el cambio físico sera muy notable, pero pasara, y bueno ... es un golpe duro ... tenemos que apoyarnos entre todos, si no nos sera imposible ...
Me quedo callado, ensimismado en mis pensamientos, miro a Cain y trato de sonreír, ¿como lo estará afrontando? ... parece muy pensativo, le aprieto ligeramente la rodilla, no esta solo ...
Me acabo la cena y recojo la mesa, volviéndome a sentar para tomar la macedonia ...
-Perdonad que halla hecho otra vez macedonia, pero es que no puedo hacer muchas cosas, me gustaría tener leche y azúcar - digo sonriendo algo triste - ...

-Yo echo de menos el chocolate- comenta Cain jugueteando con la cuchara, removiendo la fruta- Mi primo siempre hacía chocolate caliente cuando las cosas iban mal, decía que el chocolate lo arreglaba todo- Era una idea bastante tonta, pero curiosamente siempre le fucionaba. Preparar chocolate con nata y tomarlo juntos en el salón viendo la tele, o en la cama... Cain le coge la mano a Vacuum y entrelaza los dedos con los suyos. Alzó las manos entrelazadas y se llevó la de Vacuum a los labios. Pasara lo que pasase despues de la Luna no iba a dejarle, no iba a dejar a nadie de su grupo, no importaba en qué se convirtieran. Se había esforzado por mantenerles con vida, y ellos le habían mantenido con vida a él, no quería creer que algo pudiese romper eso tan fácilmente- Seremos una familia- dice de pronto- Aunque sea la familia Monster...

Vacuum me saca de mis pensamientos cuando dice lo de la macedonia y murmuro
-Siento no haberlo contado yo...pero aún tengo que asimilarlo...Y no quería ponerme a gritar como antes...
Termino el plato y miro la macedonia, pero ahora mismo no tengo ni ganas de abrir la boca. Aunque lo que dice Cain de la familia me saca una sonrisa
-La Familia Monster...Me gusta la idea...Aunque papá viva en un burdel y mamá en una torre, es buena idea.-digo bromeando. Necesito reirme un poco, distraerme de alguna manera...Pero el cansancio me va venciendo y lo va consiguiendo, así que me levanto y miro a todos.-Yo no puedo más hoy...Necesito cerrar los ojos y reorganizarme mentalmente...Asimilar lo de hoy...-hago un gesto de despedida con la mano.-Buenas noches.
Después, recojo mi plato y cubierto y salgo de la cocina hacia la sala donde dormimos todos. Me quito la camiseta y me tumbo de costado, cierro los pesados párpados, rebeldes incluso para llevarme al sueño, y me voy durmiendo poco a poco, sin darme tiempo a pensar. . .

-Tu primo era un sabio - digo tras escuchar a Cain - ... el chocolate lo arregla todo, ayer en la azotea me pareció oler chocolate en el aire, pero a lo mejor alucinaba, abra que investigarlo ...
Estrecho la mano de Cain con fuerza cuando me la coge y me la dejo besar, parece que se ha aclarado las ideas ... escucho su conclusión y río ... seremos la Familia Monster ... esta claro que no se abandonara a nadie en el camino, se transforme en lo que se transforme ...
-¿Así que soy mamá? - digo riendo tras oír a Jack - ... vaya, me toco el papel de mama, buenas noches Jack - digo cuando se va, todos se han ido yendo a dormir, solo quedamos Cain y yo - ...
Recojo y limpio la mesa, friego los platos sucios y lo guardo todo en su sitio, agarro mi cazadora y mi guitarra y me acerco a Cain, y le doy un beso en la coronilla ...
-¿Qué te apetece hacer? - le pregunto sonriendo, aunque se que la respuesta sera dormir, es muy tarde - ...

Que qué le apetecía hacer? Quería disfrutar de cada centímetro de su cuerpo, grabar en su cabeza a fuego su voz, sus gestos, todo lo que pudiese cambiar en él con la Luna Roja. Quería memorizarlo todo por si no volvía a verlo nunca más, a oírlo, a olerlo... Pero era muy tarde y no quería montar el espectáculo <<Aunque es tentador...>>
-Vamos a la cama- dice en tono suave, levantándose. Suben a la habitación común. Caín se quita las botas, los talismanes y el chaleco de cuero. Tras mucho pensar se quita también el vaquero desgastado, quedándose solo con el boxer y el anticristo. Incluso dejó los auriculares a un lado. <<Quiero oírle respirar. Toda la noche>> Un repentino miedo se apoderó de él. Miró apremiante a Vacuum y en cuanto se acostó le abrazó con fuerza, tal vez con demasiada, como si temiera que el chico fuese a desvanecerse de pronto.

Me mira intensamente, como memorizandome con la mirada, como si me quisiera conservar tal como soy ahora, creo saber porque es, porque cuando llegue la Luna Roja me puedo transformar en cualquier cosa, porque puedo cambiar y no me quiere perder ...
-Te sigo - digo acompañándole arriba - ...
Dejo la guitarra apoyada en la pared, y la ropa la dejo alado de la cama, me quedo en boxer y me meto en la cama con Cain, dejando la bufanda en el cabecero de la cama, cuando nos tapo con las mantas Cain se aferra a mi con mucha fuerza, pero no me importa lo agradezco y se lo devuelvo, dándole un beso en la boca, repasando sus labios con la lengua ... yo tampoco lo quiero perder, significa mucho para mi, sin el yo ... no sabría que hacer, o me costaría mucho decidirme, o ... nada, debía de dejar imaginar que no estaba ... le rodeo con los brazos y comienzo a parpadear somnoliento, deposito un último beso en la comisura de su boca y entierro mi cara en su cuello ...
-Te quiero - murmuro contra su oreja, antes de hundirme en el mar del sueño que me mece con suavidad - ... que descanses ... - no llego a concluir la frase - ...

Vacuum le devuelve el abrazo y le besa. Cain atrapa sus labios alargando le beso lo máximo posible, disfrutando de su sabor, de su calidez, rozándose contra su cuerpo, intentando estar lo más cerca posible de él, sn permitir ni un milímetro de vacío entre los dos.
-Yo también- le responde. Poco a poco el miedo se disipa. No iba a irse a ninguna parte, ninguno de los dos iba a irse. Se repite esto mentalmente varias veces. Le da un beso en la frente y las buenas noches y se pone a acariciarle el pelo, enredando sus mechones en los dedos, atento a la respiración pausada de Vacuum que le arruya y le adormece, como una nana. Hasta que se queda por fin dormido.

Cuando abro los ojos, lo primero que hago es preguntarme dónde estoy.
Después, recuerdo de golpe todo lo que sucedió ayer: el rodeo que dimos, Los Jardines de la Memoria, aquella grieta llena de huesos, y la llegada a este torreón.
Entonces, de pronto, recuerdo también la conversación acerca de la Luna Roja. Todos cambiaremos y nos convertiremos en simples monstruos. Entonces, ¿qué va a ser de nosotros? Pero, tal y como comenté ayer, yo aún me siento normal. Demasiado normal. Y eso me alivia y alarma al mismo tiempo.
Intentando no pensar en eso, camino por el torreón, bastante desorientada, puesto que apenas recuerdo mi paseo de ayer hasta el dormitorio.

Me despierto algo inquieta. Han pasado tantas cosas en las últimas horas... Quién iba a decirme que, cuando Vacuum, Elliot, Caín, Jack y Martalar llegaran al torreón, recibiría una noticia que iba a afectarme tanto. Jamás lo habría imaginado.
Elliot tenía razón. Vamos a transformarnos. Vamos a cambiar completamente, y quién sabe si, tras esa Luna Roja, quedará algo de nosotros. Reprimo un escalofrío. Tengo miedo, mucho miedo, y ahora que nadie me ve, no lo escondo. Por una parte, preferiría no saberlo. Al menos, estaría tranquila durante unos días, y no tan asustada. Quizás sea cuestión de tiempo pero, por el momento, no me veo capaz de aceptarlo. Es tan extraño... Ojalá no hubiera aceptado nunca la invitación de venir aquí, pero ya es demasiado tarde. No hay vuelta atrás.
Decido, sin embargo, que no voy a quedarme aquí encerrada todo el día, pensando en esto. Necesito distraerme un poco, de cualquier manera, me da igual cómo. Miro el libro de magia, pero lo desecho. Practicar sólo me recordaría lo que va a sucederme... A sucedernos a todos. Sacudo la cabeza. Quizás me venga bien tomar un poco el aire, pero no voy a salir sola, así que resuelvo ir a la terraza. Me dirijo hacia ella... Y allí está Elliot, mirando la ciudad. Está preocupada y asustada, lo sé. Como todos nosotros. Me repongo enseguida, escondiendo de nuevo lo que siento y lo que me pasa por la cabeza. Me acerco a ella.
- ¿Elliot? - digo a media voz.